Nave Cacique del Alto Mando. Cerca de la Estación Nodal

Los pulsos de la maquinaria son todo lo que se escucha en el cuartucho de apenas quince metros cuadrados, sus paredes metálicas de negro bruñido presentan junturas en sus ensamblajes que son recorridas por circuitería. Una pequeña vibración se genera en el centro de la sala, seguida de una más intensa, sin preaviso una luz se adueña del cubículo, una luz cegadora que se desvanece dejando tras de sí a tres figuras.

SANDOZ mira a su alrededor, dispuesta a desplegar el cañón de su brazo biónico, GERTRUDE aferra su bastón y ALIMAÑA activa sus pinzas eléctricas. Recorren con la mirada el lugar y se relajan al ver que están solas en el recinto.

SANDOZ

Tal como esperábamos. No hay nadie.

GERTRUDE

Y teniendo en cuenta que no nos hemos materializado en mitad de una pared parece que las coordenadas de KANAY eran correctas.

SANDOZ

RAFIA, escanea el cuarto de comunicaciones y busca un puerto de acceso.

La voz de RAFIA se hace oír a través de ALIMAÑA.

RAFIA

Dicho y hecho.

ALIMAÑA despliega una lente de su lomo y comienza a escanear la circuitería y los paneles.

GERTRUDE comienza a regular el Activador.

RAFIA

Lo he encontrado, está tras este panel seguro. Tiene una cerradura de mantenimiento.

SANDOZ

Aparta, déjame a mí.

SANDOZ acerca uno de los dedos de su brazo biónico y este se desensambla y reconstruye para dejar paso a una varilla regulable. La mete en la cerradura y comienza a oírse un sonido hidráulico. Al cabo de un rato suena un "clack".

SANDOZ

Listo.

El panel se abre y se ven varios agujeros romboidales rodeados de circuitos.

SANDOZ deja sitio a ALIMAÑA que se sitúa frente al panel. Una de sus antenas de insecto se pliega y la introduce en uno de los agujeros romboidales.

RAFIA

Estoy abriendo una puerta trasera con el software de la "repipi".

(tras unos segundos)

Hecho, mandaré una señal a la ESCARAMUZA. Ahora debe ser segura.

Luego se vuelve hacia ellas y las escanea.

RAFIA

Estoy desencriptando este puerto de comunicaciones para que sea visible y accesible solo para vuestras DataLens:

Puerto APX-[]>

GERTRUDE y SANDOZ conectan sus Datalens y en "conexiones disponibles" seleccionan el puerto mencionado. Asienten cuando finaliza la conexión.

RAFIA

Comunicaciones abiertas.

La voz de Clemencia suena a través de la vibración intracraneal que provoca las Datalens en su tímpano.

CLEMENCIA

Listo, nuestra comunicación pirata está activa. Les paso a vuestras mercedes el plano de "aqueste" navío.

Estoy usando el puerto para infiltrarme en las subrutinas de seguridad y demás sistemas periféricos.

Vaya... Parece que el sensor de perímetro de los pasillos de esa área detecta movimiento, puede ser que alguien se dirija a la sala de comunicaciones.

SANDOZ

(tensa)

¡Perfecto! ¡Más que perfecto!

GERTRUDE

Mantén la calma. Sigue el plan.

SANDOZ

¡Sabes que estas cosas se me dan fatal!

GERTRUDE

Di solo lo necesario. Intenta no levantar sospechas.

GERTRUDE hace un gesto de premura hacia ALIMAÑA que cierra el panel y se encarama en su espalda. GERTRUDE usa el Activador. En apenas unos segundos la anciana pierde consistencia, haciéndose traslúcida, unos instantes después es invisible y ese campo de invisibilidad se extiende al insecto robótico que se adhiere a ella.

Apenas pasan diez segundos y la puerta del cuarto de comunicaciones se abre. Una humana de complexión delgada y ojos saltones con uniforme de Operadora y un panel de notas digital en la mano irrumpe en la estancia.

Frena en seco al ver a una supuesta compañera revisando la circuitería.

OPERADORA

¡Vaya! Hola...

SANDOZ

¡Ah, hola!

La Operadora observa el uniforme de SANDOZ.

OPERADORA

No sabía que hubieran mandado ya a alguien a revisar la incidencia.

SANDOZ

(miente)

Pues sí, me han mandado a mí.

OPERADORA

Perdón, pero... ¿nos hemos visto antes?

SANDOZ

(notando como su frente comienza a perlarse de sudor)

Eso creo, de vista. Yo soy una desplazada así que no pertenezco a la tripulación de a bordo.

LA OPERADORA relaja la expresión.

OPERADORA

¡Ah, claro! ¿Te desplazas a la Estación Nodal?

SANDOZ

Sí...exactamente.

OPERADORA

Deberías estar ya preparando tus cosas para el desembarque. No era necesario que te ocuparas de esta incidencia.

SANDOZ

Sí, eso les dije yo. Lo que no entiendo es porque también te avisaron a ti.

OPERADORA

Yo tampoco.

SANDOZ

(ganando confianza)

Que ganas de hacernos perder el tiempo. Ni que fuéramos sus sirvientes.

OPERADORA

(con los brazos en jarra)

Sí, ¿verdad? ¡No tienen ninguna consideración!

Ambas sonríen.

OPERADORA

Oye... He visto que hay otros desplazados últimamente.

SANDOZ

¿Ah sí?

(corrige a tiempo)

Digo, sí... si hay bastantes.

OPERADORA

¿Tiene que ver con los rumores de que la Estación Nodal se va a trasladar a Heráldica? Ya sabes, a través de los cursos y eso. En conmemoración de la apertura de la Hermética.

SANDOZ intenta reprimir su sorpresa.

SANDOZ

Posiblemente.

OPERADORA

¡Así que los rumores son ciertos! ¡Supongo que tan solo os lo han comentado a los desplazados de la Estación! ¡Eso si va a ser digno de verse! Dicen que se ha hecho por última vez siglos atrás. Será un momento cumbre para nuestra generación.

SANDOZ

Eso pienso yo. Aunque nos dará mucho trabajo a los Operadores.

OPERADORA

Pues tienes razón.

(ríe)

No lo había pensado. Te compadezco.

SANDOZ

(con un gesto cómico de resignación)

Gracias.

La OPERADORA mira a los paneles y recupera su concentración.

OPERADORA

Supongo que ya has revisado los paneles.

SANDOZ

Sí... todo correcto, así que he aprovechado para revisar la circuitería antes de irme.

OPERADORA

Muy amable. Pero tú deberías estar preparándote para desembarcar en cuanto la escolta llegue a puerto.

SANDOZ

¡Ah, no me importa! Después de todo con una operación en marcha, aunque aterricemos, hay que esperar a que esta finalice para que los Operarios podamos desembarcar.

OPERADORA

Cierto. Pero aun así déjalo, no te preocupes por ello. Ya me ocupo yo de terminar de revisar la circuitería. La verdad es que es tontería que estemos aquí las dos, por una pequeña irregularidad en uno de los puertos no se va a caer la nave a bajo. Seguramente se trate de algún circuito afectado por la humedad.

SANDOZ

Sí por eso revisaba la circuitería. Pero no vi nada extraño y en los puertos tampoco.

(echándole algo de valor)

Pero ya sabes cómo son los tripulantes en cuanto notan alguna latencia en la señal ya piensan que algún fusible ha explotado en ingeniería.

OPERADORA

¡Qué me vas a contar!

SANDOZ se levanta y coge su caja de herramientas.

SANDOZ

Bueno, Si quieres echar un último vistazo... Yo por mi parte, creo que aceptaré tu propuesta e iré...

(se traba)

¡...a hacer las maletas! ¡Eso, las maletas! ¡Que ya estamos llegando!

OPERADORA

Ve tranquila. Déjalo en mis manos. Ten un buen aterrizaje y espero que te sea leve el proceso de traslado de la Estación.

SANDOZ

Gracias.

(carraspea)

Yo también lo espero.

La Operadora le dedica un saludo militar más bien informal a modo de despedida, SANDOZ lo devuelve con torpeza. Está desentrenada.

SANDOZ se para en la puerta unos segundos simulando que pone en orden sus herramientas en la caja, para que ésta permanezca abierta lo suficiente como para que la invisible GERTRUDE la cruce. Cuando calcula que ya debe haberlo hecho se retira con una sonrisa.

Al salir al pasillo se cruza con un robot de limpieza y otra Operadora que ni siquiera repara en ella, por lo demás el pasillo está vacío. Escucha la voz de CLEMENCIA.

CLEMENCIA

Bien jugado, compañera. No sois tan ingenua para estos menesteres como la capitana nos hizo creer.

GERTRUDE

(escribiendo por texto a través del interfaz de las Datalens para no hablar)

De vez en cuando, se luce.

RAFIA

(desde dentro de sus Datalens)

O quizás es que se encuentra con gente realmente idiota.

SANDOZ

(susurra)

Muy graciosa.

CLEMENCIA

Presten atención. He conseguido acceder al plano de la nave. Este es el camino a tomar a la cubierta principal y de ahí al puente de mando.

Un plano técnico de la nave se despliega en sus retinas y una línea roja las indica el camino a seguir.

SANDOZ

Todo recto, los primeros ascensores a la derecha... subir dos cubiertas.

(suspira)

De acuerdo.

GERTRUDE

(escribiendo)

Recuerda que hay cámaras, no mires hacia arriba. Cálate bien la gorra. No queremos dejar rastro.

SANDOZ asiente en silencio y baja la cabeza con disimulo.

CLEMENCIA

Estoy intentando buscar debilidades en sus sistemas de defensas. Dadme un minuto.

SANDOZ se dirige a los ascensores contemplando los modernos pasillos de la Cacique.

SANDOZ

(susurra)

Vaya sigue manteniendo la estructura de las caciques de nuestra época, pero fíjate en los sistemas de bioconservación y en el diseño de los interiores.

GERTRUDE

(escribe)

En una versión mucho más puntera de las que conocíamos.

SANDOZ le da la razón y sigue caminando. Se alegra de no haberse cruzado con nadie más. Llega a los ascensores. Uno de ellos ya se encuentra en su planta y se abre cuando ella se acerca. SANDOZ vuelve a esperar en la puerta para que GERTRUDE pase y pulsa el botón de "Cubierta principal"

Las puertas se cierran silenciosamente, y ni siquiera escucha los motores magnéticos del ascensor. Efectivamente, tecnología puntera.

CLEMENCIA

Lo tengo. He atacado la fluctuación de su escudo de iones. He hecho que parezca una avería. Acaban de darse cuenta y están enviando una petición a la cubierta de Operaciones para que manden a un técnico.

Todo va según el plan. SANDOZ puede escuchar un leve suspiro procedente de una boca invisible a sus espaldas.

Cinco minutos después SANDOZ camina a paso rápido por una concurrida cubierta. La gente se desplaza de un área a otra enfrascada en sus quehaceres o conversan amistosamente en los cruces de pasillos.

Usando el plano que CLEMENCIA les ha proporcionado SANDOZ y GERTRUDE escogen pasillos secundarios para llamar menos la atención.

CLEMENCIA

Ya han enviado la petición, la he intervenido. Operaciones no la ha recibido. Os la transferido a vos directamente.

Una ficha incidencia aparece en las DataLens de SANDOZ. La información necesaria el número de incidencia y el emisor de la petición. Todo constaba en aquella ventana.

CLEMENCIA

Presentaos en Capitanía y transferid esta ficha de incidencia para que os dejen pasar. Por cierto... se ha presentado una pequeña contrariedad.

SANDOZ frena en seco.

SANDOZ

¿Qué contrariedad?

CLEMENCIA

No he sido capaz de intervenir el log de a bordo y asignaros a vos las credenciales de otro Operario.

SANDOZ

¿¡Pero cómo voy a entrar!?

CLEMENCIA

Lo bueno, es que he revisado el proceso de incidencias de los últimos meses reflejados en los registros. Y en un 90% de las veces no se ha requerido credenciales del técnico solo que les muestre la petición con la firma digital correspondiente al área de Operaciones. Y ese sí que la he podido falsificar.

SANDOZ

O sea que hay probabilidades de que me pidan que me identifique.

CLEMENCIA

Realmente muy bajas.

SANDOZ

Pero dependemos de que sigan saltándose el protocolo como hasta ahora.

CLEMENCIA

En efecto. Dependemos de su ineficacia.

RAFIA

¡Estas jodida!

SANDOZ

¡Por el ojo de la Hermética que hoy acabo en el calabozo!

GERTRUDE le chista desde las sombras, conminándola a bajar la voz.

GERTRUDE

(susurrando)

Ya pensaremos en algo. No hay tiempo. Si no nos damos prisa llegáramos a los Límites de la Estación Nodal y no habrá evasión que valga, muchacha.

CLEMENCIA

Os esperan ya en el puente. Id presta.

SANDOZ traga saliva y sigue su camino.

A los cinco minutos llega a un pasillo con una señal de neón que reza: "Puente de mando" en una fuente sencilla y elegante. SANDOZ se sitúa frente a la puerta y solicita acceso en el panel junto a la jamba. Mira al suelo para impedir que la cámara esférica encima de la puerta le grabe el rostro.

VOZ DESDE EL INTERFONO

¿Te envían de Operaciones?

SANDOZ

Así es.

(Enfoca las DataLens hacia el Panel)

Al parecer, habéis sufrido una incidencia con los deflectores.

VOZ

Habéis tardado poco.

SANDOZ

Estaba por la zona.

VOZ

Bueno. Parece que está todo en orden.

(hay un silencio incómodo)

Pero espera un momento...

SANDOZ aprieta los dientes.

RAFIA

(escribe en las DataLens)

¡Nos ha pillado!

GERTRUDE

(también escribiendo)

Tranquilas. No seáis idiotas.

VOZ

¿No le conozco de algo, Operadora?

SANDOZ

Pues no lo sé. No sé con quién hablo.

VOZ

Ah, sí disculpe.

(una leve risa)

Puede pasar. Esto es urgente.

La puerta se abre y SANDOZ y compañía entran en una gran estancia rodeada de proyecciones que muestran las proximidades de la nave. Al frente se encuentran los oficiales de vuelo un hombre y una mujer, ambos humanos. Conversan relajadamente entre sí mientras se encargan de la trayectoria de la nave. La oficial de comunicaciones es una rivana de pelo naranja y mirada tranquila, en esos momentos da sorbos a un pequeño vaso de té. Por su parte, el oficial científico es un loreano encanecido que se repanchinga en su estación analizando la información que se muestra en la pantalla. Y en el centro de la sala, sentados en dos sillas rodeadas de paneles se encuentran el capitán y en la silla contigua, a sus espaldas, la primera oficial. El capitán es un humano en sus sesenta de expresión grave y anatomía recia y la segunda una loreana de ojos perlados, que luce el pelo rapado en la nuca con una coleta lateral. Ambos parecen mantener una conversación referente a lo que se muestra en la pantalla de proyección central. La etereonodriza de Oxión.

El personal ignora su presencia. No es más que un técnico que viene a echar un vistazo a algún que otro cable suelto.

SANDOZ puede escuchar retazos de la conversación entre el capitán y la primera oficial al entrar:

CAPITÁN

Esa nave no posee apenas defensas y mucho menos sistemas ofensivos. Me pregunto si no es exagerado haber mandado a nuestra flotilla a escoltarla.

PRIMERA OFICIAL

Y dos escuadrones en tierra para supervisar el desembarque. Debe haber algún motivo.

CAPITÁN

La Coronel Jericho supervisará ese desembarque en persona. Ella dio instrucciones directas para que tratáramos la contingencia como alerta amarilla.

(mira a las líneas luminosas sobre la pantalla de color amarillento)

De momento no hay incidencias y la etereonodriza responde según lo esperado.

SANDOZ observa las luces amarillas.

GERTRUDE

(escribiendo)

Alerta amarilla.

CLEMENCIA

(su voz sonando a través de las DataLens)

Sí, no os lo he mencionado, pero la activaron poco después de que comenzaran a escoltarnos. Nos consideran un objetivo de riesgo.

GERTRUDE

(escribiendo)

No me sorprende.

La cháchara "auditiva-retinal" cesa cuando SANDOZ ve que un reciano moreno se acerca a ella.

SANDOZ

Mierda

(susurra)

RAFIA

¿Qué pasa?

SANDOZ

(Moviendo sus retinas para escribir el mensaje en su interfaz ocular)

El que me recibió en la puerta. Claro que me conoce. Hicimos las prácticas juntos después de la academia. Hace tiempo.

GERTRUDE

¿Crees que te acabará reconociendo?

SANDOZ

Espero que no, no nos llevábamos mucho ni era parte de mi grupo.

El reciano ejecuta el saludo militar y SANDOZ le responde.

RECIANO

Bienvenida al puente de mando. Me alegro de que haya llegado con tanta premura.

Soy el oficial de Defensa GORO.

(Se le queda mirando)

Realmente su cara me suena, Operadora.

¿Cúal es su nombre?

SANDOZ

Pues eh...

RAFIA

¡Lo dicho, la hemos cagado!

GERTRUDE

(escribe)

¿Clemencia?

SANDOZ

Helena...

RAFIA

¡No digas tu nombre!

SANDOZ

¿Helena de la... Jarra?

RAFIA

¿Pero por qué no miente? ¿Tiene algún problema mental?

De repente, la banda de la muñeca del reciano comienza a iluminarse en rojo, se da la vuelta y mira hacia su puesto de control, donde varias luces titilan de la misma manera.

GORO

(en bajo)

¡Maldita sea! Parece que ahora la densidad del campo de iones ha bajado de manera alarmante. Voy a tener que reportar al capitán.

(mira hacia el centro de la sala)

A no ser que puedas sacarme las castañas del fuego.

CLEMENCIA

(a SANDOZ)

De nada, mi buena camarada.

SANDOZ intenta contener el suspiro de alivio.

SANDOZ

(a GORO)

Claro, para eso estoy aquí. Con permiso.

GORO asiente y camina junto a ella hacia la terminal. SANDOZ examina la consola, hace un chequeo de rutina. Por fortuna, aún sabe cómo apañárselas en ese entorno, aunque hay ciertas opciones que le resultan novedosas. Simula un par de chasquidos de desaprobación y se agacha tras la consola, abriendo la puertezuela donde se encuentran los conectores.

GORO

¿Es eso necesario?

SANDOZ

Puede ser un problema de los conectores.

GORO

¿En serio?

SANDOZ ignora la pregunta y finge concentración mientras manosea los cables.

Escribe en sus DataLens:

SANDOZ

Capitana ¿Estáis en posición?

GERTRUDE

Me encuentro en el centro de la sala.

He manipulado el panel de acceso de la puerta al entrar, nadie lo ha advertido. Ahora está sala está cerrada desde dentro.

CLEMENCIA

Nos queda poco tiempo. Yo estoy dispuesta. Cuando vos queráis, capitana.

GERTRUDE

Cuenta atrás. Tres...

SANDOZ abre la caja de herramientas mientras GORO toquetea un pad de datos y la mira de reojo.

GERTRUDE

Dos...

SANDOZ abre una cremallera del lateral y extrae el filtro de aire.

GERTRUDE

Uno.

SANDOZ se lo pone en la boca e intenta mantener el rostro dentro de la puertezuela.

Pasan cinco segundos. La gente tose. Otros cinco.

GORO

¿Cuánto falta?

(le pregunta)

Deberíamos... ¡Tjo, tjo!

(empieza a toser)

Deberíamos tenerlo listo para...

(tose más)

Al cabo de un rato las toses dan paso a los desvanecimientos. Se oyen algunos gemidos. Con un golpetazo GORO cae encima de su consola de control. SANDOZ le empuja con la mano para que no le caiga encima.

El capitán y la primera oficial comienzan a gimotear, se levantan y trastabillan dan órdenes al aire que nadie parece escuchar.

CAPITÁN

Pero que....

Más topetazos, otros miembros de la tripulación han caído al suelo o se han quedado fritos en sus sillas.

Una leve bruma verde cubre toda la estancia. SANDOZ respira calmadamente a través de su filtro de aire. Se levanta y asoma la cabeza por detrás del puesto de control de Defensa y ve como toda la tripulación yace inerte.

GERTRUDE se vuelve visible. Resollando, claramente cansada debido al uso del Desvanecedor y de su Neonomancia.

GERTRUDE

SANDOZ, los controles.

SANDOZ asiente y corre hacia Pilotaje, aparta a uno de los oficiales de vuelo yacientes a un lado con su brazo metálico y se inclina sobre la consola.

SANDOZ

(manipulando los controles)

Activando control remoto, usando la ruta ya definida en su plan de vuelo.

GERTRUDE

¡Perfecto! Ahora RAFIA, al control de comunicaciones. Lo hackeamos y dejamos que CLEMENCIA acceda.

RAFIA

Marchando.

ALIMAÑA se separa de su espalda y alza el vuelo hacia la consola correspondiente.

GERTRUDE se acerca hacia el capitán.

RAFIA

Ya he instalado el software. Y he usado los controles analógicos para cerrar comunicaciones con el resto de la nave.

CLEMENCIA

Puedo visualizar las funcionalidades, pero parece que ha interpretado mi software de intervención como un nuevo usuario y para poder acceder a los controles avanzados de las funciones de comunicación con las necesitaré la validación del capitán. Tal como esperábamos. Con escanear su placa identificadora en la consola de Comunicaciones debería llegar.

GERTRUDE

(puede ver la placa adherida a la pechera del hombre yaciente)

Ya estoy en ello.

SANDOZ

(a sus espaldas)

¿Cuánto tiempo estarán así?

GERTRUDE

He usado una gran cantidad de Neón en estado gaseoso, han perdido el conocimiento, se despertarán en un par de horas con mareos y problemas de memoria.

CLEMENCIA

¡Maldiciones!

GERTRUDE

¿Qué ocurre, Clemencia?

CLEMENCIA

Estaba revisando la ficha del Capitán. ALTAIR JANA.

SANDOZ

¿Y?

CLEMENCIA

Capitana, asegúrese de su estado.

GERTRUDE

(inclinándose al lado del hombre)

¿Y eso por qué?

CLEMENCIA

Porque es un Neonomante.

GERTRUDE y SANDOZ

¡¿Qué?!

Algo atenaza la muñeca de GERTRUDE. El Capitán con el rostro abotargado por el efecto del gas le agarra la mano, mientras apoya la otra en el suelo par aponerse en pie.

GERTRUDE

¡Joder!

Una daga surge de la manga del abrigo de GERTRUDE, el Capitán exclama al recibir el corte y le suelta, pero se pone a la defensiva, GERTRUDE aprovecha para alejarse con una maniobra de evasión.

SANDOZ

¡Mierda, mierda, mierda!

GERTRUDE

(sin apartar la vista del hombre que en esos momentos recobra la compostura)

Al ser Neonomante ha resistido los efectos del Neón en parte. En estos momentos su fisionomía va adaptándose al exceso de Neón y se está acostumbrando a él.

RAFIA

¡Ponedle fuera de juego, rápido!

CLEMENCIA

Un Neonomante Frío. Sus antecedentes son increíbles. En resumen: es peligroso, capitana.

SANDOZ

Los fríos pueden usar el neón para mutar sus células y curarse ¿no? ¡¿Cómo podemos tener tan mala suerte?

GERTRUDE

No es normal que haya un Neonomante capitaneando una nave. Son escasos. Esto me da mucho que pensar.

RAFIA

¡Pues ahora no es el momento de reflexiones, vieja!

CAPITÁN

(con voz rasposa e incorporándose)

Así que no era broma. Nos dijeron que no nos tomáramos a la ligera la misión de escolta y no quise escucharles.

Comienza a andar lentamente a alrededor de la sala. GERTRUDE y SANDOZ hacen lo mismo. Ambos bandos miden sus fuerzas.

CAPITÁN

Ya me parecía extraño que hubiesen solicitado que fuese yo, específicamente, quien liderara la misión.

GERTRUDE

Sí, muy raro.

CAPITÁN

Así que había una Verde implicada...

GERTRUDE

(hablando más para sí que para él)

Y ella lo sabía. La Coronel lo sabía.

CAPITÁN

(mirando al techo)

Control, ¡Avisa a seguridad!

CLEMENCIA

(susurrándole a GERTRUDE)

¡Lo lleva claro! He intervenido las intercomunicaciones y su Inteligencia artificial está "indispuesta"

Al cabo de unos segundos el Capitán parece darse cuenta él mismo de lo acontecido.

CAPITÁN

¡Maldita sea!

Busca su Fulminador, pero con un latigazo preciso, GERTRUDE se lo arranca de la mano y lo tira lejos.

GERTRUDE

Capitán, esa no es forma de tratar a sus mayores.

(sonríe)

El cuerpo del CAPITÁN ALTAIR comienza a iluminarse levemente, su epidermis muestra vetas violetas.

CAPITÁN

No tengo por costumbre subyugar a ancianas, pero es bueno salir de la zona de confort.

Entonces salta hacia delante, y estira su brazo, este envuelto en un halo púrpura comienza a deformarse, GERTRUDE y SANDOZ casi pueden ver como la piel y el tejido muscular se entremezclan intentando reordenarse de la mejor manera posible. Ahora el brazo mide casi medio metro de largo, ha casi duplicado su tamaño y los dedos finalizan en uñas torcidas y afiladas.

Parte del guardapolvos de GERTRUDE es desgarrado, pero GERTUDE consigue tirarse al suelo a tiempo, agarra una de las zarpas con el látigo de neón candente y cuando la tiene retenida le clava uno de sus puñales luminosos. Con un berrido el CAPITÁN hace crecer el diámetro de su brazo aún más y se zafa de la lazada, con un salto atrás retira el bazo. El miembro convulsiona y como si sus propias células escupiesen el cuerpo extraño, la daga sale disparada. GERTRUDE poniéndose en pie se percata que la herida de neón en la palma de la mano monstruosa está comenzando a cerrarse.

EL CAPITAN hace mutar la otra mano, esta se vuelve grande, gruesa, dura. Con el puño cerrado, semeja una maza. GERTRUDE rueda por el suelo una vez más y la evita. Pero cuando vuelve a centrar su atención, el brazo martillo está a punto de caer de nuevo sobre su pecho. Es entonces cuando otro puño plagado de circuitos luminiscentes impacta contra el dorso de la mano pétrea y la desvía justo a tiempo, haciendo que ALTAIR se desequilibre y trastabille. El brazo salvador pertenece a SANDOZ.

SANDOZ

¡Arriba, vieja chocha!

GERTRUDE aprovecha para ponerse en pie.

CLEMENCIA

Esto es importante. Su Neonomancia usa la adrenalina como medio. Así que cuanto más en peligro se sienta, más poderosa esta se vuelve.

SANDOZ

Pues ya me dirás cómo hacemos.

(cargando de nuevo contra el capitán)

GERTRUDE

Necesitamos "apagar" su sistema nervioso o su tejido celular se regenerará constantemente. Pero mi neón ya no funcionará, se ha acostumbrado a su influjo.

El brazo desgarrador se estira hacia ella como si fuera chicle. Sandoz pone su propio brazo en modo escudo y salva el ataque consiguiendo desviar el apéndice. Luego rueda hacia delante. Su escudo se desacopla para dar paso a su cañón de pulso. Dispara al CAPÍTÁN en el vientre. Con un desagradable gorgoteo, este es propulsado hacia atrás.

GERTRUDE hace aparecer una docena de dagas retráctiles de sus mangas y en tres movimientos las lanza clavándolas en los desproporcionados brazos del Capitan, inmovilizándolo contra la pared con la que acaba de impactar.

Las luces parpadean. El Neón Carbono del sistema eléctrico responde a la Neonomacia del hombre. Su cuerpo adquiere una luminiscencia violeta. El amasijo sanguinolento de pecho causado por el pulso de SANDOZ se cierra a una velocidad de vértigo. Con un alarido aún más bestial el CAPITÁN desgarra sus propias manos librándose de las dagas. Las heridas provocadas por esta maniobra curan casi de inmediato.

GERTRUDE hace un movimiento con la mano. El Neón que circula por las dagas responde a su llamada. Las dagas vuelven a su mano y ella las recoge con destreza circense. Pero apenas las recupera escucha la advertencia.

SANDOZ

¡Cuidado!

En el espacio de un segundo, el Capitán ha transformado sus piernas en un resorte y se ha abalanzado contra ellas con los dedos de sus grotescas manos unidos en una gran cuchilla ósea.

CAPITÁN

Si hay resistencia...

(con una sonrisa macabra)

¡Se autoriza la fuerza letal!

GERTRUDE sabe que no podrá esquivarlo, la Neonomancia y el uso del Activador la han dejado agotada. También sabe que SANDOZ intentará protegerla.

GERTRUDE

(piensa)

"Es así de estúpida."

Así que se da cuenta de que solo puede hacer una cosa. Empuja a SANDOZ fuera de la trayectoria. Mientras el filo irregular se acerca a su garganta.

SANDOZ recupera el equilibrio y grita:

SANDOZ

¡No! ¡GERTRUDE!

GERTRUDE siente la tentación de cerrar los ojos. Pero eso no va con ella. Ella mira a la muerte a la cara. Con un gesto de muñeca su látigo le rasga el pecho al enemigo que se abalanza sobre ella. Apenas un rasguño, pero algo sale volando de la pechera de su uniforme hacia SANDOZ. Es la identificación del CAPITÁN.

GERTRUDE

¡Aprovecha la oportunidad! Sigue con el plan.

SANDOZ

¡Mierda, vieja!

Entonces la garra se incrusta en su clavícula. El regocijo de la bestia con uniforme deja paso a la confusión.

El filo se ha parado justo en al tocar su garganta. SANDOZ también ha enmudecido. El rostro de GERTRUDE está ahora completamente negro, la extraña mancha de su rostro se ha extendido hasta el pecho y supura por sus poros creando una segunda piel. Durante un segundo GERTRUDE se transforma en la mujer de acero. El Capitán recula.

GERTRUDE siente palpitaciones en su rostro de nuevo y sabe que la mancha ha vuelto a replegarse. Luego siente una vibración, sabe que esa oscuridad que defiende su rostro está afectando al CAPITÁN de algún modo, haciéndole retroceder. La cara del ALTAIR refleja ahora miedo. Su Neonomacia aumenta debido a esto, eso es evidente, pero parece dudar.

CAPITÁN

¿Qué...? ¿Qué me estás haciendo?

ALTAIR sacude la cabeza, intenta despejar su mente, entonces se precipita hacia ella de nuevo, el filo óseo tiene ahora el tamaño y forma de una hoz.

CAPITÁN

¡Deja mi mente en paz!

GERTRUDE sabe que ella no es la causante. Es aquello, lo que vive en su rostro, lo que anida en su piel. Ahora sabe que está vivo. Pero los esfuerzos de esa "cosa "invasora son inútiles pues, aunque GERTRUDE ha podido ganar algo de terreno, sigue siendo un blanco fácil.

SANDOZ ha recogido la identificación, pero en vez de hacer caso a GERTRUDE prepara el cañón de pulso. Una tercera mano que ha surgido de la espalda del CAPITÁN, amorfa y poco sólida la empuja hacia atrás, SANDOZ cae al suelo y la energía del pulso se extingue.

CAPITÁN

(hacia GERTRUDE)

¡Muere, terrorista!

GERTRUDE

¡Sigue con la misión, muchacha!

(grita)

Entonces algo ocurre. GERTRUDE escucha un topetazo, y en menos de lo que dura un parpadeo ve como el militar se desploma. El Neón palpitando en su cuerpo, sus huesos y músculos recomponiéndose y tornando a su forma original, sus ojos en blanco y algunas volutas humo saliendo de la coronilla.

Al caer al suelo, GERTRUDE puede ver algo encaramado a su espalda. Es ALIMAÑA. Sus tenazas eléctricas aun chisporrotean, huele a quemado.

RAFIA

(desde el micrófono interno del droide)

Eso sigamos con la misión de una vez... ¡Ostias!

GERTRUDE y SANDOZ se acercan sin habla.

RAFIA

(entre interferencias)

Estaba esperando a momento adecuado. Solo tenía una oportunidad. Para tumbarlo de un golpe necesitaba reunir y usar todo el voltaje.

(suspira)

Creo que el bicho se ha sobrecargado.

¡Eh, Clemencia! Necesitarás ponerlo a punto.

CLEMENCIA

¿Para eso os hago juguetes, para que los rompáis?

RAFIA

(a través de las DataLens)

Chatarrera, ¿A qué esperas? La identificación.

SANDOZ reacciona y se dirige a la consola de comunicaciones, mientras GERTRUDE coge aliento y recoge al maltrecho robot y lo coloca a su espalda.

GERTRUDE

Gracias, hija...

RAFIA

(en sus DataLens)

De nada, vieja.

Unos metros más allá, SANDOZ escanea el identificador del Capitán en la consola.

CLEMENCIA

¡Portentoso! ¡Tengo vía libre! ¡Acaba de dar la orden para cambiar la formación! ¡Las Vasallas han confirmado la orden!

GERTRUDE no ha tardado en hacerse con unas esposas del oficial de Defensa y en ese momento está esposando al Capitán a una de las consolas. Se mueve despacio, dolorida.

Al terminar puede ver cómo a través de las pantallas holográficas que aún siguen intactas tras la trifulca como las etereomotrices Vasallas se han situado a la vanguardia de la Cacique dejando la retaguardia desprotegida y sin vigilancia.

CLEMENCIA

¡Estoy desviando las comunicaciones hacia la Cacique a mi terminal!¡Si recibimos alguna orden de tierra o de las Vasallas, seremos nosotros quienes al intervendremos! Les haremos creer que todo sigue según lo previsto. Al menos mientras sigamos dentro de su alcance.

SANDOZ

Apenas queda un minuto para la hora fijada. ¡Haz que la Escaramuza despegue ahora!

CLEMENCIA

Ya lo he hecho. Soy multitask. La etereonodriza ha abierto el acceso, hemos activado el camuflaje y cortado las comunicaciones por radar. Preparaos. Dos minutos para la recogida.

SANDOZ va a por su maletín oculto tras el panel de Defensa. Se quita el filtro de aire y la guarda en el bolsillo. Luego se sitúa en el centro de la estancia y extrae del maletín una pequeña placa romboidal desplegable. Extrae también una gruesa terminal de muñeca, llena de cables y botones analógicos y se la pone.

SANDOZ

¡Punto de anclaje del Focoproyector listo! ¡Esto servirá de Baliza! ¡Activaré el Focoproyector a distancia cuando esté dentro de alcance!

GERTRUDE recoge sus dagas y su bastón con ALIMAÑA a sus espaldas entra en la plataforma. La superficie de esta comienza a vibrar. SANDOZ se sube también y manipula su terminal de mano.

CLEMENCIA

¡Las trillizas están haciendo maniobras de aproximación!

SANDOZ

Esperemos que no nos vean.

GERTRUDE asiente, silenciosa. Aún a su pesar, en esos momentos su cabeza tiene demasiado que procesar.

SANDOZ la mira con preocupación.

CLEMENCIA

¡En posición en...! Cinco!

GERTRUDE suspira.

CLEMENCIA

¡Cuatro!

SANDOZ le pasa un brazo por encima a la anciana.

CELEMENCIA

¡Tres, dos!

SANDOZ

Bien hecho, vieja.

Esta hace un leve asentimiento.

CLEMENCIA

¡Uno!

SANDOZ

(a ALIMAÑA)

Y bien hecho, "pendeja".

Un eructo optimista emerge del robot.

CLEMENCIA

¡En posición!

SANDOZ activa la señal. La plataforma genera una pulsación que parece congelar el tiempo a su alrededor. Luego un pálpito de luz y después silencio, solo una sala llena de cuerpos desvanecidos, algunos aperos volcados y rotos, volando tranquilamente por el espacio a manos del piloto automático hacia el destino predeterminado. 

 A través de las pantallas holográficas se divisa un borrón distorsionado que puede o no que tenga la forma de una nave. Parece adquirir velocidad y perderse en el Éter, evitando a la flota militar. 

 La Escaramuza se pierde en la inmensidad y de ello solo es testigo la estrella Hermética con su párpado ya casi inexistente. Su luz baña los lejanos Nodos cuyos desprevenidos habitantes no parecen ser conscientes de que, en esos momentos, Los Patriarcas comienzan a despertar.