Nabnaleena corría con Toto y sus hermanas hacia el Ventilation Sector.

-¡Hay que avisarlos!- gritó Nabnaleena

En la celda de Opila y Tarta.

-¿Estás bien, cariño? Te noto rara- dijo Tarta

-¿Necesitas un poco de tortura, flamenquito?- dijo Toadster por fuera de la celda

-Está a punto de nacer...- dijo Opila -Little Beak...-

-¿¡Little Beak!?- gritó Tarta -¿¡Un hijo más!?-

-Little Beak...- pensó Toadster -El de la profecía...-

Y así, Opila, con mucho sufrimiento, puso un huevo.

-Si es el de la profecía, se abrirá ya mismo- pensó Toadster

El huevo se rompió y salió un mini Opila rosa, Little Beak.

-Mami, papi- dijo Little Beak -¿Dónde estamos? ¿Y mis hermanos?-

-Tranquila, pronto iremos a casa- dijo Opila

Toadster entró en la celda.

-¿Qué haces, sapo mierdoso?- preguntó Tarta

-¡Es Little Beak! ¡El de la profecía! ¡El que salvará al Reino de la destrucción!- gritó Toadster admirando a Little Beak

Toadster cogió a Little Beak y lo metió en una jaula.

-¡Mami, papi!- gritó Little Beak

-¡Suéltalo!- gritó Opila

Opila le dio un picotazo al Sheriff en el ojo.

-¡Quédate quieta, puta!- gritó Toadster

Toadster electrocutó a Opila.

-¡Aaaaaaaaaaaaaargh!- gritó Opila cayendo al suelo

-¡Cariño!- gritó Tarta

-¡Mamiiiiii!- gritó Little Beak

-A su majestad le encantará saber esto- dijo Toadster

Así, Toadster se llevó a Little Beak.

-¡Mi hijaaaaaaaaaaaaaaaaaa!- gritó desgarradoramente Opila

En la sala de la Reina.

-Su majestad, aquí tiene a Little Beak, el pollo de la profecía- dijo Toadster

-Perfecto, pon la jaula en la mesa- ordenó Bouncelia -Pronto comenzaremos la transformación-

-Así será, su majestad- dijo Toadster

Y cuando Toadster dejó la jaula en la mesa, Demoniac Banban destruyó el techo, le pegó un puñetazo a Bouncelia en la cara y rompió su trono.

-¡Mi trono, mi techo, mi cara!- gritó Bouncelia -¡¿Cómo osas a hacer esto, Banban?!-

-¡¿Y TÚ CÓMO OSAS HABERNOS METIDO EN ESTE PROBLEMA?!- gritó Demoniac Banban

-Te vuelvo a repetir que los que se metieron en este problema fuisteis voso...-

Demoniac Banban le pegó un puñetazo en la cara a Bouncelia, una patada en la barriga y le clavó las patas de araña en el pecho, sin dejar que terminase de hablar.

-CÁLLATE, PUTA, NO TE QUIERO OÍR- dijo Demoniac Banban

-¡Deja a su majestad!- gritó Toadster

Toadster fue a atacar a Demoniac Banban, pero este paró su ataque con el meñique.

-A TI TE QUERÍA VER, HIJO DE TU PUTA MADRE- dijo Demoniac Banban

Así, Demoniac Banban le dio una patada a Toadster y lo mandó volando contra la pared con el dibujo de la familia, rompiéndola del impacto.

-¿Cómo es que es tan fuerte...?- preguntó Toadster sangrando por todo el cuerpo

-TE VOY A DESTRUIR ESA CARA DE GILIPOLLAS QUE TIENES- dijo Demoniac Banban

En el Ventilation Sector.

En el conducto de Nabnab.

-Nabnab, ¿al final hay manera de colarse en las celdas?- preguntó Banbaleena

-No he podido mirarlo- dijo Nabnab

-¡¿Qué!? ¡¿Eres gilipollas?!- gritó Stinger -¿¡Entonces qué mierda has estado haciendo todo este tiempo!?-

-¡A ti no te importa!- gritó Nabnab

-¡Bueno, eso da igual ahora!- dijo Banbaleena -Nabnab, no hemos podido derrotar a los mutantes, tenemos que volver al Reino y sacar a los demás de las celdas enseguida para enfrentarnos a ellos y al Sheriff-

-De acuerdo, vamos- dijo Nabnab

-No me fío de él- pensó Stinger

Entonces, Stinger usó su poder y pudo ver que Nabnab sentía miedo y nerviosismo.

-Sospechoso- pensó Stinger

Cuando iban a salir, se encontraron con Nabnaleena, Toto y sus hermanas.

-¡Necesitamos que vengáis ya!- gritó Nabnaleena

-¿Qué ocurre?- preguntó Banbaleena

-¿Y Opila y Fiddles?- preguntó Stinger

-Opila encarcelada y Fiddles muerto- respondió Nabnaleena triste

-¿¡Muerto!?- gritaron Stinger, Nabnab y Banbaleena

-No hay tiempo para explicaciones, ¡tenemos que ir al Reino ya mismo!- gritó Nabnaleena

-¿Por qué tanto nerviosismo?- preguntó Stinger

-Banban tiene una nueva transformación y va a por el Sheriff- dijo Nabnaleena -Si lo mata... ¡¡estaremos perdidos!!-

-¿Por qué? Si lo mata es mejor, ¿no?- dijo Nabnab

-No, cariño- dijo Nabnaleena -Si lo mata no habrá nadie que detenga a Bittergiggle-

-Sí, estará Ban- dijo Banbaleena

-Incluso Banban sólo no podrá vencer a Bittergiggle- dijo Nabnaleena

-¡Pues vamos, hay que detener a Banban antes de que mate al Sheriff!- gritó Nabnab

-¿Por qué tiene tantas ganas de llegar?- pensó Stinger

Así, Nabnaleena, Nabnab, Banbaleena, Stinger, Toto y sus hermanas fueron al Reino.

Y cuando llegaron...

-¡Ban, hermano!- dijo Banbaleena

-Oh no...- dijo Nabnaleena

Ya era tarde, Demoniac Banban había matado a Toadster.

CONTINUARÁ...