Prólogo.
Todo estaba sumamente silencioso, nada rodeaba el ambiente más que oscuridad, oscuridad por todos lados. De repente una luz se encendió, era tenue y recta. La luz cortó la oscuridad y cuando lo hizo, la voz de una mujer gritando hizo eco en todo el lugar
"¡FUMIKAGE!
El chico con cabeza de cuervo abrió los ojos, con su nombre resonando aún en su cabeza. Poco a poco fue incorporándose hasta quedar sentado en su cama, con la mirada perdida en la pared que tenía frente a él. El despertador sonó entonces, indicando las 5:30 am; luego de un breve momento de meditación y de pasarse la mano por todo el rostro, Fumikage Tokoyami finalmente se levantó de la cama
Caminó hasta donde se encontraba la puerta del baño y luego de abrirla, se dispuso a entrar para empezar con su aseo personal. El reloj marcaba 6:00 am cuando salió del baño, envuelto en una toalla y con su plumaje mojado, fue hasta su armario y de el sacó su uniforme de secundaria. Analizó la prenda por un par de minutos hasta que por fin comenzó a vestirse. Una vez listo y con el plumaje por fin seco, se paró frente al espejo de su habitación y se contempló un momento
—¡Fumikage, ya te he preparado el desayuno. No querrás llegar tarde al examen en UA!
La voz de su tío lo hizo salir del pequeño trance que hasta hace un momento se dio cuenta en el que estaba. 6:46 am, era la hora que marcaba el reloj; el examen de admisión a UA empezaba a las 8 am, debía darse prisa. Tomó la mochila en la que tenía su traje deportivo y bajó caminando las escaleras del ático que era su habitación
—Buen día tío Gin, Taiyu— saludó el cuervo con una pequeña reverencia. En el comedor se encontraban ya sentados Ginkage Tokoyami y su hija Taiyu, el primero contaba con una cabeza simular a la de Tokoyami solo que el color negro de sus plumas se notaba un poco más gastado. La segunda tenía plumas blancas en lugar de negras
—Ah, Fumikage-kun, buen día ¿no te sientes nervioso?– el hombre se encontraba leyendo el periódico pero alzó la vista para poder ver a su sobrino
—No, mi cuerpo y mente están en armonía y preparados para esta prueba— el joven tomó asiento en el comedor y se llevó uno de los panes que su tío había tostado a la boca
—¡Ese es mi muchacho!— exclamó con alegría y luego cambió su rostro a una más serio, posando su vista nuevamente en el periódico que tenía en las manos— Hoy habrá entrenamiento de meditación... para ambos
El par de jóvenes lo miraron y luego se miraron entre si finalizando con un asentimiento de cabeza
—Yo aplicaré para UA el año que viene— nuevamente, ambos cuervos asintieron
Como siempre, las charlas eran cortas y directas, así funcionaba esa familia, desde que Tokoyami tenía memoria. El desayuno continúo con uno que otro comentario por parte de alguno de ellos. Cuando el reloj marcó las 7:20 am, Tokoyami se puso de pie y luego de una reverencia, se marchó. Tomó su bicicleta y pedaleó por las calles hasta llegar a UA, un trayecto que le llevó alrededor de 25 minutos, pero llegó a tiempo para el examen. En la entrada se topó con algunas personas que lo miraban raro y otras que simplemente pasaban de largo o lo ignoraban
—¡Tokoyami!
Una voz lo hizo voltear; corriendo y algo agitado se acercaba un muchacho robusto y de cabello gris, tenía los brazos diferentes a los de cualquier otra persona, eran como alas y tentáculos. Un monstruo
—Buenos días, Shoji— saludó nuevamente inclinando su rostro pero Shoji pasó de largo
—¡Nos saludamos después, vamos antes de que se nos haga más tarde
Tokoyami parpadeó algo confundido antes de empezar a correr tras de él. Recorrieron los amplios pasillos de la escuela hasta llegar al gran auditorio en el cual estaban cientos de alumnos de otras escuelas. Ambos chicos pasaron entre ellos hasta llegar a sus lugares, cerca de ellos había otros 4 alumnos de otras clases de su mismo colegio
—¡Tú, el de atrás, has estado hablando todo el tiempo...!
—"En efecto, pero considero que tú has sido más ruidoso e irrespetuoso al interrumpir al profesor y no dejarlo terminar de dar su discurso"
Tokoyami observaba todo desde su lugar. Al termino de la explicación observó el centro al que debía ir, el A, se despidió de Shoji y fue hacia allí
—"El tío Gin me ha dicho que no es necesario usar mucho mi don completo; solamente necesito invocar las manos..."
La prueba ya había empezado y Tokoyami recorría el vasto centro de la ciudad de prueba. De su espalda salían 2 largas sombras que tenían forma de un par de manos grandes. Ya había destruido un par de robots cuando vio a un chico cuya pierna estaba atascada en unos escombros
"Recuerda; el honor también viene de ayudar a los demás"
La voz de su tía sonó en su cabeza y de inmediato caminó hacia el chico a un paso más apresurado. Al llegar hacia donde estaba él se paro a un lado y observó la escena
—¿Necesitas ayuda?— el chico cuervo no mostraba expresión alguna en su rostro. Al oír su voz, el otro chico le miró con ojos entrecerrados y luego rió un poco
—¿Te parece que la necesito?— preguntó irónico. Tokoyami le extendió la mano y con la sombra que salía de él levantó los escombros
Se podía ver que la pierna estaba algo lastimada, y hasta ahora; Tokoyami no se había percatado de la extraña cola que salía de la parte trasera del chico
—Mashirao Ojiro, un placer— junto ambos puños e hizo una reverencia. Tokoyami también se inclinó un poco y procedió a presentarse
—Fumikage Tokoyami
Ambos se estaban presentando cuando sin aviso un par de cosas parecidas a unos cables pasaron en medio de ellos y se incrustaron en un robot de 2 puntos, el cual se había estado acercando de forma silenciosa hacia ellos. Ambos chicos voltearon a ver como esos cables, que en realidad eran extremidades que desprendían de las orejas de una chica, regresaban a ella
—Espero y ya hayan hecho algún punto, de lo contrario podrán continuar la amistosa charla que estaban teniendo en otra escuela que no sea esta— sin decir una palabra más, la chica se fue corriendo por un callejón. No era muy alta, tenía el cabello corto y de color púrpura además de que su tono de voz era cortante y su mirada algo seria
—Supongo que tiene razón— Ojiro asintió ante lo que dijo Tokoyami
—¡Queda 1 minuto!
La voz del profesor y héroe profesional Present Mic resonó en todo el lugar
—Un placer Fumikage, pero aquí nos despedimos, espero verte pronto
—Lo mismo digo Mashirao
Luego de despedirse cada uno tomó una ruta distinta y en toda la prueba no volvieron a encontrarse. Era extraño, el chico no lo había visto mal, ni se había asustado por las manos que salían de detrás de él ¿Sería porque él tenía cola?
La tarde ya había caído, Tokoyami bajaba la colina tranquilamente, con una mano guardada en su bolsillo, la otra la llevaba puesta sobre el manubrio de su bicicleta y la mirada puesta al frente con una expresión sumamente seria. Fue entonces que sintió una fuerte y ancha mano sobre su hombro. Por instinto pensó en activar su don y defenderse pero la amigable voz de Shoji fue más rápida
—¡Yo! ¿Cómo te fue amigo? ¿Viste la gran explosión?
¿Explosión? ¿De qué hablaba el peligris? Negó con la cabeza serio y sin articular palabra alguna. Shoji soltó una corta risa y luego soltó el hombro del chico
—Supongo que se debe a la distancia a la que se encontraban los centros de prueba. No sé muy bien que fue, sólo se que algo grande y que definitivamente no quiero meterme con el sujeto que lo haya hecho
Tokoyami asintió; eso sería lo más sabio, además Shoji no era un buscapleitos
—Siento que tendré un buen puntaje, ¿y tú?
—Lo mismo digo amigo— Shoji alzó el pulgar, no dudaba en que su amigo obtendría un buen puesto en el examen, después de todo tenía un don poderoso— Bueno, yo tomo este camino, nos vemos
Shoji se despidió con su enorme mano y dobló hacia la izquierda vez llegaron al pie de la colina. Una vez vio alejarse a su amigo, Tokoyami subió a su bicicleta y emprendió el regreso a casa
La noche ya había caído, en el manubrio de su bicicleta colgaba una linterna con diseño de candelabro antiguo. A lo lejos se divisaba ya la casa de su tío, un edificio de dos pisos que estaba sobre una subida. Tokoyami dejó la bicicleta en el patio y comenzó a subir las escaleras. Una vez entró, la única luz encendida era la de la sala, ahí se encontraba su tío, leyendo un viejo libro de artes samuráis
—Has tardado más de lo esperado
—Una disculpa, lamento no haber podido llegar al entrenamiento de meditación— Tokoyami se incó con una rodilla y agachó la cabeza
—Bueno, supongo que lo dejaré pasar por hoy, pero mañana tendrás el doble de ejercicios para compensarlo— el joven asintió, Ginkage cerró el libro y se puso de pie, caminó hacia el interruptor y apagó la luz de la sala— Puedes ir a descansar, Fumikage
—Gracias— el joven no dijo nada más y espero a que su tío subiera las escaleras. Finalmente y estando solo– o eso era lo que él creí– se dispuso a ir al patio cuando de repente
—Tardaste mucho, tuve que hacer el entrenamiento yo sola— su prima estaba parada en la oscuridad, a un lado de la puerta que daba hacia el patio
Fumikage se limitó a asentir y hacerla a un lado, quería estar solo un momento
—Ve a descansar Taiyu— dijo antes de salir al patio y cerrar la puerta tras de él. El patio era la parte más grande de la casa, tenía un jardín de rocas el cual era cuidado por Ginkage, una zona especial donde entrenaban, un pequeño arroyo el cual iba hasta un bosque más allá de la barda de la casa; después de todo vivían casi a las afueras de la ciudad. Pero la zona favorita de Tokoyami era un manzano frondoso
Caminó hasta él y se sentó bajo al pie del árbol. Gracias a la blanca luz de luna podía apreciar la sombra que hacían las hojas del árbol y como estas se movían de forma brusca por el aire que azotaba esa fría noche. Alzó el rostro al cielo y miró la luna, cerró los ojos y dejo que la fresca brisa nocturna tocara sus ojos
—Déjame salir— abrió los ojos de golpe al escuchar la voz en su cabeza, al parecer la luz de luna no era suficiente para mantenerlo tranquilo.
Se puso de pie y sacudió su pantalón, ahora solo quedaba esperar, esperar a que llegara ese día, el día en que sabría si entraría o no a UA...
...
El sonido del metal chocando se escuchó por todo el patio. Fumikage y su tío se encontraban practicando con espadas samurái de verdad, sin miedo alguno
—El cuerpo, Fumikage, usa el cuerpo completo, cada parte tiene que trabajar sola y en conjunto a la vez, tu y la espada deben volverse uno solo— el dinamismo y la agilidad con la que el mayor de los Tokoyami se movía era impresionante, un verdadero espadachín
—¡Papá, llegó la carta!— anunció Taiyu abriendo la puerta del patio, con el papel en su mano izquierda. El entrenamiento tuvo que detenerse y los 3 se reunieron para abrir y ver el contenido
De la carta salió un pequeño dispositivo metálico con forma de círculo el cual cayó al suelo y se encendió de golpe
—¡Buenos días joven Tokoyami, soy yo, el adorable, suave y amable director de UA, Nezu! Y ahora también, tu nuevo director. En base a tu desempeño en el campo de batalla y al haberte detenido a ayudar a ese chico, has conseguido un total de ## puntos ¡Felicidades, has quedado en la novena posición, por lo consiguiente, quedas aceptado! Así que... bienvenido Tokoyami-kun ¡a tu academia de héroes!
La transmisión se apagó, hubo un breve silencio hasta que Ginkage comenzó a aplaudir lentamente y con una sonrisa de orgullo en su rostro
—Yo no dudaba de mi sobrino— puso su mano en el hombro del joven cuervo, quien mantenía un rostro y porte serio pero las manos le temblaban un poco
—Felicidades Fumi-kun— su prima también le felicitó con una gran sonrisa en su rostro
—Lo logré— Fumikage dejó escapar una lagrima de alegría. Lo había conseguido, aprendería a controlar al ser en su interior y se volvería un héroe, uno que se encargaría de erradicar el mal de este mundo— Lo logré, padres...
...
En algún lugar rodeado de oscuridad
Aquel hombre encapuchado y enmascarado caminaba por los pasillos de esa cueva desolada, o eso aparentaba el sitio. Sus pasos eran secos y parecían dejar un rastro de hielo atrás. Finalmente llegó a una gran sala que en el techo tenía cientos de estalactitas de las cuales caían pequeñas gotas de agua. En el centro había una larga escalera que tenía al final una especie de trono, la sombra cubría la mitad del cuerpo de quien estuviera sentado ahí. El hombre se arodilló ante el individuo del trono
—Amo...
—Irás a la región de Chūbu mientras reúno al resto de tus hermanos...
La grave voz de ese hombre inundó el lugar e incluso hizo que cayeran un par de estalactitas. El silencio volvió a reinar y el individuo se puso de pie, no había nada más, su misión había quedado clara, desde que había sido reclutado, solo se había dedicado a eso
—Aún no es hora...
...
—Ya es hora, Fumikage-kun, debemos volver a casa...
Ya noche había caído ya, Fumikage y su madre estaban en el parque, la señora Tokoyami lo había llevado a jugar
—Mamá está hablando... debes obedecerla o el monstruo vendrá por nosotros— sobre la luz de la caja de arena en la que jugaba Fumikage, una sombra con la forma de su cabeza apareció— Seamos amigos Fumikage
Esa noche, a la edad de 5 años, Fumikage Tokoyami manifestó su don por primera vez, una noche en la que lloró hasta quedarse dormido y que a día de hoy la llama como la noche en la que inició su maldición. La noche en la que nació su miedo hacia las sombras....
¿Cómo están razita bella? Yo deseo de todo corazón que estén bien y que se estén cuidando mucho. El día de hoy y luego de varias semanas por fin he terminado el capítulo de un nuevo fic. Mi semestre por fin terminó, no más clases en línea xd
Pues así como lo ven; quise dejar tranquilo a Izuku un rato y darle a mi personaje favorito un fic propio; espero contar con su apoyo para esta loca historia que tengo planeado darles
Una aclaración, usaré como base el universo de My Hero y me apegaré a los sucesos del manga hasta cierto punto (más o menos el arco del ejercito de liberación) y de ahí en adelante la historia tendrá su rumbo propio. Sin nada más que decir, cuídense mucho, quédense en casa que esto no es juego y chaito besoooos
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