Acontecido lo anterior, Fuutarou se dirigió a su hogar.

Empezó a cuestionarse si en realidad debería confiar en Marou y su padre. Pero ya arrepentirse por su actual desicion no serviría de nada.

Callado llegó a su hogar, notando que las chicas estaban dispersas por todo el lugar, así que pasó de largo sin antes avisar su llegada, tomo rumbo hacía la cocina.

Luego de colocar las cosas que había traído del mini super. Fue hacia la sala donde estaba Nino junto a Miku viendo una telenovela y tomo asiento en medio de ambas.

Nino — ¿Como te fue? —

Fuutarou — Bien, nada interesante que contar —

Nino — Ya veo, ¿No te sientes  estresado?, mañana tienes tu examen de admisión junto a Itsuki —

Miku — Tienes razón Nino, no los eh visto estudiar desde la tarde —

Fuutarou — Ya repasamos mucho a lo largo de la semana, así que tomamos el resto del día de descanso. Ya que si nos sobre esforzamos dará el efecto contrario —

Nino — Me alegra que no seas ya tan apegado a los libros — Rio mientras Fuutarou la vio con molestia — Por cierto, ¿A qué horas saldrán del examen? —

Fuutarou — Seguramente a las 5 pm, son dos horas para resolverlo —

Miku — ¿Y si vamos a algún lugar luego para celebrar? —

Fuutarou — Lo tuve en mente — Sonrió — Déjenme eso a mí —

Nino — No me convences—  Nino lo vio con duda — A pesar de tener cinco novias eres pésimo siendo detallista —

Fuutarou — Tengo que decirles algo importante. ¿Puedes confiar en mí? — Pregunto, causando aún más duda a Nino — Te prometo que haré lo mejor posible para que sea una buena cita —

Miku — Entonces iremos las cinco — Miku dijo en voz baja — ¿Y que es eso tan importante? —

Fuutarou — Se los diré mañana, necesito aun preparar algunas cosas —

Nino — Solo no lo arruines Fuu-kun — Le vio seriamente — Probablemente sea nuestra última cita en mucho tiempo. Quiero quedarme con un buen recuerdo de ti —

Fuutarou — Tenlo por seguro — Rio — No se esperan lo que sucederá. Iré a descansar, saldré temprano a hacer unas cosas —

Dicho eso, beso la mejilla de ambas hermanas y se dirigió a la habitación que compartía con sus parejas e ir a descansar.

Aunque le costó dormirse, ya que estaba pensando con delicadeza el como haría esa cita el día de mañana.

(...)

Cómo dijo, se levantó temprano, observando una escena muy tierna de parte de las quintillizas.

Todas las hermanas se encontraban dispersas por toda la cama en posiciones diferentes.

Nino tenía la mitad de su cuerpo rodeada por una sábana con su pie en la cara de Itsuki, que abrazaba esa extremidad mientras babeaba. Ichika un poco separada estaba abrazada de Yotsuba, mientras Miku dormía en un rincón del futón con una mueca tierna.

El río, mientras se retiraba a tomar una ducha. Al terminar se arregló con sus prendas comunes y salió del apartamento.

Tomo su teléfono y realizó una llamada a su padre, que contesto inmediatamente. Estuvieron hablando por un largo rato, Fuutarou le pidió ayuda para su cita, le comento su idea que formuló durante la noche y la mañana reciente. Cosa que el accedió sin dudarlo.

Pensaba en llamar también a Marou para que ayudara, así que al finalizar la llamada con su padre se iba a comunicar con el.

Sin darse cuenta estuvo caminando un montón en lo que hablaba con su padre, encontrándose ya en la joyería del centro comercial.

Decidió dejar la llamada para después, pero sorpresivamente se encontró con Marou en la puerta de la joyería.

Marou — Que sorpresa, Uesugi-kun — con un tono frío saludo —

Fuutarou — Una sorpresa conveniente, señor Nakano — Fuutarou lo vio con sorpresa — ¿Que hace aquí? —

Marou — Eso debería preguntar yo, aunque es evidente que viniste a ver los anillos para las chicas —

Fuutarou — Si, vine a verlos para poder ahorrar y comprarlos después —

Marou — ¿Me tratas de decir que les pediras que se casen contigo sin anillos? —
Marou se dió un facepalm, mientras observaba con decepción al peli azul.

Fuutarou — ¡No tengo dinero!. No me juzgue —

Marou — Menos mal vine para encargarme de eso personalmente — suspiro con decepción — Supuse sobre que harías eso, pero no lo considere muy posible. Así que yo compré los anillos por ti —

Fuutarou — ¡¿Que?! —
Con impresión observo al peli negro, que lo veía con esa misma cara espeluznante.

Marou — Eso es lo que tengo ahora mismo aquí — En su mano derecha, tenía una bolsa con una caja grande — Aquí están los anillos, cada uno tiene una perla de diferente color. Amarillo Ichika, rosa Nino, azul Miku,  verde Yotsuba y finalmente rojo Itsuki —

Fuutarou — No lo sé.....Se ven muy costosos y no me sentiría bien recibiendolos sin pagarlos —

Marou — No te preocupes por eso, fijo me los pagarás después — Lo vio con seriedad — No lo hago por cortesía —

Fuutarou recibió la bolsa, mientras observaba con una gota en la cien a Marou y una sonrisa nerviosa.

Fuutarou — Por cierto, necesito contar con usted para algo, tiene que ver con esto —

Marou — ¿Eh?. Seguro, escupelo—

Luego de que le contará la idea, el hombre se negó rotundamente al principio pero el peli azul logro convencerlo.

El le entrego unas llaves y una tarjeta de acceso.

Marou — Solo por esta vez Uesugi-kun, ni se te ocurra que en lo que me quedé de vida volveré a hacer algo así —

Fuutarou — Igual, dada la ocasión esto podría beneficiarlo. Así hará las paces con sus hijas —

Marou — Solo por eso lo haré....Está única vez —

Dicho eso, el pelinegro se retiró del lugar sin despedirse. Se notaba a distancia que no le agradaba del todo Fuutarou.

El peli azul suspiro con pesadez, fijándose en la hora. Había pasado ya un largo rato desde que salió de su apartamento.

Salió a las 8 y 30, en la que converso con su padre paso una hora y en la que camino y converso con Marou otra hora, siendo ya las 10 y 30 AM.

Aún le quedaba algo de tiempo, así que tomo camino hacia un lugar un poco alejado.

Al llegar, pudo ver el complejo de apartamentos en el que solía enseñar hace un tiempo a las cinco hermanas.

Tomo la tarjeta y accedió, para dirigirse al apartamento en el que solían vivir las hermanas.

Al entrar, noto un ambiente atemorizante, se sentía que estaba abandonado el lugar, incluso tenía algo de polvo en algunos muebles.

Al quitarse su calzado, decidió hacer un poco de limpieza en el lugar antes de ponerse a hacer lo que tenía planeado.

Vio todo intacto en el lugar a pesar que pareciese que estaba abandonado, incluyendo las habitaciones de las hermanas. Que tenían aun sus muebles y algunas cosas en ellas.

Al parecer nadie estuvo luego de que ellas se fueran, a fin de cuentas Marou compro ese departamento solo para sus hijas, ya que el no solía ir allí. Ya que descansaba en su oficina.

Suspiro luego de revisar. Para darle una gran limpieza al lugar y arreglarlo para la cita de esta tarde.

(...)

Habían pasado ya 4 horas, el reloj marcaba las 2 pm. Siendo un apartamento tan grande le costó limpiar y adecuar el lugar para la ocasión.

¿Cómo Yotsuba mantenía limpio ese lugar?. Si que era un misterio.

Terminando los últimos detalles, recibió una llamada de una enojada Itsuki, ya que había desaparecido sin más en la mañana y dentro de poco seria el examen de ingreso.

El se excuso diciendo algo sobre el trabajo, ella aún con enojo le dijo que más le valía estar para presentar su examen y finalizó la llamada.

Este algo asustado se arregló un poco, dejando la bolsa que contenía la caja con los anillos en una mesa.

Luego de eso, se dirigió corriendo al lugar dónde presentaría el examen. Tenía suerte que aún faltará tiempo ya que el lugar se encontraba lejos.

Corriendo en chinga, logro llegar 5 minutos antes de que iniciará la hora para el examen. Lo recibió Itsuki con una clara mirada de enojo.

Itsuki — ¡¿Qué demonios pasa con tu trabajo?! — Pregunto con enojo — ¡Encima no avisas que te vas! —

Fuutarou — Calma, fue algo repentino, por lo menos llegué a tiempo —

El peli-azul observo con miedo a la pelirroja, era más que consiente de lo que podía ser capas si se enojaba.

Itsuki — Más te vale compensarlo — Se volteo — Andando, ya comenzará el examen —

Ambos accedieron a un edificio, que tenía varias aulas. Ellos fueron a una al fondo y tomaron asiento.

En breve entro un maestro que explico cosas sobre el examen, cuánto tiempo tendrían estimado para completarlo, entre otras cosas.

La presión se hizo presente cuando les entregaron sus hojas.

Por un lado, Itsuki se notaba con claro nerviosismo, ocasionando que le diera mucha tensión.

Por otro lado, Fuutarou se veía más tranquilo, le sonrió a la pelirroja haciendo que está le saque la lengua mostrando que claramente seguía enojada con el. Pero el gesto la relajo un poco.

(...)

Luego de dos horas de sufrimiento, ambos salieron del lugar. Encontrándose con las demás hermanas que venían vestidas un poco formales.

Ichika — Itsuki-chan, estás pálida —

Fuutarou — Debiste verla, creo que se le quemó más de una neurona en el examen...fue un momento épico —

Itsuki — ¡Oye! —

Miku — Por lo menos ya salieron, ¿Cómo creen que les fue? —

Itsuki — No puedo decir que fue complicado. Pero me sentí muy nerviosa —

Fuutarou — Me lo tome con calma, supongo que me fue bien —

Yotsuba — ¡Típico de ti Uesugi-san!. Del lado de Itsuki no te preocupes, seguro te fue bien —

Nino — Bueno, Fuu-kun me tiene con la duda. ¿Ya tienes todo planeado? —

Fuutarou — Claro, pero necesito que pase lo que pase, confíen en mi —

Todas lo vieron con duda.

Miku — Seguro. Pero ¿No te meterias en algún problema o si? —

Fuutarou — Tal vez lo haya hecho — Rió, ocasionando algo de preocupación — Pero un problema en el que me quiero meter, andando —

Fuutarou guío a las chicas hacía el departamento, cosa que ellas vieron con demasiada extrañesa y mucha preocupación.

Estando cansadas, decidieron no decir nada hasta el momento y confiar en la palabra de su novio.

Les extraño su repentino cambio por el ambiente, se mostraba nervioso y ansioso.

Al entrar al departamento con clara duda y ganas de reclamar, notaron como el lugar estaba sumamente decorado y en la sala había una mesa arreglada como si se tratase de algún restaurante de lujo.

Fuutarou — Se que de seguro tienen sus dudas, pero tomen asiento...La comida llegará pronto —

Aún con mucha duda, las cinco se acomodaron en la mesa junto a su novio. Repentinamente aparecieron 3 figuras.

La primera. ¡Se trataba de la pequeña Raiha!. Venía con un vestido adorable de mesera.

Yotsuba — ¡Raiha-chan!. ¿Que haces aquí?. ¡Es una sorpresa! —

Raiha — ¡La sorpresa será para ti! Yotsuba-san! —

La pequeña acomodo los cubiertos y unas servilletas, inmediatamente entraron dos hombres que igual vestían como meseros.

Ambos traían las bandejas de comida. Las quintillizas vieron con sorpresa a ambos. ¡Se trataba de Isanari y Marou!.

Nino — ¿P-papa?...Ya se me hacía que algo iba raro —

Marou — Es más raro para mí....créeme —

De forma inmediata ambos dejaron las bandejas de comida y se retiraron a la sala, Raiha se dirigió a un mueble cercano tomando una caja.

Fuutarou — Se que deben tener muchas preguntas...Así que adelante —

Ichika — ¿Que hacemos en este lugar?, ¿Por qué aquí? —

Fuutarou — Aquí fue donde me adapte a estar con ustedes. Dónde pasamos varios momentos y....El lugar en que me enamore — les sonrió — A pesar que pasó mucho, le tengo cierto aprecio a este lugar, está lleno de recuerdos —

Yotsuba — ¿Que hacen papá, Isanari-san y Raiha-chan aquí? —

Fuutarou — Vienen a apoyarnos — Todas lo vieron con confusión — Podemos comer mientras les cuento —

Mientras comían, Fuutarou les contó sobre el como se encontró con ambos padres y se reconciliaron, ya que estaban arrepentidos por sus errores y mal juzgamiento a sus hijos, omitiendo el tema del matrimonio al cien por ciento.

Nino — ¿Eso era todo lo que nos querías decir? — Pregunto con duda — Algo no me termine de cuadrar en esto. Dijiste que te habías metido en un problema si no mal recuerdo —

Fuutarou — Aún no. ¡Raiha trae la caja! —

La pequeña se dirigió a su hermano y le entrego la caja con emoción, mientas se retiraba con una sonrisa.

Yotsuba — ¡Uesugi-san trafica drogas! —

Fuutarou — No seas.....— Suspiro, tomando con calma la situación — Esto es algo difícil para mí...Así que no me juzguen o molesten — Avergonzado, se levantó y se puso de rodillas, ocasionando confusión e impresión en las hermanas — Se que es extraño y tal vez me este adelantando mucho. No me caben las palabras en estos momentos ya que yo ...Ya les entregué todo de mi, no me queda más que ofrecerles y puede sonar patético, pasamos por tantas cosas y yo ví está posibilidad — Abrió la caja , mostrando los anillos ocasionando que las hermanas se impresionaran, tomando su rostro con sus manos y sonrojandose — Amarillo Ichika, rosa Nino, azul Miku, verde Yotsuba y Rojo Itsuki.....Estos anillos a pesar de ser algo material. Son lo que justificara de forma definitiva nuestros sentimientos, se que puedo ser frio, insensible, un tonto sin remedio. Pero daré todo por cuidarlas y hacerlas felices. Ya que se que ustedes pueden ofrecerme lo mismo y lo han hecho siempre.....por eso....¡Quiero que se casen conmigo! —

De repente la mesa salió a volar y las chicas se abalanzaran contra el frutas repletas de lágrimas. Ocasionando que todos calleran de forma cómica al piso.

Ichika — ¡Y-ya te estabas tardando! —

Miku — ¡E-estuve esperando este momento desde que te conocí! —

Yotsuba — Uesugi-san...No lo esperaba —

Itsuki — ¡C-con esto arreglas lo de esta mañana! —

Nino — ¡Tonto!, ¡Tonto!..no tienes que preguntar si sabes que la respuesta es obvia —

Entre lágrimas de agradecimiento, lo abrazaron y finalmente dijeron al unisono:

Quintillizas — ¡Aceptamos ser tus prometidas! —

Unos aplausos se hicieron presentes en el lugar, siendo el trío de meseros: Isanari, Marou y Raiha.

La última se abalanzo al grupo para felicitarlos por todo, pero las quintillizas veían con incomodidad a su padre.

Marou — Les debo una disculpa por no creer en sus sentimientos y dejarme llevar por mi orgullo, se que eso no compensa lo que dije y hice...Pero para que vean que voy enserio los ayudaré y apoyaré en su boda —

A pesar de ser seco con lo que dijo y no mostrar verdadero arrepentimiento. Así era Marou, pero al fondo se veía que era sincero.

Las hermanas se vieron con una sonrisa entre si, para finalmente que Ichika le dijera.

Ichika — Todo está perdonado. Gracias por apoyar a nuestro prometido —

Marou — Está bien —

Isanari — ¡Anímense!. ¡Los espera un gran futuro! —

Fuutarou — Si así terminan mis días de preparatoria. Puedo decir — El les sonrió a todos los presentes — Que fue más de lo que pude pedir —

Luego de eso, todos conversaron por lo que restaba de la tarde, lloviendo muchos elogios de parte de Raiha a su hermano que se iba a casar.

Y así, sus días de juventud culminaron y un nuevo reto los perseguiria.

El futuro estaba cerca, en su pasado rieron, lloraron, se enojaron. Sintieron muchas cosas.

Pero a pesar de todo, su juventud fue genuina.

Nota final del autor .

Solo diré.....Aún falta el epílogo. En el que todo finalizará de una buena vez, probablemente dependiendo si llegamos a los 1000 votos en esta parte (en la historia en general xd), haré unos extras.

El epílogo saldrá en unos días. Ya que ese será el cierre definitivo y despedida de la historia.

¡Están invitados a la boda de las quintillizas y final definitivo del fanfic!.

Hasta entonces.....El libro de la Kirby ya fue lanzado, nos vemos en esa nueva travesía.