Fase 5: enfermería
-¿Cómo terminaste de esta forma? -preguntó Wanda mirando el termómetro en su mano. 38°, tenía fiebre.
Steve se encontraba envuelto en mantas dentro de su cama. Tenía la nariz roja y un par de ojeras bajo sus ojos. Le dolía la cabeza y tenía frío.
-No lo sé... Supongo que cuando me mojé no me sequé apropiadamente...
-Si sabes que cuando te mojas de esa forma, te debes dar una ducha de agua caliente, ¿No? -dijo Wanda.
-Si, lo sé, es solo que... -comenzó a recordar lo que sucedió en ese momento, la forma en la que Tony lo miraba y lo humillado que se sentía. -Um, olvidalo
Wanda le dio su sonrisa mas comprensiva y se fue para dejarlo dormir. Corrió directamente al ático; había algo urgente que debía discutir con los demás.
-¿Ustedes mojaron a Steve a propósito? -preguntó.
-Era una de las fases del plan, ¿Por qué? -respondió Natasha. Wanda los miró con desprecio.
-Él está enfermo por culpa de que luego que empaparse, se fue a dormir así como estaba. ¡Está así por la culpa de ustedes! - todos bajaron la mirada con tristeza. No se esperaban tal resultado; al fin y al cabo, todas las fases estaban saliendo mal.
-¿Qué haremos? -habló Loki al fin. -No esperaba que terminara de esa forma... -los demás comentaron "lo mismo" o "yo tampoco", concordando con él.
-¿Ustedes? Nada, yo me haré cargo esta vez -respondió Wanda para luego dar la vuelta e irse.
Una vez que se fue, todos se amontonaron contra Sam,dejándolo casi sin aire, para poder ver por las cámaras lo ella que hacía.
~~~~allá en uno de los pasillos~~~~
-¡Tony! Justo al que estaba buscando
-¿Wanda? ¿Qué necesitas? -respondió el otro.
-De tu ayuda... Supongo que sabrás que Steve calló enfermo, ¿Verdad? Pues necesito... Necesito que lo cuides por mi
-¿Cuidar... a Steve? -dudó extrañado. -Soy científico, no médico
-No tienes que hacer demasiado, solo ve, sientate junto a el y acompañalo, no es mucho pedir. ¿Por favor? -rogó.
-Está bien... -respondió Tony pasando sus dedos sobre su sien -Pero, ¿Por qué no lo puedes hacer tú?
-Por que... -Wanda dudó un segundo antes de responder. Se mordió el labio y finalmente habló. -Tengo una cita.
-¿De verdad? ¿Con quien? -dijo subiendo y bajando sus cejas.
-No es de tu incumbencia -ella se dio la vuelta y, cruzada de brazos, le dio la espalda.
-Ya veo entonces. -Tony comenzó a caminar hacia la habitación de Steve cuando gritó desprevenidamente "¡Suerte en tu cita!".
Habiendo cobrado su venganza, avanzaba victoriosamente por los pasillos. Al llegar a su destino, los nervios volvieron. ¡Tenía que cuidar de Steve! ¿Cómo haría eso cuando ni siquiera podía verlo a los ojos sin ruborizarse?
Se detuvo unos segundos para luego, tomando bastante aire y juntando valentía, abrir la puerta.
-Eh, ¿Hola? -susurró al entrar. Suspiró aliviado al percatarse de que estaba durmiendo. ¡Se había salvado de esta! O, al menos, eso pensaba.
-Fiuu -secándose el sudor falso se sentó en una silla a los pies de Steve. ¿Quién diría que el fosil se vería tan tierno mientras dormía? Un momento, ¿Qué?
Mientras el hombre de hojalata tenía una guerra en su interior contra su conciencia. (N/A: para evitar confusión, agregué los nombres de quién habla)
Consciencia: -¡Demonios! ¿En que estabas pensando? ¡Los hombres no son tiernos!
Tony: -¡Lo sé! ¡Es culpa de mi cerebro por pensar esas cosas!
Cerebro: -¡Hey! No me metas en esto, ¡es culpa del corazón!
Corazón: -¿¡Pero que dices!? Ya bastante ocupado estoy luchando con el pedazo de metal ese, ¡no tengo tiempo para ese tipo de tonterías!
Estómago: -¿Podemos simplemente ir a comer algo?
Tony: -Apoyo esa idea
Intestinos: -¡Tú solo piensas en comida!
Pulmones: -Ya chicos, que me sacan el aire
Cerebro: -Ese chiste es peor que los que hago yo
Oídos: -¡Pueden callarse de una vez!
Mientras todo esto sucedía, Steve se despertaba lentamente. Al divisar a Tony medio dormido en aquella silla, no pudo evitar reír.
-¿Eh? ¿Ah? ¿Qué es tan gracioso? -preguntó despertando casi de golpe. Había soñado que sus órganos se salían de su cuerpo y comenzaban a golpearlo llamándolo idiota.
-Es que eso no es para nada espeluznante... -dijo Steve mientras se sentaba en la cama.
-¿De qué te quejas? Hay personas que pagarían por despertar conmigo cerca y tu lo obtienes gratis -respondió Tony. El rubio casi pudo ver brillo salir de su amigo, pero supuso que solo seguía un poco dormido.
-Y... ¿Puedo preguntar qué haces aquí?
-Oh, Wanda salió en una cita y me pidió que te cuidara en su lugar -respondió moviendo sus hombros a modo de indiferencia. Steve quedó petrificado con lo que escuchó.
-Wanda... ¿E-en una... ci-cita?
-¿Si? -Tony estaba dudando si debía correr o taparse los oídos.
-¿¡Qué demonios!? -definitivamente la primera opción.
-¡Es normal! ¡Es una mujer adulta! ¡Puede hacer lo que quiera! -trató de defender el pelinegro.
Steve paró en seco. Relajó los músculos y cerró los ojos. Luego los abrió nuevamente y miró a Tony con una tímida sonrisa.
-Tienes razón
-Por su puesto que la tengo -respondió el otro.
Las dos horas pasaron volando tal como en los viejos tiempos. Steve relatando algunas de sus historias en la armada; Tony comentando y diciendo cosas graciosas sobre Nick Fury y como se lastimó el ojo; Steve preguntando sobre que otros superheroes existían y muchas otras cosas.
De la nada, el rubio comenzó a toser una y otra vez. Tony puso una de sus manos en la frente del otro para corroborar su temperatura. Esto solo hizo que Steve se tornara todo rojo. Para su mala suerte, el pelinegro creyó que tenía fiebre.
-¿Te sientes bien? Estas todo rojo
-Eh... ah... em, yo...
-Mejor recuéstate -dijo el otro.
-Woah, pervertido -comentó Wanda entrando en la habitación.
-¿Qué de- por qué todo el mundo siempre asume cosas extrañas? -respondió Tony volteando. Ahora tenía un rubor que le llegaba hasta las orejas y la nuca. -¿No te habías ido?
-No se si lo notaste pero está lloviendo. -ambos hombres contemplaron la lluvia caer desde la ventana media cerrada de la habitación.
-Oh -dijeron al unísono.
-Tuvimos que cancelar, pero aun así estuvimos dos horas. Si quieres aún puedes cuidarlo por mi, parece que iban bastante bien....
-Eeeeh... -vaciló Tony. La idea de quedarse mas tiempo con Steve le encantaba, pero no quería que se notara. -¿Tú que prefieres, Steve?
Dentro de su mente, Steve gritaba a todo pulmón "¡Traidoooooooooooooooor! ¡No me hagas elegir a mi, maldito! ¡Sabes bien la respuesta!"
-¿Dos horas? -respondió evadiendo la pregunta. Wanda pudo notar la mirada de odio de Tony hacia Steve y el rostro de "Tu te la buscaste" del otro.
-Sip, dos horas. -su respuesta pareció ser olvidada, pues los dos hombres se estaban golpeando con la mirada. Sin decir nada, Wanda caminó lentamente hacia donde estaba Tony y, posicionándose detrás, lo empujó sobre Steve. Luego de esto salió corriendo como si no hubiese un mañana.
-¡WANDA! -escuchó a lo lejos. Habían hablado al unísono de nuevo.
Mientras un Tony rojo como un tomate trataba de separarse de un Steve todo ruborizado, Wanda llegaba a la guarida secreta. Allí, todos los presentes estaban en el suelo desmayados o tratando de detener la sangre de sus narices.
-Woah, tampoco fue para tanto... -comentó al verlos en tal estado.
-No-no es eso... Es que... Solo mira... -dijo Natasha colocando delicadamente un trozo de pañuelo en su nariz.
La mandíbula de Wanda casi toca el suelo al ver la pantalla. Ambos hombres se contemplaban en silencio. Tony tenía una de sus manos a un costado de la cabeza de Steve, mientras que éste ya no lo empujaba hacia arriba, pero su mano aún seguía en el pecho del otro.
-Ahora bésense -susurró Clint mientras se inclinaba desde el suelo para ver mejor.
Desafortunadamente, Tony se dio cuenta de lo que estaba haciendo y se separó del rubio. Steve, por su parte, se sentaba mirando las sábanas. Todo se había vuelto incómodo.
En el ático, gritos de desaprobación y abucheos se escuchaban por toda la habitación.
-¡No puedo creer que ninguno de los dos tomara la iniciativa! -se quejaba Loki.
-¿Creen que nuestra ayuda les está sirviendo de algo? -preguntó Bruce, un poco dudoso.
-¡Por supuesto que ayudó! ¡De no ser por nosotros, Tony ni siquiera hubiera querido cuidar a Steve -respondió Wanda.
La próxima vez será, yo lo sé. Se dijo a sí misma Wanda, aquella tarde lluviosa.
----------------
Perdón por no actualizar <\3 no me maten plz
Ojalá les haya gustado este capitulo ♥~
Nos leemos en cuanto pueda! :'3
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top