↑ 39 ↓
Esa mañana, por primera vez en 8 años, pudo abrir sus ojos celestes por mérito propio y no a raíz de una horrible pesadilla; los abrió entre lentos pestañeos y esbozó una sonrisa al bajar la vista y poder ver a la piltoviana con su cabeza sobre su pecho y su brazo izquierdo rodeando su abdomen. Llevó su mano a sus sueltos cabellos para acariciarlos con suavidad, Caitlyn emitió un tenue ronroneo ante sus caricias.
-Joder, eso fue muy sexy, Cupcake.- dijo Vi con voz ronca, logrando sacar una sonrisa de una adormilada Kiramman.
-Bueno, está claro que no me quejaría si despertamos así todas las mañanas.- respondió ella aún sin despegar su rostro de su pecho, así que aprovechó para moverlo ligeramente y besar rápidamente el inicio de su seno izquierdo.
-Si tú no tienes ninguna objeción, pues yo tampoco.- rió la zaunita apretando más el agarre en su cintura.
Tras unos breves segundos de silencio, Caitlyn imitó un sonoro suspiro que alarmó a la pelirrosa, quien no tardó en mover sus brazos para acomodarla y lograr que ella quede boca abajo casi por completo sobre ella. Cuando divisó sus hermosos orbes zafiros cristalizados, acunó su rostro con sus manos.
-Lo siento.- murmuró ella primero desconcertando aún más a la peleadora.
-¿Por qué estás disculpándote?- cuestionó Vi de inmediato y la peliazul reprimió un sollozo.
-Es que siento que te traiciono cada vez que deseo encerrar a Jinx o...- la piltoviana detuvo abruptamente sus palabras al sentir cómo el cuerpo de Vi se tensaba debajo de ella, pero aún así continuó- O, incluso, en las pocas veces que la deseo muerta.- terminó atreviéndose a confesarlo conectando sus miradas.
-Cait, yo...- la zaunita internó formular alguna respuesta, pero sus palabras sólo se atascaron en su garganta.
-Lo siento por pensar así, sé que es tu hermana y quieres luchar por ella. De verdad lo entiendo, porque también yo tengo los recuerdos de Powder atesorados en mi memoria, pero también los de ella.- siguió la menor de los Kiramman, quien se quebró al pronunciar la última palabra y un click resonó la cabeza de Violet.
-Hablas de tu mamá.- no era una interrogante, era una precisa afirmación.
-La extraño, Vi.- respondió ella hundiendo su rostro contra el cuello de la pelirrosa- Me ha hecho tanta falta.- musitó entre sollozos. Violet sólo la estrujó más hacia su cuerpo.
Era un hecho, Cassandra Kiramman estaba muerta y por culpa de su propia hermana.
¿Por cuántas muertes más era Powder la responsable?
↑ ↓ ↑
Se escabulló entre las sombras, aunque eran muy pocas; no fue su mejor idea infiltrarse por el día, pero la proyección de las luces solares generaban una que otra sombra que lo mantuviera a salvo hasta llegar a su destino.
Giró la manija de la habitación, entró y cerró la puerta detrás de él.
-¿Qué mierda haces aquí?- cuestionó la fémina que le daba la espalda a solo unos metros frente a él.
-A jugarme mi última esperanza.- contestó Ekko firmemente sin quitar su visión de su nuca. La joven emitió una amarga risa y luego se escuchó un cansado suspiro- Lo estoy diciendo en serio, Powder.- la llamó por su nombre real.
-¿Acaso vuelves a llamarme así?- interrogó ella en un bramido, mientras se daba la vuelta para encararlo.
Él sólo subió y bajó sus hombros despreocupado.
-Así te llamas, ¿o no?- se defendió.
-Hace tiempo que ese dejó de ser mi nombre.- refutó negando con la cabeza- Y tú lo sabes bien.- añadió frunciendo el ceño, mientras se cruzaba de brazos y caminaba hacia él.
-Que lo sepa, no significa que lo acepte, ya no más.- aclaró el moreno al mismo tiempo que también cruzaba sus brazos para mantener algo de distancia entre sus cuerpos- Porque sé que mi Powder aún está ahí, lo ví cuando atacaste mi refugio y te diste cuenta que Vi está viva. Solo necesitas sanar y dejar atrás tus demonios del pasado, hablar con ella. Es lo que ambas necesitan.- le dijo tan suavemente que sus palabras le parecieron una dulce caricia de apoyo y consuelo.
-Vete ya.- le pidió la peliazul en un hilo de voz, bajando ligeramente su mirada, pues ya no se sentía con la misma fuerza para desafiarlo.
-Si yo aún te amo, ella aún te adora. Solo recuerda eso.- reveló finalmente, antes de inclinarse hacia delante y depositar un casto, pero cálido beso en su frente y luego retirarse de la habitación, sin mirar atrás.
Jinx, apenas volvió a estar sola, llevó ambas manos a su rostro para ahogar sus sollozos.
↑ ↓ ↑
-¿Mejor?- murmuró Vi cuando Caitlyn decidió separarse de ella para sentarse sobre su colchón y secar las huellas que sus lágrimas dejaron sobre sus mejillas. La piltoviana asintió antes de notar que ahora los ojos celestes de su novia se enfocaban en sus senos completamente al descubierto.
-Mis ojos están aquí arriba, Vi.- recordó la ojiazul con una sonrisa pícara, gesto que fue imitado por la pelirrosa.
-Lo sé, Cupcake, pero lo que me gusta está allá abajo.- contestó coquetamente y con una gran sonrisa de lado, la cual logró sonrojar a la piltoviana- ¿Segura que estás mejor?- se atrevió a preguntar frunciendo el entrecejo al verla desviar su mirada, mientras se mordía el labio inferior.
-¿Sabes cuándo fue la última vez que hablé con mi mamá?- cuestionó ella de vuelta y Violet negó inmediatamente- Fue al par de años de aquella noche, cuando al fin logré confesarle que había bajado a Zaun esa noche y terminamos peleando por "lo imprudente que fui". Al día siguiente, yo salí temprano hacia la Academia de Vigilantes, sin mediar palabras con ella, y en la tarde sucedió el primer atentado en donde falleció.- reveló haciendo comillas con sus dedos cuando lo requirió y Vi abrió sus ojos con sorpresa.
-¿Cómo que estuviste abajo esa noche?- interrogó incrédula.
-Esa noche estaba con Grayson cuando recibió el mensaje de Vander que solicitaba verla, me pareció que había algo raro, así que me tomé la libertad de seguirla. De un momento a otro, le perdí el rastro, hasta que la encontré y ya era muy tarde. Estaba muerta sobre un charco de sangre. Lloré su muerte unos instantes, luego me percaté de un camino de sangre y también lo seguí; llegué al final cuando la explosión ya había pasado y lo que ví, me dejó paralizada: Powder le confesaba a Silco que no fue su intención matarlos, no creía que sus muñecos explosivos iban a ser tan poderosos; él solo la rodeó en sus brazos y se alejaron. Ninguno se dió cuenta de mi presencia.- relató tomando las manos temblorosas de su novia, quien no pudo evitar derramar lágrimas silenciosas al darse cuenta que la muerte de su familia no había sido su culpa, ni la de Silco; si no de su hermana.
-La explosión fue por Powder.- logró decir en su estado de shock, sintiendo cómo un poco del peso de la culpa que cargaba durante todos estos años se aligeraba un poco.
Caitlyn asintió antes de volver a hablar.
-Después de que fueran empecé a buscarte entre los escombros, pero solo hallé los restos de Vander, Mylo y Claggor. Pasé horas esperando encontrarte y, como no lo logré, saqué la misma conclusión que Powder: te creí muerta.- la voz de la Kiramman se volvió a quebrar en sus últimas palabras, logrando que Vi reaccione y la jale hacia ella para compartir un consolador abrazo.
Estuvieron unos momentos ensimismadas en la burbuja de amor y consuelo que habían creado, hasta que un estruendo, acompañado de un golpe seco, sacudió la mansión Kiramman.
¡Hola hola, genteeeeeeee!
Espero que les haya gustado el capítulo de hoy, lo hice con mucho cariño para ustedes. 🤍
Estamos muy cerquita del final, solo nos queda el último capítulo junto al epílogo para despedirnos de esta historia. Ojalá la estén disfrutando tanto como yo.
Bueno, eso es todo por hoy...
¡Nos leemos pronto! ❤️🔥
A_Hiccstrid
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top