¿En qué momento fue?

¿En qué momento
pasó que dejé
de ser una mujer?

Sólo por una mala decisión todo mi futuro,
toda mi vida cambió.

He sido abusada, maltratada, usada, y golpeada.

Me han despojado de todo mi valor. Mi cuerpo ha sido usado como un estropajo.

¿Mi único sentido es dar placer?

¿Para eso he nacido?

¿Ese es el significado de mi existir?

Busco sin encontrar un ser que me pueda respetar y querer, que me pueda ver a la cara, a los ojos antes que a mis pechos.

Que pueda pensar en mí como una persona y ya no más como un objeto de satisfacción.

Que pueda preguntar por mis sentimientos,
que me entienda y me escuche, que me pregunte: «¿qué tal tu día?»

Y que me ponga toda su atención, que me dé su tiempo, no las sobras,
no aquellos pequeños momentos al día donde esté desocupado,
o cuando esté aburrido.

Me gustaría ser yo lo primero que piensa por las mañanas al despertar.
Y ser yo el último pensamiento en su mente antes de ir a dormir.

No pido a un hombre perfecto, sólo pido a alguien que me quiera por lo que soy y no por el placer que le pueda otorgar.

Que no busque cambiarme, que aguante
mi mal humor; porque soy una persona, tengo sentimientos y así como hay días buenos habrán días malos y tengo derecho de sentirme como una mierda de vez en cuando.

Si alguien me puede querer aquí y ahora, prometo serle fiel; cuidarlo y quererlo con pasión y con locura.

Y no sólo quererlo de verdad, quererlo con mi mente, con mi corazón y mi alma.

Entregarle mi cuerpo y cada uno de mis días por el resto de la vida.

Odiaría que tomara alcohol o que fumara. Porque quiero ser yo su único vicio.

Quizás esté loca,
quizás sea este mi castigo por entregarme a quien no me merece.

Por querer a quien no me quiere, por cegarme ante las grandes verdades de la vida.

Pero mientras siga respirando, seguiré esperando y buscando.

https://youtu.be/WGXnKAQfL0o