No ha pasado tanto tiempo desde que te perdí, padre mío.

Aún no me siento capaz de superar tu perdida y acostumbrarme a tu ausencia, simplemente, me rehúso a hacerlo.

En estos momentos... es del poco tiempo que tengo para pensar en ti, hay tanto trabajo como jefe y ahora entiendo el por qué tus cambios de humor, ahora entiendo todo ese estrés que sentías.

Siempre admiré que pese a todo el trabajo que tenías, amabas lo que eras. Yo aún no estoy seguro de poder ser lo que tú algún día fuiste, pero hago mi mayor esfuerzo. De algo estoy seguro... y es que nadie podrá llenar este vacío que has dejado en cada uno de nosotros.

No me ha sido fácil acostumbrarme a estar sin ti, de hecho, es lo más difícil que puedas imaginar, porque ahora no te veo levantarte de mal humor por las mañanas, estar gritoneando toda la tarde y roncar como oso por las noches.

Justo ahora me siento estúpido por estar hablando conmigo mismo en estos momentos. Gracias a Thor nadie lee los pensamientos, si no me tomarían como un completo ridículo. Pero... ¿sabes qué?, eso ya no me importa. No les pido que me acompañen en mi dolor, pero tampoco que me prohíban hablar de ti. Yo quiero recordarte y sentir como si aún estuvieses aquí conmigo.

Cada que hago esto... te siento cerca, como si estuvieses a un lado mío, escuchando mis desgracias, alegrías, todo... como si aún cuidaras de mí.

Cuando encontré a mi madre... pensé que los dioses me habían dado la oportunidad de recuperar ese tiempo como familia, sin embargo, ahora me doy cuenta que era otra dura prueba. Me regresaron a mi madre, pero me arrebataron a mi gran y honorable padre.

Me gustaría llegar con Astrid a donde ustedes. Aunque mi madre haya decidido irse, el amor que se tenían nunca desapareció. Me siento orgulloso de ser la prueba de su amor... y en un futuro... me gustaría tener mi prueba de amor con Astrid. La amo demasiado, no tengo dudas de querer hacer mi vida con ella. Nos hemos distanciado, pero es porque aún no me siento con ánimos para convivir con las personas.

Me pregunto todas las noches si allá... ¿sabrías mi nombre?... si, ¿sería lo mismo?

Mi lugar no está allá.

El tiempo puede abatirte, el tiempo puede doblar tus rodillas y romper tu corazón hasta hacerte suplicar por favor.

Más allá de la puerta... hay paz, estoy seguro... Y sé que allá no habrá más lágrimas.

Debo ser fuerte, seguir adelante, porque mi lugar no está allá.

Entre lágrimas y recuerdos... me despido de ti, padre mío.

Gracias por quedarte conmigo una noche más, pero ahora... es hora de que descanses y dejes el dolor. Es hora de que ignores mis lágrimas y dejes de pensar en mí, yo debo superarte. Sé que lo haré, con la ayuda de todos mis seres cercanos. Pero primero... debo dejarte ir.

Adiós, padre.

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Okay, un pequeño relato que salió de mi cabeza mientras escuchaba la bella canción de "Eric Clapton".

Verán que en ningún momento de la historia menciono el cielo -como si lo menciona el título-, ya que, no sé si el Valhalla cuente como cielo, lo sé, re ignorante la niña.

Quizá muchas cosas queden con cierta incoherencia, pero es porque quería poner textos de la canción -que menciona el cielo- y pues hice todo para que quedara un poquito.

Volviendo al punto de arriba, decidí no mencionar el cielo, sin embargo, como un tipo homenaje hacia esa canción, decidí colocarlo como título, porque aunque son épocas distintas, el sentimiento es el mismo.

Este pequeño one-shot va dedicado a todos aquellos que han perdido a un ser querido. Las cosas se superan, fáciles o difíciles, pero quiero que sepan que no están solos. No confundan superar con olvidar, son cosas totalmente distintas.

Simplemente... mantengan en su memoria los mejores momentos con esa persona, los tristes, los malos, los divertidos. Creo que todo recuerdo es bueno, porque si sufres por esa persona... quiere decir que no todo fue tan malo como parece. Así que... añora cada momento y prepárate para vivir sin un pedazo de ti. No se olvida, se aprende a vivir sin ello.