Al día siguiente me dirigí al departamento de soltero de Naruto, él siempre se levanta tarde así que, qué mejor que llegar un poco temprano, levantarlo, desayunar y hablar con él.

Naruto siempre guarda una llave debajo de una maceta que está afuera de su departamento, la tomé y empecé a abrir lentamente, mi corazón se sentía presionado, solucionar lo que sentía era imperante así que después de un respiro empujé la puerta para poder entrar, pero algo me detuvo.

―Sa... Sakura chan, eres tú?― Oí que decían del otro lado, me sentí consternada, qué hacía Naruto levantado ten temprano, son prácticamente las 6 de la mañana, él se levanta a las 9:30, pese a que entra a trabajar a las 9:00, siempre llega a las 10 a su trabajo.

―Sí Naru, soy yo, ― dije,― qué pasa, por qué la puerta está atrancada y que haces despierto tan temprano

―HAA... Pues...

Me enojé, algo pasaba, su nerviosismo era más de lo habitual, usé toda la fuerza que tenía, siendo alumna de Tsunade, pude utilizar mi fuerza para empujar la puerta; la abuela de Naruto no sólo era la directora de la escuela donde Naru y yo nos conocimos, sino que también era la directora del centro médico y una mujer con mucha fuerza gracias a "El Sello Yin: o Liberar", ella me está enseñando no sólo medicina, la cual siempre he querido aprender, sino que también me pasó el conocimiento para poder tener y controlar el sello.

―¡Naruto Namikaze Usumaki! Qué...

―¡SORPRESA!

Me quedé anonadada, toda la familia de Naruto y mi familia estaba allí, Naru se veía desvelado o como si no hubiera dormido, rascó su nuca y dijo: ―Lo lamento Sakura chan, anoche le hablé a todos para comunicar las buenas nuevas y pues llegaron todos aquí desde las 2 de la mañana que estábamos organizando una sorpresa para ti, pero... Bueno, llegaste antes Dattebayo.

―Ho... Hola

―¡Sakura! mi niña, estoy tan feliz, has florecido de una forma gratificante y ahora vivirás un cuento de hadas con tu amigo de la infancia y...― Mi madre daba ese pequeño discurso mientras lloraba, entre hipos me abrazaba y besaba, saltaba con Kushina y ambas lloraban y hablaban de ¡NIETOS! Mi papá se acercó a mí y con una mirada de orgullo, nostalgia con lágrimas contenidas me dijo: ― Sabes que eres mi vida, mi sangre el fruto de más de veinte años, siempre tuve miedo de que llegara este momento, pues en las sombras maldecía a todos tus posibles amores pues podrían ser mentirosos, pues como hombre uno sabe las miradas y victorias de los otros hombres y es ahora que quero tener un candado encerrarte y arrojarlo lejos para que nada ni nadie te haga daño, pero sé que eso es imposible, por eso te digo que únicamente la muerte podrá hacer que yo no te apoye.

*Nota, ésta es la canción con la que me inspiré para el discurso de Kisashi; es de la obra de "Romeo y Julieta" versión musical francés de los que cantan: "Los Reyes Del Mundo (Les Rois Du Monde) - Romeo et Juliette", nótese la época y que están representando a Shakespeare así que por favor traten de entender la letra de una forma más tradicional.

https://youtu.be/leinQcjVyKo

No pude evitar llorar, le di un gran abrazo a mi padre, creo que después de tanto alboroto, despejar la mente y hablar con Naruto, hablaré con papá, pues no sé si realmente quiero casarme con Naru y no quero que papá lo liquide como le dijo a Naru que lo haría si me hace algo, como dije antes sí quiero a Naruto, pero no sé si de esa forma como para recorrer las veredas del destino sus altas y bajas con él.

Era la 1:30 de la tarde, como Tsunade estaba en la pequeña sorpresa me dejó llegar tarde al hospital por esa ocasión, entre planificaciones de boda, relatos familiares y más, no me dio tiempo de hablar con Naru, también influyó el hecho que Tsunade sólo me diera un poco de tiempo para estar con ellos, pues ambas teníamos que llegar al turno vespertino del hospital, el cual inicia a las 2 de la tarde en punto.

La jornada fue más larga y agotadora, le comenté a Temari todo lo que había ocurrido y que incluso Karin, la prima fastidiosa de Naru, se me había acercado a felicitarme, Karin y yo nunca nos llevamos somos como agua y aceite; ya eran las 7:30 y tenía que hacer doble turno, pero un mensaje de Minato llegó a mí, él es el dirigente de la aldea y Naru lo sucederá en el futuro, así que con permiso de Tsunade, pues aunque ella ya no sea la dirigente del lugar su hijo todavía la toma en cuenta, me dirigí a la oficina de mi... Mi futuro... De Minato pues, fue cuando lo vi.

Después del ritual y que el sacerdote Teka hablara con los grandes líderes de mi situación, supe el nombre completo y la ubicación de mi flor, curiosamente Shikamaru también tubo que ir al mismo lugar que yo, pues su flor estaba en el mismo lugar que la mía, antes de partir mi padre y abuelo hablaron conmigo; Sasuke, ―dijeron,― te deseamos suerte, pero sabemos que en estos tiempos los matrimonios arreglados son... Arcaicos por así decirlo, no quiere decir que no existan pero son menos comunes, así que por lo tanto, es muy probable que tu flor ame a ese hombre, si es así, no luches contra ello, pues una mujer enamorada puede defender a su pareja pese a cualquier hilo del destino, si cuando hables con ella ves esa chispa, respira, resígnate y aléjate, ¡ENTENDIDO! Yo asentí, pero realmente me gustaría pelear por mi flor; sin embargo eso no lo dije

Una cosa más ― me detuvo mi padre― hablando de compromisos arreglados, si la chica te rechaza, tu deber familiar es casarte y pese a que no pertenece al clan, qué mejor que Hinata Hyūga, pues la combinación del Sharingan y el Byakugan serían muy convenientes― yo suspiré y asentí acaso tenia de otra.

Estaba preparando mis cosas, sabía que Shikamaru me acompañaría, pero nunca esperé ver a Hinata en la puerta de la aldea, me dijo que su padre la había dicho lo mismo sobre nuestro matrimonio arreglado en dado caso de que mi flor sí estuviera enamorada, no obstante, ella podría impedirlo si encontraba a ese choco que la ha estado persiguiendo en sueños y esperaba convencerlo de hacer la prueba, le pregunté por qué venía con nosotros y me dijo que la adivina del lugar le dijo que su chico soñado estaría en el pueblo del Té, así que no vi inconveniente que nos acompañara, Shikamaru sólo dijo: ―¡Qué fastidio!

Los tres nos encaminamos al pueblo del Té, un lugar pequeño pero con una buena infraestructura, nos dirigimos directamente con el dirigente, le entregamos el pergamino pues allí explicaba el motivo de nuestra visita, el mandó a dos mensajeros a buscar a las chicas, pues Shikamaru y yo llevábamos el nombre de nuestra destinada en ese pergamino, mientras que a Hinata le dijo que le hablaría a su hijo para que la ayudara en la búsqueda.

El dirigente Minato nos advirtió que pese a que conocía la costumbre del ritual, no podíamos obligar a nadie a hacer lo que el destino dicta, pues hay épocas en las que el destino se adelanta y hay personas que se enamoran de alguien más, con cada palabra sus ojos me miraban de forma constante, será que él conoce a mi flor y por eso lo dice, salí de mis pensamientos cuando un fuete grito interrumpió el salón.

―HEI! Papá qué pasa Dattebayo

Un chico alto y rubio llegó, se paró de forma abrupta y balbuceó, miró a Hinata de una forma... Un tanto extraña, pero dijo algo que a todos nos causó sorpresa.

―Verbenas...

Después de un rato, una chica rubia con ojos verdes entró, el dirigente la presentó como Temari mientras veía de forma rara a su hijo y el sonrojo de Hinata, antes de que dijera algo más, una chica hermosa, con el cabello... ¿ROSA? Entró al lugar, fue cuando el chico rubio dejó de mirar a Hinata, pues la voz de la chica lo distrajo

―Sakura chan,― dijo él de forma ensimismada

―Ho... Hola, ― Dijo ella.