Era un nuevo día en ciudad Miami, en un departamento en el centro de la ciudad se encontraba un hombre recién levantado, su cabello era rojo y verde, ojos rojos rasgados, muy delgado. Llevó una mano a la cara tallando, se levanta y se dirige al baño, se lava la cara y se ve en el espejo a pesar de tener 32 años su apariencia era de menos edad, menos cuando reía, ya que se le notaban algunas arrugas y el pelo estaba empezando a verse algunas canas.
Se dirige a una habitación y se ve a una niña de unos 6 años de cabello rojo y de ojos rojos igual que su padre empezaba a despertarse, al ver a su padre le sonríe y va hacia él saltando encima suyo.

- Hola papá- dijo la niña mientras reía al verlo medio despeinado.
- Buenos días, cielo- le besa la mejilla- ¿vamos a desayunar?- la niña asienta.

Cuando llegaron a la sala Yuya prepara el desayuno para ellos, mientras lo hacía recibió muchas llamadas de la empresa donde trabajaba, su hija sentía lástima de su padre trabajaba todo el tiempo, pero siempre pasaba tiempo con ella, no importaba cuanto trabajara, Yuya colgó y le sirvió la comida a Sakura, y se sienta enfrente de ella, una vez terminado lavan los platos y se suben al auto para ir a dejarla en la escuela e irse a trabajar.
Yuya trabaja como organizador de eventos, más precisamente para bodas, todos sus compañeros le decían "cenicienta", porque le podían pedir cualquier favor y él lo hacía, hasta ha llegado a limpiar toda la empresa para una pareja ya que los de la limpieza estaban de huelga porque querían un aumento de sueldo.
Ese día tenía una cita con una pareja que, por lo que escuchó eran muy indecisos, preparó unas hojas y a la hora señalada llego la pareja, primero entró una chica de pelo largo color púrpura y ojos fucsia delgada y tranquila, después entró un hombre que hizo que Yuya sostuviera el aliento, era muy guapo, cabello de color negro y gris, ojos de un azul extraño pero lindos, delgado pero con musculatura. Esta pareja era joven eso hizo que Yuya frunciera el ceño, sospecho algo desde que cruzaron la puerta, los invito a sentarse y empezaron las presentaciones.

- Bueno, empiezo las presentaciones, soy Yuya Sakaki, su coordinador de su boda- les extiende una mano como saludo- ¿se pueden presentar?
- Yo soy Ruri Kurosaki la novia, tengo 20 años- se presentó y miró a su novio.
- Mucho gusto soy Yuto, tengo 21 años- se terminó de presentar.
- Chicos para empezar les tengo un cuestionario para saber algunas cosas necesarias para la preparación de la boda- les extiende una hoja y lapiceras- si tienen alguna pregunta me la pueden hacer.

La pareja se puso a hacer las preguntas, mientras tanto Yuya recibió una llamada de la escuela de su hija, se excusó un momento y atendió mientras se retiraba de la sala, al terminar la llamada se sienta nuevamente, en ese momento le entregan las hojas, en menos de 10 minutos los vio a los ojos con el ceño fruncido.

- Lo que deduje- los mira a los ojos, asustando un poco a la joven pareja- ustedes no se aman- declaró sin más.
- ¿C, cómo lo supo?- preguntaron los dos.
- Sencillo, este no es un simple cuestionario, con el puedo saber si les gustaría que la boda sea en el aire libre, en una iglesia, o simplemente saber si se aman o no- los miro ahora más calmado- ¿me pueden decir los motivos?
- Lo que pasa es que nuestros padres organizaron la boda, nosotros no queremos, pero aunque se lo digamos a nuestros padres no nos escuchan- le explico la chica conteniendo las lágrimas.
- Ah, entiendo- se rasca la nuca- se los digo por experiencia, traten de convencer a sus padres en un futuro puede que se arrepientan de eso- suspiró con melancolía siendo captada por la pareja.
- ¿A usted también lo obligaron?- pregunto Yuto, dudando ya que no quería ser un metido.
- Sí, es más fue con mi mejor amiga- ellos se extrañaron ellos recién se conocían no tenían ni idea de lo doloroso que era eso- yo si me queje pero ella no por lo que dedujeron nuestros padres que ella si me amaba, pero resulta que ella no encontraba el valor de decírselo. Nos terminamos cansando y hace 2 años nos separamos, ella se fue no sé dónde dejándome solo con mi hijita- hizo una pausa asciendo un masaje las cien, los mira a los dos y continúa diciendo- no cometan los mismos errores, las demás parejas que venían con los mismos problemas no duraron ni 1 año.

Después de eso se fueron y Yuya se sintió bien consigo mismo, pero después de ver a Yuto sintió que él sería la persona más importante para él. Cuando terminó el día se fue a buscar a su hija, llegaron a su casa y después de ayudarle con la tarea, bañarla, y de comer se fueron a dormir.
Ese día tenía que empezar con los preparativos de esa boda se haga o no, los llevo de aquí a allá para conseguir los centros de mesa, las flores, adornos y otras cosas, mientras fueron pasando las horas Yuya se sintió más enamorado de Yuto. Pasaron las semanas y una tarde mientras terminaba de ver el lugar de la boda, tocaron la puerta del despacho de Yuya.

- Adelante- se asoma un hombre de unos 25 años de pelo parado de color azul y amarillo y ojos azules, con una gran sonrisa en su rostro- ¿Qué sucede Yugo?.
- Pasa que tienes una visita que quiere verte, pero antes- le entrega una nota, al ver que la está leyendo deja entrar a Sakura, esta a su vez va directamente donde está su padre, la pareja la veían con cariño, por la timidez de la niña- los dejo, bay- se aleja antes de oír los gritos de su amigo.
- ESPERA YUGO- cuando se da cuenta él ya se había ido, suelta un suspiro de derrota y mira a su hija- déjame adivinar, tus maestras están en una reunión "sorpresa" y Yugo y Yuri estaban "hablando"- ella asiente- Ah -suspira- ¿tienes tarea?- asiente, y señala una mesa un poco apartada- puedes usarla, si no sabes algo no dudes en preguntarme ¿entendido?- se agacha a su altura y le besa en la frente mientras ella lo abraza, se separan y siguen en lo suyo.
- Que linda hija tiene- dijo Ruri viendo a la niña haciendo la tarea.
- Gracias, espero que no se sienta mal con todo esto que esta pasando- baja la cabeza con tristeza.
- ¿Porque?- pregunto Yuto.
- Digamos que mi ex esposa sabe que estoy ganando bien ahora, quiere la tendencia de Sakura para que le pase más dinero, tenemos el juicio en dos días, un día antes de su boda- se se dio un masaje la sien con cansancio- me parece que terminamos la cita por hoy hasta pronto- los despide y se acerca hasta su hija, la mira y le dice con una sonrisa grande- dime la verdad ¿Qué paso, que viniste aquí?
- Mamá fue a retirarme, me habían dicho que eras tu por lo que salí feliz y al ver que era mamá salí corriendo hasta aquí- bajó la cabeza mientras explicaba a su papá lo sucedido- no lo hice a propósito papa.
- ¿Ella te hizo algo? -vio que negó- ¿sabes si quería darte algo o hacer algo?- dijo preocupado.
- No, salí corriendo antes de que me dijera algo,- mira los ojos llenos de preocupación de su padre y se siente mal-¿hice algo malo?
- No cielo, solo me preocupe- recoge todas las cosas de su hija- vamos a casa- se dirigen tomados de la mano hacia el auto de él se dirigen a su casa.

A los dos días fueron al juicio por la tenencia de Sakura, el que se la ganó fue Yuya, Yuzu se enojó con él por esa razón, y juro que les iba a ser la vida imposible. Sakura cada vez que veía a su madre se asustaba, porque sentía que su padre le costaba verla, pero cuando está con los futuros esposos sentía comodidad menos con Yuto, con el siente familiaridad, por esa razón cada vez que lo ve empieza a hablar con él.
Ese era el día de la ceremonia, Yuya dejó a su hija con sus padres y se fue a supervisar la boda, sintió mucho dolor todo el tiempo al ver que Yuto se está casando con otra persona, pero igualmente mostró una sonrisa, de pronto recibió una llamada a medianoche, empezó a ponerse nervioso y a gritar, se dirigió a la pareja excusándose y se va corriendo justo antes de que dieran las doce campanadas, Yuto fue tras él para que se calmara pero cuando llego a la puerta lo vio manejando su auto con lágrimas en los ojos, pero al bajar su mirada vio su celular tirado, al recogerlo ve que había un mensaje, la curiosidad lo domino y lo miró, decía que su hija estaba internada por un accidente y que la culpable parece ser Yuzu.
Por unos días no supieron nada de Yuya ni de Sakura, la boda se canceló hasta próximo aviso, después de una semana se enteraron que Sakura esta bien, el auto no alcanzó a atropellarla pero recibió un golpe en la cabeza, Yuzu fue a la cárcel por muchos años, Yuya no se separó de Sakura en ningún momento, un día Yuto fue al hospital para devolver de una vez su celular, cuando se vieron sintieron mariposas en la panza, los dos estaban perdidamente enamorados, pero por miedo de como reaccionara el otro no se confesaban, pero Yuto no pensaba así.

- Yuya, ¿te molestaría si me quedo aquí hasta que Sakura se despierte?- Yuya asiente, Yuto se sienta a lado suyo, lo mira y siente cariño al ver a su hija- ¿Yuya?
- ¿Si, Yuto?- mira sus ojos y ve cariño y amor infinito, inconscientemente los dos se fueron acercando y sus labios se juntaron en un dulce beso, se separan por falta de aire, Yuya se separa un poco de él apartando la mirada- ¿Qué hiciste?- se tapa la boca sintiéndola caliente.
- Te amo- lo abraza apegándose a él.
- ¿Pero y Ruri, y tus padres?- lo mira no creyendo en lo que dice.
- No te preocupes, están de acuerdo, a los que mas me costo convencer fueron a mis padres, pero cuando supieron quién eres lo aceptaron- lo besa en la frente tranquilizando a Yuya.
- ¿Por eso viniste?- lo mira con cariño, pero de pronto recuerda a Yuzu y empieza a llorar siendo consolado por Yuto- pero, qué pasa con lo de Yuzu, y mi hija me...- fue interrumpido por un beso.
- No me importa tu pasado, te amo, y a tu hija también la quiero, estoy dispuesto a que sea mi hija a partir de ahora- le sonrie con cariño, en ese momento siente que le tiran de la remera baja la cabeza encontrándose con Sakura.
- Bienvenido papá- abraza a Yuto sorprendiendo al par- los escuche, y quiero que Yuto sea mi papá- les sonrie a los dos y abrazados, los dos adultos correspondiendo el abrazo entre risas.

Después de unos días Sakura fue dada de alta, por lo que salió del hospital, enseguida pusieron fecha para la boda, después de unos días Yuya y Yuto se presentaron los padres, cayendo se bien desde el principio, lo que si les presionaron desde los dos lados para que tuvieran un hijo, haciendo que los dos se sonrojaron y se pusieran nerviosos todo el día, al llegar a la casa de Yuya acostaron a Sakura y se pusieron a hablar.

- ¿Es cierto lo que decían tus padres, puedes quedar embarazado?- le agarra las manos con delicadeza, viendo como se sonrojaba haciéndolo ver más lindo.
- Em, si puedo- mira a Yuto que estaba con una sonrisa más grande- ¿no crees que soy un monstruo?- baja la cabeza, pero siente que Yuto se la levanta recibiendo un beso en los labios lleno de amor.
- Eres todo menos un monstruo, eres mi príncipe que me saco de las tinieblas de mi corazón- le acaricia las mejillas, y siguieron con los besos y se le sumaron caricias, de pronto Yuya está sentado entre las piernas de Yuto besándose apasionadamente- me parece que hay que empezar a trabajar para tener a nuestro hijo- dijo como pudo entre beso y beso, Yuya asintió, Yuto lo cargo y se dirigieron a la habitación de Yuya para pasar una noche muy movida.

Yuya quedó embarazado enseguida sorprendiendo a todos, para el momento de la boda Yuya tenia 2 meses de embarazo, pero como era poco no se le notaba en el traje. La boda fue al aire libre y fue muy divertida y privada, solo fueron los parientes más cercanos y los amigos de ellos, al salir de la capilla vieron un cartel que decía "Adiós last cinderella" haciendo que Yuya se riera por las ocurrencia de sus amigos, Yuto lo abraza desde atrás.

- Te amo- le besa la mejilla.
- Y yo a ti- le sonrie con cariño.

- Y yo a ambos, papas- comento la hija, ahora, de ambos abrazando una pierna de cada uno mirándolos con cariño.