Capitulo 40 - Lo llamaría arrepentimiento
-Narra Sonic-
¡Uff! No cabe duda que aunque pueda mover mejor el hombro, el exceso de carga o movimientos bruscos causan un crujir y dolor que no me terminan de encajar para nada.
Fue una mala idea asumir que el cabestrillo me estorbaba, pero almenos, terminé el deber obligado que el albino me dejó antes de que anochezca.
No sé cuánto tardarán, pero prefiero librarme de ese mandato tan perturbador. Sé que está molesto, quizá celoso, ¿Pero se justifica ese comportamiento? Sus palabras de Silver fueron demenciales, me cagué.
Sigo cagado.
Mientras reposo mirando el techo desde la cama de mi habitación, siento temblar mis piernas todavía...creo que lo que he oído de Silver es una pesadilla ¡Bruu! Me hiela sentir que...estaba amenazándome como mi propio jefe, no por nada es sangre de su sangre, ¿Por qué tanto coraje? Solo reafirmo la veracidad de la confesión de Shadow sobre su hijo, sobre el interés que también tenía sobre mi y que le cayó muy mal vernos juntos en la recámara de sus padres ¿Todo lo que me ha dejado ver fue su estrategia para intentar ganarme antes que su padre? ¿Él es...es entonces una fachada? ¿El Silver que conocí fue una mentira?
Si el padre es terrible el hijo puede salir peor, no hay ninguna duda. Y aún así...no sé, siento que le debo una explicación a ese joven. Es algo que no creo, ¡Simplemente no puede ser! Yo ayudé a ese chico con sus conflictos internos, con sus emociones debido al acoso de Manic; he sentido palabras y halagos genuinos de él...¿Qué es todo esto ahora?
La vibración en mi cadera me hacen prestar atención a mi celular: recibo una llamada de un número que no conozco. No es la primera vez que tengo la llamada perdida y decido tomarla por azares de destino o por mi alto nivel de vale madre:
—¿Quién habla?
—¡Al fin! Soy yo, tarado —Con un resoplido a secas, dejo de estar a la defensiva—. Soy Espio, parece que te has olvidado de mí.
—¡Carajo! Pero sí tú eres quien se ha olvidado de mí —replico aún acostado, con la frente fruncida de oírle ese reclamo—. No has llamado. Intenté una vez llamar a tú teléfono y no entró, supongo ahora, fue porque cambiaste tu número.
Tras una risa, el camaleón continúa—. Así es, hubo un problema con la compañía ¡Pero eso no importa, amigo! Llevo días queriendo contarte que está por irme de perlas —«Almenos a alguien le está yendo bien»—. Dos domingos que llamo y nada, pensé que igual ya te habías muerto de tanto coger con tu jefe.
—¡N-no digas eso ni de broma! —Carajo, si tan solo supiera que de verdad puedo morir pero por otras circunstancias...tras resoplar por mis pensamientos turbios, continuo—. Es un número desconocido Espio, ¿Piensas que volveré a ser tan ingenuo?
—Pues...terminaste tomándome la llamada al final así que... sí —Que manera de darle la razón, ¡Agh! Hasta me molesta—. En fin ¿Cómo te va a ti? ¿Sí ya te cogió tu jefe?
—Joder Espio... —No puedo hablar de este tema con orgullo o satisfacción porque tengo demasiado presente el enojo de Silver y sus palabras tan desagradables—, solo te diré que llevo buen avance. Las cosas van mejor y me veo dentro.
—Sabia que tu culo iba a ceder, así de perra eres —Debo admitir que me causa gracia su forma de animarme. Me limito a reír sin carcajadas—. Almenos ese sobre de deudas disminuirá más rápido de lo previsto.
—Si, eso espero...¿Y qué es lo que deseas contarme? Por qué dices que te irá de perlas pronto?
—¡Oh sí! Entré a un gran negocio, ya sabes... —Cada vez que oigo ese tono y la palabra negocio se me erizan las puas más de lo normal, ¡Bru! ¡Ya no quiero saber de esos negocios!—. Vector consiguió al cliente, no he tenido inconvenientes, ya iniciamos con los primeros sondeos.
—Sé que se te daba bien lo de las computadoras y softwares, terminaste tu licenciatura en sistemas —mirando mis otros dedos, cambio de mano para sostener el teléfono, hasta acostado siento que realizo un chingo de esfuerzo—. Dime ya de una buena vez de qué se trata y espero no planees invitarme, estoy hasta el cuello de mierda por el momento.
—No, no, claro que no pensaba invitarte, eres la mala suerte andante, está yendo bien todo sin ti —Sus comentarios de hijo de puta por esta ocasión me hacen sentir socarron—. Es un hackeo. Retiraremos algunas acciones de una empresa y luego, recibiremos tajada, parece complejo pero es más sencillo de lo que parece.
—¿Y acaso se necesita tener un cliente para ello?
—Pues a como lo ves, Vector recibió un anónimo para hacerlo, incluso ofrecían una cantidad extra para que fuese aceptado el trabajo —Conforme mas explica, siento la temperatura bajar en mi habitación—. Dijo que buscaba solo el 10% de lo que fueramos a sacar, el resto Vec podía dividirlo entre la gente que ocupase.
—Ufff no lo sé, Espio, suena demasiado sospechoso todo, y date cuenta quien te está diciéndo esto eh, el más ingenuo y bobo de tus amigos, según tú. —expreso sin meditarlo, con la voz impostada. Recibo de él una risa burda por no creeme.
—Ja, ja, está todo bajo control, no desconfíes —Ahora tengo ganas de golpearle por tal nivel de soberbia que expulsa—. Incluso pensé que si la cantidad que me toca es considerable...darte un pequeño porcentaje, ya sabes, creo que te ayudaría mucho, Sonic.
—No amigo, eso no es necesario —Me parece un gesto amable de él pese a que le causé varios conflictos en su departamento...¿Debo considerar que si me estimada de verdad?—. Prefiero primero estar equivocado, que la libres y entonces si, nos veamos y me digas en persona qué pretendes hacer con todo lo que saques.
—De acuerdo, así será.
—Espio, quiero aprovechar la llamada para hacerte una pregunta y sé que te resultará...rara —Suspiro con el aura pesada porque si, no debería preguntar esto y mucho menos a él, su respuesta podría generarme mas ansiedad que tranquilidad...—. ¿Sabes algo de Manic? Ese día en tu departamento cuando recién conseguí el empleo... sé que ya pasó un tiempo, pero...
—Sí...fuiste un idiota y me alegra que ahora te arrepientas de ello. —Tuerzo los ojos escuchandole «Si supieras cómo terminó todo»—. No te culpo, creeme. Debe ser difícil hablar luego de un daño emocional así. Cómo sea, no sé nada de él —Trago saliva como si no supiera nada de su desenlace—. Quise llamarle antier justo para preguntarle algo sobre un equipo y su teléfono estaba muerto, parece que igual cortó su línea, así que lamento no poder ayudarte.
—Ni hablar. Creo que todo es mejor así...
—¿Tienes alguna explicación de por qué es que ambos hacemos cosas tan inmorales? —Pregunta con un tono lisonjero y hasta burlesco, noto su intención de cambiar de tema para que no me ponga sentimental—. Porque nadie aquí está trabajando "dignamente"
—Me justificaré diciendo que la sociedad y el gobierno me han obligado—Ahora si suelta una carcajada, yo igual; cualquiera de allí fuera en la sala me debió oir. Prosigo tomando aire—. ¿Qué? Así es como lo dicen los jóvenes ¿No?
—Sí, Sonic, seguimos siendo taaaan jóvenes ~
-Narra Silver-
—¿Por qué no comes aunque sea la mitad? —Sacudo la cabeza de forma negativa—. ¿O te pido algo más ligero?
—Amy, ya déjalo —La voz arisca de mi padre desequilibra la conversación—. Está claro que no quiere comer nada ¿Por qué le insistes como si lo mimaras? Ya no tiene 8 años.
—Tiene razón mi papá: ya no tengo 8 años, así como él ya no tiene 25, por lo tanto, los conjuntos ya no le van, sin importar el color de su camisa. —Deberia serenarme, pero hasta ahora él es quien intenta que mi madre no me brinde la atención de siempre, ¿Pretende aislarme de ella o cómo para qué?
—¿Qué les pasa? Han estado lanzándose indirectas desde que llegamos al restaurante —¡Es que mi bocota está imparable! Todo de él me provoca. No dejamos de mirarnos de manera retadora pese a la reprimenda de mi madre—. ¿Hay algún problema del que me tenga que enterar?
—No, ninguno. —respondemos al unisono, continuando con la batalla de miradas, sin realizar ningún parpadeo.
—¿¡Entonces que les pasa!?
—Amy, tranquila —Dándole un mimo a su mano, mi padre exhala abrumado y prosigue, observandole con dolencia que me resulta muy falsa—. Admito que yo he estado bastante irritable desde los problemas que he tenido en mi empresa...me sobrepasan. No es mi intención amargarles la comida a los dos, estoy muy a la defensiva con todo —Frotando una de sus sienes, toma sus cubiertos y finaliza—. Discúlpame Silver, también te ofrezco una disculpa, Amor.
—Te disculpo...a medias. —expulso en tono bajo llevándome un trozo de carne a la boca.
—Querido, ninguno de nosotros está molesto contigo y no deberías de desquitarte —Reacomoda su peinado como si lo dicho anteriormente la hubiese desalineado demasiado. Continúa mirandonos a los dos—. Espero encuentres a alguien pronto para que suplante el puesto que te tiene más absorto de lo normal, lo que menos quiero es que estés así.
—Sí, ya hay vacante solo falta rellenarla...
—Dentro de toda esta tensión personal que tenemos él y yo, puedo notar que hay algo que le abruma de verdad, y en el fondo me gustaría preguntarle qué es, pero tomando en cuenta la actitud defensiva que tuvo tirándome la comida y reclamando de forma celosa...¿Todavía mi padre puede confiar en mi?
¿Todavía yo debería confiar en él? ¿Qué pasó con nuestro trato y confianza que teníamos de meses y aún mantuvimos hace unos días?
—Necesito ir al baño, con permiso. —Me levanto con prisa, la revoltura de mi estómago se siente cada vez más cerca de mi laringe.
Apenitas y cruzo la puerta, logro llegar al primer inodoro: la arcada me sofoca y si hay alguien mas allí seguro sintió que un animal salvaje invadió los dígitorios. ¡Uagh! Toso con violencia y toda esa poca comida de Zetas, cebolla y ternera que logré ingerir ahora se revuelve en el agua de la taza.
La última vez que sentí este nivel de ansiedad reflejado en mi estómago fue cuando hice mi examen de admisión a preparatoria...demonios.
—¿Silver? ¿Te encuentras bien? —Escupo y bajo la tapa para jalar la palanca, estoy sorprendido de oír su voz. Me tomo mi tiempo para responder.
—Regresaré a la mesa, solo dame un momento...
—Vamos, aquí te espero... —Son pocos los segundos que transcurren luego de oír su oración. Abro la puerta y está allí, recargado en los lavabos—. ¿Qué es lo que te sucede?
—Dímelo tú, seguro te sientes lo suficientemente confiado y sabio de adivinar. —Apático, paso a su costado sin mirarle, abriendo la llave de uno de los lavabos para enjuagar mi boca con premura ¡Uhg! Se siente repulsiva la sensación del ácido gástrico en la lengua.
—Te lo estoy preguntando bien, Silver. —¡Caray! ¿Y ese tono tan sereno y meloso de dónde salió?
Detengo mi acción y replico con indígnación—. ¿Y cómo he de saber cuando tu intención es "preguntar bien"? —Le miro desde el espejo, notando que él no me devuelve la mirada. Pego otro sorbo y continuo—. Ya no sé qué eres, papá, ¿Estoy hablando en verdad con mi padre o con la perra celosa que siente soy su competencia?
—¡Basta! no me nombres así, quiero que te relajes —Alza un poco su timbre, y pese a ello, no me siento intimidado—. Es verdad, no he actuado de forma respetuosa y educada contigo y por lo tanto ahora tú no lo harás conmigo, pero creo que sabemos muy bien el por qué hemos llegado a este punto.
—Ajá, dirás que la culpa es de Sonic... ¿Crees que el que no pueda estar con alguien me sube o me baja el ego, contrario a ti? —Mi garganta se comienza a cerrar «otra vez este sentimiento no, por favor...»—. Estoy por entrar a la universidad, me hiciste ver qué ya no soy un niño pero me hablabas de responsabilidades y de ser un adulto competente, ahora dime tú si realmente eres un verdadero ejemplo, tratándome como si fuera alguna persona vulgar que se pelea por un amorio.
—¡Maldita sea Silver! —Golpea la losa del baño con una ira que no veía en él desde hace mucho. Admito que mi boca sigue incontrolable y no sé hasta qué punto se mantendrá así—. Sí, ya no eres un crío, estás por entrar a la universidad y creo que cometí un error al no tomarte como un joven adulto responsable y capaz de manejar y tomar tus propias decisiones —Creo que voy a volver a vomitar...me siento hasta mareado—. Te veía tan ingenuo y asustado...y en la última semana ya no he visto a un adolescente precoz con intentos torpes de sobresalir, sino a mi contraparte más hábil y volátil —Suspirando y bajando su tono, parece serenarse porque sí, otra vez está cayendo en la rivalidad que tanto he notado recientemente—. Así que por favor, hijo, no me hables ahora como si de verdad esto fuera mi culpa.
—¿Ves? Te diste cuenta que volvías a recaer en tratarme como tú rival. Se supone que ambos éramos "confiables" para esto ¡Tú me lo decías! Qué podíamos hablar de forma abierta, ¿Qué pasó? —Le doy espacio para que hable y no lo hace, me da pie a descargar este sentimiento melancólico que vuelve una vez mas—. El día que yo te confesé que me empezaba a parecer demasiado sucio esto tomaste la actitud defensiva de desplazarme, me viste como si estuviera haciendo cosas intencionales para perjudicarte ¿Ya se te olvidó que...? —¡Maldita sea! Pensé que no volvería a sentirme así después de aquella borrachera...me fuerzo para culminar mi pregunta sin que mi voz se rasgue por completo—...¿Que dijiste que no harías esto por la fuerza y que tú...?
—...¿En serio me vas a salir ahora con todo eso? —Su pequeña risa burlesca me descuadra, «¿Pero que demonios, papá?»— ¿Me dirás ahora que no fue así? ¿Que todo, absolutamente todos los encuentros, charlas, convivencias y lo que ha pasado contigo y Sonic fue auténtica casualidad? Silver, en verdad, si no supiera que eres mi hijo podría creerte pero no, no lo hago, porque te pareces a mi en muchos aspectos y sé que eres igual de inteligente y astuto que yo. —Carajo...es burdo lo que estoy oyendo, porque es cierto.
Mirándome al espejo, me siento sucio. Al principio esa era mi tirada: adelantarme a mi padre para que se diera cuenta que no necesitaba nada de él, que podía ser mejor que él "teniendo" a Sonic primero... antes que él...con toda la mentalidad de un crío caprichoso y ahora, ¿Me atrevo a cuestionar a mi padre cuando he seguido sus pasos?
¿En qué maldito momento sufrí de este breakdrown tan precoz?
—¿Acaso ya olvidaste que me chantajeaste para dejarte estar con Sonic primero, involucrando mi trabajo? ¿O que parecias un cachorro asustado al enterarte por las sirvientas que tú madre deseaba acostarse con el erizo cobalto y temias por no ser el primero? ¡Me lo narraste suplicando que no fuese asi! —Su voz me está taladrando la cabeza a un punto en el que me vuelvo loco de sus indirectas—. ¿Será que por conveniencia preferiste fingir ante mi ese arrepiento por todo, y que te aprovecharás del amor que te tengo para volver a chantajearme?
—¡BASTA! —grito agachado la cabeza y encogiendo mis hombros...ese terrible escalofrío recorre toda mi columna vertebral—...yo no quería llegar a nada de esto. Y-yo no quería...es-esto me sobrepasa.
No sé cómo va a reaccionar mi padre a eso. No sé si es buena idea liberar de esta forma tan explosiva los sentimientos que tengo con él pero...no tengo con quien liberarlos.
Ya me cansé de perder a mi mismo y a mi padre por culpa de un erizo ageno a la familia y los impulsos que desembocan todo ello.
-Narra Shadow-
—¡BASTA! —grita estrepitosamente con las manos apoyadas en la loza, miro hacia abajo y noto un ligero temblor sobre sus codos, hombros y hasta cadera—...yo no quería llegar a nada de esto. Y-yo no quería...es-esto me sobrepasa.
Me siento muy confundido, tanto como cuando descubrí que mi hijo había sido víctima de un abuso de joven y que no le di la confianza de hablarlo. ¿Que estoy haciendo mal ahora? Todo, a decir verdad. Cree con mi sangre una rivalidad por un hombre al punto de causarnos daño como si fuéramos unas putas en celo...¿Pero qué demonios nos pasa?
¿Qué carajos me está pasando a mi?
Todas las dualidades recientes que he tenido las he liberado. Todas las suposiciones que tuve con mi hijo las he dicho, ¿Qué sigue? ¿Cuál es la solución a todo esto? Siempre le he dicho a Silver que yo me encargaré de resolverlo...siempre quiero resolverlo todo.
Pero no sé cómo resolver este pendiente con mi progenitor.
—¡Estás equivocado, papá! Esto no es una competencia, ¡Entiende de una maldita ves!, sí lo fue para mí, para ti o para ambos antes, te confirmo a dia de hoy que ya no lo es. Y todo lo que te he dicho ha sido verdad porque es así como lo siento, ¿¡De verdad crees que soy tan vil!? —No quiero responderle. Me siento totalmente confundido, ¿De verdad mi ansia por Sonic me ha llevado a tener esta desconfianza sobre Silver?—. Sí así como me ves dices creer que soy como tú, y si esto que siento es ser como tú, no quiero ser como tú, ¡Jamás quiero parecerme a ti!
Pero, ¿Y si no es así? ¿Y si realmente mi hijo está manipulando y jugando con mi sentimiento de ser su padre?
Alcanzo a sujetarle del hombro, ya veía venir que saldría despavorido pero no, no puedo permitir que su madre lo vea en ese estado frenético y ansioso, y tampoco quiero seguir alargando este tema que se vuelve agobiante para ambos.
Antes de que comience a manotear logro rodearle con mis brazos para brindarle un abrazo bastante efusivo y hasta abrasivo...es, extraño...de inmediato percibo los olisqueos por sobre mi hombro, cautelosos pero profundos, él está llorando y corresponde el abrazo con una fuerza extrangulante sobre mi saco.
No puedo seguir engañándome de esta manera, no puedo echar a pelear a mi hijo contra mi por alguien más, solo es carne, sí, eso es Sonic, solo carne. No hay lazo profundo, no tiene ningún significado emocional más...
...¿En verdad no lo tiene?
—Te-tengo qu-que decirte algo... —Me aparto un poco para percibir mejor su voz—...no quiero...no s-se com-como lo tomarás...
—Solo dímelo, ya no quiero que dudes de mi ni de mi amor que siento por tí. —Buah, que cursi he sonado...¿Es que nunca he sido tan cariñoso con él? No tengo algún recuerdo de ello en esta situación.
—Ese día en tu empresa...cuando Sonic me acompañó, yo... —Aguarda rompiendo la cercanía para tallarse los ojos—...yo hablé con él de cosas tan superficiales y... sentí una genuina atracción e interés por él que...que sentí comenzaba a gustarme de verdad...me s-sentí muy confundido. —Carajo.
Tenía esa suposición demasiado incrustada en mi cabeza, y aún así, no fallé al confesarlo a Sonic de forma impulsiva... ¿Estoy sintiendo un arrepentimiento tan profundo de forma espontánea, justo ahora?
Si, están siendo estos unos verdaderos días de mierda.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top