Capítulo 34

Sentados en el pasto, bajo la sombra de un enorme árbol, no fui capaz de comer mi helado, Connor terminó comiéndoselo, sentado a mi lado en silencio, viendo a Lucía jugar con otros niños en los juegos, muy entretenida.

— ¿Todavía te duele el estómago?

Tomando mi mano con notoria preocupación.

— Un poco... — Llevando mi mano a este— No creí que lo viera tan pronto llegara a casa, Lucía... ella...

— Los niños son niños, actúan por instinto más que nada, y tenía curiosidad sobre su padre, después de todo, conoce su rostro, y por lo que escuché, ella intentaba protegerte, le dijo que tú lo odiabas. Antes de salir de la heladería, nos dejó un mensaje para ti, le dije a Lucía que yo te lo diría.

Si se me había pasado un poco el dolor de estómago, ahora podría devolver todo lo que he comido en el día, sentía muchas nauseas.

— ¿Qué dijo?

— Dijo que después de cómo terminó todo entre ustedes, necesita que se reúnan para hablar, él sabe que no quieres encontrártelo, pero cree que ambos merecen cerrar ese ciclo.

— ¿Por qué yo querría hablar con él? Qué se joda. Estoy muy bien por mi cuenta, todo él es problemas y oscuridad, no quiero volver a eso.

— Yo solo cumplo con entregar el mensaje — encogiéndose de hombros— le dije que no querrías hablar con él, pero como siempre, su temperamento es una mierda, se controló porque estaba la niña ahí.

— ¿No dijo nada por Lucía?

Un pequeño espacio en mi corazón aún albergaba algo de esperanza.

— Dijo que se parece a ti, que afortunadamente no sacó nada de mí — negó riendo— estaba furioso al enterarse de que nosotros teníamos una hija ¿No te molestaste por eso? Fue lo primero que se me ocurrió, lo siento.

— Creo que es justo lo que necesitaba escuchar, si sabe que Lucía es su hija, quizá qué puede llegar a hacer — temblando del miedo— Tendré que molestarte muy seguido de ahora en adelante.

— No eres una molestia, lo sabes — me apoyé en su hombro— Te pedí muchas veces que regresaras a casa con nosotros, es porque te quería cerca, Oren y yo te extrañábamos mucho, además, está Lucía, queríamos que ella supiera quienes éramos, que forjara un lazo con nosotros.

¿Cómo fue que elegí a Luca en vez de Connor? Este chico no me gusta de manera romántica, pero me trata tan bien que... que quizá podría hacer el esfuerzo, quizá en algún momento llegara a gustarme, o quizá no, pero sería una buena figura paterna para Lucía.

— No pienso alejarme de aquí, y nosotras odiamos estar solas, así que pasaremos mucho tiempo juntos desde ahora, podría hacerles una rica cena — irguiéndome— Pasemos al supermercado, les haré algo delicioso.

— ¿No estás cansada? Podríamos solo pedir algo, llegaste a casa hoy, ya es tarde, deberías descansar.

— No te preocupes, las mamás nunca descansamos, además, me hace mucha ilusión prepararles algo y comer todos juntos en la mesa, extraño esas comidas.

— Bien, está bien ¿Y qué comeremos señorita chef?

— ¿Qué quieres comer? Aprendí muchos platillos nuevos en Rusia, y perfeccioné mis comidas de aquí, así que lo que se te de en gana puedo cocinarte.

— Uuuf — saboreándose— Podríamos comer esa carne que hacías en medallones — señalándome— la que hacías en budinera con un montón de verduras, y esas papitas con cascara... uuf... que delicia...

— ¡Mami! Yo también quiero comer eso.

Lucía apareció de la nada, lanzándose sobre nosotros, provocando que perdiéramos el equilibrio y termináramos recostados en el piso, todos juntos, carcajeando fuerte.

Éramos felices a nuestra manera ¿Por qué no seguir por este camino?

***

LUCA.

Todo iba bien con mi cita, acababa de llegar a la ciudad luego de mis peleas en México, unos toros que definitivamente eran duros de derribar, me dejaron horribles cardenales en el cuerpo como recordatorio de que debía aumentar aún más mi masa corporal, lo primero que haría luego de mis vacaciones, sería ponerme a entrenar, Tom dice que me sobreesfuerzo demasiado, pero ¿Cómo consigo seguir creciendo si no me esfuerzo?

La vida se trata de sacrificios, necesito olvidarme de la recreación y dedicar mi vida al entrenamiento.

— ¿Y bien? ¿Dónde vas a llevarme esta vez?

Blake y yo llevamos saliendo unos meses, digamos que nos encontramos por casualidad en la calle, nos juntamos a conversar, una cosa llevó a la otra y aquí estamos. ¿Qué mejor que tener un polvo seguro cuando regreso a casa?

— ¿Dónde quieres ir?

— Quiero ir a ver el mar, quiero playa, fiesta, diversión ¿Olvidaste cómo divertirte Landon?

Aún me resultaba incómodo utilizar el apellido de Tom, no me acostumbraba a la idea de tener un padre y un hermano con el cual... no me llevaba especialmente bien, sobre todo porque sé que sigue en contacto con mi ex novia, lo he escuchado hablar en un par de ocasiones, o ser fotografiados juntos en Rusia, la he visto en televisión, se ve que le está yendo de maravilla, nunca la vi más radiante y feliz.

No me necesita.

— Hola señor.

Una pequeña niña se acercó a mi mesa, parecía lanzarme cuchillos desde sus ojos, tenía los labios fruncidos y arrugaba la nariz.

No recuerdo quien... pero conocí a alguien que hacía las mismas expresiones cuando estaba molesta.

— Hola niña ¿Dónde están tus padres?

Digamos que no soy partidario de los niños, siempre que me ven, comienzan a llorar, y como no fui alguien dotado de mucha paciencia, prefiero alejarme.

— Mi mamá no creo que quiera verte en estos momentos, ella te odia ¿Lo sabías?

Que carajo...

No entendía nada de lo que pasaba aquí, pero no quería ser agresivo, era solo una niñita, quizá estaba perdida, intenté observar a mi alrededor, buscando a una pareja que buscara a su niña perdida, pero todos parecían muy tranquilos, entonces ¿De dónde salió?

— Lucía ¿Qué haces aquí? No debes hablar con desconocidos.

Le dijo el hombre que parecía ser su papá, pero apenas tuve la oportunidad de verle el rostro, soy consciente de que palidecí, era Connor.

— Connor ¿Es tu hija?

¿Esta es la razón por la que casi no nos visitaba? ¿Por la que nuestro padre babeaba cuando cierta persona le enviaba fotografías?

— Así es — entregándole el helado a la niña— Mami nos espera, se derretirán los helados.

Cuando dijo que su mamá era Jessa, todo a mi alrededor dio vueltas, eso quiere decir que ella lo eligió a él, decidió quedarse con Connor.

¿Por qué me duele tanto si yo la alejé de mí?

¿Por qué me siento tan traicionado?

— ¿Puedes darle un mensaje?

— No creo que quiera hablar contigo Luca, Jessa hace mucho tiempo que no quiere saber nada de ti.

— Dale el maldito mensaje o yo me aseguraré de dárselo en persona.

Levantándome con premura de la mesa para amenazarlo, lo que asustó a la pequeña, quien se escondió tras Connor, en ese momento me di cuenta de que la estaba cagando, y volví a tomar asiento.

— Lo siento... yo... suelo alterarme, no quería asustarte Lucía.

Haciendo el intento de sonreír, pero mis labios seguían curvándose hacia abajo.

— ¿Qué quieres que le diga?

Suspirando.

— Dile que necesitamos hablar, que no terminamos de la mejor manera, necesito disculparme, necesitamos cerrar ese ciclo.

— Se lo diré, pero dudo mucho que quiera hablar contigo.

— Mi mamá lloraba todas las noches por tu culpa — dijo la niña notoriamente apenada— ¿Tú llorabas?

Rasqué mi nuca con incomodidad.

— Yo... sí, algunas veces.

Su mirada me incomodaba, era una mirada acusatoria.

— Pues mi mamá lloraba todas las noches, no quiero que mi mami hable contigo, se lo voy a decir — tomando la mano de Connor— Vamos papá, a mamá no le gusta el helado derretido — tirando de él hacia la salida— Ni los señores malos, a ella no le gustan las personas malas.

Connor se encogió de hombros, pidiendo disculpas por la actitud de su hija, siguiéndola fuera de la heladería.

— Oye ¿Dónde vas?

Sin darme cuenta, me había levantado de la silla, con la intención de seguirlos.

— Sólo necesito verla una vez, sólo quiero verla.

— Yo soy tu novia Luca, no ella.

— Sólo una vez. Necesito saber si está bien.

— Yo la veo bastante bien, su hija tiene las mismas agallas que ella.

Ahora sé a quien me recordaba los gestos de la niña, son los mismos que Jessa solía hacer.

— Discúlpame Blake.

Dejé dinero sobre la mesa y salí de la heladería, viéndolos cruzar la calle directo al parque, Connor rodeaba la pequeña cintura de Jessa mientras ella tomaba la mano de su pequeña, una revoltosa, alegre y linda niña, cómo ella.

— Parezco un acosador... ¿Qué estoy haciendo?

Parando a escasos metros de ellos, viéndolos descansar bajo un árbol, Jess estaba cómodamente apoyada en el cuerpo de Connor, luego Lucía se lanzó sobre ellos, parecían una familia muy feliz, ella se ve feliz, está radiante...

¿Seríamos así de felices si no le hubiese pedido abortar? ¿Nuestro hijo o hija sería tan tenaz como esta niña?

¿Por qué fui tan cobarde? Ella es la mujer de mi vida y le hice algo horrible.

— Vete de aquí.

La niña otra vez. Lucía apareció de la nada, mirándome mal.

— Yo sólo quería ver cómo estaba tu mamá, no es necesario que le digas que estoy aquí.

La niña miró tras ella, estrujando sus dedos, nerviosa.

— Mi mami se enojó porque hablé contigo, así que no podemos volver a hablar.

— ¿Por qué te acercaste a hablar conmigo en primer lugar? Ella tiene razón, no puedes hablar con desconocidos.

— Es que usted señor... no es un desconocido...

Volvió a mirar hacia atrás, al pendiente de sus padres, probablemente no quería que se dieran cuenta de que hablaba conmigo.

Para ser tan pequeña, era muy inteligente.

— ¿Cómo que no lo soy?

¿Será que ella sabe sobre mi historia con Jessa?

— Es que usted...

— ¿Lucia? ¿Dónde estás?

Jessa preguntó por ella, la niña se asustó y corrió en dirección a ella, diciendo que estaba jugando con tierra un poco más allá, Jess le dijo que jugara donde sus ojos la vieran, la niña me dedicó una ultima mirada y se reunió con los demás niños en el juego, olvidándome por completo.

— ¿Qué me habrá querido decir?

Desanimado, di media vuelta y fui directo a casa pasando por completo de Blake, después de ver a Jessa, estar con Blake parecía una estupidez, no hay comparación entre ambas.

Supongo que aún después de cinco años, sigo teniendo sentimientos por ella.

Soy un jodido hijo de puta egoísta, después de todo el daño que le hice, ahora estoy pensando seriamente en cómo quitársela a Connor, sabiendo que él es su mejor opción y que tienen una hija juntos.

Ella sigue siendo mi mayor tentación, mi talón... 





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¡HOLA MIS AMORES! 

COMO LES PROMETÍ, TRAJE UN NUEVO CAPÍULO DESDE LA VISIÓN DE LUCA, TODAS QUERÍAMOS SABER QUÉ PASABA POR ESA CABECITA ESPECIAL SUYA.

ARREPENTIDO EL HOMBRE, LA VA A SUFRIR SI SE TOPA CON JESS, ELLA NO LE DARÁ TREGUA.

NOS LEEMOS MUY PRONTO MIS AMORES.


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