Capítulo 25: "Un descuido y varias sensaciones de mal augurio"

Laviun Avez había logrado llegar justo después de la salida bomba ocasionada por el grupo de PussyCats, mas no quería intervenir, por lo sencillamente se acerca a Aizawa-sensei.

—Lamento la demora, ¿me perdí de mucho?—pregunta mientras baja del lomo del loro gigante.

En un buen salto ya se encontraba en el suelo, y con Lukoil en su hombro.

—No, pero perderás tiempo si no llegas antes al campamento. Aun eres parte de la Clase 1A, así que apresúrate. —añadió serio Aizawa.

No iba admitir que la sola presencia de la pelilavanda en ese lugar era muy imprudente, pero no tenía nada para hacer al respecto que solo estar allí cuando debiera accionar, como buen maestro, por lo que solo vio como la mirada de la pelilavanda al asentir se fijaba en el pequeño niño.

—Hmp... ¿un niño? Traerá mas problemas, debieron dejarlo en el kinder, tks... Dicen que soy imprudentes y las Pussycats lo son más. —añadió mientras observaba a sus compañeros lucirse.

—No soy un inútil como ustedes, queriendo ser héroes —se quejó Kota.

La pelilavanda al posar sus ojos violaceos en el pequeño niño pelinegro con gorra, sonríe vagamente.

—¿Quién dijo que yo quiero ser uno? Solo estoy aquí para fortalecer mi quirk, luego me largaré.

—Gerk~ joven niño~ no se meta con nosotros~ gerk~ —añade Lukoil burlon.

La pelilavanda soltó un bostezo, realmente estaba un poco cansada, mas no se perdería este pequeño comienzo por nada, quería ver todo.

—Oie... Si llego antes, ¿podré dormir, Aizawa-sensei?—pregunta un tanto desinteresada.

—Si lo logras, supongo que si.

—Bien, Miss Mandalay y Miss Pixie, espero nos cuiden bien. —pasó por cerca de ambas con respeto.

—Laviun-san espero que no te sobreesfuerces mucho, recuerda que...-

—Recuerda que me importa un bledo lo que digan los médicos, por lo que solo cuiden a mis compañeros, por mi ni se preocupen.

Sin mas con un suave salto fue bajando e intercalando su caminar a traves de saltos entre ramas, sin mirar atras solo yendo al frente, pasando desapercibida entre sus compañeros, mientras que Lukoil le decía por vía mental por donde ir. Claro que varios monstruos se cruzaban con ella, pero sabía que el agua no era el fuerte de ninguno, por lo que esfuerzo y dedicación iba pasando cada prueba.

En menos de media hora de esfuerzo, el fruto de su esfuerzo dio su recompensa, pero Lukoil la mirada preocupado en medio del último asalto contra uno de los señuelos de Pixie-boo su corazón advirtió y sangre brotó por sus labios.

—Listo, ahora si me disculpan... Tomaré un descanso...—tose jadeando mientras Mandalay suspira preocupada, llevándola a la enfermería.

—No pensé que se lo tomara a pecho, pero tu alumna es una idiota pero tiene buena intención —añade Pixie-boo, con una expresión seria.

—Lo sé, pero es imprudente. Solo espero que en este tiempo se dedique a ser mejor y no a suicidarse.

Añadió Aizawa mientras a lo lejos se observaba como Iida, Todoroki, Midoriya y Bakugo llegaban con el resto de sus compañeros un poco por detras, bastante agotados.

Aizawa nota como Mandalay ha vuelto y la mirada que le da es bstante tranquila por lo que da por sentado que la pelilavanda ya se encontraba descansando. Por lo que al ver a sus alumnos llegar y a Pixie-boo muy enérgica pregunta, logrando entender por Mandalay que la edad ya le estaba afectando, el no tener familia.

—Con respecto a la edad...—dice Midoriya algo inquieto.

Mas con la mirada de la rubia de Pussycats Pixie-boo bastante amenazadora.

—¿Qué con eso?

—¿Quién es ese niño?

Todos al llegar se dan cuenta de la presencia del pequeño Kota, siendo Midoriya quien se acerca a él.

—Ah, no. Es el hijo de un primo.

—Vamos, kota. Saludalos

Mas solo el niño seguía fulminandolos serio, pensativo por una parte al recordar las palabras de la chica extraña. No entendía del porque había llegado herida, o porque Shino-san ni Ryoko-san la trataban con delicadeza.

Pero contra todo pronóstico el mismo niño había golpeado a Midoriya, o tambien conocido, como lechuga parlante, en las partes nobles.

—Mocoso —sonrío vagamente Bakugo.

—¿No es como tu?—dijo desinteresado Todoroki.

—¿¡Qué, para nada!?

Se acerca intimidante Bakugo hacia Todoroki.

—¡Callate, maldito idiota, mitad mitad!

—Lo siento.

Aizawa instantaneamente corta la conversación entre ambos y les pide que vuelvan por sus cosas al autobus y se instalen para ir al comedor, que mañana recien comenzaría lo real.

Todos lo hacen, la pelilavanda no deseaba aun cruzarse con ninguno por lo que los evadió y fue pasando como fantasma entre aquella situación, al llegar la noche en un árbol cercano al campamento se encontraba mirando el cielo.

—¿Porqué ellas te tratan con suavidad?

Una voz se hace notar en aquella oscuridad, la pelilavanda baja la mirada al suelo notando al mismo niño de antes.

—Porque no saben guardar su pena en otro lado.

—No entiendo, explícate.

Lukoil se encontraba durmiendo en brazos de la misma pelilavanda, hoy había logrado cansarse bastante, por lo que con un arrurú, había logrado que duerma tranquilo.

—No te incumbe. Como mi no me incumbe que estes de luto. ¿no?

Dice un tanto recelosa la pelilavanda, colocando tenso al niño, pero este agarra una piedrita en manos con la intensión de tirarsela pero se queda tieso sin poder hacerlo, soltando aire por la sorpresa, pero logra ver el brillo diferente en los ojos de la chica extraña, quien con un salto baja sin problemas acunando al loro entre sus brazos, para acercarsele.

—Pronto no existiré, es por eso que están alborotadas, seré como tu familia. Sólo que me iré al infierno por tanto daño que haré —admite mientras deja un suave beso en la frente de Kota—... Cuida bien y protege tu familia. Aun las tienes a ellas, yo lo intento.

Sonríe suavemente mirando a su pequeño loro, para luego llevarlo con ayuda de su Quirk hasta dentro del campamento, dejandolo con Mandalay, quien le agradece con la mirada, logrando que Laviun asienta.

Para luego desaparecer por la puerta en dirección a un lugar para descansar. Sin más encuentra a Aizawa, quien la observa incrédulo.

—No iré a levantar mas charla, no lo molestaré, solo quiero descansar. Buenas noches, Aizawa-sensei.

Una vez dicha esas palabras en un pequeño futõn la pelilavanda se recostó a descansar, olvidando todo a su alrededor. Dejando a Aizawa con una sonrisa suave. Después de todo siempre buscaba hacer el bien en todo. A pesar de ser misteriosa, engreída e imprudente.

[...]

Kota una vez que quedó con Mandalay la abrazó, para luego romper el silencio.

—Ella... ¿También se irá?

La voz había sonado en un susurro, pero la castaña solo logro abrazarlo e intentar calmar su inquietud con una palmada suave en la espalda.

—No hay nada que podamos hacer, solo podemos apoyarla cuando no pueda más. Espero que no te haya dicho nada malo, pero ella es así. Disculpala si te ofendió —comenta.

Dando a comprender más allá de ello al pequeño que esa podría ser la razón por la que ella no quería ser héroe. Su destino estaba escrito y pronto, como ella dijo: "ya no existiría". Pero porque lo decía tan... Como si ya lo hubiera asentado. Sabía que dañaría a muchos e incluso ya dictaba un infierno para ella, realmente ella era diferente, pero una idiota.

[...]

Aquella noche todos descansaron perfectamente, Lukoil fue el primero en despertar fue en busca de la mochila que la misma había traído, con un poco de comida.

—Gerk~ despierta~

—ah~ no quiero eso.

—Gerk~ anda abre la boca, o llamaré al rubio gerk~

La pelilavanda lo mira con fastidio, y agarra la botella cerca con una pastilla que hacía que la sangre se regulara y vaya bien al corazón. Para luego comer uno que otro dango, mientras daba una cereza a Lukoil.

—Eres el mejor amigo, gracias por todo el esfuerzo. —añade al termina a ir para arreglarse.

Lukoil sabía que nada esta bien, pero aun mas sabía que ella ocultaba su pesar y desgaste para no preocupar.

[...]

Todos estaban concentrados en sus distintos entrenamientos para fortalecer sus singularidades, cada uno estaba trabajando en sus distintas limitaciones de estos mismo.

Bakugo empezaba a hacer las explosiones mas grandes pero hacia el cielo, elevando mas la probabilidad de llegar a su límite y explotarlo. Era ese la meta del campamento.

Por otro, Todoroki Shoto sumergido en agua en un balde expandía el hielo a su alrededor y luego lo desintegraba con su lado del fuego, se notaba cada uno cansado y sobreesforzandose.

Cada uno de los compañeros se esforzaba uno mas que otro, y todo esto mientras que la misma pelilavanda se encontraba meditando a lo lejos en un árbol, admirando el alma espiritual de cada uno, pensando en como usar eso a su favor, no solo con jugar con sus cuerpos como si fueran maniquies.

—Gerk~ te descubrirán si no haces nada gerk~

—Lo sé, y ya lo hicieron. Aizawa-sensei tengo una idea pero necesito ayuda.

Admite la pelilavanda al notar que el mismo sensei estaba por tirarla del árbol a tierra firme. Aizawa no creía como lo lograba percibir si supone que está débil.

—Dime.

—El alma es energía de una u otra forma. Quisiera ver si puedo almacenarla en mi. ¿Con que podría comenzar?—pregunta.

Aizawa al notar por donde iba, la lleva a un rincon donde animales de gran calibre se encontraban.

—Comienza con tu fuerza física, luego expande tu capacidad de analizar el alma, e intenta voltear el efecto. Pero comienza por niveles, no queremos causar mas ondas destructivas.

Lo decía ya por anteriormente ya había ocurrido, ya que Midoriya y Kyoka Jiro ya lo hacían con sus quirks.

—Esta bien. Ya se como hacer con lo demás, no se preocupe.

—Solo recuerda reposar si algo anda mal. No querrás que los demás se enteren de la verdad, ¿o si?

Aizawa y Laviun intercambiaron miradas, que por un minuto parecieron de agradecimiento. Y lo era

—Gracias.

Sin mas que mediar, Lukoil quedó mirando la situación desde una rama, el también era parte del equipo de Laviun, por lo que debía ejercitarse. Aizawa le colocó algunas pesan en cada pata, logrando desafíos para el loro pelirrojo de plumas traseras multicolor.

Muchos no sabían de la presencia de la pelilavanda hasta poco después que notaron al punto rojo aletear desde muy arriba. Algunos se sorprendieron e inmediatamente buscaron donde se encontraba su compañera quien no se hizo esperan al hacerse notar.

Ya que luego de varios intentos, logro quitar la energía pequeña de un oso y combinarla con el quirk se agua, pero al ser energía y un líquido elevados en el aire, dos cosas contrarias juntas, con un color eléctrico llamando la atención, era bastante complicado de manejar, la pelilavanda necesitaba bastante concentración para lograrlo o fuerza mental.

—Wao! ¿cuándo llegó?

—Mira Bakugo,  es Avez-san —añade Midoriya sorprendido.

Bakugo al voltearse sintió un cosquilleo extraño al mirarla, pero frunció el ceño al conectar con su mirada era del mismo color electrico de la combinación que elevaba al cielo, pero luego su mirada cambio a preocupación. Todoroki tambien lo notó. La chispa de la energía que había dentro del agua era inestable casi podía decirse que salvaje, por lo que al chispear dentro del agua ocasionó una explosión, moviendo varios árboles, pero mas que nada dejando exhausta a la pelilavanda.

Que había logrado amortiguarla con otro muro de agua, pero tambien sentido una pequeña corriente de electricidad pasar por su cuerpo, deteniendo su corazón. Por lo que Mandalay enseguida ordenó a los estudiantes seguir con sus practicas mientras Aizawa rapidamente llegaba a ella con ayuda de Ragdoll, todos quedaron algo preocupados ante la situación pero no podían desobedecer la orden por lo que arregañadientes lo hicieron, aunque mas tarde fueron en busqueda de su compañera.

Bakugo y Todoroki principalmente llegaron encontrandola lejos de estar descansando, sino que comiendo.

—¿Uhm? ¿Que pasa?

—¡Maldita perra! No hagas mas idioteces —gruñe Bakugo ingenuo.

Pero se acerca a limpiarle la comisura de los labios a su adversa, con suma precaución. Mientras que Todoroki logra respirarcon tranquilidad.

—Tks... Imprudente como siempre, Laviun-san..

—Hmp... No pasó nada, solo fue un mal de cálculo.

Todoroki suspira exasperado por la falta de cuidado de su mejor amiga y hermana. Mientras que Bakugo chasquea la lengua.

—Bien, si. Ancianos. No me moriré por ese fallo, joder.

Ambos habían logrado sentir algo diferente recorrer como escalofríos ante aquel comentario, por lo que decidieron hacerlo pasar. Para luego quedar en acuerdo con Bakugo que la cuidaría, dejandolos solos.

—Llegaste tarde. Te perdiste, Ai.

—Ya sé, tambien tuve mis controversias como ustedes. Esos monstruos de Mandalay-san son insufribles. —comenta mirándolo.

Pero sin duda y esperar mas, sus labios chocan en un beso, pero una tos falsa los interrumpe.

—Cofcof...

—¡Maldita sea! ¿Que quieres mocoso?

—Vejete, chica extraña, l-lamento interrumpirlos.

Kota se había avergonzado y mas al ver como estaban pegados.

—Hmp...¿Que deseas?

—Mandalay dice que vayan a ayudar con la cena —comenta y sale huyendo.

Por lo que Bakugo mira a Laviun que al intentar levantarse de la camilla pierde aire.

—Tú, descansa. Si tienes hambre volveré con comida.

Laviun abraza suavemente por la espalda a Bakugo.

—Gracias por preocuparte. Lamento ser tanta mierda en tu camino...

—Igual así te quiero, maldita. Solo no hagas mas lío. Nos vemos.

Bakugo besa de manera corta y ruda los labios de su pareja para luego marcharse. Mientras eso ocurre Laviun suspira, pero se alerta al sentir presencias en un punto.

—Gerk~ ¿iremos a pasear?

—Si, prepárate. Puede ser que debamos actuar. Aunque no creo hacer mucho.

«Solo espero no ser inútil, y poder protegerlos como se debe»pensó.

Durante un ejercicio de entrenamiento nocturno, los villanos se reúnen cerca del campamento para iniciar su ataque contra los estudiantes de la U.A. Todo empezaba a calzar de acuerdo a los mal presentimientos de Laviun Avez.

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¡Holi! ¡Holi!
¿Que tal estan? ¿Que tal el cap?
Al parecer las cosas empiezan a encenderse en el ambiente. ¿Hasta donde llegará la resistencia de Avez?
¿Podrá cuidarlos o solo mirará y caerá en un mal sabor todo su esfuerzo?