Un gran golpe rompiendo la vitrina principal de la parte frontal de la iglesia resonó por todo el patrimonio, lo que inmediatamente, me hizo ponerme alerta. Puse a κουδούνι detrás de mí, empujándola con mi mano derecha, para protegerla del peligro.

Vi una silueta, que no pude ver al completo por el reflejo del sol que cegó completamente mis ojos color nieve. Toda esa situación no es que transmitiese un buen sabor de boca, lector. En seguida, un escalofrío recorrió toda mi piel blanquecina, y en ese momento, fue en ese preciso instante cuando me empezó a doler un poco la cabeza.

No distinguía cara alguna en ese cuerpo cegado, por el resplandor que traspasaba la vidriera. Cuando por fin el propio sol me permitió recuperar la visión, ya le tenía enfrente mío, respirando frente a mí. Yo, con un rostro impactado y de rivalidad, sabía que algo no andaba bien, y que él, se había presentado allí con una intención u objetivo, a esto se juntó que mis dolores de cabeza, cada vez se hacían más intensos conforme el paso de los minutos.

-Vaya, vaya... Así que lo que me dijo mi padre era verdad. ¿Qué tenemos aquí? La reina casándose con, ¿quién coño eres tú? – dijo el miembro del CHAOS.

- Retrocede. – ordené a κουδούνι.

Fue Nacht el que me cogió de la barbilla con aquellas manos que poseían unos guantes de cuero gordo negro para inspeccionarme y analizarme desde cerca, a lo que yo, rechisté. Me selló mi boca blanquecina con su magia negra, e inmovilizó a todos los presentes en aquella iglesia.

-Vaya, sí que soy bien bienvenido. Así que tú, ¿eres la famosa hija de ángeles, ¿verdad? -rio – ¿y tú se supone que eres arcángel, heredando la sangre divina de tus padres? No esperaba para nada que una mujer como tú, fuera la hija de la misma persona con la que me peleaba por oscurecer el cielo hace un par de años atrás – preguntó. Ven, te enseñaré lo que es una buena batalla.

Posteriormente, Nacht empezó a direccionar sus manos a diversas partes de mi cuerpo, que yo me negaba a que me tocaran, en frente de toda la iglesia. Yo negándome y posando mis manos encima en sentimiento presión para alejar las suyas, decidí optar por otra opción. Conecté mi subconsciente a la vez que acercaba frente con frente, mis ojos se iluminaron, para poder con mi magia, lanzarlo por los aires, revolcándose por la alfombra carne.

- ¡Eh tú! Vuelve esas manos a tus bolsillos y retírate – dijo alguien

- Vaya, la diversión ha acabado

Intenté hablar llamando a κομψός, pero al tener aquella especie de vendaje mágico, era yo la que no podía dirigir la palabra a nadie, por mucho que lo intentara. Mientras, giré y miré a κουδούνι, que se mostraba algo confundida por la situación, y por quién era esa persona. Nacht salió disparado y empezó a matar a gente, a conquistar la iglesia, con su poder y magia negra del CHAOS, al utilizar tanta fuerza para dispararse, el vendaje desapareció en un abrir y cerrar de ojos.

- κουδούνι, quédate aquí, κομψός y yo iremos tras él, tú quédate aquí e intenta conducir a todos fuera de la iglesia. – dirigí

- Pero, y si te pasa algo, ¿qué? Además, a los monaguillos de la iglesia estamos para defenderla, no para quedarnos como estatuas.

- Si vienes, prométeme, que no te harás daño alguno. – κουδούνι afirmó con la cabeza con decisión

Los monaguillos ayudaron a todo el mundo a salir, incluso al cura, que tenía una movilidad reducida pequeña, pero sin él la iglesia no se mantendría a día de hoy estable. Κουδούνι, κομψός y yo, fuimos los que perseguimos a Nacht.

- ¡Καθρέφτης, CUIDADO! – fue κομψός el que me avisó de que algo malo iba a pasar a continuación, por otro lado, solo pude ver a κουδούνι echándose las manos a la boca en estado de shock.

Sentí como un pequeño disparo en la parte derecha del muslo. Ahogué un grito mientras era yo, la que caí como una pluma desde las grandes alturas de la copa de la iglesia. Cuando me desplomé, ya no parecía una pluma, mi cuerpo se convirtió en una piedra, y finalmente caí desplomada, haciendo revolver todos los escombros. Pausa. En cuanto me dispararon, κουδούνι se dirigió hacia mí para poder cogerme en brazos, y arrimarme hacia su pecho.

- ¿Estás bien, amor?– shock, arrancó preguntándome.

Era la primera vez que κουδούνι me llamaba amor, me sentí francamente alagada, que hizo que un ligero colorete, apareciera en mis mejillas. Ahogué otro de los miles gritos que grité, de ternura. Respondí nerviosa:

- Si estoy bien – contesté arrastrándome como pude lejos de sus brazos, y como siempre, oculté mis sentimientos hablando más seca que una barra de pan del día anterior.

Κομψός, al vernos, siguió el rastro de aquel malnacido. Con su espada, intentó empuñársela unas cuantas veces, pero lo único que consiguió fue que se teletransportara a algún lugar desconocido. Automáticamente, bajó del aire para reunirse con nosotras.

- ¿Καθρέφτης, has tenido algún tipo de relación con ese chico? – pregunto κουδούνι nada más bajar κομψός

- κουδούνι, ese es Nacht, su nombre significa, la noche. ¿Sabes a lo que me refiero, ¿no?

Κομψός dirigió su mirada hacia mí, pensando que era una broma lo que estaba diciendo, mientras le cruzaba un flashback en su mente. Nacht es uno de los hijos del CHAOS...