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Matthew.
Parecia ser un dia normal, hasta que alguien me tiro de mi cama, voltee a ver al causante de todo esto. Marcello.
-¿Que te sucede tan temprano por la mañana?.
-Solo levanta tu trasero de ahí paringles.
-Ya te he dicho que no me llames asi- conteste mientras me levantaba para llegar hasta mi escritorio.
-Estuve investigando a John... No llegue a nada el maldito no dice nada al respecto, solo que intento abusar de la princesa por ser "candente" ese maldito es un cerdo.
-Marcello solo era una suposición mia y de Anayansi, no es como si fuese cierto.
-¿Entonces porque estar en tu oficina?.
-Tal vez queria llamar su atencion, no lose.
-Tan inocente como siempre amigo, hablo encerio ese maldito oculta algo... Y no puedo evitar que Anayansi tambien.
-¿A que te refieres?.
-Amigo la princesita parece perfecta, pero, nadie lo es, nadie puede ser perfecto.
-Ella se esfuerza por tener una nueva vida Marcello, solo déjala en paz.
-Deja de ser tan ingenuo o que, ¿acaso ya te enamoraste de ella?.
Guarde silencio un momento. No sabia como contestar esa pregunta pero, ¿porque? Normalmente mi respuesta ante todo sobre ella era un rotundo no. Pero, ¿porque dudar?.
-Matt, ¿te enamoraste de la princesa?- sabia que cuando Marcello me llamaba Matt era porque estaba preocupado.
-Creo que es linda, pero no es amor... Tal vez aprecio como a una hermana.
-Estas basando esto en un tal vez.
-Acaso importa, tu lo haces siempre.
-Exacto, yo lo hago tu no, tu siempre estas seguro de tus respuestas.
-Bueno siempre hay una primera vez...
Oí como la puerta se abrió, Marcello y yo callamos un momento, Dios, Anayansi se veia preciosa en ese vestido azul, no podia evitar seguirla con la mirada era del mismo color de sus ojos.
-¿Sucede algo?.
-No es nada- respondi mientras regresaba mi mirada a Marcello.
-Lindo cambio- dijo Marcello con una sonrisa coqueta.
Observe a Marcello no podíamos seguro nuestra conversación mientras Anayansi estuviese aqui adentro, pero no pensaba correrla, por las miradas de Marcello estaba desesperado, queria continuar con la conversación.
-Hay un error aqui- dijo Anayansi llamando mi atencion y la de Marcello.
-Yo no veo nada- dijo Marcello despues de haber visto las hojas se encogió de hombros y me dio las hojas.
-Hay un incremento del 1.5% en las ventas y compras- dijo Ananyadi mientras las marcaba con un marcador- Si no mal recuerdo me dijiste que los incrementos siempre debían señartelos y tener una documentación del porque del aumento, que se compro y vendió.
Estaba sorprendido pense que cuando hablaba de negocios ella se aburrida pero prestaba demasiada atencion, me sente en mi escritorio para revisar los demás documentos, Anayansi marcaba cada que veia un error. La observe de reojo estaba mordiendo su pulgar, con mi mano quite la suya para que evitará estar mordiendo su pulgar.
-Perdona lo hago cuando estoy nerviosa.
-Son demasiados errores- comento Marcello- demasiado cautelosas para ser sinceros.
-Aun me preocupa el tema de John- confeso Anayansi - Matthew, ¿que si el no trabajaba solo?, ¿que tal si... Si el que esta detrás de todo esto quiere algo mas que tu compañía?.
Hubo un gran silencio, las preguntas de Anayansi eran algo de cual debíamos preocuparnos.
-Vaya esto se esta volviendo complicado- dijo Marcello antes de tirarse a la silla- preciosa me impresiones, como es que lograste notarlo.
-Solía trabajar como gerente de un restaurante, mi jefe mi enseñó todo lo que se...¿que hace Mirt Muller en la lista de invitados?.
No habia notado cuando tomo el sobre de la fiesta que mi padre habia organizado.
-Perdona- dijo Marcello confundido.
-Ya saben, Mirt Muller, ¿puedo?- me pregunto mientras señalaba mi laptop.
-Claro.
-Mirt Muller, encargado de una de las empresas literarias, normalmente él solo selecciona a autores y trabaja para hacerse asquerosamente rico a el mismo.
-¿Que acaso eres agente del FBI?- pregunto Marcello- se que vienes de Nueva York.
-No- respondio mientras reía- pero seria genial serlo... Saben creo que tenemos muchas cabos sueltos.
-Opino lo mismo, dime preciosa, ¿quien eres?.
-Tranquilízate, mi padre solía ser escritor y Mirt trato de convercerlo para trabajar para el pero mi padre nunca confío en él, decía que no era de fiar... Jamás olvidare a ese tipo, incluso despues de que mis padres murieron, trato de converseme sobre venderle el último trabajo de mi padre, pero ese trabajo murió junto con mi padre, jamás sabia a lo que se refería.
-Asi que ese tipo tambien es un acosador- dijo Marcello en tono cómico.
- Anayansi necesito hablar con Marcello a solas, podrías salir un momento.
-Claro.
En cuanto ella salio tome la lista y observe a Marcello.
-Te lo dije la princesa, oculta algo... Pero la verdad tiene un punto, Mirt Muller tiene una pequeña fama de ser un estafador sin mencionar que hay un rumor mucho mas comprometedor.
-¿Cual es?.
-Dicen que secuestro a la hija del escritor Damien Duval, pero solo es un rumor... Lleva desaparecida mas de 10 años, debido a que nunca salieron fotografías de ella nisiquiera saben como encontrarla, bueno nisiquiera saben su nombre, su familia fue muy cautelosa para poder hallarla, incluso sus abuelos meternos aun la buscan, aunque me causa curiosidad su abuelo paterno es el que mas tenia devoción en encontrarla pero en los últimos meses retiro todo los medios para encontrarla.
-¿Porque Muller secuestraria a la hija de ese hombre?.
-Hay varios rumores pero ninguno es certero, hay quienes dicen que se fue por su cuenta.
-¿Tenia problemas la chica?.
-Por lo que me dijo mi padre del caso ninguno, sus padres eran los mejores, le dejaron todo su familia la amaba, solía ser conocida por tener el caracter de amabilidad de su padre y la belleza de su madre.... Técnicamente todo iba bien hasta que bueno sus padres murieron, lo único que me parece increíble es que despues de 10 años mi padre siga investigando dice que alguien provoco el accidente o algo asi por el estilo, pero bueno nos salimos del tema, como el bueno amigo que soy y por supuesto el mejor agente de policía te ayudare, la princesita formuló muy buenas preguntas al parecer si hay muchos cabos sueltos.
-Gracias.
-Por cierto tambien necesito información sobre la princesita es sospechosa.
-¿Porque?
-Como te dije siente que oculta algo.
Me quede callado un momento, cierto lo hacia, pero como cualquier otra persona que quiere empezar su vida de nuevo.
-No déjala, si yo llego enterarme de algo te avisare.
-Si claro.
Dicho esto Marcello se fue, me levante del escritorio y seguí observando todo. Tantas cosas habían pasado esta mañana demasiadas para ser precisos.
Ya tenia suficiente con lo de mi hermano como para empezar a concentrarme en esto, tome el desayuno y comencé a comerlo, cuando termine observe hacia la ventana para observar a Marcello irse, fue algo extraño pense que ya se habia marchado. Me levanté para salir de mi habitacion, al abrir la puerta me encontre con Anayansi, quien solo me dio una breve sonrisa.
-¿Necesitas algo Matthew?.
-No, yo queria ir a buscarte.
-Bueno ya estoy aqui- dijo mientras entraba a la habitacion y ese acercaba a la cama dispuesta a tenderla- debería tomar un baño ya es medio dia.
-Lo haré despues- dije mientras volvía a mi escritorio y me sentaba, no dejaba de rascarme la cabeza y morderme el labio inferior.
-Te preocupa algo- dijo Anayansi mientras se acercaba a mi- lose muy bien, tambien estas nervioso... ¿Que es lo que sucede?.
-Supongo que demasiadas mociones por el momento... Sabes aun estoy preocupado por mi hermano, al parecer tiene la misma enfermedad que tenia su hermana por lo que todo podria salir muy bien pero...
-Necesitan un corazón- dijo Anayansi interrumpiendo.
-Si.
Oí soltar un gran suspiro a Anayansi cuando la voltee a ver ella estaba llorando, ella se arrodillo a mi lado mientras lloraba a mi lado, yo me sente en el suelo a su lado y la abrace, no sabia que habia pasado. Cuando la oí disculparse una infinidad de veces me preocupe mas.
-Matthew- me llamo en voz baja- lo siento.
-No es tu culpa- conteste al no saber que mas decir.
Ella negó con la cabeza y me miro.
-Yo se como... Se como conseguir un corazón, pero no quiero que me odies... No quiero que me trates diferente por esto...
Ella oculta algo.
Aquella palabras que Marcello habia dicho ahora cobraban sentido. ¿Que era tan preocupante como para poder odiaría?, ¿que podria ser para hacerla tratar de una manera diferente?.
-Yo jamás te odiaré Anayansi- le dije mientras le limpiaba las lagrimas- yo no podria odiarte.
Ella trago saliva y me miro directamente a los ojos.
-Mi verdadero apellido no es Normant... Es Duval, yo soy hija de Damien Duval y Katherinne Normant, mis padres murieron en un accidente de auto ambos eran donadores de organos, el de mi madre ya fue donado pero el me di padre no- ella tomo una pausa y me tomo con fuerza la mano- se... Se como conseguirlo para que se lo donen a tu hermano, pero no quiero irme de tu lado Matthew, no quiero estar lejos de ti.
Aquella palabras me habían puesto nervioso, mi corazón no dejaba de latir, sin pensarlo volví a abrazarla con algo de fuerza esta vez, tenía que tranquilizarme... Ambos teniamos una buena relación, como de mejores amigos que son como hermanos, no podia pensar mas allá, no debía hacerlo.... Pero queria hacerlo.
-No lo haras... No te iras de mí lado jamás.
La última vez que habia sentido un deseo tan egoísta, fue de pequeño, ahora otra vez, yo estaba aqui, abrazando su pequeño cuerpo que sentía que podia romper, estaba entre mis brazos algo que no queria soltar jamás.
¿Era egoísta? Si.
¿Infantil? Tal vez.
¿Podia hacer algo al respecto? No lo sabia.
Despues de un rato ella termino dormida en mis brazos, la acosté en la cama y la arrope un poco, me había enamorado de esta chica de bella chica de ojos azul cielo.
Solté un gran suspiro, tantas noticias en un dia, eran algo confusa.
Todo simplemente era confuso.
Anayansi.
Antes de que Marcello se fuera me dijo: Cuida bien de Matthew.
Bueno esa mi intención desde un principio se lo habia prometido a Anna. Volví a la habitacion para continuar con mi trabajo, Matthew aun seguia en pijama por lo que me causo algo de gracias.
A pesar de que le habia dicho que tomara una ducha el se sentó en la silla de su escritorio, lo observe con atención.
Cuando Matthew esta nervioso, tiende a rascarse mucho la cabeza. Solía decirle que se quedaría calvo pero nunca me escuchaba, cuando veas que lo hace trata de averiguar su problema.
Era algo que decía una de las carta, cuando mire que agora mordía su lado inferior sabia que el estaba preocupado.
Suele morderse el labio inferior es signo de mucha preocupación. Habla con el y no te rindas hasta que él te lo cuente.
Sabia que eso no era bueno por lo que trate de hablar con el.
-Supongo que demasiadas mociones por el momento... Sabes aun estoy preocupado por mi hermano, al parecer tiene la misma enfermedad que tenia su hermana por lo que todo podria salir muy bien pero...
-Necesitan un corazón- dije interrumpiendo.
-Si.
Sabia lo que podia hacer, tal vez no habia podido salvar a Anna pero podria salvar a uno de sus nietos. Eso era algo bueno, ¿no?.
Podria estar un poco mas tranquila al hacerlo. Pero eso implicaba muchas cosas, tendria que contarle la verdad a Matthew, tendria que llamar al abuelo, tendría que volver a Paris... Estaba dudando, estaba siendo egoísta, yo en que estaba pensando seria una manera de arreglar un poco mi error seria una manera de ayudar a Anna, pero estaba pensando mas en mi que en ella, se lo debía, no solo a Anna, no solo a Matthew... Tendria que hacer algo.
Pero es mas grande mi miedo.
Estaba en un mar de sentimientos, solté un gran suspiro que estaba acompañado con lagrimas, cai al suelo al ya no tener fuerzas en las piernas, la culpa me estaba consumiendo, sentí como Matthew me abrazo. La culpa volvió y no pude evitar seguir llorando a mares mientras pedía perdón, tenia que hacerlo tenia que disculparme, tenia que hacer algo.
-Matthew, lo siento.
-No es tu culpa- contesto con nerviosismo.
Tenia que hacerlo, tenia que amarme de valor, negué con la cabeza y mire a Matthew.
-Yo se como... Se como conseguir un corazón, pero no quiero que me odies... No quiero que me trates diferente por esto...
-Yo jamás te odiaré Anayansi- dijo mientras me limpiaba las lagrimas- yo no podria odiarte.
Podia hacerlo, podia confiar en el. Trague saliva por el susto y mire directamente a los ojos a Matthew.
-Mi verdadero apellido no es Normant... Es Duval, yo soy hija de Damien Duval y Katherinne Normant, mis padres murieron en un accidente de auto ambos eran donadores de organos, el de mi madre ya fue donado pero el me di padre no- ella tomo una pausa y me tomo con fuerza la mano- se... Se como conseguirlo para que se lo donen a tu hermano, pero no quiero irme de tu lado Matthew, no quiero estar lejos de ti.
El seguia observandome con atencion, no decía nada. Mi lagrimas ahora eran de miedo. ¿Acaso me odiaba? Todo aquella duda se disperso, cuando Matthew me abrazo con fuerza.
Seguridad.
Tenia tantos años sin sentirme tan segura y protegida por alguien, sentía que podia confiar en él. En lo que sea... Yo podria hacerlo.
-No lo haras... No te iras de mí lado jamás.
Aquella palabras hicieron sentir un gran mar de sentimientos, sentía cosquilleo en mi estomago, queria sonreír pero mi tristeza era mas grande, necesitaba sacarlo, necesitaba llorar todo lo que me habia guardado con Anna.
Ahora entendía un poco, ambos teniamos que ayudarnos mutuamente... Ambos teniamos que saber como curar las heridas del otro para continuar.
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