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Sebastián's POV

—¿Y esas caras largas, dramáticas? —preguntó Wyatt sentándose frente a William y Parker con una calma tan silenciosa que los hizo asustarse.— ¿Qué?, ¿me ven cara de fantasma para mirarme raro?

Me mordí el labio para no reírme por nada del mundo sentándome al otro lado de el ojiverde totalmente ofendido con los chicos.

—Fíjate que pensábamos que realmente ibas a sentarte con los del club de actuación. —mencionó el pelirrojo algo confundido.

—Nah. Les cuento que me había aburrido de no compartir con mis viejos amigos de la infancia.

—A ver, ¿qué es lo que está pasando por tu cabeza? —soltó el azabache ahora más confundido que todos nosotros, era claro que los únicos que se habían mantenido unidos éramos Parker y yo, pues el azabache y el castaño habían tomado caminos distintos.

—Decía que desde que llego la señorita que será mi actriz los note más unidos, así que también me uni, extrañaba fastidiarlos asustándolos. —los tres nos miramos y luego a él.— sí siguen haciendo eso les facilitaré el acceso a las chicas para que les hagan bromas sin problemas.

—Por eso yo decía que...

—¡SEBASTIÁN!

—¿Qué hiciste ahora, Gallagher? —ignorando la pregunta de Will sonreí divertido dirigiéndole una mirada a la venezolana que venía llena de confeti de colores y algo de pintura.

—Mi pequeña venganza, eso fue.

—Creo que será mejor que corras porque tiene una cuchara de plástico en la mano. —reí ante el comentario de mi mejor amigo rodando los ojos esperando que ella se acercara y de ahí huir por la puerta.

Pero cuando ella se quedó quieta a mitad de camino y miro a las chicas a su alrededor sonrió cínicamente, subiéndose sobre una mesa para luego silbar y que todas le prestaran atención.

—¡Chicas!, Sebastián dijo que va a regalar su camisa y saldrá con la primera que lo atrapé.

La voy a matar.

Más de un grupo de chicas se levantó dispuestas a correr detrás de mí, incluyendo a la rubia de la que tanto huía que recién estaba entrando a la cafetería y sus amigas detrás.

—¡Corre, hermano! —grito el pelirrojo al mismo tiempo que el resto de los conocidos de mi equipo.

Sin más remedio y encargándome de lanzarle mi peor mirada a la teñida, salí por la puerta siendo atropellado por una chica que venía de frente.

Sin importarme más corrí con todas mis fuerzas imaginándome la siguiente broma que habíamos iniciado en nuestra pequeña guerra.

Agnesia no se salvaría.

Agnes POV's

—¿Cuándo les diremos que salió en la revista nueva? —preguntó el pelirrojo lanzándome el suéter de Will al tiempo que él se lo entregaba con una risa divertida.— somos los mejores amigos que Sebastián podría pedir.

—¡Fueron ustedes!, oh... debí imaginarme que una obra cómo está no la podía orquestar nadie que no fuese Parker. —Wyatt les aplaudió haciendo una reverencia ante ellos con verdadera exageración.

—¿Revista? —pregunté fuera de lugar sentándome al lado de Wyatt quien me tendía unas toallitas húmedas, lo miré confundida y él se encogió de hombros.

—¿Qué?, la grasa de la piel arruina el cutis del rostro. Siempre se tiene que estar preparado.

—Realmente no era por eso, ¿tienes más cosas en ese bolso?

—Todos los cosméticos y cremas necesarias para cuidar la piel, pequeña actriz. —me sonrió con orgullo echándose el cabello hacía atrás.— ¿cómo crees que se mantiene este dios griego?

—Buena pregunta. —él me sonrió y suspiro con dramatismo mirando su celular concentrado. Miré a Will con seriedad haciéndolo casi escudarse detrás de Parker.— Mira, querido. Eres mi amigo, pero si lastimas mi hermana de otra madre tienes que tener claro que te viene el chalequeo completo por una semana, así que o vas arreglar las cosas por lo que sea que le hiciste o te llegas con las bromas más arrechas que vas a conocer en tu vida. —entrelace mis manos e hice una de las caras de las villanas de la Rosa de Guadalupe.

Tuvo efecto porque el azabache mandado salió de la cafetería casi que huyendo, Wyatt me aplaudía emocionado y Parker, bueno él sonreía con diversión.

—En verdad que tienes que ser actriz. —comentó el castaño con una sonrisa amplia haciendo un corazón con sus manos.

—Aún me cuesta creer que seas real. —el pelirrojo se carcajeó divertido, regalándome una mirada de orgullo.— sobre la revista, Sebastián es modelo en algunas marcas que no recuerdo y esta semana salieron las fotos de su última sesión, entonces he ahí el resultado.

—Wow. Con más razón le voy a hacer bromas seguido.

—¡Agnes!

—Es Cory. —chille con disimulo subiéndome la capucha del suéter ocultando mi rostro contra el hombro del ojiverde.

—Ya, ya, querida, que si sigues escondiéndote se va a dar cuenta que eres tú.

—No me estás ayudando, loco Adam.

—Muy tarde, Green. —fue lo único que le escuche decir al pelirrojo antes de que mi crush tocará mi hombro.

—Me va a ver el rostro. —Wyatt hizo una mueca de terror y me tendió algo blanco, ¿una máscara?, me la coloqué sin pensar y tome fuerzas para enfrentar al chamo que me traía embobada.— ah, hola... Cory, ¿cómo estás?

Lo vi fruncir el ceño cuando noto mi evidente cambio.

—¿Estás bien?, ¿pasó algo? —me miró preocupado y antes de que hablara fue Wyatt quien puso su mano en mi hombro en forma de apoyo.

—Lo qué pasa es que estaba audicionando para la obra que planteamos, el virus del confeti.

—Sí, eso exactamente. —los nervios en mi voz eran tan palpables como en mi cuerpo que terminé derramándole la botella de agua que tenía en la mano encima de él.— yo en verdad, coñ... ¡lo siento tanto!

¿Me podía ir peor?

—No te preocupes, igualmente me toca ir a las duchas, recién llegué del entrenamiento, entonces quería saber sí... te gustaría salir, hoy. Después de clases.

—Sí, ¿por qué no? —le devolví una sonrisa apenada aunque la máscara me tapará la boca.

—Genial, ¿nos vemos a la salida?

Asentí tontamente desconcentrándome cuando la camisa blanca del uniforme del equipo se le pegó en su abdomen, marcado.

Ay diosito...

Wyatt me tocó disimuladamente la espalda y yo volví a mi realidad.

De pana que los crush así, son reales.

—¡Cory! —lo llamé antes que se fuera, sonriendo nerviosa.— ¿podría ser más tarde?

—Claro, ¿a las seis?, te paso a buscar a esa hora. ¿Te parece bien?

—Sí, está bien. —le sonreí y él se me quedo mirando con esos preciosos ojos grises característicos suyos.

—La dirección, pequeña. —murmuró el castaño disimuladamente tosiendo y entonces reí nerviosa avisándole dónde era que vivía a mi crush quién dijo que llegaría a las seis y cuarto a mi casa.

Cuando al fin se fue, grite contra mis manos emocionada disimulando un poco.

—¡Esa es mi rompecorazones! —aplaudió con emoción el ojiverde al tiempo que el pelirrojo nos miraba confundido.

Moría porque fuese la hora de esa salida.

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¡Holaaaa!

No tengo mucho que decir en este cap, arepitas, sólo que lo disfruten y...

La casi navidad 🌚

Pásenla chevere, disfruten ese día con muchas ganas, sea leyendo, comiendo, como quieran disfrutarlo.

Se les quiere, arepitas.💚