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Matthew.
Habia pensado con cuidado a donde llevarla y por fin habia encontrado el lugar perfecto y tenia un gran plan para llevar a cabo eso, aunque sabia las posible consecuencias que conllevaria eso.
-¿A donde vamos?.
-Es una sorpresa.
-Vamos Matthew dimelo.
-Si te lo dijera no seria una sorpresa cariño.
-Ya te e dicho que te amo.
-No trates de sobornarme cariño.
Cuando llegamos al aeropuerto le cubrí los ojos con una venda a Anayansi, cuando por fin llegamos al hotel, abri la puerta que conducía al balcón la tome la mano y la dirigui hasta llegar al balcón, le quite la venta algo nervioso.
-Bienvenida a París.
La gran sonrisa que Anayansi tenia se borro en un instante mientras observaba la torre Eiffel, me miro decepcionado se dio media vuelta y se encerró en el baño. Creo que habia salido mal.
Tire la venda en la cama y toque la puerta del baño.
-Anayansi, ¿estas bien?- no hubo respuesta- ¿Anayansi?... Cariño, amor.... ¿mi vida?.
-No quiero verte Matthew.
Solte un leve suspiro, creo que habia ido demasiado mal, aunque bueno era una de mis tantas posibilidades. Me sente en la cama y tome las llaves que me habia dado, busque la que era para el baño y entre.
-Anayansi, se que estas molesta pero...
Voltee la mirada hacia ella, quien estaba tomando un baño solto un grito y me tiro el jabón en la cara.
-Sal de aqui.
-Pero eres mi esposa, ¿Que tiene de malo que te vea desnuda?.
-¡LARGO!.
-Esta bien- dije mientras salia del baño- vaya creo que realmente esta molesta.
Tome una silla y observe la torre Eiffel tenia tiempo sin venir a París, oi el sonido de la puerta del baño abrirse, supuse que aun seguiria molesta conmigo por lo que nisiquiera me limite a verla, tal vez habia sido una mala idea.
-Lamento haberte arrojado el jabón en la cara- comento Anayansi apenada mientras se paraba enfrente de mi y jugueteaba con sus manos- Tambien por haber actuado de esa manera... Te conozco Matthew y se que no tenias ninguna mala intención al traerme aqui, despues de todo París tambien fue tu hogar.
Solte una leve sonrisa, parecia una niña pequeña que estaba pidiendo disculpas por una travesura que habia hecho, me levanté y la abrace por la cintura le di un beso rápido y la observe a los ojos.
-Esta bien, te perdono por lo del jabón, despues de todo creo que fue algo inapropiado de mi parte hasta cierto punto... En caunto a lo de París, tendrás que disfrutar esta luna de miel conmigo, ¿de acuerdo?.
-De acuerdo.
-Bien, ire a tomar un baño- dije mientras la soltaba y me diriguia a la ducha.
Cuando sali del baño observe a Anayansi sentada observando la torre Eiffel, habia tantos sentimientos queriendo ser reflejamos en ese rostro de melancolía, me acerque a ella y la tome de la mano.
-¿Nos vamos?.
Ella solo asintio con la cabeza y ambos salimos rumbo a muestro primer destino. El museo cultural que mi familia patrocinada, varias pinturas eran del abuelo de Anayansi, parecia muy feliz el estar aqui, se pasea sin parar mientras tomábamos nuestras manos, despues de un rato me llevo a su cafe favorita, parecia totalmente emocionada.
-Siempre venía aqui con mis abuelos y mis padres- comento mientras observaba hacia la ventana- se que te va a encantar el té de aqui- comento con una enorme sonrisa.
Cuando nuestra orden llego me hizo cerrar los ojos, mientras me daba una cucharada de su postre, ella si que sabia como hacer que soltara bobas sonrisas, me encantaban los postres franceses y ella lo sabia a la perfección, sabia todo lo que podia encontrarme de este lugar.
-¿Que tal?.
-Delicioso- dije mientras abría los ojos y la observaba- simplemente exquisito.
Observe el leve sonrojo de Anayansi, amaba ese leve sonrojo que soltaba de vez en cuando y queria que siguiera asi.
-Sabes te tengo otra sorpresa.
-¿Encerio?, ¿que es?.
-Realmente muy curiosa la niña, ¿verdad?.
-Tu sabes que si.
Despues de un rato ambos regresamos al hotel, mientras Anayansi se bañaba, tome la caja del regalo que le tenia preparado lo deje en la cama junto con una nota y sali de la habitación.
Anayansi.
Debo admitir que al principio no estaba del todo feliz por estar aqui en Paris, aun habia un poco de dolor en mi corazón pero era algo que podia soportar, despues de todo ya no estaba sola, ademas me habia divertido bastante el dia de hoy, cuando sali del baño observe la habitación vacía.
-¿Matthew?.
Me acerque a la cama y observe una caja de regalo con una nota.
Un presente para mi bella dama. Paso por ti a las 8, para ir a nuestra primera cita.
Con amor, Matthew.
Solte una leve sonrisa, siempre diciendo que lo suyo no era lo cursi y escudandose que solo decia lo que sentía, en definitiva me habia casado con un buen hombre.
Abri la caja y me encontre con hermoso vestido color vino, con una manga de lado y corte de sirena. Normalmente usar vestidos no eran mi tipo, pero que diablos digo, era algo que mi esposo habia escogido para mi. Por supuesto que lo usaría sin rechistar.
Cuando termine de arreglarme me observe en el espejo con una sonrisa satisfactoria, habia logrado mi cometido, estar bella para mi esposo.
Oi el sonido de la puerta, tome mi pequeño bolso de mano y la abri con una sonrisa.
-Wou... Es decir wou te veo y se que los milagros existen.
No pude evitar sonrojarme al escuchar tales palabras, Matthew me extendió su mano y ambos nos diriguimos a la gran sorpresa, no podia creerlo era un concierto de música clásica. Comence a sentir un leve panico, ¿le habia comentado a Matthew mi panico al cello?, ¿lo habia hecho? Creo que si. Pero...
¿Porque traerme hasta aqui? Vamos Anayansi respira todo ira bien.
Lo único que me tranquilizada era estar en una zona VIP, solo eramos el y yo por lo que si entraba en panico, no causaría ningun inconveniente a nadie.
Hasta ahora todo habia ido muy bien, no habia tocado el cello, nisiquiera parecia que lo fuesen a tocar, senti una enorme tranquilidad que se esfumo al ver notar que habria un solo de cello, yo y mi maldita bocota.
Necesita respirar, cerré los ojos un instante, Bach predule cello suit n. 1.
¿Que acaso esa medita canción tenia que seguirme toda mi vida?.
Era esa canción, esa misma canción que yo.
Ya no podia mas, en panico se estaba apoderado de mi, senti como comenzaba a tener dificultades para respirar, cuando pensaba llevar mi mano a mi pecho senti la calidez de la mano de Matthew, quien me estaba mirando.
-Ma.. Matthew yo....
Dije con una voz temblorosa, cuando sentia que estaba a punto de echarme a correr Matthew me abrazo y me observo directamente a los ojos.
-Yo estoy aqui, tranquila.
Dijo con una dulce voz mientras me seguia observando, se acerco a mi y comenzo a besarme. Oi la canción a la perfección, entendía cada nota, a pesar que toda mi atencion estaba en Matthew quien me besaba dulcemente, mientras me abrazaba por la cintura, estaba comenzando a dejarme llevar por ambos tanto por la música como por Matthew, lleve una de mis manos hacia la cabeza de Matthew mientras le acariciaba su cabello, hacia una pequeña danza con mis dedos al ritmo de la música, nos separamos un poco para poder respirar, estaba deseosa de mas y Matthew tambien, el volvió a besarme con tranquilidad, con dulzura, el me estaba transmitiendo que todo realmente estaba bien, cuando la canción termino, Matthew se separo de mi y volvió su vista de nuevo al frente para observar a la orquesta.
Otra vez abría un solo de cello pero de alguna forma ya no sentia nerviosa ni con miedo, estaba confundida no sabia lo que habia pasado, trate de dirigir mi mirada al frente para concentrarme en el concierto pero no lo lograba mire de reojo a Matthew quien estaba sonriendo, el tomo mi mano y besó mi mejilla.
Creo que alguien habia logrado su cometido, al terminar el concierto, decidimos regresar caminado al hotel.
-¿Te gustó el concierto?.
-Me encanto.
-Mmmm, si estas hablando del concierto, ¿verdad?.
-Por supuesto- conteste mientras sentia mis mejillas sonrojar, sabia a lo que se refería... Matthew.
-¿Si?.
-Lo hiciste a propósito- lo dije en afirmando.
-Se que te encantaba el cello, bueno aun te encanta pero debido a lo de tus padres, tenias como cierta fobia, leí que una manera de superar la fobia en enfrescándola, demostrando a la persona que todo ira bien.
-Y solo se te ocurrió besarme.
-Bueno funciono, ademas no oi ninguna queja mientras lo hacia- comento Matthew mientras se detenía.
-Estas comenzando a hablar como Marcello- comente entre risas-¿que le has hecho a mi tierno esposo?.
-Sigue aqui-comento Matthew mientras me siguetaba de la cintura.
Yo cerré de los ojos en espera al tacto de sus cálidos labios. Pero lo unico que nos callo de imprevisto a ambos fue el aguacero que se solto, Matthew me cargo entre sus brazos y comenzo a correr bajo la lluvia, teniamos la suerte que estábamos a unos cuantos pasos del hotel, durante el camino al ascensor no dejábamos de reír, Matthew aun me cargaba entre sus brazos, mientras caminaba por el pasillo senti la gran necesidad de besarlo, me acerque a el pero solo bese la comisura de sus labios el me observo y me bajo con cuidado enfrente de la puerta, se acerco a mi para besarme, abrió la puerta y nos encaminamos hasta la habitacion mientras seguíamos basándonos, oi el sonido de la puerta cerrarse, Matthew volvió cargarme entre sus brazos mientras seguia basándome, sentí como bajo el cierre del vestido antes de arrojarme a la cama, sus besos comenzaron a bajar por mi cuello, sentia un gran cosquilleo, tambien regreso a mis labios y me beso esta vez con desesperación.
Senti una leve punzada de dolor, a mi mente venían varias imágenes de John, el como el me tiro al suelo, caundo estaba tratando él... No.. No... El no era John, porque estaba pensando en eso, caundo senti como trataban de despojarme de mi ropa, comencé a forjear.... No, no, esto no estaba bien.
-¡No!, ¡Ya basta déjame!- grite mientras le soltaba una gran bofetada a Matthew, quien me miro desconcertado, se levanto de la cama y me observo, sentia mis ojos llorosos, no podia creer que habia recordado algo como eso- yo... Yo, lo siento- dije entre lagrimas- no queria pegarte Matthew, es solo que yo... Yo nose que paso- dije arrwpentida mientras llevaba ambas manos a mi rostro.
-Esta bien, tranquila- dijo Matthew dulcemente mientras me abrazaba- perdona yo, yo no queria hacerte recordar algo como eso.
Abrace a Matthew y llore en su hombro, me sentia tan lamentable, como habia podido comparar aquel momento con este, como habia podido comparar a mi amado esposo con esa basura. Me sentia de lo peor Matthew no se merecía algo como esto.
-Vamos Anayansi ve a tomar una ducha, no quiero que te resfries.
Yo solo asenti con la mirada y tome una ducha, cuando sali observé a Matthew quien estaba observando la lluvia, se veia tan perdido, tan triste, cuando el volteo a verme me sonrio y entro al baño para poder ducharse, me tire a la cama y no pude evitar llorar lo habia arruinado todo. Caundo Matthew salio, se fue a sentar en una silla cerca de la ventana.
-¿No vas a dormir conmigo?- pregunte algo temerosa.
-Ire despues, no tengo sueño aun.
Observe el reloj ya era mas de media noche, era obvio que estaba cansado, pero no pensaba decirle nada, no me sentia cómoda por lo que habia pasado y al parecer el tampoco.
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