Tiempo después.

Los vitoreos de las demás personas y el rugido de celebración dr los dragones resuena por todo el valle mientras Kayden y yo nos besamos sonrientes.

- Finalmente.

Mencioné y él me sonríe. - Finalmente...

Ambos miramos hacia el público viendo a la reina, a mis amigas, hermana y a sus hermanos. Aplaudían con fuerza y gritaban de felicidad por nosotros, y ambos vimos hacia las dos sillas reservadas.

- ¿Crees que estén aquí?

- Bueno... convengando que me amenazaron en sueños sobre casarme contigo... estoy seguro de que sí.

Comencé a reír y é sonríe con diversión pero vuelve a atraerme y a besarme intensamente. Pero nuestro momento se ve interrumpido por el sacerdote.

- Es momento...

Miré a Kayden antes de soltar sus manos y sonreír nerviosa, me di vuelta hacia el sacerdote quien traía una corona realmente grande, y yo me incliné y agaché levemente.

El sacerdote dice un par de palabras y me coloca la corona en la cabeza, yo me levanté y miré hacia el pueblo.

- Larga vida a la reina Rea.

- ¡Larga vida a la reina Rea!

- ¡Larga vida a la reina Rea!

- ¡Larga vida a la reina Rea!

Kayden sujeta mi mano y ambos sonreímos hacia el pueblo antes de tomar nuestros lugares en ambos tronos. Kayden levanta mi mano y la lleva hasta sus labios, los cuales usa para depositar un tierno beso en mis nudillos.

- Larga vida a mi reina...

Rodé los ojos sonrojada pero reí con un poco de nervios por su culpa. Aún me seguía poniendo nerviosa y no entendía como.

Miré a mi hermana quien me felicita desde lejos y lagrimea, yo le sonreí con ternura y ambas nos miramos por un momento más.

***

***

- Realmente voy a extrañarte, Liz...

Mi hermana mayor y yo nos dimos un fuerte abrazo del cual no queríamos despegarnos.

- Y yo a ti, Rea...

- Haré que nos visites de vez en cuando ¿Si? Así que más te vale estar preparada.

- Siempre y cuando no me despiertes de golpe.

Ambas reímos con las lágrimas cayendo por nuestras mejillas, pero entonces nos separamos y nos miramos al rostro.

- Mándale saludos a Arthur de mi parte...

- Lo haré.

Ella se separa de mi y la gi irse hacia el portal que las brujas habían creado. Me mira una vez más antes de cruzar, el portar se cierra y yo resoplé profundo mientras llevaba una mano a mi pecho. La iba a extrañar demasiado.

- Mi reina, es momento de irnos a casa.

Miré hacia Kayden y sonreí antes de acercarme a él y sujetarme de su brazo.

- Vamos, mi rey.

Ambos ensanchamos nuestras sonrisas y caminamos hacia los demás, era momento de ir a... casa...

Tenía una casa a la cual ir... Sí, tal vez no sea algo humilde pero... tenía un hogar al cual regresar, con amigos reales y ahora una nueva familia...

Tal vez no debería, pero agradezco que me hayan echado de la casa de mi hermana y su esposo ese día...

***

***

Narra Larissa

Suspiré profundo mientras miraba el cielo desde mi balcón. Vi a las parejas conformadas por mis hermanos y sus novias volando en sus respectivos dragones. Aunque podía ver a Aiden desde aquí, él era el único que tenía un libro en manos pero... al parecer consiguió a alguien que tiene su mismo gusto por la lectura.

Volví a suspirar y me llevé la mano al pecho al sentir mi corazón latiendo con fuerza en mi pecho.

- Tres años... y aún no regresas...

Pegué mi frente a mi brazo sobre el borde del balcón mientras resoplaba.

- ¿Esperas a alguien más o puedo emocionarme... ?

Levanté la mirada rápidamente y lo vi al fin, saltó hasta estar en el balcón... conmigo... su sonrisa amplia me hizo paralizar por un momento.

- Declan...

- He esperado tanto tiempo por escucharte decir mi nombre de nuevo... Larissa...

Mi cuerpo se estremece pero entonces corrí hacia él quien me recibió encantado y ambos nos fundimos en un abrazo tan cálido del que no quería separarme nunca.

- Realmente... has regresado...

- Sí, te dije que lo haría...

Él se separa leve para verme y yo vi la cadena en su cuello, él nota lo que yo miraba y sujetó el collar en su mano.

- Aún lo tengo, ¿Recuerdas lo que significaba para nosotros?

- Claro que sí.

Asentí frenética y entonces él me toma por la cintura y me acerca a su rostro para besar mis labios con tanta pasión e intensidad. Nuestros sentimientos no habían cambiado... hasta me atrevo a decir que... aumentaron mucho más de lo que creía.

- Dime ya... ¿A dónde fuiste que te tomó tanto tiempo?

Él sonríe y se lleva la mano al bolsillo del pantalón para rebuscar en él.

- Te dije que te conseguiría lo que quisieses... bueno... aquí lo tengo.

Él saca de su bolsillo una horquilla realmente hermosa, era increíblemente divina... no podía creer lo que veía.

- Declan...

- Me costó encontrar una que sea digna de ti, pero lo hice... y quería traértela.

- ¿Fuiste de regreso hasta el otro lado del mundo, en un camino peligroso... para traerme esto?

- Sí, porque tú lo vales todo Larissa... realmente todo.

- Eres increíble...

Lo jalé y lo acerqué de nuevo a mi para besarlo. No sabía si le había dicho increíble de idiota o... realmente lo era. Creo que un poco de ambas.

- Es hermoso, gracias...

Declan me sonríe y yo me puse la horquilla en mi cabello, suerte tenía un peinado que permitiría sujetar a la horquilla.

- No sé como podría agradecerte...

- Pues... ¿Qué te parece acompañándome en mi siguiente viaje y en los que siguen... ?

Sus mejillas se tornan rosadas pero me mira sonriendo decidido y firme a su propuesta. Yo abrí los ojos de par en par.

- ¿Acompañarte... ? ¿Viajar... ?

- Sí. Sé lo mucho que anhelas hacerlo, así que quería que viajes conmigo y conozcamos lugares juntos.

- Pero... Declan no puedo... soy una princesa, querrán hacernos daño si tienen la oportunidad...

- Lo he pensado mucho, créeme, pero decidí que yo te protegeré. No dejaré que alguien te haga daño, haré todo lo que esté a mi alcance para impedirlo... pero quiero cumplir tu sueño de salir y conocer el mundo...

Me tiende la mano, yo lo pensé bastante. Miré hacia el castillo, el pueblo y los dragones volando... pero suspiré y sonriendo asentí. Tomé su mano y fuimos hacia el borde del balcón para no perder tiempo.

El primero en saltar fue Declan, se subió a su caballo y me miró.

- ¿Confías en mi?

- Sí...

La respuesta sale de mis labios sin siquiera pensarla antes, Declan sonríe más y extiende sus manos.

- Entonces salta... yo te atraparé.

Lo miré, pero suspirando profundo me subí al borde y me tiré hacia él, cerré los ojos pero entonces sentí como sus brazos me atrapaban y él besaba mi frente.

- Bien hecho.

Sonreí incrédula por lo que acababa de hacer pero Declan pone en marcha su caballo y los dos pasamos al frente del castillo donde los demás bajaban de sus dragones mientras mi madre también los acompañaba.

- ¿Larissa? ¡¿A dónde vas?!

- ¡Lo siento mamá, te amo pero me voy a viajar por el mundo con Declan!

- ¡No se preocupe, majestades... la cuidaré con mi vida!

- ¡Más te vale o acabaremos contigo!

- ¡Lari, cuídate!

- ¡Adiós Rea, Sarah... todos! ¡Nos vemos!

Nos alejamos de ellos y yo miré a Declan, ambos reimos levemente con complicidad y cruzamos por el pueblo hasta salir de aquí.

Suspiré profundo sin saber a dónde iríamos, pero sabía que estaba bien... mientras fuera con Declan.

Fin