nota de la autora: estuve trabajando mucho para esto lo ultimo que publicaré en este libro serán las opciones de mi próximo libro y el epilogo

- no, por favor no me hagas esto... ¡no me dejes! ¡¿ que hice mal?!- decía una albina de ojos amatista, con lagrimas en los ojos que corrían su muy ligero maquillaje bajo uno de sus ojos.

- no has hecho nada, el intercambio acabo, debo irme mañana en la noche- le respondió un heterocromatico castaño, apunto de llorar, se había convertido en un chico fuerte estando al lado de la albina, le había tenido que defender muchas veces,  secar tantas lagrimas de esos ojos que el adoraba.

- ikanaide... onegai... ikanaide....- no aguanto más. Un abrazo, un beso, de noche... el diablo se apodero de la decencia y el juicio y los mando al infierno, ¿a quien le importa? nunca estarían con alguien mas, fue un juramento, nunca de labios, siempre del corazón.

El no aguantaba verla llorar, ella no aguantaba estar sin el, besos, caricias, abrazos, poco a poco las prendas fueron retiradas de ambos cuerpos.

- ¿estas segura?

-lo estoy.

Loon se dio cuenta de algo, lo único que quedaba en ambos cuerpos eran las ropas intimas, solo que la superior de la chica eran vendas, no eran de heridas, si no... ocultaban algo, eran aquello, pequeños, pero notorios, pechos, ella sonrojada bajo la mirada, justamente donde apuntaba la mirada confusa del chico.

-¿por qué haces esto?

-me da vergüenza... acepto que parezco chico pero... prefiero ocultar eso.

- yo creo que eres hermosa tal y como eres.

un sonrojo, otro beso y una lamida a la oreja de la albina. El chico no quiso seguir hablando, tenia que complacer a la chica de sus sueños, comenzó a besar el cuello de la joven y con algunas lamidas y chupones de por medio dejando salir de los labios de la otra gemidos

-suenas adorable.

- ¿tienes que decir esas cosas?

-pues... estoy nervioso, nunca había hecho esto

- yo tampoco, pero siempre hay una primera vez.

después de eso, una mirada pervertida de parte de la albina y un cambio de pose inesperado para el pequeño loon, de ser activo paso a ser sometido por su chica, un sonrojo potente y un beso húmedo, digamos que lo que les quedaba de ropa se fue a la basura, literalmente callo en la papelera de la chica.

ambos se sentaron y se abrazaron, se miraron a los ojos y loon tomo las mejillas de su contraria.

-quiero hacerlo... pero tengo miedo.

-el miedo lo tiene mai al quererse confesar a towntrap, esto es entre tu y yo, quiero, quiero ser tuya-una lagrima- ¡quiero que seas mio!

-yo también quiero eso.

la recostó lentamente y posicionandoce sobre ella, un beso, y la entrada a un mundo en que ambos solo habían escuchado, un momento de éxtasis, las embestidas llenaban a ambos de placer y sonrojos, gemidos se escuchaban por la casa entera, que bueno que marionette había salido, el sudor caía en la cama, había un poco de baba por algunos sitios, sobre todo en el cuerpo de la albina... por los pechos (7w7), y un poco en el cuello del castaño, quien diría que tras un grito de placer llegaron al orgasmo.

-aishiteru.

-te amo.

//al dia siguiente//

-puppet, ¡sal del cuarto!

- ¡no! déjame mai

-puppet... déjame pasar- esta vez era la voz del chico, antes, tímido, bueno, aun lo es, solo que no tanto.

- ¿no tenias que largarte? -un sollozo.

- puppet... no me odies por favor, te lo juro, no quiero irme- estaba apunto de llorar, no soportaba que su, hace aproximadamente media hora, exnovia, no podían mantener una relación a distancia, loon no se permitiaria hacerle eso a puppet, ¿quitarle la ilusión del amor porque el estuviese lejos?

//la hora de irse a japón :v//

- no vino...-apunto de llorar, un castaño esperaba el primer llamado a su avión al lado de una peli-azul

. te dije que no valía l- y la estúpida no pudo terminar su oración, porque una albina gritaba el nombre del japones y corria hacia el.

- ¡puppet!- se levanto y corrió con ella, un beso, y la primera llamada al avión.

- perdóname por ser tan insegura, no me olvides- un empujón para el castaño, y una despedida con la man y con las lagrimas en los ojos

//1 año después//

- di mamá.

-m-a-am-mi- un niño con un ojo rojo y el otro morado (referencia al fonnie aquí :v) con un cabello castaño de mechas blancas, reía sin parar en los brazos de su, muy joven, madre

-¿estas segura de que no volverá?

- no quiero que se vea obligado a volver conmigo por oliver, no lo merece gaby.

- pero... el no se quería ir, pasaron su adolescencia juntos, se fue sin querer.

- tal vez... y solo tal vez... vea a su hijo si vuelve, no lo obligaré a enterarse- dijo la madre tomando en sus manos un marco con fotos de ambos, algún día tenia que explicarle a su hijito todo eso.