Capítulo Treinta y Seis
Maratón por Semana Santa :P (1/4)
Capítulo 36
«Al parecer...ya no me necesitas más» repitió Liam mientras esperaba el ascensor. Los parpados los tenía caídos, al igual que su sonrisa y su entusiasmo. ¿Qué sucedía con él? Ni él sabía la respuesta.
La puerta se abrió, y en eso, una voz conocida le saludó.
—¡Liam! ¡Hola!
—Oh, Susan...Hola—respondió este acompañándola en el ascensor.
—¿Pasó algo?—preguntó la doctora al notarlo apagado.
—¿Ah?...No.
Pasaron largos segundos para que Susan llegará a su destino. La puerta se abrió, y ella viendo que Liam seguía mudo desde que entró al ascensor, salió despidiéndose con la mano; sin embargo, antes de que diera un paso más, Liam le habló.
—Mi madre me dijo que irás a visitarla esta semana.
—¿Eso dijo...?—preguntó avergonzada, ya que temía que aceptando la oferta de Judith, Liam pensara que estaba desesperada por estar con él—¿Estás molesto?—volvió a preguntar al ver que él no decía nada.
—No—negó mirándola a los ojos—Al contrario, iré contigo.
***
A pesar de que la fría brisa que cubría la ciudad londinense no entraba a los edificios por la calefacción, el séptimo piso del hospital donde las Wood y Jules se encontraban, resultó ser la excepción. Los tres quienes se sostenían de la mano esperando a que el Doctor saliera de la habitación, empezaron a sentir frio.
—¡¿Por qué diablos hace tanto frio aquí?!—gruñó Jules mientras sacaba sus guantes del bolsillo. Giró a ver a las chicas, y viendo que Maggie era la que se congelaba más, le entregó sus guantes—Toma. Tú los necesitas más que yo.
—¡Gra-Gracias!—exclamó emocionada al recibirlos.
«Su aroma...» deliraba la niña al tocarse las mejillas coloradas con los guantes puestos «Cierto, ¿por qué no aparece el señor Liam todavía? ¿No habrá recibido mi mensaje? ¿O estaría ocupado?»
—¡Rosa! ¡Rosa!—gritaba un joven acercándose a los chicos.
—¡Liam!—se levantó inmediatamente de su asiento—Oh...Richie—se acercó al joven agitado—Estás sudando.
—El ascensor estaba ocupado, así que subí las escaleras lo más rápido que pude. ¿Y... cómo estás?—le preguntó tomándola de los hombros.
—Tengo miedo, Richie—respondió entre sollozos.
—Yo también. Yo también...
De repente, la puerta de la habitación 707 se abrió. Los cuatro jóvenes inmediatamente se acercaron a la primera persona que salía de allí, el doctor.
El doctor sintiéndose acosado por sus miradas, decidió ser rápido con su respuesta.
—Hicimos lo que pudimos—anunció agachando la cabeza.
«¡¿Qué?!»
El corazón de Rosa al igual que el de Richie, se detuvieron por un segundo.
—No logramos revivirlo. Lo siento—Richie y la pequeña Maggie al oír la noticia rompieron en llanto—Necesitó saber el nombre de un familiar o algún apoderado para firmar los papeles de defunción.
—Yo lo haré—indicó Ricky aun sin poder comprender que su mejor amigo...había fallecido.
«¿Por qué? ¿Por qué?» se preguntaba Rosa mientras observaba a su amigo entrando a la habitación «¡¿Por qué... Colin?!»
Jules mientras abrazaba a la hermanita de Rosa llorando desconsoladamente, no sabía cómo consolar o la chica que tenía en frente. Solo la observaba apenado, esperando a que se desahogara entre lágrimas al igual que su hermana para que el dolor se desvaneciera rápidamente. Sin embargo, Rosa no mostraba ninguna emoción. Su mirada al igual que su postura, estaban congeladas.
—Rosa...—intentó Jules tomarla de la mano.
—Entren ustedes. Quiero estar sola, por favor—suplicó dándoles la espalda.
—Está bien—asintió el otro mientras seguía a Maggie hacia la habitación.
Al escuchar la puerta cerrarse, sin pensarlo dos veces, se escapó de allí. Quería estar lo más lejos de ese hospital. No quería ver como se llevarían el cuerpo de Colin de la habitación. No quería ver a sus amigos llorar y en especial a ella misma. Estaba cansada y frustrada. No se sentía capaz de ver a su amigo muerto, sin haber tenido la oportunidad de decirle un gracias o un... adiós.
Rosa necesitaba desaparecer, volver al pasado o despertar de esta tormentosa pesadilla, para volver a ver a Colin sonreír mientras la llamaba..."Ross".
***
Habían pasado cuatro días desde la muerte de su mejor amigo. Hace dos días habían enterrado a Colin en el Cementerio de Highgate. Como era de esperarse, sus padres estuvieron ausentes en la ceremonia. Su madre tenía otra familia y su padre estaría en alguna parte de Londres, ebrio y podrido por dentro. Si ni velaron por su hijo vivo, era inútil que fueran a decirle el último adiós a su hijo. Sus amigos más cercanos y "sus amiguitas" asistieron al entierro. Todos, a excepción de su... mejor amiga.
Desde que Rosa había dejado el hospital, ninguno de sus amigos lograba contactarse con ella. Sus amigos más cercanos—Richie y Jules—sabían que estaba con los Gilmour, pero ni con ellos quería hablar.
Desde que regresó a la mansión, Rosa no había vuelto a salir de su dormitorio. Aún seguía dolida, frustrada, impotente y desconectada del mundo. No quería comer, y mucho menos hablar con alguien. ¿Qué podrían hacer los Gilmour para sacarla de ese castigo?
—¡No puedes estar encerrada toda tu vida!—exclamaba Judith, quien cansada de tolerar la privacidad de su mono, decidió usar la llave "maestra" de la casa para abrir por una vez por todas esa puerta.
Al abrir la puerta, encontró a Rosa sentada en su cama mirado hacia la ventana. De una manera escalofriante...
—¿Rosa...? Ven a almorzar con nosotros.
—¿Liam está abajo?—preguntó con una voz apagada.
—No, aún no ha regresado. Estuvo aquí todos los días esperando a que salieras de tu dormitorio, pero hace media hora lo llamó uno de tus amigos, un tal Richie.
—Richie
—Sí, ese. Bueno niña, ya es hora de que salgas de aquí. Tienes que seguir con tu vida. Aun eres joven, no debes deprimirte.
—No es fácil volver a sonreír...Acabo de perder a mi mejor amigo.
—Ay, Rosa...—suspiró sentándose a su lado—Yo también perdí a mi mejor amigo hace unos cuantos años atrás. El dolor de saber que nunca más lo tendrás a tu lado, es inexplicable. Sin embargo, recordar todos los buenos momentos vividos a su lado, te satisface, porque a pesar de que el tiempo es muy corto, sabemos que fuimos alguien especial en la vida de esa persona. Lo acompañamos en los buenos y hasta en los malos momentos. Nos reímos y nos peleemos, pero nunca nos separamos. No todos tienen ese privilegio, Rosa. Solo los valientes.
—Señora Judith...
—¿Te conmovieron mis palabras?—Rosa asintió entre sollozos—Imagínate yo ganando un Tony o un Oscar, mis discursos harían llorar a todos los espectadores. ¡Me adorarían!
—¡Tampoco exageré! Señora Judith... Gracias.
—¿Entonces, vendrás a almorzar?—preguntó regresando hacia la puerta—Extraño verte comer como bestia en la mesa.
—Iré—sonrió mientras intentaba secarse las lágrimas—Antes de levantarme de la cama, quisiera hacerle una pregunta.
—Dime.
—¿Alguna vez se enamoró de su mejor amigo...?
—Sí, fue mi primer amor y el único.
—Eso... quiere decir que... él era-
—Así es.
—El padre de Liam.
***
—¡Bienvenido a casa, hijo!—saludó Judith desde el comedor—¿Te sirvo tu almuerzo?
—Sì, por favor—respondió dejando su abrigo en el sillón—Sabes si Rosa ha salido de su...¡Rosa!—exclamó sorprendido al notarla almorzando al lado de su madre.
—¡¿Què?! No grites, que estoy cerca.
Liam viendo que tenía de vuelta a Rosa, se acercó a ella y la miró con ternura.
—¿Por qué me miras así? ¡No te daré mi comida!
—Aquí tienes, hijo.
—Gracias, mamá—tomó asiento al lado de Rosa y empezó a comer.
Mientras comía lentamente su almuerzo, no podía evitar mirar de reojo al pequeño mono de su madre. Estaba muy contento de verla actuando como antes. Sin embargo, también había tristeza en sus ojos, cuando recordaba que él no estuvo con ella en el hospital, sino Jules... Si fuera por él la hubiera abrazado como nunca hace un par de minutos al volver a verla. Tal vez Rosa no lucía elegante, a decir verdad lucía desaliñada, sucia y hasta apestosa, pero para los ojos de Liam se veía... linda.
—¡Terminé! ¡Gracias por la comida! ¡Estuvo deliciosa!—exclamó Rosa mientras se levantaba de la mesa—Iré a cambiarme de ropa.
—Te sugiero que te bañes también—indicó Judith colocando los dedos sobre su nariz— ¡Apestas!
—No quiero bañarme...
—¡No seas un mono sucio!
—Rosa—terció Liam—Toma.
—¿Y esto?—preguntó al recibir una especie de sobre. Le dio la vuelta al papel y en eso leyó:
"Para Ross"
—Richie estaba en el apartamento de Colin con un par de amigos. La dueña del edificio iba a botar sus pertenecías, así que fueron a salvar algunas cosas. En eso, encontraron esta carta a tu nombre debajo de su almohada y me llamaron para entregártelo.
—Gracias...
Abrió el sobre y sacó un papel escrito a mano.
"Querida Ross:
Hola, no soy bueno escribiendo cartas... No va con mi estilo, tú sabes... cursi y todo eso. Pero esta vez... será una gran excepción. Sé que cuando leas esta carta, ya te habrás enterado sobre mi enfermedad y me verás dormido como un bello durmiente en mi cama o en mi tumba. Debes estar odiándome por escribir esto o por haber tomado la decisión de acabar con mi vida, ¿verdad? Espero que algún día me llegues a perdonar, pero era algo que debía hacer. No era feliz. No era un chico sano. No tenía padres que se preocuparan por mí. No estudiaba y lo peor era... que no te tenía a mi lado.
¿Recuerdas el día que nos conocimos? Cuando Richie me presentó a esa chica que se hacía llamar "Ross" con actitud distinta, divertida y alocada, decidí nunca apartarme de ella. ¿Recuerdas cuando tuve una gran discusión con mis padres y fuiste a consolarme? Ese día te convertiste en mi mejor amiga. Y... ¿Recuerdas el día que te me declaraste? Pues, yo también te quería de la misma manera.
Si no hubiera sido un chico problemas, si no hubiera estado enfermo, si hubiera nacido millonario, te habría hecho feliz. Te hubiera pedido ser mi novia y hubiéramos estado juntos para siempre. Sin embargo...no fue así. Mi vida fue una completa mierda. Lo único que me estimulaba a seguir vivo era verte sonreír diciendo "Buenos Días" todas las mañanas.
Nunca me atrajeron las chicas con "clase". Detestaba mis tatuajes. Y nunca, me enamoré de otra chica que no seas tú. Cuando te fuiste decidida a convertirte en una "Dama" me preocupó, porque aparte de saber que no te tendría a mi lado, no quería que cambiarás. Aunque...eso cambio cuando oí tu voz por teléfono diciéndome que lo harías por ti misma y no por mí. Oyendo esas palabras, podía imaginarme a una Ross doctora o hasta abogada en un futuro. ¡Quiero que cumplas tus sueños! Quiero que te enamores del chico correcto. Quiero que formes una familia, pero sobre todo... ¡Quiero que seas feliz!
Recuerda que siempre te cuidaré de donde este.
Te amo, Rosa Wood.
Colin."
—¡¿Por qué le entregaste eso ahora?! ¡Acaba de volver a la vida y con esto la volviste a destrozar!—regañaba Judith a su hijo, después de ver a Rosa derramar lágrimas mientras leía la carta.
—Perdón, pero debía ella leerlo.
—Liam—terció Rosa mirándola decidida.
—Dime.
—Llévame a Highgate, por favor.
—¿Se-Segura?—ella asintió—Ok, vayamos—dio un último bocado a su comida y se dirigió a colocarse su abrigo.
—¿Adónde creen que van? —Preguntó Judith—Tú—señaló a Liam—termina de comer y tú—señaló a Rosa—¡Báñate!
—Está bien...—respondieron ambos regresando de la sala.
Mientras su hijo volvía a sentarse a la mesa y Rosa subía las escaleras, Judith sonrió «Me alegro que vaya a visitar a su amigo Colin. Ha demostrado ser una buena amiga, se perdonó ella misma y también perdonó a su amigo. ¿Qué habría en esa carta? ¡Ay! Estoy tentada a robar esa carta, pero me contendré. Como diría William "Una carta hacia alguien especial, es confidencial"»
Volteó a ver la mesa de café de la sala, donde se encontraba su libro rosa y apoyando sus manos en su barbilla suspiró con una sonrisa más pequeña «Ay...Solo nos falta una regla más, Rosa. Y habré terminado mi trabajo».
***
All Rights Reserved. Copyright © teffo96 2015
Abuuuu un capítulo muy triste ಥ_ಥ:
Empezó la maratón por Pascuas :) Gracias nuevamente por sus comentarios y votos ♥ Y un abrazo a las personas que se tomaron la molestia de no chotearme xD y me contestaron mi preguntita. Qué emoción que mi historia sea leía por casi todo Latinoamérica ♥
Si quieres saber más cosas sobre esta historia o mis demás historias, te invito a darle LIKE a mi página de Facebook, "Teffo", allí te enterarás de muchas cosas woojojojo :) Nos vemos mañana ♥
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top