Capítulo Dos

Capítulo 2

—Está es mi humilde oficina. ¡Bienvenida!

Entró primero Liam, seguido por Rosa. Ella quedó asombrada de lo lujoso que era el lugar. Su oficina era más grande que el departamento de Colin, o tal vez también la casa de sus padres.

Tenía escasas paredes, había más ventanas que ellas. El piso brillaba de limpio, había una chimenea, sillones de cuero negro. Al medio del salón había una gran mesa redonda con varias sillas con respaldar, una era la más grande. «De seguro que es el del tío» pensó ella. Vio que Liam se acercaba a su escritorio, una mesa lisa, limpia y brillante también.

—Toma asiento.

Indicó él a Ross.

Ella hizo caso tomando asiento en el único asiento que estaba frente de él.

Liam comenzó a mirarla detenidamente, pensando qué es lo que podían hacer primero.

Rosa un poco hiperactiva empezó a tocar todo lo que había a su alrededor. Liam quería preguntarle sobre el pasado con sus padres, pero pensó que aún no era el momento.

Necesitaba quitar ese silencio incómodo, así que le preguntó:

— ¿Y dime por qué quieres ser más educada? ¿Te diste cuenta que es necesario cambiar esa actitud?

Rosa estaba jugando con los clips de la mesa que no le prestaba atención.

—¡Rosa! ¡Te estoy hablando!

Ella lo miró a los ojos y comenzó a “acomodarse”, colocó su espalda hacia el respaldar de la silla y subió las piernas al escritorio.

—Bueno, la verdad hay un chico que me gusta. Su nombre es Colin, es un chico sencillo, simpático y muy carismático. Es mi mejor amigo. Él me acogió en su casa después de que me fuera de la mía. Colin se independizó al instante que él cumplió dieciocho. Siempre me hace reír y a veces sonrojar. No le puedo mentir, ¡estoy loca por él!  Aunque ahora... ¡estoy furiosa con él!

—¿Por qué?

Preguntó mientras empujaba los pies de Rosa hacia el suelo.

—Bueno, hoy decidí declararme. Decirle por fin este sentimiento que tenía guardado, ya bastante tiempo. Pero fue en vano, me rechazó el imbécil. Dijo que no me acercaba, ni un poquito a su tipo de chica.

—¿Y para él, cómo es su chica ideal?

—Una palabra. ¡Femenina!

—Así que tú, por eso aceptaste mi propuesta rápidamente, ¿no?

—Ajá.

—Bueno, es un buen comienzo que tengas una meta, aunque no precisamente deba ser un chico. ¿Estudias alguna carrera?

—No, ninguna.

—¿Ninguna? — Respondió sorprendido.

—La verdad no quiero ir a la universidad. Pensaba ser boxeadora y esposa de Colin. Aunque soy joven para casarme, tengo diecisiete, pero no importa igual falta poco para qué cumpla dieciocho y ser por fin mayor de edad…

—Mayor de edad y sigues con esa mentalidad de niña.

Liam se levantó de su asiento y caminó hacia su librero.

—¿Qué buscas?— preguntó Rosa.

 —Ya verás… ¡Ah! ¡Lo encontré!

Él sacó un libro color rosa y regresa a su escritorio.

—Toma.

Rosa le recibió el libro.  

— "La Vida es color de Rosa", raro nombre para un libro. 

Ella abrió el rosado objeto y empezó a pasar las hojas lentamente. Contenía diez capítulos, según ella le parecían los diez mandamientos aunque no precisamente de la Biblia, sino de cómo convertirse en una Dama. Llegó a la última hoja del libro y vio un dibujo de una joven vestida elegantemente, con un collar de perlas y un hermoso vestido, exacto para su figura. Rosa  quedó embobada de cuan hermosa se veía. Volteó hacia Liam, señalándole el dibujo.

—¡Quiero llegar a ser como ella!— exclamó.

—¿Te comprometes a seguir al pie de la letra todos los pasos?

—¡Sí!

Liam sonrió, tomó el libro y comenzó a darle una hojeada.

 —Este libro le perteneció a mi madre, fue su regalo por sus quince años. Fue su libro favorito, siguió al pie de la letra y pensó que tenía que compartir esto con su hija...

—¿Con tu hermana?— ella interrumpió.

—No, no tengo. Mi madre le hubiera encantado tener una hija, pero no.

—¡Uh!

—No te preocupes, no es para sentirse triste. Mi madre igual me lo entregó y quiere que se lo dé a mi esposa o sus nietas.

—¡Qué linda la seño! ¿Y tú lo has leído? ¡Claro, por eso está en tu librero! ¿Es uno de tus libros favoritos, no? ¿Aprendiste a ser toda una dama?— preguntó con ironía.

«Sí es uno de mis libros favoritos...» pensó Liam avergonzado.—¡Qué graciosa!— exclamó.

—¿Y sabes, por qué ese ridículo título?

—¿Ridículo? A mí me parece brillante. Lo que pasa es que tú no has empezado a leerlo. No has escuchado la frase "La vida NO es color de Rosa", ya que en verdad la vida es dura.

— No, nunca.

— Bueno, existe esa frase. La autora borró el "NO" ya que sí puedes lograr a tener una vida feliz, si te propones a darle un toque femenino a tu vida.

—¿Y eso incluye hombres también?

— Esto... ¡No! Es para público femenino. Bueno, empecemos a leerlo.

***

Al frente de "Gilmour's", se encontraba la tienda departamental "King's", otra de las grandes empresas de Reino Unido y de Europa.  Además competencia desde ya casi un siglo.

Su actual CEO de tal empresa es Jules King, un joven no mayor de veinticinco años y único heredero del bisnieto del fundador.

¿Enemigos?

Ambos fundadores, de "Gilmour's" y "King's" eran amigos desde la universidad, ambos estudiaron administración empresarial, y decidieron unir sus conocimientos para poder formar su propia empresa, volviéndose ambos socios. Aunque al final toda esa idea se vino abajo, cuando ellos tuvieron una gran discusión por no decidir el nombre que llevaría su empresa. ¿Sería "G&K" o "K&G"? Al final no decidieron nada, ya que ambos querían la inicial de su apellido primero. Desde ese día dejaron de ser amigos y comenzaron a crear sus propias empresas independientes.

Dio la casualidad de que fundaron sus empresas, el mismo día. Un primero de marzo de 1914.

Ambos ese día, se declararon la guerra.

Pasaron décadas y así continuó. Ahora sus bisnietos son los nuevos encargados de hacer sus empresas, la mejor. ¿Quién ganará?

***

Dentro de  "King's"

— Joven Jules, aquí le traigo las nuevas gráficas del rendimiento de la empresa.

El CEO recibió los papeles. Estaba cómodamente sentado en su asiento con las piernas estiradas en su escritorio, con una mano sostenía los papeles y con el otro, un puro.

El joven tiraba los papeles al suelo cada vez que terminaba de leer uno, su secretario inmediatamente iba a recogerlos. Cuando tiró el último papel, apagó su puro y se levantó enojado.

— ¿Cómo es posible que seguimos siendo la segunda mejor empresa de Reino Unido? Recién llevo dos años como jefe de "King's", ¿y solo he podido subirla hasta el segundo?

Tiró otros papeles que tenía en su escritorio al suelo, el secretario nuevamente va a recogerlos.

Jules apoyó ambas manos al borde de su escritorio.

 —Necesito recuperar el orgullo de mi empresa. ¡Gilmour's desde este año dejarás de ser el favorito del país! ¡Ya verán! ¡No me importa si debo jugar sucio! Cuídate Liam, cuídate...

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¡Primer capítulo al fin! Tercera obra que escribo :') Sí te gustó dale "VOTE"  ¡Gracias por leer! :)

PD:  El pólogo anterior, creo que es mejor que sea el capítulo uno, así que este, sería ahora el segundo jejeje :) ¡Perdonen!

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