Muchas cosas podrían seguir  de una u otra forma.

Después de todo, muchos juzgamos a los demás por ser unos mentirosos en varias ocasiones, cuando los mentirosos mas grandes somos nosotros mismos.

Los exámenes se aproximarían pronto, con ello un nuevo desafío para nuestros protagonistas. No todo puede centrarse en un solo argumento.

Los sentimientos, en si son difíciles de entender, pueden llegar a ser fuertes verdades o mentiras hirientes, pero todo con un propósito y señal.

Pero, ¿por qué son tan difíciles de entender?, podemos poner un ejemplo. Te gusta una chica. Amas a esa chica pero la pones por encima de ti, ¿crees que eso es en realidad un buen acto?. ¿Crees que ella no se preocupa por lo que te pueda pasar?.

Es bueno proteger a lo que quieres, pero no significara nada si te matas a ti mismo por dentro.

¿Cuál era el problema de Fuutarou?. Tal veas sea menos que un problema. El punto es no saber como se siente ''Su pareja'', por su conducta.

Como dijo una figura femenina alguna vez, no le hagas promesas a una chica que no puedes cumplir. ¡Pero en este caso es a unas quintillizas y las consecuencias son al quíntuple!.

Ya no faltaba mas de una semana para los exámenes regionales. Por lo cual nuestro protagonista y las quintillizas se encontraban en sus tutorías para poder mejorar y evitar un claro repruebo en cualquier clase.

Aunque esto ya no era de alguna forma tan frustrante y complicado, las chicas por obra  y magia del autor habían aumentado su inteligencia. Por lo cual las cosas se tornaban un poco mas fáciles para Fuutarou.

Pero entrando en un ambiente y personaje diferente, podremos ver a Marou Nakano, padre de las quintillizas y actual jefe de Fuutarou, que se encontraba hablando con un chico de cabello color miel, sentados en una cafetería. 

????  — Así que...Trabajo de tutorías  —

El chico veía con atención e intriga al adulto, demostrando gran interés en la conversación y el tema de la misma.

Marou  — Si, para ese trabajo contraté a el hijo de un conocido mío, creo debes conocerlo — El hombre tomo una taza de té para beber lentamente un poco de el — El fue el primero en el ranking antes de ti Takeda-kun —

Takeda — ¡Claro!, ¿Cómo no conocer a mi eterno rival en los estudios? — El chico sonrió victoriosamente — Después de tanto tiempo, al fin puedo ponerle un fin a nuestra rivalidad —

Marou — Lo contraté para que demostrara que siendo un estudiante excepcional, pueden surgir mejores resultados. Por lo cual fue una realidad, pero para su mala suerte ya no es excepcional, ahora es una persona normal — El hombre cruzo ambas manos y vio con seriedad a Takeda, helándole a este la piel por unos instantes— Ahora tu eres  excepcional y al que veo apto para enseñarles a mis hijas, ¿tomarías el trabajo? —

Takeda — ¡Si eso significa superar de nueva cuenta a Uesugi Fuutarou, es un hecho! —

Marou — Ya veo, en estos momentos debería estar saliendo de los departamentos. Podemos ir a darle la noticia. Andando — Se levanto de su asiento, dejando unos billetes en la mesa, que eran la paga de el té que bebió, y se dirigió a su auto que estaba afuera del establecimiento —  No hay tiempo que perder —

Takeda — ¿Qué?, ¿Justo ahora?....Pues ni modo — 

Takeda se levanto y lo siguió. 

(....)

Pov Fuutarou.

Recientemente las tutorías eran un poco menos frustrantes que de costumbre, supongo que pude dominar por fin a esas cinco idiotas, aunque por dentro debo admitir, que ellas han mejorado bastante.

Hoy no conté con Yotsuba e Itsuki, ambas teniendo algunas cosas que hacer. Itsuki quería ir a un restaurante que acaba de abrir, Yotsuba dijo que tenía que pensar algunas cosas sobre todo y tomar un respiro de los estudios, me preocupo en un principio perro ella con una sonrisa me dijo que todo estaba bien.

¿Quién soy para negarle su tiempo a solas?. 

Al salir de los departamentos luego de la sesión de estudios y ver unas películas con Ichika, Nino y Miku me retiré para ir a mi casa.

Ya cruzándome con la salida del edificio, me tope con Marou y...Un tipo que jamás había visto en toda mi vida.

Marou — Buen diá, Uesugi-kun — 

Fuutarou — S-Señor Nakano, que coincidencia — 

Marou — Una gran coincidencia podría decir, pero no es así en esta ocasión — Marou se hizo a un lado, dejandome ver mas claramente a el chico que lo acompañaba — Te presento al nuevo tutor de mis hijas, Takeda Yuusuke —

Takeda — ¡Después de mucho tiempo!, ¡al fin te eh superado Uesugi-kun! — El hizo una señal de victoria con sus manos — ¡Nuestra rivalidad por fin a acabado! —

Fuutarou — ¿Rivalidad? — Lo vi con confusión — Ni si quiera se quien eres —

Takeda — ¿Q-Que?, ¡Soy el segundo del ranking! —

Fuutarou — Oh, ya veo, nunca me fije en puestos inferiores al 1 en el ranking, así que es una sorpresa para mi tu existencia hasta ahora — Voltee para mirar con seriedad a Marou — ¿Se puede explicar mejor? —

Marou — Me demostraste que un estudiante excepcional puede dar mejores resultados que un tutor profesional, pero para tu suerte — El me  vio con frialdad — Ya eres alguién normal, nadie sobresaliente. Takeda es el primero en el ranking actualmente y el más apto que veo para ahora enseñarle a mis hijas _

Fuutarou— ¡Espere!, Usted lo dice con sus propias palabras. Lo que importan son los resultados —

Marou— A eso voy Uesugi-kun, temo que por tu bajón de notas igual baje el desempeño de mis hijas, puedes volver a tu vida normal apartir de ahora —

En el seguía viendo esa mirada de seriedad y más que todo de frialdad.

Fuutarou — Espere,e ofresco un trato señor Nakano — El me miró, sin cambiar su semblante — Si retomo el primer ranking, ¿Podré seguir siendo su tutor —

Marou — No me convence del todo, ¿Porque te molestas tanto por este trabajo? —

Fuutarou — Mi orgullo me dice que... Solo yo puedo hacerlo y si no le basta con eso. ¡Obtendre el primer lugar en el ranking nacional —

Marou — Bien, si ese es el caso, acepto . Pero si no quedas en ese primer puesto, serás despedido y jamás te acercaras a mis hijas de nuevo. ¿Entendido? —

Fuutarou — Es un trato —

Takeda — ¡No perderé ante ti, Uesugi Fuutarou! —

Luego de ese cruce último de palabras, ambos se retiraron dejándome a mi muy pensativo. ¿Sería capas de lograr el primer lugar a nivel nacional?.

Era mi única preocupación, quedar en el top 1 de la escuela no sería gran problema. Estaba apuntando y apostando más alto de lo que imaginaba. Pero como dije antes, debo cargar con la responsabilidad de los sentimientos de ellas.

Pov Narrador.

Lo que no tenía en cuenta Fuutarou, es que en una esquina se encontraba cierta chica de listón, viendo con preocupación como su pareja partía hacia su hogar. En sus pensamientos solo se nublaba que debió haber intervenido de alguna forma, pero simplemente no lo hizo. ¿Acaso Fuutarou sería honesto esta vez con ellas?.

Para su suerte, no fue así, de nueva cuenta el hizo las cosas a su manera. Ausentandose de las tutorías por toda la semana entera. Causando mayor preocupación en Yotsuba. Causando que le comentará a sus hermana de lo que en realidad estaba pasando, todas se llevaron una gran decepción.

Itsuki — El lo hace todo solo de nueva cuenta — Con tristeza, veía a sus hermanas — Pensaba que sería más honesto con nosotras —

Ichika — Encima nos miente, ¿Cómo que Raiha-chan está enferma? — Ella se sentó en la sala —

Nino — ¡Ese idiota! — ella a simple vista se veía enojada, pero por dentro estaba triste —

Miku — .... — Ella no articulaba nada, solo se veía en ella una mirada vacía —

Yotsuba — A pesar de todo...yo no puedo criticarlo — Ella sujeto sus puños, precionandolos con fuerza — Yo le eh fallado a el todo este tiempo — todas la vieron confusión — Yo...Fui la chica que el conoció en Kioto, a pesar de nuestra promesa yo...— Ella empezó a derramar lágrimas — No eh Sido capas de cumplir con mi parte, por mi culpa Uesugi-san a sufrido —

Nino — No te culpes Yotsuba — Ella la abrazo — Son solo cosas que pasan, se que se prometieron algo....Incluso creo que tengo una idea —

(....)

Los exámenes nacionales habían dado inicio, las quintillizas estaban sumamente preocupadas por su tutor y novio. Ya que el había accedido a una apuesta que no podría ganar.

Fuutarou se había desvelado todos estos días para estudiar y prepararse al cien por ciento para esto, pero como consecuencia por ello sus horas de sueño se vieron afectadas. Cosa que no pasó desapercibida por sus novias.

El negaba cualquier inconformidad, las chicas sabían que algo pasaba y era claro. Pero su falta de honestidad y terquedad eran grandes.

Al comenzar el empezó a paso veloz, respondiendo todas las preguntas con gran rapidez, todo lo que veía automáticamente su cerebro le daba respuesta. En uno momento todo se empezó a volver lento, sus energías decían cada vez más a tal punto de desmayarse.

Tiempo después de despertar, el maestro lo veía burlonamente mientras sostenía su examen.

El solo lo vio, por primera ves en mucho tiempo con temor.

(...)

El tiempo para que los resultados llegarán fue rápido. Un lapso breve de 3 días.

Fuutarou se encontraba con Takeda, el último lo veía burlonamente.

Takeda — ¡Quedé en el octavo lugar a nivel nacional!. ¿Tu qué lugar ocupaste?  —

Su mirada determinante era clara en sus ojos, no solo se veía confianza en esa cara.

Fuutarou, estaba pasmado por los resultados, con una mirada fría lo miro.

Fuutarou — Número tres —

Takeda se impresionó, como a la vez cayó al piso, de repente Marou entro en escena. Viendo con su característica mirada a Fuutarou.

Marou — Ya veo, los felicito y a la vez. Lo siento Uesugi-kun, aunque demostraste ser sobresaliente no cumpliste con las expectativas que tu mismo te pusiste. Le avisé ya a las chicas sobre la situación — Por primera vez, cambio un poco su expresión, mostrando una cara sonriente que se veía algo tétrica — Gracias por tu trabajo y hasta nunca — El se retiró seguido de Takeda, que aún estaba pasmado, aunque fue una victoria para el....Fue una victoria amarga —

Fuutarou solo se quedó parado, mientras lágrimas caían de su rostro y pequeñas gotas de lluvia empezaban a caer del cielo.

Fuutarou — Parece....Que comenzó a llover —

El chico se inclino, y empezó a llorar golpeando el piso. Frustrado por su fracaso.

¿Que cara les daría a las chicas?, A pesar de todas sus promesas se veía incapaz de verlas nuevamente ya que había fallado de nueva cuenta. Había fallado a lo que les prometió, se había fallado a si mismo de igual forma.

En lo que resto, el sufría mientras no solo las lágrimas caían de su rostro, si no que la lluvia lo acompañaba hasta que dejó de sentir que se mojaba.

???? — Vaya, Uesugi Fuutarou. Te vez horrible — Una voz femenina fue lo que escucho, a lo cual sorprendído se volteo —

Fuutarou — ¿R-Rena? — Se paro de golpe, viéndola con impresión —

Rena — ¿No esperabas verme? — La chica lo vio con una sonrisa y la vez preocupación —

Fuutarou — ¿Que haces aquí? —

Rena — Alto, la que hace las preguntas aquí soy yo — Cambiando ese aire, se vio uno de madurez y seriedad — Lo arruinaste según veo...¿Qué se siente? —

Fuutarou — ¿Enserio lo preguntas cuando me viste llorar, tumbado debajo de la lluvia? — Le conteste sarcásticamente — No solo te falle a lo que te prometí. También les falle a tus hermanas, lea prometí ser las sincero y solo falle arruinando más las cosas —

Rena — Eso me facilita más las cosas, que sepas que soy una quintilliza — Ella lo veía con incredulidad — ¿Sabes?, Debido a tu falla tuve que optar por aparecer denuevo cuando prometí no hacerlo hasta que te valoraras de una buena vez. Pero no solo me hiciste dudar a mi si no a mis hermanas de tus verdaderos sentimientos —

Fuutarou — Puedo entender lo primero pero no lo segundo —

Rena — Con lo que hiciste, nos haces dudar en lo que realmente sientes. ¡Por lo cual opte por esto!. ¡El juego de las quintillizas! — Ella me veía con una mirada tranquila y llena de confianza — Si logras reconocerme en los próximos 5 encuentros contando  este podrás hallar una verdadera respuesta a tus problemas y más que todo. Lograr que te perdonemos de alguna forma —

Fuutarou — Supongo entender que duden de que yo los amo...Pero ¿por que necesariamente tengo que reconocerte? —

Rena — Está es tu prueba de fuego. ¿Recuerdas el viaje con el abuelo?, La única forma de reconocernos es con amor, si puedes reconocer a una reconocerás al resto por qué nos amas — Ella lo vio coquetamente — ¡Así que es tu deber, y yo como tú amiga de la infancia te vine a dar un consejo!, Debes ser más seguro de lo que quieres. ¡Cuando lo tengas más claro me verás denuevo seguramente! — Ella tomo camino en retroceso, alejándose de él viéndolo de la nada con una mirada sonriente y a la vez fría — Aprende a valorarte más, adiós —

El chico quedó en shock....¿En qué diablos se había metido?.

Continuara.