La Escaramuza, en el Puente de Mando. En algún lugar del Sector Heráldica.

El RECIANO mira a su alrededor confuso. Le han atado con un cable de circuitería grueso a uno de los asientos del puente de mando y la tripulación le rodea inquisitivamente. SANDOZ sentada en un rincón de la consola de mando, pone su pie encima de los pequeños bots de limpieza apilados que se agitan temerosos.

RECIANO

(señalando a SIÓN)

¡Culpa ser suya!

El decir que vieja pagar mucho por limpiar interior de nave.

Yo limpiar ayer y hoy. Levantarme temprano para acabar trabajo.

GERTRUDE mira con severidad a SIÓN, CLEMENCIA con desconfianza.

SANDOZ

¿Y cómo accedió al interior de la nave?

RECIANO

Él darme pulsera de código.

GERTRUDE le coge la mano, el hombre lleva una pulsera electrónica desechable, como la que a veces SANDOZ les daba a los encargados de plataforma del puerto para subir las mercancías a la nave, cuando podían pagarse ese lujo. Normalmente las pulseras estaban registradas para permitir acceso solo a ciertos lugares de la nave. La que porta el RECIANO le da acceso prácticamente a toda la embarcación.

GERTRUDE

Ha tenido la nave a su merced durante un día entero.

SANDOZ

(a SIÓN)

¡Maldito pinche pendejo!

(SIÓN se rasca la cabeza)

¡Podía habernos afanado la nave!

(da un pisotón a los bots sin darse cuenta y estos gimen, curiosamente también el RECIANO gime)

RECIANO

Yo estar limpiando cuarto herramientas. Yo escuchar pisadas, cuando darme cuenta, chaval cerrar escotilla y dejar encerrado.

GERTRUDE

(pregunta a SIÓN)

¿Por qué?

SIÓN

Él tenía que venir...

CLEMENCIA

(interrumpiéndolos)

¡No podemos llevarlo con nosotros!

GERTRUDE

Ha estado encerrado en el cuarto todo el tiempo al parecer. Dudo que sepa nada de nuestra situación, ni lo que está ocurriendo. No creo que corramos ningún riesgo si le dejamos ir.

SIÓN

De hecho, sí conoce nuestra situación.

RECIANO

(sudando)

¡No! ¡Yo no conocer! ¡No saber nada!

SIÓN

(sonríe)

A través de la escotilla le conté sobre nuestro contrato y le comenté que estábamos a punto de huir de los Represores y despegar en dirección al Claustro, en busca de la guarida de la Antítesis.

DOCTOR AZALEA

¡¿Bromeas, chaval?!

CLEMENCIA

¡Mi hipótesis no parece tan descabellada ahora! ¿cierto?

GERTRUDE

(mesándose las sienes)

Si SIÓN fuera un espía ¿Por qué confesaría haberlo organizado todo?

CLEMENCIA

¿Psicología inversa?

GERTRUDE

Tontería inversa más bien. Así no actúa un espía. Puedo dar fe.

DOCTOR AZALEA

¿Así que es cierto que fuiste una espía,"capi"? ¿No fue una exageración de la tita GIRALDA?

GERTRUDE no responde.

SANDOZ

¡La pregunta es la misma! ¿Qué hacemos con él? Si lo sabe todo puede denunciarnos a la Brigadía. Y no podemos tenerlo prisionero para siempre. Ni llevarle al Claustro.

DOCTOR AZALEA

(secándose el sudor con un pañuelo de seda extraído de su bolsillo)

¡Démosle boleto!

CLEMENCIA

Por desgracia, no queda más remedio.

RECIANO

No matarme, yo no decir nada, no decir... Yo, no querer, no tener interés gobierno...

SIÓN

(se agacha a la altura del RECIANO)

Te vendría bien estar entero... podrías sonar más convincente.

RECIANO

(con los ojos abiertos)

¿Tú cómo saber...?

SIÓN se encoge de hombros y sonríe.

El RECIANO cierra los ojos y algo comienza a vibrar en el ambiente, todos lo perciben, una sensación incómoda y pasajera. Nadie le da importancia. Al cabo de un rato los robots de limpieza bajo la bota de SANDOZ dejan de moverse.

La piel del RECIANO luce más vívida, más lustrosa, su actitud más segura y su mirada más despierta.

RECIANO

Mucho mejor

(resopla un par de veces)

¿Cómo lo sabías, muchacho?

Todos fueron conscientes del cambio de tonalidad en la voz, y de la mejora en la formación sintáctica de sus frases.

SIÓN

Normalmente no hay un cómo. Simplemente lo sé.

RECIANO

Empecemos de nuevo. Cuando no estoy entero, mi... intelecto tampoco lo está.

(se dirige a GERTRUDE)

La Capitana de esta nave, presumo. Debéis saber que no tengo interés alguno en denunciaros, no soy amigo de las instituciones gubernamentales, y me importa una algarrota (31) lo que planee la resistencia.

SANDOZ

¿Ha dicho cuando está entero?

CLEMENCIA

(ignorando la pregunta)

Siento comunicaros que vuestras afirmaciones no son suficiente garantía, caballero.

SANDOZ

(grita a Clemencia)

¡Virgen de la Hemoglobina! ¡No vamos a matar a nadie porque nos lo diga una sociópata que viste las ropas de tatarabuela fallecida!

CLEMENCIA

(mirándola de arriba abajo)

Resulta hilarante, que vos os creáis una experta en "moda" ... querida compañera.

(el DOCTOR AZALEA no puede contener la risa)

GERTRUDE

(al RECIANO)

A mi tripulación no le falta razón. Supone un problema, señor limpianaves.

RECIANO

¡No soy un limpianaves!

(el RECIANO se arrepiente al instante de haber hablado)

GERTRUDE

¿Quién es entonces?

RECIANO

¿Por qué debería decíroslo?

De repente el Doctor Azalea, coge la cabeza del hombrecillo y le da un beso profundo en los labios. El RECIANO apenas lo ve venir.

Todos perciben como los labios del DOCTOR muestran un color blanco intenso.

GERTRUDE

(con picardía)

Doctor, por favor, conténgase.

SANDOZ

Había oído hablar de genofilia pero esto ya es demasiado.

CLEMENCIA

Mi corola solo muestra tal efusión "oscular" con otro hombre para satisfacer mi libido o...

para inocularle un compuesto.

DOCTOR AZALEA

(limpiándose los labios con el pañuelo)

Le he inoculado un suero de la verdad, me he trasplantado varias glándulas que me permiten producir un compuesto con propiedades similares al Pentotal Sódico combinado con barbitúricos procedentes de mis propios especímenes transgénicos.

La Brigadía daría una fortuna por hacerse con esto para sus interrogatorios.

(guiña un ojo a GERTRUDE)

Será más eficaz que los "vapores" de la "capi" y menos agotador.

(esbozando un gesto de falsa preocupación dirigida al RECIANO)

Aunque aún está en fase experimental.

El RECIANO rebulle en el asiento y crispa las manos, acto seguido bufa al notar los primeros efectos del suero.

CLEMENCIA

Perdemos el tiempo. Deberíamos probarlo con "aqueste" muchacho.

(señala a SIÓN)

El muchacho frunce los labios en dirección al DOCTOR listo para ser besado.

GERTRUDE le pone una mano en la cara y le empuja a un lado.

GERTRUDE

A lo que íbamos.

(Dirigiéndose al RECIANO)

Te lo preguntaré de nuevo.

¿Quién eres, hombrecillo?

RECIANO

No soy un hombrecillo, tengo 35 años. Me llamo FINNEGAN TIRR, Profesor FINNEGAN TIR del Nodo Filigrana. Mis amigos me llaman FINN. Soy un Arqueólogo Esotérico. O al menos lo era.

(FINNEGAN se muerde la lengua. De nada le sirve)

CLEMENCIA

Un experto en la Era Patriarcal y las Reliquias...

Todo el mundo gira la cabeza hacia SIÓN sin poderlo evitar.

SANDOZ

Ya, y limpia naves en el espaciopuerto como pasatiempo dominical.

FINNEGAN

Tengo mis motivos para ello, sobre todo supervivencia.

GERTRUDE

Y mercancías jugosas...

(El RECIANO calla con esfuerzo)

Mercancías antiguas, de valor histórico que pueda vender al mejor postor, coleccionistas, proveedores del mercado negro o incluso a los hijos de Gevaudán.

RECIANO

(suda profusamente)

Estudio esas antigüedades, completan mis investigaciones...

SANDOZ

¡Así que un saqueador! ¡Y va y ronda por nuestra nave a sus anchas! ¡Por eso curioseaba en el cuarto de las herramientas! ¡Seguro que registró el almacén!

RECIANO

Solo me interesan las Reliquias... nada más. Pensaba hacer el trabajo por el que me habíais contratado de todas formas...

Y sí, admito que vendo las Reliquias... ¡A precios asequibles y solo a quienes les vayan a dar buen uso!

(piensa unos momentos)

Excepto si se trata de una comunidad muy necesitada... en ese caso son gratis.

GERTRUDE

(levantando una ceja)

Conmovedor.

DOCTOR AZALEA

Mi suero no tiene fallas. Así que dice la verdad.

SANDOZ

¡Qué tontería, las Reliquias no tienen valor más allá del histórico! Sin un Canon no pueden activarse.

FINNEGAN

(sonriendo y con las pupilas dilatadas)

Biológicamente sí, pero, existen aparatos... prototipos prehistóricos, que permiten usar muchas de las reliquias a través de su interfaz.

CLEMENCIA

(levantándose de golpe)

¡Bromeáis caballero!

FINNEGAN

(ahora habla con pasión)

En absoluto, en eso consiste mi investigación. Yo mismo estoy replicando esos aparatos basándome en planos antiguos y referencias técnicas.

(reflexiona unos instantes)

Esto les ofrezco. Déjenme libre y yo mismo les haré llegar uno de estos aparatos.

Imagínense usar Reliquias en su propio beneficio ¿Qué me dicen? ¿Hay trato con el viejo FINNEGAN?

Todos quedan pensativos.

GERTRUDE

Tentador, pero un traficante, por muy docto que sea, es un traficante. No inspira precisamente confianza.

SIÓN

No nos darás el aparato ni las Reliquias. No cumplirás el trato, porque temes que no los usemos para buenos fines.

FINNEGAN

Yo no pienso que...

(aprieta los puños)

No, no pienso dároslo... ¡Mierda!

DOCTOR AZALEA

Ni intentes mentirnos, mi compuesto no te induce en un relajamiento hipnótico como otros sueros, sino que ha sido mejorado para inhibir tu capacidad de ocultar información, aunque pongas todo tu esfuerzo en ello.

FINNEGAN

(sonrojándose)

Suelo ser bastante honesto igualmente.

SIÓN

Hay una parte de nuestra misión que no te conté.

(se acerca a FINNEGAN)

Quería enseñártelo en persona.

Antes de que nadie pudiera impedírselo, SIÓN libera al Orbe Psiónico y lo deja flotar a su alrededor. El Orbe observa y analiza a FINNEGAN unos segundos, ejecuta un movimiento que todos perciben como señal de asentimiento y se funde nuevamente con la espalda de SIÓN.

FINNEGAN

¡Una reliquia de Primer Orden!

GERTRUDE

¿Conoces esta Reliquia en concreto?

FINNEGAN

¿Qué hace un Canon como tú aquí?

¿Qué tienes que ver con estos forajidos y la resistencia?

DOCTOR AZALEA

¡Hey, tronco! ¿A qué vienen tantas preguntas?

FINNEGAN

La Cuaterna y Gevaudan llevan detrás del Nodo Psiónico mucho tiempo. Está en su lista de prioridades. He oído mucho y visto mucho, he hecho recados para hijos de Gevaudan y limpiado sus naves... murmuran que está mencionada en una de las Directivas.

GERTRUDE

(haciendo una mueca)

¿Ordenes de los Patriarcas eh?

FINNEGAN

(mirándola con enfado)

¿Otra que piensa que el Patriarcado es un cuento de niños eh? Una religión pasada de moda o algo así...

(los mira uno a uno)

Pues la historia antigua dice que se equivocan.

SANDOZ

Cuentos aparte ¿Por qué tienen tanto interés en el Orbe los miembros de la Cuaterna?

FINNEGAN

No lo sé. Tienen interés en todas las Reliquias sobre todo de Primer Orden, pero esta Reliquia parece ser muy importante... Solo una reliquia de Primer Orden puede fusionarse así con su portador.

SIÓN

(dice con alegría)

Ellas me secuestraron.

FINNEGAN

¿Le han arrebatado una Reliquia a Gevaudán? ¡Con razón les persigue la Brigadía!

¡Genial! ¡Estoy en una nave de suicidas! ¿Por qué les preocupa que yo les delate? ¡No durarán mucho con vida!

GERTRUDE

Nos subestima profesor...

Hagamos un trato. Será nuestro "rehén", será tratado como un invitado hasta que lleguemos a nuestro destino y nos ocuparemos de que allí se le profese el mismo respeto. A cambio, podrá estudiar este Orbe todo lo que quiera.

FINNEGAN piensa, piensa durante varios segundos.

FINNEGAN

Sería fascinante, ciertamente, aunque de poco me serviría si me llevo esos conocimientos a la tumba.

SIÓN

FINNEGAN, tengo que pedirte un favor. Divídete.

FINNEGAN

¿Con que fin?

GERTRUDE

SIÓN ¿a qué te refieres?

SIÓN

Él es especial.

(contempla al resto)

Como todos nosotros.

SANDOZ

(ojeando a CLEMENCIA)

Algunos son más "especiales" que otros.

GERTRUDE

Así que especiales ¿eh?

(Tras sostenerle la mirada a SIÓN unos minutos, le pregunta a FINNEGAN)

¿Y en qué sentido es usted especial, profesor?

FINNEGAN

(gruñe, resistiéndose un buen rato, al final, agotado, habla.)

En mis expediciones, cuando aún era un reputado arqueólogo. Hice un hallazgo, uno que me quitaron de las manos.

Ese hallazgo arqueológico, ese artilugio antiguo, aún...digamos, conservaba emanaciones en su interior.

SANDOZ

¿Emanaciones?

FINNEGAN

Residuos de algo antiguo, un compuesto extraño. No sé cómo llamarlo... el caso es que... afectó a mi sinapsis. Ahora puedo dividir mi mente... mi espíritu, dirían algunos, y adherir un fragmento a un objeto o cuerpo inorgánico. Lo descubrí de la peor manera posible, creedme.

SANDOZ

(boquiabierta)

¿También con máquinas?

FINNEGAN

Artefactos mecánicos, sobre todo. Sí. Siempre y cuando no posean una programación o fuentes de energía... Sino la IA nativa podría corromper mi mente o la alimentación del aparato freír mi sinapsis.

Resulta más efectivo y menos agotador con materiales no procesados, herramientas u objetos sencillos. Cuanto más primitivos mejor.

CLEMENCIA

¡Fascinante! ¡Verdaderamente fascinante!

(acercándose emocionada)

Ahora sí que voto por no matarle.

(señala a los bots de limpieza inactivos)

Presumo que por tal motivo los bots dejaron de funcionar. No eran bots, solo carcasa, chatarra con ruedas, no poseen programación. "Vos" erais la programación.

FINNEGAN

Si el objeto al que me adhiero posee partes articuladas o algún tipo de función propia, puedo ejecutar ciertas acciones limitadas... Pero al dividirme pierdo lucidez... sufro una especie de proceso involutivo de la cognición...

SANDOZ

¡Vamos, que se vuelve más idiota!

FINNEGAN

(gruñendo)

Muy sutil.

(suspira)

Incluso después de todos estos años no lo controlo del todo. Si estoy mucho tiempo dividido mi mente puede quedarse en ese estado para siempre, sin mencionar que se activa solo en momentos de estrés entre otros muchos inconvenientes. Debido a ello no abuso de su utilización.

CLEMENCIA

¿Durante vuestra posesión de qué tipo de cosas sois consciente?

FINNEGAN

(intentando ser escueto en su respuesta)

De algún modo puedo percibir estímulos sensoriales, aunque el objeto poseído no disponga de órganos receptivos. Más que ver u oír en el sentido tradicional... simplemente soy "consciente de las cosas".

GERTRUDE

(claramente sorprendida)

Supongo que le ha sido muy útil para el espionaje. Dejar una parte de su mente adherida a cualquier objeto cotidiano y esperar que alguna conversación jugosa acontezca en las inmediaciones.

FINNEGAN

Veo que usted también sabría sacarle partido a mi habilidad. Por desgracia, el objeto poseído no puede estar muy lejos de mí.

SIÓN vuelve a hacerle la súplica silenciosa a FINNEGAN posando la mano en su pierna, entonces extrae el orbe que flota a la altura del rostro de profesor.

SIÓN

Adhiérete al Orbe, con tanta consciencia como puedas, hay algo que debo enseñarte...

FINNEGAN

No puedo. Por mis estudios sé que el algunas Reliquias gozan de inteligencia propia. Podría destruir mi consciencia.

SIÓN

¿Inteligencia propia? No exactamente... el Orbe... digamos que no funciona como otras máquinas. Él preservará tu mente y la guiará.

FINNEGAN

¿A qué te refieres?

SIÓN

La curiosidad constituye tu mayor virtud y tu mayor debilidad. ¿Quieres estudiar el ORBE? He aquí tu única oportunidad de hacerlo de cerca.

SANDOZ

¿¡Qué vas a hacer, pinche enano!?

GERTRUDE alza una mano pidiendo silencio, interesada en lo que está a punto de acontecer.

FINNEGAN

(tras morderse los labios)

No tengo más remedio, por lo que veo....

SIÓN le sonríe. FINNEGAN asiente y cierra los ojos. Todos perciben una vibración en el ambiente. La piel de FINNEGAN se vuelve cetrina, su expresión perdida, la mayor parte de su mente ha viajado hacia el orbe.

La Reliquia levita hasta el techo de la nave y empieza a dar vueltas. De repente ante la sorpresa de todos, se produce un estallido de luz.

Cuando la ceguera debido al deslumbramiento se atenúa, GERTRUDE distingue a FINNEGAN inconsciente aún atado a su silla y a SIÓN arrodillado en el suelo cogiendo bocanadas de aire.

El DOCTOR AZALEA toca el cuello de FINNEGAN.

DOCTOR AZALEA

Un desmayo, nada más.

SIÓN

(resopla)

Se recuperará.

Os prometo que cuando despierte estará de nuestro lado.

GERTRUDE parece la única capaz de mirar al muchacho sin inquietud. Pero no sin intriga.

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(31) Algarrota: Tubérculo del Nodo Mazorca con el que se hacen diversos dulces y masas en repostería.