Meeren
Daenys Targayen

SIEMPRE LE HABÍAN DICHO QUE ERA IGUAL A SU PADRE, Jon Nieve. Mientras que su gemelo Rhaegon era igual a su madre; Daenerys Targayen. Rubio y de ojos azules, ella era castaña y de ojos cafés.

Eso molestaba terriblemente a su madre por lo que ese comentario lo había escuchado un número limitado de veces. Daenerys Targayen odiaba profundamente a todos los Stark, desde Sansa Stark a Jon Nieve. Su sobrino, hijo de Lyanna Stark y Rhaegar Targayen.

Daenys siempre se sintió mal por no ser igual a su madre, ella era cortés y dócil, tímida, nunca logró que la tratarán con temor o amor como a Daenerys o a su hermano; Rhaegon, eran la sangre del dragón.

Su madre insistía que volverían a Poniente y reinarian pero Daenys escuchaba los rumores. Que Daenerys Targayen no tenía un futuro en los Siete Reinos al igual que sus hijos, que todo lo había logrado gracias a sus consejeros, a su ejército o gracias a los dragones.

Y Daenys no podía no darles la razón. Lo único que ella deseaba era permanecer en Meeren, era lo más parecido que tenía a un hogar y no quería perderlo si su madre no lograba vencer a Rhaenys Targayen y Sansa Stark. Ambas mujeres que se llevaban mal con su madre...

Por eso Rhaegon decía que era frágil a diferencia de Daenerys. Dany hubiera ido a conquistar Poniente inmediatamente pero debía esperar que sus dragones crecieran. Además, meses más tarde se reveló que ella se encontraba embarazada de gemelos.

Y claro, su madre no era la misma que antes de morir, había quedado un poco mutilada sin embargo Daario Naharis que había mantenido la paz en Meeren la seguía amando aunque hubiese perdido la belleza que la caracterizaba ya que el deseó de vengarse por la traición la consumía.

Desde que era un niño Rhaegon fue entrenado para matar a todos los Stark y Lannister que habían en Poniente. Lo usaba para conseguir venganza, arrebatándole la infancia.

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La Rebelión dorniense
Dorne, los Jardines Acuáticos

—Tu hermano y sobrinas fueron asesinados y tu te sientas aquí en los Jardines Acuáticos viendo el cielo sin hacer nada —Reclamó Ellaria Arena a Doran—. ¡Mi hija está muerta por culpa de Rhaenys Targayen!

Aún no superaba que Oberyn Martell su antiguo amante la desprecio al enamorarse de la reina Rhaenys.

—Oberyn murió defendiendo a la Reina Dragón y sus hijas fueron asesinadas por la reina Cersei. Rhaenys Targayen no tuvo nada que ver —Respondió el príncipe Doran impertérrito.

—¡Es la hija de Rhaegar Targayen! ¡Rhaegar que abandonó a tu hermana y dejó que la asesinaran! Tu hermano murió por ella ¡Tu hermano! Y ahora Aegon no es el Rey por ella... ¡Él es el legítimo rey! ¡El hijo de Elia, el sobrino de Oberyn!

—Quisieras que fuera a la guerra.

—Todo el país quiere que vayas a la guerra. Él es el rey, no Rhaenys, no una Lannister.

—Tenemos suerte que el país no lo decide.

—Las Serpientes de Arena están conmigo —Anunció colocando la mano en la barandilla—, tienen el amor del pueblo. Ellas vengarán a su padre y hermanas mientras tu te sientas aquí en tu silla sin hacer nada y colocarán a Aegon en el Trono de hierro.

—Nymeria apoya a la reina, detendrá a quién intenté hacerle daño... Yo amé a mis hermanos, Aegon es hijo de Elia... El hijo de Elia… lloré de gozo al saber que una parte de mi hermana había sobrevivido. Hiciste muy feliz a Oberyn por eso siempre tendrás un lugar en mi corazón pero aquí no habrá una rebelión, no aquí, no mientras yo gobierne.

—¿Y eso por cuánto será? —Espetó Ellaria—. El pequeño Daemon es muy listo y entiende que su padre es el hijo varón de Rhaegar. Que tiene el derecho de reinar.

—No te atreverías, Ellaria.

—Nymeria lo dijo hace años ya “Acabará igual que empezó, con sangre. Acabará cuando rajemos Roca Casterly de parte a parte para que el sol brille sobre los gusanos que devoran el corazón de ese lugar. Acaba con la destrucción absoluta de Tywin Lannister y toda su obra”. Rhaenys Targayen es parte de su obra —Ellaria le sonrió antes de irse—. Y Aegon es el verdadero rey.

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El Norte, Invernalia
Tyrion Lannister

—¿Qué ves? —Le preguntó por fin el pequeño león.

Bran suspiró.

—Solo puedo ver el presente, sí, Daenerys está viva. En el futuro lo único que veo al asomarme es muerte... Sangre y Fuego. También un nacimiento, creo que es un Targayen... Daemon; el hijo del príncipe Aegon, está llorando no sé si es felicidad o tristeza.

—Lo único que quiere Daemon parece ser el Trono... —Tyrion Lannister frunció el ceño y apretó los labios.

—No es buena toda está tención... La tención que los Targayen tienen entre sí, todo por el Trono de hierro —Bran suspiro con la mirada pedida y su típico misterio.

—Lord Tyrion, hay algo más... El príncipe Daemon le tiene cariño a la princesa Elia. —Soltó Varys con sincera preocupación, la niña le agradaba, la había visto crecer.

«Quizá muera en esta guerra, quizá mueran todos los Targayen excepto Daenerys. Si Bran Stark no sabe...» Pensó Tyrion antes de volver al castillo. Rhaenys no debía darse cuenta de lo que pasaba, sino su sobrina iría inmediatamente tras Daenerys.