Capítulo 11

Por alguna razón sentía como si todo eso del rescate nunca hubiera ocurrido y siguiera en ese lugar. No quería abrir los ojos por miedo a encontrarme allí y no con Tanner, sentí un poco de desesperación y miedo que hasta comencé a respirar pesadamente.

-Leyla...

Me detuve de golpe al escuchar la voz de Tanner en mi oreja. Su mano se pasa por mi brazo acariciando me levemente.

-Leyla, despierta...

Le hice caso y poco a poco abrí los ojos, sentí que besaba mi hombro mientras seguía acariciando mi brazo. Giré primero mi rostro para verlo pero entonces lo abracé con fuerza suspirando profundo.

Él no dice nada, solo me abraza y consuela con sus caricias. Suspiré aliviada de que todo sí haya sido real. Estar con Tanner ahora... me encantaba ya que lo había extrañado.

-Mi Luna... no sabes lo mucho que me preocupaste.

-¿Y tú no me preocupaste a mi? Creí que no ibas a despertar nunca...

-No podría dejarte, y menos cuando estabas en peligro.

-No quiero que sea un sueño... no quiero despertar y seguir allí con ese dolor - mi voz apenas y ya salía.

-Y no lo estás... Estás aquí junto a mí, y si quieres lo puedes comprobar...

Me separé para verlo y entonces él me besa los labios con intensidad. Apoyé mi mano en su mejilla y le correspondí de inmediato.

-Eso se sintió muy real, ¿no lo crees?

Asentí sonriendo y volví a besarlo, él acaricia mi cintura hasta pasar su mano a mi espalda baja y me empuja contra su cuerpo.

-Tanner... te amo...

-Yo también te amo, flamitas...

Ambos reímos por el apodo pero nos acomodamos de nuevo, él nos cubre con la manta mientras yo me acurrucaba en su pecho, sentí que besaba mi cabeza una vez más antes de que yo volviera a quedarme dormida.

***

***

-Mi Luna... - Tanner vuelve a hablarme en el oído -. Ya tienes que levantarte, flamitas...

-Mm, Tanner déjame dormir... - me quejé como niña pequeña y me cubrí hasta la cabeza con las mantas.

-Si te dejo dormir vas a querer despertar en la noche.

-¿Qué hora es? - pregunté adormilada.

-Doce y cuarenta y seis del medio día.

Me senté de golpe y bajando las mantas, luego suspiré profundo para mirar a Tanner.

-Sí... creo que sí debería despertarme ya.

Él me sonríe con diversión pero más me miraba con ternura y amor. Sonreí ligeramente antes de que él se me acerca apoyando su mano en mi nuca y besando lentamente mis labios. El beso era largo pero lento, me encantaba... pero...

-Tanner... tengo hambre.

-Me lo imagino, pediré que te preparen el almuerzo. Ya vuelvo...

Asentí y lo vi alejarse y luego dejar la habitación. Yo me levanté y fui hasta el baño para darme un baño medio corto y luego salir; me enredé la toalla por el cuerpo y luego sequé mi cabello.

Pero mientras acababa con eso se me vino a la mente los cazadores, ellos aún me estaban buscando... No quería que volvieran a atacar la manada por mi culpa, debía de hacer algo. ¿Pero qué... ?

Dejé las cosas donde debían ir y me cambié, quería liberar mi mente antes de almorzar así que me acerqué a la ventana y me lancé. Me transformé y salí volando, volé por encima del bosque amando la brisa y el sentirme liberada.

Luego de aquella experiencia con los vampiros... esta sensación se apreciaba mucho más. Pero me hace pensar... ¿qué sucedería si yo no hubiera conocido a Tanner antes de que eso sucediera? Iban a matarme, estaba claro... y él nunca hubiera sabido que su Mate habría muerto en ese momento...

-¡Hm!

Me detuve en seco al escuchar un alarido. Se hizo el silencio mientras yo me mantenía en mi lugar tratando de escuchar de nuevo, entonces lo volví a escuchar. Un lobo pidiendo auxilio...

Escuché rápidamente las motos de los cazadores y fui hacia aquella dirección. Agudicé mis sentidos y pude ver como ellos estaban por llegar a la loba omega la cual estaba huyendo, pero ya estaba muy herida por lo que no fue una sorpresa que ya no pudiera continuar y cayera al suelo. Tenía tantas flechas en su cuerpo que dejaba una mancha muy grande de sangre.

Antes que los cazadores, yo bajé y quedé entre ellos obligándolos a detener sus motos. Rugí en amenaza antes de agarrar inmediatamente a la loba y alzar vuelo. La agarraba sin apretar demasiado para no lastimarla pero también evitando que cayera por la piruetas que tenía que hacer para esquivar los disparos de los humanos.

Perdí a los humanos yendo hacia otra dirección que no fuera la manada para mantenerlos lejos de allí, me escondí un segundo en lo que me tomaba dejar a la loba en mi lomo, giré mi cabeza para verla. Ella chillaba del dolor y jadeaba mucho.

-Tranquila, estarás bien. Resiste.

Ella se transforma en su forma humana y trata de levantar al menos su parte superior para mirarme mejor y arrancarse un par de flechas.

-G..Gracias...

Asentí sin más, le dije que se sujetara y ella lo intentó. Nuevamente alcé vuelo y fui a la manada sin hacer mucho ruido o ser muy vistosa. La chica en mi lomo se quejaba pero a la vez trataba de no desmayarse. Cuando llegué a la manada con un rugido de llamada, todos se me acercan y yo me agaché para que pudieran ayudar a la chica.

Unos guardias iban a hacerlo pero el que se adelantó fue Aarón, y fue muy rápido en sujetarla cuando ella ya no pudo resistir mucho el equilibrio en mi lomo y cayó. De no ser por él, habría terminado en el suelo.

Aarón la mira con preocupación pero molestia a la vez, mira sus heridas mientras ella se acurrucaba contra él. Me transformé y noté cuando los ojos del Delta se volvían dorados por la furia, pero decidió llevársela rápidamente hasta el hospital para que la atendieran de inmediato.

Sentí a Tanner cerca y luego me abrazó por la cintura desde atrás, besó mi cuello y yo sentí mi piel erizarse.

-¿Qué sucedió?

-Los cazadores la estaban persiguiendo... no podía ignorarla.

-Lo sé. - me giré para ver su sonrisa.

-Ahora me alegra haber ido a estirar las alas.

Él amplia la sonrisa pero yo me paré en puntillas y besé sus labios tiernamente, aunque no seguimos más cuando yo me separé y me lo llevé a casa.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top