Hola chicos, lo siento, esto es tarde, de nuevo. Seguí intentándolo, pero el sitio me estaba dando problemas y no subía el capítulo

Descargo de responsabilidad: no mío

El día de San Valentín de ese año fue un viernes, con un viaje de Hogsmeade programado para el día siguiente.

Harry y Ginny pasaron la noche en la Sala de Requisitos, disfrutando de la compañía del otro durante una cena a la luz de las velas cortesía de Dobby.

Ron también había logrado susurrar algunos planes del Día de San Valentín, preparando un picnic junto al lago, utilizando varios hechizos útiles para mantener el área seca y libre de nieve, así como cómodamente cálido en el aire fresco del invierno.

Susan se sintió un poco excluida ya que todas sus amigas pasaron la noche con sus personas importantes, y pasaron la noche vagando por el castillo, pensando en cosas – principalmente Neville y Hannah.

Los Gryffindor y Hufflepuff pasaron una noche agradable comiendo en un aula que Neville había establecido. Cuando la noche llegó a su fin, Hannah miró a su novio y respiró hondo. A ella realmente le gustaba Neville, y le gustaba ser su novia. Pero podía ver a dónde iba esta relación, y sabía que necesitaba hablar ahora.

Sintiendo el cambio de humor, Neville miró hacia arriba y se encontró con la mirada de Hannah. Sonrió. "Qué está pasando, Hannah? Te gustó la comida?"

Hannah asintió temblorosamente. "Lo hice... Neville, tenemos que hablar."

Neville frunció el ceño. "Qué pasa?"

Hannah respiró hondo. "Neville, realmente me gustas."

Neville asintió, confundido. "También me gustas."

Hannah sacudió la cabeza. "No, no lo haces." Neville abrió la boca, pero Hannah habló sobre cualquier cosa que pudiera haber dicho. "No de esa manera. Neville, te gusto como amigo, pero puedo decir que tu corazón no está realmente en esto. Tú y yo, no vamos a trabajar, porque todavía estás enamorado de Susan."

Neville miró, y Hannah suspiró. "Lo siento, Neville. Nunca quise interponerme entre ustedes dos –"

"Nos separamos", interrumpió Neville. "No te entretuviste entre nada. Susan y yo –"

"Son buenos juntos", sonrió Hannah, extendiéndose y apoyando una mano sobre la suya. "Rompiste, pero eso no fue porque no sentías el uno por el otro." Neville parecía incómoda y la sonrisa de Hannah se amplió. "Ambos se asustaron porque sentían cosas que no entendían. Te enamoraste, Neville, y sucedió antes de lo planeado, así que rompiste." Ella respiró hondo. "Es hora de dejar de correr."

Neville la miró y captó su mirada comprensiva. Sonrió vacilante y se puso de pie. "Lo siento, Hannah", comenzó, pero ella sacudió la cabeza.

"Está bien, Neville. Ve a buscarla. Y Neville?" ella llamó, deteniéndola ahora ex novio cuando abrió la puerta. Se dio la vuelta y la miró. "Una vez que la encuentres, no la dejes ir. Ambos merecen ser felices juntos."

La sonrisa de Neville se volvió más segura, y asintió. "Gracias, Hannah. Te veré más tarde."

Con eso, salió rápidamente de la habitación y se dirigió hacia la sala común de Hufflepuff en una caminata rápida. No estaba seguro de dónde encontraría a Susan, pero esperaba tropezar con ella de alguna manera.

Susan regresaba a la sala común cuando escuchó a alguien llamar su nombre. Girando, estaba confundida y sorprendida de ver a Neville corriendo hacia ella.

El Gryffindor se detuvo frente a su ex novia y buen amigo, y luego se detuvo, sin saber cómo comenzar. "Hola," finalmente dijo.

"Hey," Susan respondió torpemente. Ella miró a su alrededor. "Dónde está Hannah?"

Neville se mordió el labio. "Rompimos."

Susan miró fijamente. "Qué? Quiero decir, lo siento, Neville."

Neville sacudió la cabeza. "No lo soy." Susan parecía confundida. ¿Había hecho Hannah algo? Neville suspiró. "Susan, cuando rompimos, pensé que era lo correcto, pero Hannah me señaló algunas cosas esta noche, y tiene razón. No es justo para ninguno de nosotros para mí y Hannah hasta la fecha, porque no tengo sentimientos por ella. Nunca lo hice realmente."

Susan sintió que su aliento se atrapa en la garganta. ¿Qué decía Neville? "Neville..."

Neville sacudió la cabeza de nuevo, tomando la mano de Susan en la suya. "Cuestión, cuando rompimos, no es porque ya no tuviéramos sentimientos el uno por el otro. Lo recuerdas, ¿verdad?" Susan asintió, todavía confundida. Neville suspiró. "Lo creas o no, Hannah realmente lo aclaró para mí. No es sólo que no estaba listo para lo que estaba sintiendo. Lo tenía miedo. Estaba confundido y no entendía los sentimientos que tengo por ti. Pero ahora lo hago." Respiró hondo. "Te amo, Susan. Quiero pasar el resto de mi vida contigo. Lamento que me haya llevado tanto tiempo resolverlo."

Susan sonrió brillantemente y se inclinó hacia adelante para besarlo. Retrocediendo, se levantó la mano y se cepilló ligeramente la mejilla. "Yo también te amo."

Neville sonrió y se inclinó para darle otro beso.

Unos minutos más tarde, ambos se dieron cuenta de la hora, y con un rubor, Neville le dio a Susan un picoteo más en la mejilla, antes de retroceder. "Buenas noches, Susan. Te veré mañana?"

Susan asintió, radiante. "Noche, Neville."

Se separaron, y Susan rápidamente regresó a la sala común. Hannah la estaba esperando cuando entró en su dormitorio.

Susan se detuvo justo dentro de la puerta, señalando que sus compañeros Hufflepuffs de sexto año ya estaban dormidos.

Hannah respiró hondo, mirando a uno de sus amigos más viejos. "Susan, lo siento."

Susan frunció el ceño. "Para qué?"

Hannah puso los ojos en blanco. "No soy una idiota, Sue. Sé que debería haberme mantenido alejado de Neville. Incluso si ustedes dos se hubieran separado, los ex novios están fuera de los límites. Y me di cuenta de que todavía tenías sentimientos por él."

Susan suspiró y comenzó a cambiarse a su ropa de noche. Una vez hecho ese acto, se sentó en su cama, doblando las piernas debajo de ella mientras se enfrentaba a su amiga. "Muy bien, estaba un poco enojada cuando aceptaste salir con él", admitió. Hannah miró hacia abajo, culpable. "Realmente me molestó que ni siquiera me preguntaras si estaba bien, primero." Ella se mordió el labio. "Sé que no hemos pasado mucho tiempo juntos últimamente. Lamento ignorarte en los últimos años."

Hannah sacudió la cabeza. "No me has ignorado, Sue. Quiero decir, sí, solíamos pasar más tiempo juntos durante el verano, pero todavía has sido un buen amigo. Tú solo..."

"Comenzó a salir con Gryffindors más", terminó Susan. "Lo siento, Hannah. Me hice amigo de Harry y los demás, y me pillé un poco. Debería haberte incluido más en mi vida."

Hannah sonrió ligeramente. "Me alegro de escuchar eso, pero no te culpo ni nada. Y no salí con Neville para fastidiarte ni nada. Pensé que era lindo."

Susan sonrió tímidamente. "Él es, no es él."

Hannah estrechó los ojos. "Muy bien, chica. Derramar. Qué pasó esta noche?"

La sonrisa de Susan se amplió. "Neville me alcanzó hace un rato. Estamos de vuelta juntos."

Hannah chilló, y luego aplaudió sobre su boca cuando se dio cuenta de que las otras chicas de la habitación estaban dormidas. ¡Quitándose las manos después de un momento, susurró, "Eso es genial, Susan! Estoy muy feliz por ti!"

Susan se sonrojó, pero su sonrisa podría haber iluminado la habitación. "Deberíamos dormir. Se está haciendo tarde."

Hannah asintió, pero estrechó los ojos mientras se acostaba, todavía mirando a Susan. "Muy bien, pero me estás contando detalles más tarde."

Susan se rió entre dientes y asintió mientras ella también se acostaba.

XXX

Cuando Neville regresó a la sala común de Gryffindor, encontró a Harry y Ginny, así como a Ron y Hermione esperándolo en dos sillones junto al fuego. Hermione y Ginny parecían bastante contentos con las vueltas de sus novios.

Harry levantó la vista cuando Neville entró en la habitación y levantó una ceja. "No es inteligente, Nev. ¿No sabes que se supone que debes volver a la sala común después del toque de queda? Especialmente cuando hay tres prefectos esperándote?"

Neville salpicó un poco, pero se calmó cuando vio la sonrisa en la cara de Harry.

El sexto año Prefecto se rió entre dientes. "Que tengas una buena noche, lo tomo?"

Neville asintió tímidamente, tomando otro asiento desocupado junto a sus amigos.

"Cómo está Hannah?" Preguntó hermione. "Ustedes dos tuvieron una buena cena?"

Neville se mordió el labio. "En realidad, Hannah y yo nos separamos."

Hermione jadeó. "Oh, Neville, lo siento mucho."

Neville se encogió de hombros. "No lo soy." Todos lo miraron, confundidos. "Susan y yo volvimos juntos."

Harry sonrió. "Eso es genial, Nev. Me alegra que ustedes dos hayan dejado de bailar el uno al lado del otro. Incluso Ron pudo ver que ustedes dos todavía se parecen."

"Sí.." Ron hizo una pausa. "Hey!"

Todos se rieron.

"Sin embargo, en serio", dijo Harry, recuperando el aliento. "Estoy feliz por ti."

"Definitivamente", estuvo de acuerdo Ginny. "Hannah está bien con eso? Espero que no estuviera demasiado herida."

Neville resopló. "Hannah es la que me dijo que dejara de correr y enfrentara el hecho de que todavía estaba enamorada de Susan. Técnicamente creo que rompió conmigo, pero tenía razón. Susan y yo no nos separamos porque ya no nos gustábamos. Los dos estábamos asustados." Suspiró. "Tenía miedo de lo que sentía, así que hice lo fácil. Pero si hay algo que me has enseñado Harry, es que no vale la pena ganar si no tienes que luchar por ello."

Harry se sonrojó ligeramente. "Gracias, amigo", dijo en voz baja.

Cuando se estaba haciendo tarde, todos se dirigieron a la cama. Al día siguiente fue un viaje a Hogsmeade, y querían comenzar temprano.

XXX

El resto de febrero pasó en silencio, y con la llegada de marzo, los estudiantes de Hogwarts casi podían decir que la primavera estaba en camino.

La nieve se estaba derritiendo, y aquí y allá, las flores se podían ver valientemente alcanzando su punto máximo desde el suelo.

Desafortunadamente, esto también significaba que los exámenes se avecinaban, por lo que los estudiantes realmente no podían disfrutar del cese en un clima frío y amargo. Ginny y Luna estaban más acosados que los años más jóvenes y sextos, ya que sus BÚHOS estaban a solo un par de meses de distancia.

El decimoséptimo cumpleaños de Ron fue una ocasión festiva, ya que Harry una vez más pidió a los elfos de la casa que ofrecieran una fiesta para toda la casa. Cumplieron, y los Gryffindor pasaron ese sábado por la tarde congregados en la sala común, disfrutando de la comida y celebrando el cumpleaños de su compañero de casa.

Ron estaba casi tan sorprendido como Hermione había estado en septiembre, cuando muchos de sus compañeros de casa le desearon un feliz cumpleaños. Simplemente no había pensado que fuera tan popular. Claro, la gente le prestó atención, pero siempre había pensado que eso era solo porque su mejor amigo era Harry Potter.

Hermione le dio a su novio un nuevo juego de guantes de portero, algo que sorprendió y complació a Ron, ya que ciertamente no esperaba el regalo relacionado con el Quidditch.

Harry y Ginny le consiguieron dos entradas para un juego de los Cannons ese verano, y Neville le dio un certificado de regalo a Honeydukes.

Fue un gran día para Ron, y todavía no podía creer que fuera mayor de edad. Sus padres le enviaron un hermoso reloj, como era costumbre para un mago que alcanzó la mayoría de edad, y una gran caja de dulces. Fred y George le dieron una caja de productos de broma, y Bill y Fleur, una navaja de afeitar mágica. Charlie le envió un par de guantes de piel de dragón de Rumania.

Cuando la fiesta comenzó a disolverse cuando los estudiantes se dirigían a la cama, Ron miró a Harry y sonrió ampliamente. "Gracias, amigo. Hoy fue genial."

Harry asintió, sonriendo a cambio. "Cualquier vez, Ron. Feliz cumpleaños."

XXX

Las lecciones de aparición durante los sextos años estaban demostrando ser todo un juicio. Harry fue hasta ahora el único que realmente hizo algún progreso, aunque varias personas más se habían esplendido. Ron se había emocionado unas semanas con las lecciones cuando abrió los ojos para encontrarse dentro del aro, hasta que vio a varias personas riéndose a su alrededor, y se dio cuenta de que simplemente había saltado los pocos pies para llegar a su destino, en lugar de aparecer. Otros fueron atrapados parpadeando, un acto en el que aparecieron muy rápidamente a su destino y de regreso, apareciendo al resto del mundo simplemente parpadeando en su lugar, realmente no viajar a ningún lado. Fue otro subproducto de no estar lo suficientemente determinado, les informó Twycross.

Más de un estudiante se estaba frustrando con Twycross, y se le ocurrió su propia 'D' a sus espaldas. Aliento de perro, y Paleta fueron quizás los nombres más amables de estos. Varios también sugirieron dónde Twycross podría pegar sus aros.

Harry logró tener cierto éxito a principios de marzo, apareciendo con seguridad en su aro para aplaudir a sus amigos.

Unos días después de marzo, Harry se dirigía a la sala común una noche, cuando el sonido de las voces silenciosas le hizo detenerse. Escuchando por un momento, pensó que podía distinguir la voz estridente de Pansy Parkinson, y rápidamente colocó un Encanto de Disilusión sobre sí mismo antes de acercarse sigilosamente.

Una puerta ligeramente abierta a un aula vacía le mostró que en realidad era Pansy en el interior, junto con Crabbe, Goyle, un séptimo año que estaba bastante seguro se llamaba Miles, además de otro séptimo año cuyo nombre no estaba muy seguro, y un quinto año que conocía se llamaba Albert, solo porque Theo le había contado sobre el horrendo hedor que el adolescente había criado cuando no había formado el equipo de Quidditch a principios de año.

No escuchó todo lo que dijeron, pero sí captó algo sobre garantizar el secreto y una 'posible entrada'.

Parecían estar terminando su reunión en ese momento, por lo que Harry rápidamente retrocedió y se aseguró de que tenía dos corredores, antes de lanzar el Encanto de Disilusión. Incluso si no hubiera escuchado todo, sabía que acababa de descubrir a los candidatos más probables para los 'informantes' de Malfoy y Voldemort'.

Cuando regresó a la sala común, se unió a Ginny, Ron, Hermione y Neville junto a la chimenea, dejando caer su bolsa de libros y estableciendo algunas salas menores para evitar que alguien escuche su conversación, incluido el encanto que Snape le había enseñado a él y a Ginny, Muffliato.

Ginny levantó la vista cuando Harry se sentó y frunció el ceño ante el uso de los encantos. "Harry? Qué está pasando?"

Ella había sido atrapada estudiando y no había escuchado lo que tenía en su camino de regreso a la Torre.

El resto de ellos también levantó la vista, llamó su atención.

Harry suspiró y con voz silenciosa, les contó sobre la conversación que había escuchado. "Parece que están trabajando en una forma de entrar en Hogwarts."

Hermione frunció los labios. "Harry, sé que puede que no suene bien, pero Voldemort no puede entrar en el castillo. Hay demasiadas salas y protecciones en su lugar."

Harry sacudió la cabeza. "Nothings infalible, Hermione." Miró a Ginny, quien asintió.

Ginny se inclinó ligeramente hacia adelante. "Algo que Fred y George me han enseñado es que todo es posible si tienes suficiente nervio. Si Voldemort realmente quiere entrar, encontrará una manera."

"Pero Dumbledore –", argumentó Hermione, pero Neville la cortó.

"No hemos aprendido ya que Dumbledore no merece nuestra confianza?"

Hermione parecía sorprendida, antes de asentir con tristeza. "Lo siento, sé que tiene mucho por lo que responder, pero sigue siendo la única persona a la que Voldemort temió. No lo pensaría dos veces antes de venir aquí?"

Harry asintió, concediendo el punto. "Aún así, tuve un sueño hace un tiempo, y a Malfoy se le había dado una tarea, 'redimirse'. Estaban hablando de una misión y de informantes en su lugar."

La boca de Hermione se torció hacia abajo. "Por qué no dijiste nada antes?"

Harry se encogió de hombros. "Realmente no me dio ninguna información específica. Y he atrapado a Pansy, Crabbe y Goyle susurrando juntos antes. Le dije a Snape, y él dijo que los estaba vigilando. No hay mucho que podamos hacer, pero esté atento." Se mordió el labio. "Mientras tanto, ¿cómo van con su investigación sobre nuestro proyecto?"

Todos se miraron el uno al otro.

"Podríamos tener algunas cosas de las que hablar", dijo Ron, mirando a Hermione, quien asintió con la cabeza.

Harry sonrió ligeramente. "Bueno. Nos reuniremos este fin de semana y discutiremos todo. Por ahora, sin embargo, tengo un horrible ensayo de Defensa que ni siquiera he comenzado aún."

Hermione miró fijamente. "Harry! Ese ensayo se debe esta semana!"

Ron resopló. "Sí, amigo. Incluso yo lo he empezado."

Harry puso los ojos en blanco, pero no respondió, solo sacó un rollo de pergamino y su libro de texto y comenzó.

XXX

Ese fin de semana, Harry y sus amigos pasaron el sábado por la mañana en la Sala de Requisitos. Blaise y Daphne estaban tan cerca de obtener sus formas de animagus, por lo que pasaron una hora practicando, antes de que Harry los llamara para poder discutir lo que habían aprendido sobre Voldemort.

Esa práctica valió la pena, ya que tanto Blaise como Daphne lograron transformarse con éxito en sus formas de lince y zorro. Cambiaron de nuevo a vítores, mientras sus amigos miraban, felices por su éxito. Luna besó a su novio, antes de que Harry le pidiera a la habitación que les proporcionara sofás para que se sentaran.

Una vez que se establecieron, miró al grupo. "Solo quería ver cómo les va a todos con su investigación. Luna, Neville, Susan, ¿vieron los viejos discos?"

Neville asintió. "El profesor McGonagall nos mostró la sala de registros. Es enorme y tomó un poco de excavación, pero logramos encontrar un registro de Tom Marvolo Riddle asistiendo a Hogwarts de 1938 a 1945. Era prefecto y jefe, miembro del Slug Club. En el papel, suena como un estudiante popular y querido que estaba destinado a grandes cosas." Neville se estremeció. "Si no supiera que se convirtió en Voldemort, habría pensado que estaba mirando a un futuro candidato al Ministro de Magia."

Harry asintió. "Era bueno ocultando sus verdaderos colores. Mucha gente gravitó hacia él debido a su carisma y encanto. Has encontrado algo que pueda ayudarnos?"

Neville suspiró. "No hay mucho allí. Copiamos el archivo para que lo miren, pero realmente no es mucho para seguir. Riddle era huérfano. Creció en un orfanato en Londres, y recibió un estipendio del Hogwarts Trust para pagar sus cosas escolares."

Harry tomó el pergamino que Susan le entregó y lo desnudó. Realmente era principalmente superficial, pero sabía que podría ser útil. "Este es un buen trabajo, chicos, sigan cavando y vean lo que encuentran. Nunca se sabe cuál podría ser la clave para derribarlo."

Neville, Susan y Luna asintieron, y Harry miró a los demás. "Qué hay de ustedes? Cualquier cosa?"

Ron se encogió de hombros. "Hemos pensado algunas ideas, pero realmente no hay forma de estar seguros de nada, sin realmente revisarlas."

Harry asintió. "Voldemort es narcisista. Usaría objetos de importancia, y los colocaría en un lugar especial. No dejaría sus horcruxes en ninguna parte." Miró a Neville. "Creció huérfano, ¿verdad?" Neville asintió, y se volvió hacia Ron. "Pasó los primeros once años de su vida pensando que era insignificante, que nadie se preocupaba por él. Luego recibió su carta a Hogwarts, y de repente, no era solo un huérfano sin futuro. Obtuvo pruebas de que era especial."

Ron gaped, y Hermione frunció el ceño. "Qué estás tratando de decir exactamente, Harry?" Preguntó hermione.

Harry suspiró. "Solo estoy sugiriendo que podría considerar usar lugares que simbolizaran su ascendencia, su herencia mágica. Lugares como Gringotts, donde brujas y magos guardan su dinero, o Hogwarts, el primer lugar donde realmente se sentía como en casa."

Blaise inclinó la cabeza hacia un lado. "Parece que has pensado mucho en esto", comentó.

Harry se encogió de hombros. "No mucho", respondió. "Simplemente sentí lo mismo. Crecí pensando que a nadie le importaba, y luego me presentaron al mundo mágico y me sentí especial por primera vez en mi vida." Hizo una mueca. "Odio el hecho de que puedo simpatizar con el bastardo, pero al mismo tiempo, podría ser útil un poco, porque lo entiendo."

Ginny tomó su mano en la de ella y se inclinó hacia su lado. "Harry, el hecho de que hayas tenido experiencias similares creciendo no significa nada. Lo que importa es que tomaste decisiones diferentes de él. Sí, es posible que hayas sentido lo que hizo cuando era niño, pero eligió la venganza. Eligió el poder. Eligió el odio. Voldemort estaba obsesionado con demostrar que era el mejor, y creía que la sangre mágica demostraba que era mejor que nadie." Ella sonrió tranquilizadoramente. "Elegiste familia. Encontraste uno que no habías tenido antes, y harías cualquier cosa para mantenerlo. Elegiste ser feliz."

Harry no pudo evitar sonreír a su novia. "Gracias", dijo suavemente, inclinándose para darle un beso.

Cuando se separaron, Ginny le dio un picoteo en la nariz. "Siempre estoy aquí para abofetearte con un cheque de realidad, Harry."

Harry se rió entre dientes, y los demás sonrieron. Enrolló ligeramente los ojos y miró al grupo. "Solo sigue cavando. Nunca se sabe si algo de su pasado podría ser la clave para averiguar dónde escondió un horcrux."

Asintieron y salieron de la habitación para ir a almorzar.

XXX

Al día siguiente, Harry decidió pasar algún tiempo en el proyecto que Dumbledore le había pedido, el que había decidido llevar a cabo por sí mismo, en lugar del anciano.

Ginny lo llamó Operación Slughorn, que hizo que Harry rodara los ojos, pero tuvo que admitir que encajaba.

Slughorn se sorprendió, pero muy dispuesto a aceptar la oferta de ayuda, y los dos pasaron el domingo por la mañana fregando calderos y dando al laboratorio de pociones una buena limpieza. Slughorn le mostró algunos trucos para sacar manchas y viejos ingredientes que se habían secado, y hablaron de muchas cosas. En su mayoría, sin embargo, Harry dirigió la conversación hacia el pasado.

Slughorn estaba feliz de hablar sobre la madre de Harry largamente, y Harry disfrutó escuchando las historias que el profesor compartió. Todavía no confiaba en Slughorn para mirar su espalda en una batalla, pero se estaba calentando ligeramente hacia el hombre. Slughorn sabía mucho sobre su madre, ya que había sido una de sus estudiantes estrella, y más de una vez comparó a Harry con ella, en términos de talento. Aunque normalmente no le gustaba cuando alguien lo comparaba con sus padres, queriendo ser visto como su propia persona, Harry descubrió que realmente no le importaba tanto. Quizás fue porque durante los primeros tres años de su educación, Snape se había apresurado a decirle cuánto era un idiota, al igual que su padre. Eso había contaminado toda la experiencia.

Pero ahora que Snape ya no estaba en su garganta quejándose y menospreciándolo, descubrió que no le importaba que lo compararan tanto con sus padres. Sabía que habían sido personas talentosas y maravillosas, y no le importaría aspirar a ser como ellos.

"Así que debes haber estado enseñando un tiempo, entonces", comentó Harry de brazos cruzados, tratando de que el profesor confirmara sus teorías. "Si enseñaste a mis padres, y el profesor McGonagall dijo que también le enseñaste."

Slughorn se rió jovialmente. "Oh sí, recuerdo a Minerva. Bruja joven brillante. Mucho mejor en Transfiguración que Pociones, por supuesto, pero sin holgura. ¡Oh, eso fue hace años! Ella te dijo eso?"

Harry asintió. "Ella dijo que probablemente habías estado enseñando unos años antes de que ella comenzara, y te retiraste unos años después de que mis padres se graduaran."

Bueno, la última parte no era realmente cierta, era más justo lo que sabía de cuando Snape había comenzado a enseñar, y Harry sabía que se había hecho cargo de Slughorn.

Horace asintió, pensando. "Veamos, comencé aquí, oh, debe haber sido 1928. Dios mío, ¿fue realmente hace tanto tiempo?"

Harry asintió con la cabeza, haciendo los cálculos rápidamente; Slughorn seguramente habría sido un maestro cuando Voldemort había asistido. Sin embargo, no estaba seguro de que debería decir nada todavía, queriendo ganarse la confianza del hombre mayor y obtener un poco más de una buena relación, primero.

Slughorn lo regaló con algunas historias de sus primeros años en el trabajo; hubo varias que Harry disfrutó escuchar, mientras involucraban a Dumbledore encontrando problemas en su nuevo papel como profesor de Transfiguración. Todos aclamaron a Dumbledore como el nuevo Merlín, y lo habían hecho durante tanto tiempo, fue divertido escuchar historias de antes de que él hubiera sido alguien a quien tantos admiraban.

"Bien por mí, es que el momento", exclamó Slughorn un par de horas después, saliendo de una historia sobre su grupo de primeros años que tuvo que pasar todo un sábado limpiando ranas desovan del techo del laboratorio de Pociones después de un percance en clase. "Deberías subir a almorzar antes de que termine."

Harry asintió y comenzó a limpiar un poco, antes de salir de la habitación, aunque no después de aceptar una invitación a un almuerzo la semana siguiente, y prometiendo pasar la invitación a sus amigos.

XXX

Más tarde ese día, Harry les dijo a los demás lo que había aprendido de Slughorn. Todos se sorprendieron al escuchar que el profesor había estado enseñando durante tanto tiempo.

"Mi mamá y mi papá dijeron que les enseñó", comentó Ron, "pero esto está mucho antes que ellos."

Harry asintió. "El profesor Slughorn dijo que comenzó casi al mismo tiempo que Dumbledore."

"Blimey", murmuró Ron.

Harry se encogió de hombros. "Sí, así que estuvo cerca por un tiempo. Pero piénsalo, chicos. Slughorn comenzó en la década de 1920. Riddle asistió a finales de los 30's. Eso significaría que Slughorn le enseñó."

Hermione jadeó. "Cuántas personas todavía están cerca que recuerdan Voldemort de antes?"

Harry hizo una mueca. "No muchos. Creo que es por eso que Dumbledore hizo que Slughorn viniera a enseñar. En Hogwarts, es mucho más seguro de lo que estaría en cualquier otro lugar."

Los ojos de Hermione brillaban con conocimiento. "Crees que podría tener alguna información sobre Voldemort", observó.

Harry asintió fácilmente. "Sí," respondió simplemente. "Podría saber algo y ni siquiera ser consciente de ello, pero McGonagall dice que probablemente tengo una buena oportunidad de sacarlo de él, porque mi madre era una de sus estudiantes favoritas. Si aprendo algo, se lo haré saber a todos."

Asintieron y pasaron el resto de la tarde haciendo la tarea.

XXX

El resto del mes pasó en una bruma de trabajo, tarde en la noche y temprano en la mañana. Los exámenes finales y los OWL venían, demasiado rápido para los estudiantes de Hogwarts.

Harry se aseguró de asistir a todas las fiestas y reunirse con Slughorn, y aunque sabía que estaba realmente en dígitos negativos cuando se trataba de tiempo libre, se aseguró de asistir a todas las fiestas, también pasó varias mañanas y tardes más ayudando al profesor los fines de semana. No fue realmente tan tedioso, la mayor parte del tiempo pasaron preparando pociones y hablando de los padres de Harry. Prefería mucho esto a las reuniones del Slug Club, porque se sentía más como una persona real que tenía una conversación con alguien que conocía a sus padres, que como una pieza de apoyo, usado para el beneficio de otra persona.

Hacia fin de mes, Harry finalmente sintió que había pasado suficiente tiempo trabajando en las buenas gracias de Slughorn – y trató de no sentirse demasiado manipulador en lo que estaba haciendo – así que cuando lo estaban embotellar sus cervezas esa tarde (un antídoto contra un veneno que Slughorn había insinuado podría aparecer en el NEWT, y luego elogió a Harry, diciéndole que le habría dado una O si la hubiera estado calificando), abordó cuidadosamente el tema en el que había estado trabajando durante tantas semanas.

"Profesor?" Slughorn levantó la vista y asintió para que Harry continuara. Respiró hondo y lo hizo. "Me preguntaba...¿recuerdas a un estudiante tuyo, llamado Tom Riddle?"

Había pensado en obtener una reacción del hombre mayor, pero no tan grande. Slughorn dejó escapar un sonido casi como un grito, y derramó la mitad del caldero de poción en el suelo.

Sacudiendo de miedo, miró a Harry. "Dónde escuchaste ese nombre?" susurró.

Harry hizo una mueca, usando su varita para limpiar el desastre de la poción, antes de responder. "Tu reacción indica que entiendes el significado. Sabes en quién se convirtió Riddle, ¿no."

Slughorn no parecía ser capaz de un pensamiento coherente.

Harry suspiró. "Sé que no quiere hablar de ello, profesor. Pero lo que sabes podría ayudarnos a ganar."

Slughorn dejó escapar una risa débil. "Suena tan simple cuando lo pones así, Harry. Pero es mucho más complejo."

Harry sacudió la cabeza. "No, no lo es." Slughorn parecía sorprendido por la brusquedad de la declaración. "Profesor, creemos que sabemos cómo detener a Voldemort."

Slughorn dejó escapar un "Eep!" a nombre, pero Harry siguió adelante, implacable.

"Alguna vez has oído hablar de un horcrux?"

Si solo el nombre lo había asustado, parecía completamente aterrorizado por la última pregunta de Harry.

"No puedo", susurró. "No es... Yo solo..."

Harry se inclinó hacia adelante, con los ojos ardiendo intensamente. Casi parecían brillar en intensidad. "Sabías que mi madre dio su vida por mí?"

Los ojos de Slughorn estaban doloridos. "Harry, no lo hagas."

Harry sacudió la cabeza. "Voldemort le dio una opción. Ella podría haberse hecho a un lado, pero ella se negó, y él la mató." Slughorn no estaba al tanto de las lágrimas que se filtraron de sus ojos ante la dura declaración de Harry. "Quieres que su sacrificio sea en vano? Podría ayudarnos a vencerlo, profesor."

Slughorn lo miró durante varios momentos en silencio, antes de suspirar, mirando hacia abajo, incapaz de seguir conociendo la mirada honesta y de búsqueda. Poco a poco, levantó la mano con su varita y descansó la punta en su templo, y su otra mano encontró una botella vacía.

Mientras Harry observaba, sacó un largo hilo plateado – un recuerdo. Slughorn lo depositó en la botella y lo sostuvo. "Por favor, no pienses demasiado en mí cuando veas esto. Si lo hubiera sabido..."

Harry asintió, tomando la botella. "Entiendo, Profesor. Gracias."

Slughorn lo detuvo cuando llegó a la puerta. "Harry." El adolescente se dio la vuelta. Slughorn parecía devastado y ligeramente perdido. "Necesito que hagas algo por mí."

Harry asintió. "Por supuesto."

"Oblivícame."

Harry parecía confundido. "Señor?"

El profesor de Pociones suspiró. "Necesito que limpies mi memoria de darte eso. Nadie puede saberlo."

Harry asintió lentamente. Nunca había Olvidado a nadie antes, pero sí conocía la teoría. Hesitantemente, levantó su varita, concentrándose en lo que quería hacer, antes de susurrar, "Obliviar."

Los ojos de Slughorn se vidriaron por un momento, antes de concentrarse de nuevo. "Harry!" exclamó jovialmente. "Muchas gracias por tu ayuda con estas pociones. Madam Pomfrey estará feliz de tener estos antídotos, por si acaso."

Harry asintió, tratando de sonreír. "Por supuesto, Profesor. Voy a alcanzar a mis amigos ahora."

Eslughorn con vigas. "Por supuesto, por supuesto."

Harry hizo una salida apresurada, diciéndole mentalmente a Ginny que lo encontrara en la Sala de Requisitos lo antes posible y que trajera su bolígrafo. Sabía que pronto se lo diría al resto del grupo, pero quería ver la memoria primero, para ver lo que el profesor le había dado.

¡Por favor revise!