Quería un consuelo, los busqué y no estaba. Quería sentarme con uno de ellos a hablar de la vida y que me viera llorar. Creí que lo harían, pero todos se quedaron solo en el "¿Estás bien?" o "Si quieres hablar aqui estoy", también decían "Te noto extraña", pero solo eran palabras que hasta el mismo viento se sintió apenada de escuchar cuando se las llevó.

Soy transparente con las personas porque odio la hipocresía y la falsedad. Creí que todo estaba bien hasta que los necesite. Me aleje de todos porque nadie era lo que yo creía. Tomé mi corazón herido y lo encerré en una jaula, porque ahora es un animal sediento de amor. Un amor que no va a encontrar, lamentablemente.

Los tomé de la mano, les conté mis mayores secretos, miedos, costumbres y dolores. Me vieron reír, enojarme y llorar. Perdón, pero me dañaste ignorándome cuando te necesitaba. Me dañaste cuando me dejaste de lado y me dijiste que ya me habías reemplazado. Me dañaste cuando quise tomarte de la mano y no me dejaste. Me dañaste cuando me viste mal y no hiciste nada.

Perdoname por las veces que dije cosas que te molestaron. Perdoname por ser directa y dejar que conocieras cada una de mis sombras. Perdoname por encontrar un refugio en ti. Perdoname por no entenderte y por no ser capaz de hablar contigo, el dolor es más fuerte que mis ganas de estar contigo a solas.

Quiero respirar sola, ya no contigo.

Estuve sola, eso es lo que me molesta.

Nadie estuvo para mí...

Y eso me dolió...