-¡¿Que el Prisionero se está liberando?!- gritaron Jonesy y Bananín asustados

-Sí, y eso no augura nada bueno- dijo Lince

-¿No hay ninguna forma de que el hielo se mantenga congelado?- preguntó Jonesy

-El Rey Helado planeaba congelar toda la isla para mantener el bloque congelado- dijo Lince

-¡¿Congelar toda la isla?!- gritó Bananín -¡Pero eso será peor para todos nosotros!-

-Pues no queda de otra: o se congela la isla o es destruida por el Prisionero- dijo Lince

-Vamos a Pisos Picados, a lo mejor todos juntos podemos encontrar alguna solución- dijo Jonesy

Y así, los tres se fueron corriendo hacia Pisos Picados.

En el castillo del Rey Helado.

-Majestad, Lince, de la Fuerza Ártica, nos ha traicionado- dijeron los Trogs -Han liberado a los opositores-

-Búsquenlos por todas las partes de la isla- ordenó el Rey Helado -Ejecútenlos a ellos y a todos sus amigos-

Los Trogs asintieron con su cabeza, pero uno le avisó de algo.

-Majestad, el brazo del Prisionero ya se ha descongelado- dijo uno de los Trog -Si seguimos esperando, se escapará-

Al oír eso, el Rey Helado destruyó una parte de su trono por la ira que tenía. Y después se levantó.

-Pues entonces ha llegado la hora...-

En Pisos Picados.

Cuervo seguía golpeándole la cara al Sargento Invierno.

-¡A los amigos no se les hace eso, cabrón! ¡Era tu amigo!- gritó Cuervo

-¡Agh! ¡Agh! ¡Agh!-

Mientras Cuervo se encargaba del Sargento Invierno, los demás se enfrentaban contra el ejército de AIM.

-¡Tenemos que aprovechar que Cuervo está distrayendo al jefe!- gritó Líder Arrumacos

-¡Yo no creo que pueda seguir luchando!- gritó Rex escondido en un arbusto

-¡Pero si no estás ni dando apoyo moral!- gritaron Deriva y Bombardera Brillante

-¡Continuemos, chicos! ¡Nosotros podemos!- gritó Ramírez

Y en ese momento...

-¡Ya llegamos, chavales!- gritó Jonesy disparando a varios AIM, acabando con ellos

-¡Tornado puntiagudoooo!- gritó Bananín girando entre sí mismo y atacando con su pico

Y Lince sacó 2 pistolas con silenciador y empezó a disparar a todos los robots que aparecían por delante de ella.

-¿Lince? ¿Amiga?- preguntaron los robots

-Lo siento, pero el oro me mueve- sonrió Lince acabando con más robots

Un rato después, los protagonistas ya habían terminado.

-Chicos, esta es Lince, ha decidido traicionar a la Fuerza Ártica para salvarnos a Bananín y a mí- dijo Jonesy

-En realidad es por el oro, Jonesy, no te confundas- dijo Lince

-Bueno, eso también- dijo Jonesy

-¿Le has prometido darle oro a cambio de que te libere?- preguntó Cuervo llegando con sus amigos -Eres de lo que no hay-

-¿Lince? ¿Cómo te atreves?- preguntó el Sargento Invierno

-Lo siento, Nick, pero me ofrecieron una cantidad de oro mejor de la que me das tú- dijo Lince

El Sargento Invierno rugió de ira, así que fue corriendo a atacarle. Pero de repente, se convirtió en una estatua de hielo.

-¿Qué demonios?- preguntaron todos

-"Demonios", nunca mejor dicho- dijo una voz femenina

Cuando se fijaron, vieron a una demonia de hielo con gorra blanca y ojos rojos.

-Me presento, mi nombre es Escalofrío- dijo esta -Mano derecha del Rey Helado-

-¿Por qué lo has congelado? ¿No se supone que sois amigos?- preguntó Jonesy

-¿Amigos? No, no puedo permitir que alguien que no sabe hacer bien su trabajo se quede con vida y sirviendo a su majestad- dijo Escalofrío

La demonia rompió la estatua de hielo del Sargento Invierno, acabando con su vida.

-¡OSTIA PUTA!- gritaron todos

-Ahora decidme: ¿dónde está el Punto Cero?- preguntó Escalofrío

Pero ante esa pregunta, Cuervo estaba buscando a su hermana.

-¿Y Carroñera?-

La hermana de Cuervo estaba volando para atacar por la espalda a Escalofrío, y cuando lo iba a hacer...

-Adiós, cielo- dijo una mujer apareciendo delante de ella y congelándole las alas

Al tener congelado su medio para volar, cayó al suelo desde una gran altura, perdiendo la vida.

-¡NO, CARROÑERAAAAAAAAA!- gritó Cuervo desgarradoramente

Todos agarraron a Cuervo para que no fuese a por aquella mujer.

-Así que ha venido, alteza- dijo Escalofrío

Así es, la mujer que acabó con la vida de Carroñera era la mujer del Rey Helado: la Reina del Hielo.

-Sinceramente, ver cómo pierden la vida todos estos inútiles es súper divertido- dijo entre risas

Cuervo agarró a la Reina del Hielo del cuello, empezando a asfixiarla. Pero Escalofrío le congeló las manos y se las cortó, haciendo que soltase a su reina.

-¡Aaaaaaaaaaaaaargh!- gritó Cuervo

-¡¿DÓNDE ESTÁ EL PUNTO CERO?!- gritaron ambas mujeres

Pero en ese momento, un gran viento invernal invadió la isla.

-¡¿Qué es esto?!- gritó Líder Arrumacos

-¡Pónganse todos a cubierto, por favor!- gritó Ramírez

-Es la tormenta del Rey Helado...- dijo Lince con miedo

Y así era, al mirar al cielo, todos vieron al Rey Helado de una forma gigantesca.

-Habitantes de esta isla, debo congelar vuestro hogar por el bien de todos nosotros- dijo el Rey Helado -Pero eso no significa que os vaya a dejar vivir, pues con este fragmento del Cubo...-

Todos vieron que el Rey Helado tenía en sus manos uno de los fragmentos de Kevin.

-¡TIENE UNA PARTE DE KEVIN! ¡NO!- gritó Bananín

-Crearé vuestra perdición- dijo el Rey Helado

Y así, el Rey Helado invocó la Tormenta de Nieve y dio un gran golpe contra la superficie de la isla, congelando toda Athena.

Por el uso de los fragmentos de Kevin, unos Monstruos del Cubo Gélidos aparecieron.

-Venid a mí, bellas criaturas- dijo la Reina del Hielo atrayendo a los Gélidos -Yo os guiaré-

Los protagonistas sacaron sus armas para hacer frente a la Reina del Hielo y a los Monstruos Gélidos.

Pero Cuervo se estaba yendo, iba hacia Pico Polar.

-¡Cuervo! ¿A dónde vas?- preguntó Jonesy

-A por el Rey Helado- respondió Cuervo muy seriamente -Es hora de acabar con esto...-

CONTINUARÁ...