Capítulo 21 - ◇la segunda Pasión◇

-Narra Sonic-

-¿Por qué debería de hacerte caso, Manic?

-¿Porque trabajé con él por 3 años? -Mierda, quiero controlar este suspenso en mi cabeza, pero me es imposible no sentirme sudoroso ahora. Me desabrocho la chamarra y dejo que siga hablándome mientras me concentro en mi plato-. No lo hagas si no quieres, repito que solo te estoy poniendo sobre aviso porque ese es el modus operandi de Shadow, y créeme que donde pone su ojo, pone la bala sí o sí.

-¿Eso fue lo que pasó contigo? -Aguarda un momento, tanto que hasta la mesera arriba y nos ofrece postre, yo me niego pero él pide una gelatina gourmet que no pinches conozco.

-No exactamente. Pero sí es verdad que decidí disfrutar de ello a reprimirme y hacerme el difícil.

-Es que no lo entiendo Manic...¡No lo conozco de nada como para que desee algo conmigo! -Realmente me estoy alterando. Vine por respuestas y las estoy obteniendo al punto de un nerviosismo desbordante.

-Escucha...por tu bien y si no quieres terminar como yo no hagas cosas estupidas, ¿Sí? -Ahora la sorpresa se apodera de mis ojos, este Manic parece más centrado y calculador, pero, ¿por qué debería de mostrar esa preocupación hacia mí?

¿Todavía hay más sorpresas de las que debo enterarme?

-De todas formas ya no podré verte ni hablarte...en serio que no quiero relacionarme contigo después de lo que me has contado.

-Está bien, lo respetaré, pero... -Aguarda a que se vaya la mesera quien deposita su pedido, yo le pido que se lleve mi plato porque ya no puedo acabarlo, se me ha revuelto el estómago con todo esto-, estamos ya bien, ¿no? El pasado, lo que yo...

-Sí, sí, como sea, no me interesa guardarte ningún rencor.

-Parece lo contrario. -¡Agh! Pedazo de...

-¿Acaso quieres que te dé una letanía dramática? Si en el pasado no te importó lo que sentí, ¿por qué debería de robar tu atención ahora?

-Porque soy diferente, Sonic. No quiero nada más que estar en paz, es más, acepto si no me perdonas solo...ya cumplí de mi parte al ofrecerte una disculpa sincera por lo que te hice.

-No, Manic, esto ya no funciona con una simple disculpa y ya. -Se sorprende de mis palabras, no toca su postre por clavarme su mirada sobre la mía, como si quisiera que cediera o algo.

-¿Entonces qué deseas? ¿Cómo quieres arreglar esto?

De un momento a otro las imágenes escolares pasan como página dentro de mi cabeza. Un momento tras otro, tras otro...hablandando mi pecho y mi garganta para pedirle algo con un sentimiento dentro de mi boca.

-Solo quiero una explicación -murmuro por estar al final en un lugar publico-, solo quiero una maldita explicación de por qué hiciste lo que hiciste conmigo, con lo nuestro.

-Sonic...no tengo una auténtica explicación de eso.

-¡Claro que la tienes! -¡Bravo! Si queria exibirme con él mostrándole mi auténtico rencor lo he hecho de maravilla. Respiro hondo apretando mis palmas sobre la mesa y dejando que mi voz no se quiebre otra vez-. Déjate de mentiras si es verdad que tanto quieres arreglar las cosas...

-¿Quieres la verdad?

-Claro que la quiero, Manic.

-Dejame terminar esto y vamos a mi departamento. -¿Qué? ¿Para qué?

-¿Para qué ir a tu departamento? Tengo que volver a la mansión de los Hedgehogs, no tengo toda la noche y...

-Por favor, paciencia y...de verdad que tengo que mostrarte unas cosas. -Toma mi muñeca de forma cómplice y tranquila, como si quisiera que le brindara otro voto de confianza...

¿Pero qué más me da ahora? Creo que puedo entregar otra vez eso, la confianza, porque no solo me ha ido mal en mi vida en general al igual que en el amor, he tenido una carga de emociones tan fuertes en esta comida que solo deseo...terminar con todo.

-Narra Silver-

Mi madre trae consigo más de 6 bolsas de ropa, yo y mi padre traemos solo una, bueno, mi padre dos porque tiene una obsesión por las corbatas y los relojes; en fin.

Pasamos por la zona de restaurantes, de pronto me dio un hambre voraz y tuve que expresarlo, tanto caminar y caminar por el centro comercial si me agotó hasta la más mínima gota de pena que me quedaba, por un lado es bastante bueno.

Mi papá estaciona y bajamos en seguida luego de que pusiera los seguros y un cuidador nos diera un pase. Estoy realmente a gusto, muy a gusto y hasta eso me aterra.

-¿Entonces llegarás en la noche...? -Giro mi cabeza y mi padre está hablando por teléfono, no sé con quién pero mi madre le hace señas para adelantarse y pedir una mesa-. De acuerdo, háblale a Berta, es posible que nosotros lleguemos más tarde, solo...no te descuides, ¿ok?

En cuanto cuelga, pregunto -¿Algún asunto en la casa?

-Era Sonic, me pidió más tiempo hasta la noche, comentó que se le atravesó "un asunto de importancia"

-Bueno, me alegra que lo entendieras. -...¿a qué vino ese comentario?

-Claro que lo voy a entender, estoy demasiado cerca de lo que quiero como para yo regarla. -Mi estómago se contrae. A pesar de todo ese detalle de que mi padre quiera algo con Sonic me...joder.

Habia olvidado ese pesar por estos días.

-¿Entonces llegaremos tarde también nosotros? -vuelvo a cuestionar con mi padre, me siento bastante pregunton.

-Tu mamá dijo que quería ver a su secretaria para acomodar unas cosas, así que pasaremos y dudo que nos tardemos 15 minutos. -Entramos al restaurante y mi madre nos hace señas para que la hubiquemos, caminamos y nos acomodamos para comer/cenar, ya está por oscurecer.

Bueno, no debería de molestarme con ella, con ninguno de los dos para ser honestos; además, ¿para qué quiero llegar pronto a la casa?

-Narra Sonic-

En el transporte, comienzo a notar los faros de la avenida encenderse conforme el día avanza, está por oscurecer y es evidente que debería estar en la casa de los hedgehog. ¿Pero qué estoy haciendo? Comienzo a arrepentirme por dejar que Manic me lleve a su casa/departamento.

-Tengo que regresar, Manic.

-Por favor, ya vamos a llegar, estamos a unas cuadras, ¿no querías una explicación?

-No entiendo por qué deberías de traerme hasta tu casa para eso.

-Ya estabamos de acuerdo, ¿sí? Llama a Shadow, tienes su número, ¿no? -buena pregunta, creo que nunca se lo he pedido y no veo la necesidad de tenerlo, pero claro, ahora sí me vendría de poca. Mi silencio le responde-. Rayos...deja te lo paso y le marcas.

-¿Qué? ¡no! No voy a tener justificación para que sepa de donde agarré su teléfono personal.

-Claro que sí, todos sus empleados lo tienen así que, dile eso si te pregunta, que te lo pasó alguien de su servidumbre. -Me toma el teléfono y teclea, él solo lo ha guardado con su descaro de siempre. No me es sorpresa que se lo sepa de memoria, bastardo.

-Ok... -¡uf! Vuelvo a tomar mi teléfono y marco, pero el tono se repite por 4 veces y decido colgar.

Manic se levanta del asiento, el bus ligero hace una parada y también me pongo de pie para bajar junto a él en una zona concurrida de edificios y movimiento. Hay bares, restaurantes y cafés ahí, en cada esquina. Caminamos hacia dentro de la cuadra y giramos en la esquina siguiente. Un edificio de 8 pisos está a mis narices, de mejor vista que los que atravesamos hace un momento por la calle.

-Rápido, ven. -insiste con señas en sus manos y lo sigo, no puedo evitar analizar bien en donde me estoy metiendo.

Subimos hasta la mitad de los pisos. ¡Qué caray! Es un edificio bonito, pero para conocer la extravagancia de Manic esperaba algo más..."minimalista"

Vuelvo a intentar con el teléfono, mientras sigo a pasos lentos al erizo verde por el pasillo, ¿no me contestará porque no conoce el número? Es una opción no descabellada, pero sí no le aviso yo me siento...

-¿Sí? -¡Por fin! La voz ronca me parece acertada pero aún así decido preguntar:

-¿Señ-? ¡ah!, ¿Shadow?

-¿Sonic? ¿Este es tu número?

-Sí, lamento llamarlo así pero, quería pedirle mayor tiempo fuera porque...se me ha atravesado un asunto de importancia...

-¿Cuanto tiempo necesitas?

-Eh...2 horas, quizás...espero que no pase de las 9 de la noche.

-¿Entonces llegarás en la noche? -Me estoy entumeciendo. A cada pregunta que dice mi voz se vuelve cada vez más temblorosa.

-S-Sí, discúlpeme por ello, no volverá a pasar s-solo debo arreglar esto...

-De acuerdo, háblale a Berta, es posible que nosotros lleguemos más tarde, solo...no te descuides, ¿ok? -¿Descuidarme? ¿Qué? ¿Por qué?

-Gracias, Shadow, adiós... -cuelgo pronto, trago grueso y Manic está fuera de una puerta esperándome, es mejor que ignore mis pensamientos.

El erizo verdusco abre la puerta y el sitio es bello, comparando mi antigua habitación compartida con Espio. Ahí podría vivir una familia de cuatro integrantes súper a gusto.

-Buenas noches Sr. Manic -ambos miramos a la joven lechuza, trae una mochila pequeña entre brazos y deposita en el sillón unos peluches de colores-. Liz está dormida, todo el dia preguntó por usted pero no pasó a mayores.

-Gracias Nan, mañana te veo temprano, ¿sí?

-Sí, buena noche, con su permiso. -El ave se marcha, yo me quedo aún más mudo, porque estoy interpretando y deduciendo muchas cosas...

Quitándose el saco, mi ex pareja acomoda sus cosas en una percha y yo hago lo mismo, no veo ninguna ventana y es verdad que sí se siente el calor en este cuarto.

-Ven Sonic, quiero que conozcas a Liz.

La habitación está ahí, en seguida, no puedo dejar de crear la verdad de esto en mi psique...una verdad que estoy esperando desesperado.

Manic abre la puerta, la habitación es reducida pero amplia para esa pequeña niña. Una luz de una lámpara giratoria adorna la habitación con estrellas y ella, sobre su cama color miel con flores, está leyendo o viendo un libro con dibujos.

-¡Papi! -Manic toma a la cría, es una eriza color pasto con detalles amarillos en sus brazos y boca-. ¿Fuiste a trabajar? Es sábado...

-Perdón lindura, tuve que ir y hacer varias actividades, ¿Cómo te fue con Nan?

-¡Bien! hicimos pastelitos y te guardé uno... -Me le he quedado viendo tan fijamente que termino notando que se ha incomodado. Se pega a su pecho, tímida por no conocerme.

El verdusco se gira hacia mí y dice-. Liz, él es un conocido de mi juventud, se llama Sonic, saluda.

-Hola, Liz, ¿qué tal? -Jamás había tratado con niños y ahora, estoy más idiota de lo normal.

-Hola~ -canturrea, los tres sonreímos.

Manic la deja en la cama nuevamente, mientras le explica-. Tienes que dormir, mañana nos vamos al parque, ¿sí?

-¿Va a ir Nan?

-Sí, Nan nos acompañará, ¿está bien?

-¡Sí! -La arropa, me voy hacia la puerta, prefiero ver la pared oscura del pasillo, notando unos cuadros de figuras raras que solo el gusto de Manic entiende.

Hay uno que otro retrato, fotos de esa misma eriza más pequeña, y también de él, con sus padres, con Nan...

No estoy comprendiendo bien esto.

Se cierra la puerta detrás de mí, el chico pelo verde sale con una sonrisa un tanto incómoda, y mis mejillas están muy tensas como para sonreír o decirle algo.

-Eh...bueno, ya conoces a Liz.

-¿Cuantos años tiene tu hija?

-Casi 6 años, ¿cómo deduces que es...?

-Dejemonos de mamadas, ¿está bien? Está claro que lo es, tiene tus malditos ojos hermosos café/miel... -respiro profundo, ¡y me cuesta muchísimo! Tampoco quiero que la niña se despierte por gritarle a su padre-, ok, ¿sí lo es, cierto?

-Sí, lo es...¿Te acuerdas de Molly?

-No me jodas Manic...¿ella es su madre?

-Pues genéticamente lo es, porque desde que nació me la dejó y no la he vuelto a ver jamás -Esa frustración interna empieza a bajar y de pronto, me siento compasivo, como si pudiera entender el pasado de mi compañero en segundos.

No lo pienso mucho y regreso a la sala. Me siento sin invitaciones y mi anfitrión me ofrece algo de beber, no me niego porque en el fondo sí deseo un trago, y más si estoy a punto de oir una historia dura de digerir.

-Cuando estuvimos juntos, antes de que lo formalizaramos, Molly me estuvo buscando mucho. Evadí todo lo que pude su contacto porque supuse que solo deseaba molestarme por mi "falta de masculinidad" y el lío terrible que hubo por mí homosexualidad. El punto de todo es que, a mediados del trimestre, me la encontré embarazada, y negué que fuera mío, hasta que lo tuvo y me hice la prueba de paternidad. Tras eso, me desconecté de mis cercanos e intenté tener un convenio rápido con ella para que no tuviéramos ningún conflicto ya pero fue inútil, ella se tomó mis actitudes previas intencionales, como si realmente hubiera querido dejarla con un niño y que no pudiera seguir adelante...

Una noche Molly me dejó a Liz en el departamento, y por más que intenté ahora yo ponerme en contacto con ella no tuve respuesta. Dejé de insistir, y también tuve que dejarte por la fuerza. Solo huí, Sonic, me aparté de todos y terminé la carrera por convicción y lucha propia; los chismes corrieron y sé que a tus oídos llegó que me fui con alguien más, una verdadera lástima. Tenia una nueva responsabilidad, y si te soy sincero, es una "responsabilidad" que amo porque es lo que tengo ahora y me hace dichoso.

-¿ Y como hiciste para...? Ya sabes, estar en ambas cosas, poder con todo, darle tiempo y cuidados si solo era un bebé...

-Le contraté una nana, a Nan, ha estado conmigo durante todo este tiempo es ya de la familia. Me iba muy bien luego de conseguir el empleo con Shadow, podía pagarlo, ahora no lo sé pero haré lo que pueda...

- ¿Por qué nunca me lo dijiste?

-Tambien sabia huir de mis problemas, Sonic. No eras el único que estaba sufriendo y no encontré la cara para poder darme a explicar contigo. Sé que debi de hablarte sobre esto pero...lo nuestro estaba tenso ya y decirlo me dio la expectativa de que todo empeoraría.

Me hizo comerme la lengua, no sé por qué tengo la cabeza en otro lado, pero a la vez...me siento joven. He mirado tan fijamente a Manic que me siento totalmente estúpido, un estupido que cree las mentiras de otro estúpido.

Aunque sé que todo esto es verdad y desbordó la sinceridad por todos lados.

Termino el alcohol de mi vaso y me pongo de pie. Manic se extraña de mis acciones, me observa ahora consternado por creer que ha dicho algo que me ha ofendido y, bueno, realmente no me siento ofendido por lo que ha dicho.

-¿Qué pasa? ¿Ya te vas?

-He oído lo que me interesaba, ahora tengo que volver a mi trabajo.

-¿Pero qué carajos contigo, Sonic? -《¿Qué?》 Su expresión es molesta, hasta desgarradora-. ¿No piensas decirme algo más?, ¿En serio?

-Manic, he oído lo que quería saber, y sí, ¿te lo digo? Me ha convencido tu historia, está bien.

-¡No! ¡No está bien! -Se pone de pie, tomándome de mis hombros y explotando de rabia-. ¿Por qué te estas conteniendo tanto en decirme algo? ¿Porque no escupes lo que sientes realmente?, ¿Acaso ganas algo ocultándolo?

Me ha enfurecido tanto su actitud que no sé como es que decido contraatacar besandole. El juntar mis labios con los suyos de esa forma, llena de ira y recelo...una molestia que ahora me parece muy estupida porque todo el rencor que alimenté para ese erizo fue falso, justificado en mentiras y creación mías contra esos mismos sentimientos de cólera...

Intento desvestirlo, para este punto yo no quiero ya hablar, solo quiero detener este momento en mi cabeza, creyendo que será grato, que será como la primera vez en la que me metí con este erizo verdusco sin saber que acabaría mal.

¡Por qué a mí no me importó que todo fuera mal en mi vida mientras estuviera con él!

Tomo aire y vuelvo a besarlo. Él también se separa, pero con mayor control en todo esto; dejo que lo haga, dejo que me recuéste en el sofá, a la par que baja mis bermudas muy fácilmente. Lo sostengo por su nuca, tirando de sus púas y no quiero que baje, quiero que se quede aquí en mi pecho, besando y lamiendo mi cuello, mi boca...el delirio de las sensaciones que ya no tenía vuelve poco a poco volviéndome loco, poniéndome duro en todo aspecto.

¿Deberia de parar? ¿Por qué? ¿Por qué tengo que creer que esto es una pésima idea? Jamás pensé en que una hija, una mala cogida, una falta de anticonceptivo, fuera la causante de la destrucción de mi felicidad, de los malos entendidos que tuve por mucho...mucho tiempo...

Libero un monosílabo con supremacía, sin dejar de tocarnos. Dejo que juegue a su antojo y entre mis gemidos recordé a la pequeña, no me gustaría que nos vea, es demasiado joven para entender esto, pero inmediatamente pienso en hacer esto de forma silenciosa, suprimiendo mi escándalo.

Ja, además, Manic ya me está poniendo muy pronto el ejemplo manteniendo ocupada su boca...

-No hagas mucho ruido... -Y sí, solo deja de comerme el bulto para decirme eso, me siento adivino.

Me siento precoz de no poder disfrutar esto más. Sé perfectamente que no vamos a pasar de esto, porque no podemos hacerlo aquí, ahora lo intullo fácilmente pero, ah, sí solo pudiera durar un poco más...

-¿Qui-qieres que me venga e-en tu boca? -pregunto de forma baja, con la entrepierna entumecida.

Siento como aprieta mi cadera con una mano, y con la otra solo frota por debajo de mi cola, metiendo su mano y moviendola de la forma más estimulante posible para que termine pronto. Dejo salir todo lo que sea con un suspiro, acariciando mi cara y sus púas...

Jamás pensé que me sentiría tan liberado de rencor y malas memorias con esto, con tal solo esto...

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top