Capítulo 14: "Una semana en la agencia"

✔ Primer día zafado.  (Presentación y ¿Por que lo eligieron?)

ℹSegundo día: Agotador

Martes por la mañana, el héroe había despertado temprano a los jóvenes, ocasionando que Laviun no tenga absolutamente buen humor hacia su persona, por lo que para no empeorar la situación se mantenía callada, y con una expresión inexpresiva.

—Ahora demuestren sus koseis con agilidad y fortaleza, lo utilizarán para vencerme antes de la hora del almuerzo —había dicho Jeanist.

Bakugo sonrió complacido y rudo ante el hecho de que al fin lucharía con alguien digno de una batalla.
Mientras que Laviun se encontraba con una jaqueca por no haber dormido más, ni siquiera el héroe había dejado que desayunara, en sintesis desde este momento sin sueño y comida, lo quería matar.

Por lo que dejó a Bakugo que se enfrentara sin ella al héroe, mientras que Lukoil le conseguía algo de comida, cuando al fin llegó el loro pelirrojo con una bolsa de papas fritas, sonrió, mas luego le invitó un poco. Ella había observado que su amigo plumífero había traído un poco de jugo de melón, y agradeció mentalmente, disfrutando de la bebida, una vez llena y feliz con su estomago, se levantó y empezó a hacer una leves flexiones. Llamando la curiosidad del héroe.

Quién con unos cuantos movimientos detenía nuevamente al rubio ceniza, pero no duraba mucho por las explosiones que este causaba.

La pelilavanda bosteza por última vez, para luego juntar sus palmas frente a su pecho, cerrando los ojos, meditando y así pudiendo percibir mejor sus auras/almas. Un fresco viento removió levemente su cabello y allí fue como comenzó la danza del primer encuentro.

Bakugo percibió el cambio de clima, y al verle meditar, se hizo a un lado con un salto,  ya sabía que meterse en su camino significaba que ella se entreteniese con él. Por lo que dejó que actuara ella. Observando como al abrir sus ojos estos eran de un lavanda brillante y empezó con las caricias.

Best Jeanist al ver aquello sintió un leve roce en su interior, pero no sabía dónde, por lo que cuando se dirigió para atacarla, percibió un movimiento del brazo de Laviun hacia la izquierda, ocasionando que de algun modo aquello le quitara el aliento y lo llevara hacia esa dirección.

—¿Y si bailamos, sensei? —preguntó cínica,  Laviun.

Bakugo era testigo que aquella forma de ser era nueva, al parecer el héroe había ganado un por que para que ella lo tomara en serio. Justo cuando se decidía para unirse al encuentro Lukoil se acercó a él.

—Espera~ gerk... Sólo un poquito... Quiero jugar con el inepto del héroe —dijo Lukoil,  entendiéndose perfectamente que era ella.

Bakugo se mordió la lengua para no gritarle, luego lo haría. Sólo un pestañeo le costó saber que el héroe Best Jeanist ya no se encontraba en sus cinco sentidos, mareado, adormilado y cansado.

No quería dejarse vencer, sabía que el kosei de esa joven era bastante poderoso, y solo ahora lo podía saber en carne propia. Best Jeanist intentó detenerla con una red de hilos, pero al parecer ella no estaba atenta a ello y Bakugo entró en acción mandando una explosión hacia él, evitando aquello, y con sola una mirada, el héroe supo que en este momento ya no podría hacer nada, ambos se habían unido por algun motivo.

Por lo que justo cuando ambos iban a atacarlo, sus compañeros de la agencia aparecieron detiendolos apenas, mientras que el rubio se dejaba caer cansado al suelo.

—¡Malditos, suéltenme! ¡Aun no he terminado, maldita sea! —gruñe enojado el rubio cenizo.

—Hmp... Y luego nos tomas por débiles, já, ya quisieras. —sonrió Laviun mientras luego bostezaba y se dejaba caer en los brazos del héroe que la mantenían quieta.

Bakugo se tensó ante aquello, pero intentó no ser obvio y no le tomó importancia, sabía que estaría bien. Y se había dado cuenta que el sueño para ella, si era importante. Sólo por ello la pelilavanda se desmayaba en vano a cada rato.

Best Jeanist enseguida fue ayudado por su compañeros, y cuando estos vieron calmado el ambiente, soltaron a Bakugo, mientras llevaban a la joven dormida hacia la sala, a un sofa, donde descansar.

Una vez que ambos se encontraban dentro de la agencia, Best Jeanist felicitó por su esfuerzo en vencerlo.

—Para ser el segundo día no ha quedado mal, me agrada saber que se lo estan tomando en serio. Aunque... ¿de qué se trata el kosei se tu compañera? —pregunta curioso Jeanist.

—Tks... Maneja el alma o aura de las personas a su antojo, y para que sepas, vamos en serio, yo no juego, ella tal vez, pero no nos subestime que saldrá peor de lo que fue esta mañana —dijo Bakugo, llevando a su compañera a su cuarto.

—Bien, descancen se lo merecen. Mañana saldremos a vigilancia —dice Jeanist.

ℹTercer día: Aburrimiento y leyes.

Miércoles a la mañana, se habían despertado de buen humor ambos, Bakugo había despertado temprano para hacer sus ejercicios matutinos, mientras que Laviun se había despertado a las 9:00, a las 9:30 desayunó, y a las 10:00 am partieron junto al héroe a un paseo de vigilancia en las calles,  todo el día se dedicaron a ello. Aunque Laviun había sentido que la observaban, y Bakugo también lo había percibido, pero no sabía de donde, sólo se hacia del que no le importara.

En la tarde/noche pudieron escuchar una noticia en la televisión, algo de que Endeavor había salvado a unos alumnos de Yuuei, del asesino de héroes,  aunque pudieron ver a Iida, Midoriya y Todoroki en esa situaciòn.

Bakugo hervía de la irá ante aquello, pensando que Midoriya había hecho algo mas que él. Laviun al ver aquello se aventuró y dejó un beso en su cuello al pasar cerca suyo.

—No te estreses tanto, Bakugo, buenas noches —dijo Laviun, desapareciendo entre los pasillos.

Bakugo había podido sentir un estremecer cálido y delicioso contra su piel,  tanto que lo había paralizado,  temblaba de la impotencia por no poderle gritar,  pero no admitiría que le gustaba su compañera, no a estos marranos de esta agencia.

ℹCuarto día: Sentido común vs Educación social.

Jueves: El Héroe Jeanist empezó serio aquel día, enseñando a Bakugo y Laviun como actuar y ser con las personas,  la educación y el sentido común. Siendo sensibles,  y tratar con educación.

Claro está que desde el principio Bakugo le había gritado al héroe que el no necesitaba estás clases,  que había venido aquí para mejorar su fuerza no, apariencia y educación.
Pero el héroe lo obligó a sucumbir, mientras que lo peinaba y dejaba presentable. Mientras que Laviun había sido clara que no la tocarían ni un pelo. Haciendo un barrera de contención hacia su persona. Así de paso practicaba su resistencia.

Aunque para terminar rápido el día, ambos habían sucumbido en las reglas de educación y modales. Cansados llegaron a sus habitaciones, Bakugo no quería hablar al respecto con su peinado de niño bueno, y Laviun no quería hablar por que realmente ya estaba cansada de todo esto en general.

ℹQuinto día:
Viernes,  aquel día se volvieron a enfrentar a Best Jeanist, pero esta vez juntos desde el inicio, con agilidad y destreza antes de que el héroe pudiese decir algo mas, este ya se encontraba liado con sus hilos, y Bakugo a punto de penderlo en llamas. Mientras que Laviun tocaba su espiritu para hacer dormir al sensei temporal.

Que no pudo evitar caer en inconsciencia. Sus compañeros del mismo dieron de alta sus entrenamientos con él, para luego decirles que vayan a desestresarse conociendo el lugar.

Bakugo a regañadientes aceptó, quería salirse de este lugar estilista y educado, que ya no lograba soportar. Mientras que Laviun solo deseaba comer y averiguar quien la estaba observando. Bakugo tomó diferente camino al de ella, ya que fue hacia una tienda de chili's picante. Y ella hacia algun lugar, pero la emboscaron en un callejón, arrincandole.

—Así que tu eres la famosa Laviun Avez... Mi jefe estaría contento si te mato aquí y ahora, aunque tienes buen cuerpo preciosa —dijo un hombre un tanto pervertido y asqueroso.

Mientras ella tragaba las ganas de vomitar al sentir sus manos en su viente y espalda, pudo concentrarse y empujarlo para alejarlo de ella, pero al intentar huir otra mano la atrajo hacia él, y se alarmó mucho tanto que sus ojos brillaron del miedo. Pero al ver que era Bakugo se calmó y dejó recostar en él.

—¿Pero qué rayos te pasó? ¿Uh? —preguntó pero fue interrumpido por un tipo que miraba lujurioso a la joven pelilavanda.

Bakugo al sentir que ella temblaba, algo en él, se encendió de irá, por lo que dejó a Laviun resguardada, y perdida entre sus pensamientos. Mientras que él daba su merecido al maldito pervertido que había osado tocarla, digamos que el criminal no terminó bien.

Bakugo al volver junto a ella, la pudo ver con su vista perdida, abrazándose.
Por lo que con suavidad la alzó entre sus brazos, percatándose que no era muy pesada, sino que era practicamente una pluma, era cierto que la pelilavanda era linda, pero nunca había pensado que la sorprenderían así. Algo estaba mal con ella. Y lo averiguaría.

Pero por ahora sólo la dejaría descansar, aunque no era ciego, se había dado cuenta que al estar cerca de él, ella se calmaba. Y de alguna manera eso lo hacía sentir magnífico, y empezaba a desear que sólo con él se sintiera así.

ℹSexto día: Meditación.

Sábado,  Laviun había despertado en brazos de Bakugo, quien realmente no supo deshacerse de ella, y seguramente había dormido a regañadientes con ella, por lo que una vez que intentó salirse de él, el rubio ceniza la atrajo a él, inconsciente.

Laviun nuevamente sentía esa sensación de intimidación por no saber como actuar, no se esperaba esta reacción por parte suya, por lo que fue allí donde fue consciente de todo. Sus sentimientos hacia el rubio crecían conforme los meses pasaban, a pesar que intentaba ser lo menos interesada en él, no podía controlarse en dejarle algunos besos en momentos que no se lo esperaba.

Le divertía y encantaba ver que sus besos reaccionaban bien en él, y no la detestaba como lo hacía ver siempre. Pero aquellos besos que comenzaron como un juego, empezaron a convertirse en necesidad.

Sabía que esto no la beneficiaba por lo que se regañó y una vez que sintió su agarre ya leve, se alejó de él, besó su mejilla, y le sonrió triste.

Agarró una hoja, y escribió rapidamente en él: "Lo siento, tuve que terminar antes las prácticas, por un contratiempo personal,  nos vemos pronto-By: LaviunAvez. "

Agarró con suavidad a Lukoil quién se encontraba dormido, y al ver la hora se percató que ya eran las seis de la mañana, por lo que sin querer se encontró a Best Jeanist en el camino,  se disculpó por su partida temprana con un problema familiar, logrando así la baja en las prácticas.

Pero cuando al fin se dirigía dónde creía que lo encontraría, ya lejos de cualquier tipo de observación por algun héroe, al girar en un callejón. Pudo encontrarse con él, quién abrió un portal y pidió su cooperación por las buenas. Logrando que Laviun como Lukoil aceptaran el "aventón" desapareciendo.

Aquel día Bakugo se extrañó al no verla, pero no le tomó importancia, fue y se ejercitó como todos los días, luego fue a las patetitas clases de lección de modales y meditación del héroe Best Jeanist, para luego ser avisado que su compañera ya había completado la práctica en la agencia.

Bakugo enojado por no haber sido avisado antes, fue llegando a su habitación con una tremenda ira y daño en su interior por su repentina partida. Pero cuando cerró bruscamente la puerta una hoja cayó a sus pies, la levantó y pudo leer.

"Lo siento, tuve que terminar antes las prácticas, por un contratiempo personal,  nos vemos pronto-By: LaviunAvez. "

Bakugo gruñó y se maldijo por no haber sentido cuando se fue y escribió aquello,  no había podido preguntarle del por que su extraño actuar.

ℹSeptimo día: Completado.

Una vigilancia normal, sin ningún problema, aburrido sin la presencia de su compañera, pero no argumentó nada al respecto.

Mientras Bakugo seguía las prácticas hasta el final, Laviun se encontraba durmiendo en un departamento y lugar desconocido, Black Mist por órdenes de Shigarashi le había dicho que no la trajera a la guarida,  que el iría hacia el lugar dicho.

Shigarashi hace como tres horas que había llegado al departamento y la observaba dormitar como si fuera una de las cosas que más le gustara hacer, y esto le daba miedo. No entendía bien como ella y su sueño se entrelazaban en una misma. Pero por alguna razón sabía que ella ocultaba algo más tras toda la apariencia que se lograba ver.

Le acarició la cabellera con delicadeza, ocasionando que la pelilavanda murmurara.

—Tomu... Cinco horitas mas... Por fis...

Aquello lo había dejado en shock, aquel apodo lo reconocería en todos lados, y en sus sueños era en donde mas se escuchaba aquello. Tragando saliva, la despertó con apretar e imposibilitarle respirar en la nariz, ocasionando que despertara asustado e hiciera un pucherito.

Haciendo que algunos flashes de recuerdos llegaran a él.

“Tomu... Por que siempre me haces lo mismo, estaba soñando con hamburguesas mutantes, que me las comía” —escuchó decir a la pelilavanda.

Sólo que el lugar donde estaban actualmente estaba reemplazado por otro lugar y momento, era ella mas pequeña,  con un brillo de felicidad en sus ojos violaceos, pero tambien adormilados. Ella lo había abrazado en forma de venganza y lo empezaba a hacer cosquillas.

Pero gracias a unos chasquidos fue sacado de aquel recuerdo, pudiendo ver a la misma pelilavanda pero ya mas con una apariencia madura, pero encerrada aun en esa fachada de niña. Solo que su felicidad no iluminaba sus ojos como aquél recuerdo.

Su duda y deseo era saber: «¿el por qué no era así, ahora?»

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Bendito sea el WiFi de los autobuses preferenciales xD gracias a ello pude publicar, ¡Espero les guste el cap! ¡Salud y mucha lokura!