XVII
Los siguientes días no lo vimos por las calles. Tras explicarle a la madre de tu amiga lo sucedido nos prometió que nos llevaría a casa cada día para que no nos pasara nada. Siempre había pensado que tenías amigas geniales, pero lo que no sabía era que sus madres también lo eran.
¿Aquella protección
sería suficiente
para cansarlo?
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top