La entrevista volvió a reabrirse después de la pausa inesperada y todos parecían preparados, menos Clari. Ella estaba ocupada pretendiendo cantar Breathe For You aunque no supiera cantarla realmente y solo estuviera diciendo cosas sin sentido, al menos hasta que el señor Chae carraspeó la garganta para interrumpirla e impedir que invocara a algun ser maligno.

— Este... —se acomodó en el asiento— ¡continuamos con las preguntas! Nos quedamos con... —revisó su papel— Wonho, aún hay mas preguntas para ti.

El aludido puso cara amarga como si había probado un limón.

— ¿Por qué yo? —se quejó en medio de un lloriqueó, apoyando su frente en el hombro de su esposo.

— Bueno, les diré... —hizo un puchero— algún día.

Didi rodó los ojos.

— Desde que era pequeño me la pasaba observando a mi padre trabajar en esa area, así que supongo que se convirtió también en mi pasión... —sonrió— además mis obras se ven genial, ¿no es así HyungHyung?

Hyungwon arqueó una ceja.

— ¿Haz hecho algo antes? —cuestionó dándole justo en el corazón— no he visto.

Formó un puchero.

— Te enseñé mis diseños... —susurró con bastante dramatismo— se supone que debes saber...

Hyungwon rodó los ojos.

— Me refiero a algo real. —aclaró— no he visto nada de eso aún.

Una bombilla se encendió en su cabeza.

— ¿Te gustaría verlos? Solo tienes que volver conmigo a mi pais... —puso una cara coqueta.

Hyungwon suspiró.

— Siguiente pregunta por favor.

— ¡HyungHyung! —reclamó cruzando los brazos.

— Uh, una pregunta interesante... —susurró Hyungwon acomodándose en la silla para verlo mejor, al tiempo que cruzaba los brazos.

Wonho lo miró de reojo un poco nervioso.

— Yo... Bueno... —se rascó la cabeza y miró hacia sus padres— si... Pero no...

Todos fruncieron el ceño.

— Así que el excremento con ojos ya había estado con chicos antes... —comentó Samuel con diversión.

— ¡Claro que no! —gruñó— tal vez solo había dado alguna que otra mirada... ¡Pero nada más! Siguiente pregunta...

Miró a Hyungwon de reojo y sonrió con nervios al notar la mirada del delgado diciéndole sin palabras exactamente lo que tenía que responder.

— Gracias, pero soy casado... —susurró.

Samuel soltó una carcajada y el resto no sabía como reaccionar.

— Mandilón. —comentó Wooji.

— ¡Mamá! Solo estoy siendo buen esposo... —respondió— por favor acabemos con este sufrimiento...

— ¡¿Cómo lo supiste?! —preguntó emocionado— bien, bien... La contaré. —carraspeó su garganta— Changkyun fue mi compañero en la universidad, era un nerd y en general no bebía con nosotros, pero en la fiesta de graduación lo obligamos a tomar una copa, lo que nadie sabía es que el pobre se embriagara solo con eso... —soltó una risita— la parte mas graciosa es que se volvió muy serio estando ebrio, definitivamente no era la reacción que esperabamos de un ebrio, así que apostamos que no haría una tontería. Él nos cuestionó qué queríamos que hiciera, así que a otro amigo se le ocurrió la canción del pollo... —se aguantó la risa— El tonto se apartó del grupo por 20 minutos para aprenderse la canción como el nerd que era y sabrá Dios a quien le robó la ropa, cuando volvimos a verlo estaba frente a todos bailando la canción que le pidió al DJ que pusiera... —suspiró— no me preguntes de donde sacó el dildo que usó de micrófono.

Suspiró.

— Pero yo... —agachó la mirada— no quiero cancelar la boda...

Todos lo miraron con el ceño fruncido.

— ¿Qué? —preguntó Samuel casi al unísono con Hyungwon y Didi.

No hubo más respuesta.

— Tengo una madre que eructa como rana de pantano y un padre que quiere heredar su empresa a un tipo que le cantó la canción del pollo. O sea mi vida ha sido un desastre muy genial. —sonrió— tuve una buena infancia, al menos hasta que comencé a preocuparme por caerle bien a los demás. Mis padres siempre han cuidado bien de mi...

No se contuvo y se levantó de su silla solo para ir a abrazar a ambos señores.

Clari estaba limpiandose las lagrimas sentimentales en silencio, hasta que se dio cuenta de que la ronda de preguntas para Wonho por fin había terminado.

— ¡Bien! ¿Quién será el próximo? —todos se miraron entre sí— ¿Hyungwon? ¿Samuel? ¿Dasom?

— Yo iré... —comentó Samuel— solo sueltalo.

Sonrió con coquetería.

— ¿Alguien en mente? Quizá a ti, preciosa. —guiñó un ojo— puedes pretenderme, lo acepto... Y mi bebida favorita es el French 76, no lo conocía sino hasta mi noche de bodas con Hyungwon... —se quedó pensativo, Hyungwon se tapó la cara y Wonho se puso rojo de enojo— ahora que lo pienso, el Mocca que prepara Hyungwon también me gusta mucho.

— ¿Por qué tienes que elegir cosas que tengan que ver con él? —gruñó el celoso Wonho.

Samuel sonrió y se encogió de hombros.

— Solo digamos que... —ensanchó su sonrisa— su sabor es inolvidable. —Wonho gruñó como perro— El de las bebidas digo.

El contento Samuel sonrió aún más e hizo una señal para continuar. Parecía que su propósito en la vida era alterar a Wonho y sabía muy bien como hacerlo.

Frunció el ceño.

— Eh... No.

La sonrisa volvió a su rostro.

— Quizá... —susurró pareciendo inocente.

— ¿Con qué derecho? —le reclamó Wonho.

Samuel se encogió de hombros.

— Con el derecho de las ganas que me salen de los huevos. —respondió tranquilamente— siguiente pregunta.

— ¿Quién dice que no lo hice? —preguntó sorprendiendo a todos los presentes— ¿Cómo no podría enamorarme de él siendo como es? También soy humano, pero... —suspiró conectando su mirada a la del sorprendido Hyungwon— incluso un imbécil como yo sabe enmendar sus errores. Hyungwon se merecía a alguien mejor. —apartó la mirada— Y sobre lo demás... Soy sincero y quería que me odiara porque quizá esa sería la manera en la que podría desligarse de mi y buscar a alguien más. Después de todo, ya tenía el título de ser el malo... —sonrió levemente— aparte ya lo he dicho, soy adicto a su café. Es su culpa.

— Idiota. —susurró Wonho— menos mal que eras consciente que necesitaba alguien mejor... —sonrió con orgullo.

Samuel asintió.

— Si, pero por desgracia llegaste tú a cambio. —suspiró apesarado.

— ¡Tú! ¡Hijo de... —fue sostenido por Hyungwon.

— Siguiente pregunta. —susurró el delgado, cansado de estar deteniendo las peleas entre ambos mayores.

Sonrió levemente.

— ¿Acaso importa ahora? —preguntó en respuesta.

— Bueno, hay varias cosas que responder a esto... —se quedó pensativo— una de las cosas es que la sinceridad puede hacerte quedar como el malo o como el bueno depende de la perspectiva. Si la verdad duele, tú serás el malo. Si la verdad gusta, tú serás el bueno. —se encogió de hombros— admito que a veces he jugado a ser el malo, pero todo ha tenido un motivo.

— Es normal, soy genial. —comentó sin tapujos.

Didi rodó los ojos y el señor Chae carraspeó la garganta.

— Engreído. —comentó la chica pero él simplemente rodó los ojos.

— Eh... ¿Siguiente pregunta?

Suspiró.

— Porque sé que si se va, las cosas pueden ir peor... Él no será feliz. —ladeó una sonrisa— ademas...

Guiñó un ojo.

Wonho soltó una risita de sarcasmo.

— ¿Quieres que te abandone y luego te humille? Buena elección. —se burló.

Samuel rodó los ojos y sonrió.

— Si me ahuyentas a todo el mundo diciendo algo como eso, te robaré a Hyungwon. —amenazó con el dedo— es mejor qur guardes silencio.

Hyungwon frunció el ceño.

— ¿Qué?

Wonho abrazó a Hyungwon y lo atrajo hacia él.

— No hables con él. —gruñó— ¡Siguiente pregunta!

— Mmm... —soltó una risita— Touché...

Guiñó el ojo y miró a Clari quien se estaba dando aire con un abanico por el derroche de coquetería.

— ¿Ya? —preguntó sorprendida— ¿esas son todas las preguntas? ¿Tan poquito? —se escuchó un carraspeo de parte de Wonho y ella se enderezó— quiero decir... Sigamos adelante... Claro, despues de otro break... —se abanicó de nuevo— creo que necesito refrescarme.

La risita de Samuel se escuchó al ver la cara de Wonho mientras abrazaba a Hyungwon contra él, tomandose muy en serio la palabra de Samuel. No iba a permitirle que le robara a HyungHyung... ¿O sí?

•— Volveremos pronto —•