Capítulo 5
Una vez que ya estába la mesa puesta incluidas las pizzas, éramos nosotros los que teníamos que organizarnos para poder comenzar a cenar. Estábamos esperando que James nos dijera cómo sentarnos, ya que podía ser que lo hubiera planificado al ser él el dueño de la casa. Al parecer a él le era indiferente, así que nos sentamos como quisimos. Las casualidades eran las protagonistas en esa cena, ya que Brad se sienta enfrente de Jara, ésta a su vez al lado de su hermano. Durante la cena, Brad estaba un poco extraño, parecía que algo le estaba pasando por la cabeza y además de gran preocupación para él.
Narra Tristan:
Desde que conocí a Andrea, ella ha sido la que ha ocupado la mayor parte de mis pensamientos, tendré que darle las gracias a Jara por habernosla presentado aquel día, el cual queda en el recuerdo para mí. No puedo decir que estoy enamorado de ella, pero sí que me gusta, con ese pelo tan maravilloso de color castaño claro y esos ojazos verdes que me atrapan con cada una de sus miradas, aunque no las haga de forma intencionada. Cuando yo estaba en lo mejor de mis imaginaciones y pensamientos, oigo un estruendoso ruido y pensando que era el pastel me desperté preocupado, en realidad había sido Jara que se le había roto la pata de la silla, pero estaba riéndose lo que me hizo pensar que no se hizo daño.
Narra Brad:
Ahora que la tengo aquí delante de mí, me viene a la cabeza aquello que ella dijo un día de que le gustaba alguien. No dio más información, no dijo las características del chico, ni sus gustos, ni especificó nada más. Por lo tanto no sé quién puede ser, igual es James, o Tristan u otro que yo no conozca, porque yo no creo que sea. Pero bueno, tendré que dejar a un lado esto ya que tiene que ser ella la que lo desvele. Mientras yo pensaba en eso Connor me miraba constantemente un tanto extrañado, qué debía estar pensando de mí. Pero tampoco decía nada, únicamente se echaron una descarada mirada con su hermana. Yo continué en mi mundo, hasta que Tristan vino por detrás y me dio un susto, a la vez me ofreció un trozo de pizza más.
Narra James:
María, esa chica nueva que conocí en el centro comercial, es una de las personas que mejor me ha caído desde el momento en que me la presentó Tristan. En ese momento, no pensé que llegaría a sentir algo por ella, todavía no era algo muy fuerte e insistente pero sí comenzaba a sentir algo por mi estómago, sobretodo cuando la veía. Era una chica alta, morena con una mecha roja que destaca entre el color oscuro de su pelo, con ojos azules preciosos...Además me dí cuenta que mientras hacía esa descripción no dejaba de mirarla, aunque cierto es que muchas veces pienso en ella. Cuando la veo venir es como si fuera mi alegría, siempre me saca una sonrisa. Durante la cena estaba pensando en esto, y veía como Tristan y ella misma me miraban fijamente, qué cara debía estar poniendo para llamar tanto la atención de los demás. Como María y Tristan veían que no iba a dejar de estar ausente, pues de repente dan una palmada y así logran que yo pierda la concentración de mis pensamientos, y ya vuelva a estar presente de cuerpo y también de mente en la cena.
Narra Connor:
El hecho de tener a Brad y a mi hermana tan próximos, uno enfrente del otro, y además a Brad tan pensativo que está ausente desde hace ya un buen rato provoca que ellos mismos estén dando vueltas por mi cabeza. Todo esto me pasa porque yo quiero que ellos acaben juntos, porque yo sé por muy seguro que ellos se quieren y que el amor que existe en ese ambiente es recíproco, puedo asegurar que serían muy felices. Yo deseo todo lo mejor para mi hermana, por eso quiero ayudarle a cumplir sus objetivos, pero no sé muy bien cómo ya que a veces pienso que en vez facilitarle el camino, puedo complicárselo. Aunque a Brad también lo conozco muy bien y no creo que se creara un conflicto por mi culpa. Pero bueno, tendré que seguir planeando cómo colaborar para hacer realidad está pareja tan increible. Mi hermana me pisó sin querer, pero eso hizo que yo conectara con el presente, es decir, con la cena y dejara a un lado mi imaginación.
Cuando acabamos de comernos las pizzas, como Jara había sido al artífice, junto con su hermano, del pastel, se levantó para irlo a coger de la nevera. En ese instante Brad le dijo:
-Ya te acompaño yo, así te ayudo a traerlo.
-No no, no hace falta que puedo yo sola- Dijo Jara rápidamente.
-Ya voy yo- Dijo Connor.
-Bueeeno vale, ven tú- Dijo Jara.
Después de mantener esta conversación, Brad se queda todavía más pensativo, pensando que algo pasa y es por eso que Jara no deja que él la acompañe. Jara aparece ya con el pastel y lo deja en medio de la mesa, aunque en ese instante de dejarlo e ir a por un cuchillo Tristan mete el dedo en el pastel. Justo en ese mismo instante llega Jara con el cuchillo y le da un golpe en la mano, para que la quite del pastel. Todos los demás se empezaron a reir. Antes de comenzar a partir el pastel, Jara pregunta:
-¿Queréis y podéis comer todos?
-Siiiii!- Contestaron todos a la vez.
-Vale, pues entonces alcanzarme platos que empiezo a repartir- Dijo Jara.
Narra Jara:
Todo estaba siendo normal hasta que llegó el momento de entregarle el plato a Brad. En ese momento estaba un poco nerviosa, tan nerviosa que casi se me cae el pastel antes de llegar a su dueño, y además ese roce de las manos hizo que me pusiera roja, como si fuera un tomate. Todos se me miraban de forma extraña, pero en que me alejé de él todo volvió a la normalidad y pude repartir tranquilamente sin complicaciones.
-¡Que bueno está el pastel!- Dijo Andrea.
-¡Eres una excelente repostera Jara!- Dijo María.
-La verdad es que está buenísimo- Dijo James.
-Gracias chicoos. ¡Me alegro que os haya gustado!- Dijo Jara muy contenta.
Tras comerse el postre, se tomaron unas copas pero con la calma, sin montar mucha fiesta. Y a la mañana siguiente.....
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top