Capítulo 2

El sueño estaba terminando conmigo, miré a mi vínculo e hice un leve chillido seguido de un sonido parecido a un ronroneo.

-Ayúda...

Él asiente y se da vuelta, mira a uno de los lobos y este asiente antes de irse corriendo. Mi compañero se pasa por mi hocico de nuevo hasta estar junto a mi ojo.

-Estarás bien...

-Alpha. - una bruja y el lobo de antes aparecen de inmediato.

Mi compañero va hacia ellos y se vuelve a su forma humana, con ropa, al estar frente a ella. Pero al él alejarse fue como volver a mi instinto defensivo, luché contra el sueño una vez más y miré a mi alrededor.

-Sarahí, haz algo por ella, por favor.

La bruja se me acerca pero mi corazón latió con fuerza, rugí un poco e intenté levantarme. Me dolió todo el cuerpo, así que solté alaridos de dolor. Los guardias se posicionan a la defensiva y eso me alteró más, ellos gruñieron y yo igual. No podía evitarlo, sentía la necesidad de defenderme.

-Mi luna...

Sentí a mi vínculo cerca de mí, apoyando sus manos bajo mi cabeza y con solo su tacto pude bajar mi estado defensivo. Mira a sus guardias y con solo una mirada amenazante ellos agachan la cabeza y retroceden.

-Alpha, está claro que ella no confía en nadie más que usted para acercarse, y yo no tengo las ganas de ser cocinada hoy.

Gruñí a la bruja pero mi compañero llama mi atención, lo miré y dejé caer la cabeza de nuevo. Él me acaricia levemente para calmarme, y funciona.

-Mi luna... calma, ella te ayudará ¿si? Te prometo que no te lastimará ni te provocará dolor. Confía en mí.

Miré a mi compañero un segundo, el dolor era insoportable al igual que el sueño y antes de no poder hacerlo asentí. Mi compañero le da el permiso a la bruja para acercarse y eso hace. Yo estaba por quedarme dormida.

-Permiso. - dice la bruja, Sarahí al acercarse a mi.

Escuché unas palabras en un idioma extinto y luego sentí como si el viento me acariciara todo mi cuerpo y lo limpiara de todas las heridas. Dejé escapar un suspiro de alivio, ya no me sentía cansada. Volteé a ver mi ala y pude presenciar como aquella abertura se cerraba rápidamente. La moví un poco notando que tampoco sentía dolor.

-Ya está.

Me levanté en mis cuatro patas y me sacudí un poco por la tierra. Estiré ambas alas y las probé, al igual que mi cuerpo... todo se había curado al completo. Miré a la bruja y asentí agradecida.

-Gracias... y... lo siento.

-No fue nada. Me honra haber ayudado a una Hignis... - hace una leve reverencia.

Yo le devolví el gesto agachando la cabeza igual, ambas nos enderezamos y ella desaparece con su magia. Mi vínculo le ordena a todos sus guardias retirarse y mientras ellos lo hacían, él se me acerca.

-¿Quieres transformarte?

Me apené enseguida ya que... en realidad nunca más, desde mis diez años de edad, volví a mi forma humana. No sabía como era, ¿y si no le gustaba?. Retrocedí un paso, apartando la mirada, mi compañero lo nota enseguida y me sonríe.

-Ven... sígueme.

Él se da vuelta y empieza a caminar, yo dudé un momento pero al final terminé siguiéndolo. Cruzamos su pueblo, yo agaché un poco la cabeza con algo de miedo ya que todos me estaban mirando. Llegamos a una casa, más grande que las demás, y fuimos hasta el patio trasero. Una mujer con uniforme sale y se acerca a mi compañero.

-Trae algo para cubrirla. Y preparen el baño.

-Sí, Alpha.

Ella se va y él me hace seguir caminando hasta una pequeña cabaña a lado de la piscina. ¿Cubrirme?

-Cuando te sientas lista puedes transformarte... Te darán con qué taparte y si quieres puedes tomar un baño para relajarte.

-¿Relajarme... ?

Asiente sonriendo; la mujer de antes regresa con algo en manos, mi Mate lo agarra y la manda a irse. Agarra una de las sillas que estaban allí y la acerca para dejar la ropa en ella.

-Puedes ponerte detrás, si no quieres no miraré.

Él se voltea, yo miré la ropa, luego el lugar, y por último a mi compañero. Tragué grueso ante la idea de que él me viera antes que yo misma, pero al final fui tras esa pequeña cabaña y me mentalicé antes de transformarme.

-¡Huh... ! - casi caí por no estar acostumbrada a estar en mis dos piernas y sentir que pesaba mucho menos.

Mi piel se sentía extraña al no ser escamosa; toqué mi cabeza, ya que se sentía extraño el tener cabello. Miré mi espalda, era extraño no tener mis alas, ¡Todo era extraño!

-¿Estás bien?

-¡S..Sí... !

Me toqué el cuello al sentir extraño mi propia voz saliendo de mi boca. Suspiré profundo y me calmé como pude, agarré lo que me habían traído y lo miré, no entendí para qué "cubrirme" pero... supongo que será por algo... estuve un rato tratando de averiguar cómo usar lo que me dió o... qué se supone que debía cubrirme.

Pensé en la mujer que había venido, ella mostraba los brazos, las piernas y la cabeza... ¿lo que cubre su ropa es lo que hay que cubrirme yo? Miré mi cuerpo, me sentía algo expuesta, lo que era extraño... otra vez.

Resoplé y traté en enrrollarme la tela por el cuerpo con algo de torpeza. Hice juegos para saber como mantenerla firme y al final lo conseguí. Batallé más en saber como usar mis manos que en lo demás.

Ahora... el mayor problema... ¿Qué dirá al verme? Ni siquiera yo sé cómo soy... ¿Soy fea? ¿Lo asustaré? ¿Estoy mal... ? ¡Diosa, ya no quiero! Me volveré a mi forma dragón y me iré... pero... él quiere verme, y me sentiré mal si me voy. Lo acabo de encontrar, el único ser en el que puedo confiar plenamente... ¿en serio lo quiero perder?

Pero ¿y si lo pierdo porque a él no le gusta como soy? ¡Agh... ! Ya. Relájate... no sabrás lo que piensa si no le muestras.

-¿Hay algún problema?

-Am... s..solo... no... No me mires raro... ¿si?

-¿No mirarte raro? - sonaba algo divertido, pero se controló -. Está bien... No lo haré.

-B..Bueno...

Resoplé para darme ánimos y me asomé apretando la tela en mi pecho en automático. Él me mira por encima del hombro, yo sentí mi rostro arder al igual que todo mi cuerpo. Pero él tenía los ojos abiertos de par en par.

Su mirada era de todo menos desprecio o desagrado, me miraba con asombro, ternura, dulzura... eso me pareció a mí. Me sentí avergonzada e intimidada por su mirada, que hasta aparté la mía.

-T..Te dije que no me mires raro...

-No sé cómo más quieres que te vea... - al instante me sobresalté al tenerlo frente a mí y levantando mi cabeza para conectar nuestras miradas -. Eres hermosa.

Mi corazón palpitaba más rápido de lo normal, su mano subió a mi mejilla y la acarició con su pulgar, yo cerré mis ojos disfrutando de su tacto, mi piel se erizaba y me hacía sentir tan, pero tan bien...

-¿E..En serio?

-Completamente en serio. Eres simplemente preciosa, mi Luna.

Sonreí sin poder evitarlo aunque me sintiera más avergonzada que antes. Él me suelta para darme mi espacio pero me da el paso frente a él al levantar un brazo y yo lo hice. Caminó a mi lado y ambos entramos a la casa, yo me sorprendía por cualquier cosa ya que nunca había tenido nada como esto en frente. Todo se veía realmente bien y hermoso.

Entonces escuché pasos acercarse y al final vi entrar a un chico, yo me escondí tras mi compañero quien me sonríe.

-Alpha, ¿qué sucedió con ella? ¿Quién es?

-Es mi Mate.

El chico abre los ojos con sorpresa pero al instante hace una reverencia hacia mi.

-Luna...

Yo me asomé un poco.

-Soy Leyla...

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top