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-¿Esto es necesario?- cuestionó Caitlyn con incomodidad viendo cómo la pelirrosa buscaba en sus cajones algún conjunto de ropa que pueda quedarle.
-En la sala, te dije mi respuesta.- contestó tajantemente Vi sin dejar de buscar.
Kiramman resopló resignada, caminó de un lado a otro por la habitación de la peleadora, tratando de encontrar la paciencia que le faltaba para soportar la situación. Desvió sus ojos azules al cuerpo en movimiento de Vi, cómo los músculos de sus brazos se marcaban ante sus flexiones, por fin le encontraba una ventaja al hecho de que sólo vestía un top deportivo y un bóxer femenino para dormir. A parte de sus fuertes brazos y abdomen tonificado también podía apreciar el inmenso tatuaje que emerge desde su cuello y se expande por sus hombros, brazos y espalda. Caitlyn no pudo evitar sentir una gran curiosidad por el significado de aquel tinte impregnado en su piel.
-Hum, bueno, al menos, agradezco que no hayas decidido quemar también mi ropa interior.- soltó sin pensar la peliazul después de una pequeña risa.
Al darse cuenta de sus palabras, se quedó estática sobre su lugar dándole la espalda a la otra mujer y con las mejillas encendidas por un rojo carmesí; de esa forma, no pudo ver cuando Vi se detuvo para observarla esbozando una sonrisa pícara en sus labios y un destello de diversión en sus ojos.
-Eso también deberíamos arreglarlo.- dijo sin molestarse en ocultar la gracia de la situación en su tono de voz. Sin embargo, Caitlyn no se inmutó ante su comentario- O sea, digo que es aceptable usar el mismo brassier durante unos días, pero las bragas ya deberías cambiarlas.- añadió antes de morder su labio inferior para evitar reírse al ver cómo la Vigilante se encogía entre sus hombros para mitigar su vergüenza.
La más alta gruñó por lo bajo cuando una molestia se activó en su cuerpo, ¿cómo se atrevía a bromear con ella con tal de avergonzarla luego de todas las aberraciones que le bramó la noche anterior?
-¡No tienes sangre en la cara!- acusó cambiando su semblante apenado por una más iracundo al girarse para encararla- Ya no tienes mi confianza ni amistad para que juegues así conmigo, Violet, mucho menos después cómo te expresaste hacia mí anoche. No querías lidiar conmigo, no querías que vuelva a ser parte de tu vida, incluyendo toda Zaun; pero aún así, te subiste a ese ring y me sacaste de allí para traerme a la casa que compartes con tus...- Caitlyn vaciló en escoger su siguiente y Vi levanta el mentón expectante a lo que pueda decir.
-¿Con mis qué, Caitlyn?- incitó a qué continuara.
-¡No lo sé!- exclamó irritada la piltoviana- ¿Amigos? ¿Compañeros? ¿Amigos con derechos? ¿Amantes? ¿Novios? ¡Es difícil saberlo cuando ves la confianza y la naturalidad con la que se pasean por toda la casa en ropa interior!- la señaló y también recordó haber visto a Jay en bóxers- Creo que si no fuera por mi presencia, hasta andarían desnudos.- arremetió volviendo a sonrojarse por algo más que la cólera.
¿Eran celos lo que ella sentía? ¿Celos de que, en realidad, Vi tenga esa confianza con alguno de ellos o, incluso, con los dos?
La de ojos celestes dejó de mirarla para buscar con más rapidez y brusquedad en sus desordenados cajones, finalmente, encontró algo de ropa que le quedaba más larga a ella, pues era de una chica que pasó una noche aquí y tenía la misma contextura y altura de Caitlyn. Luego le arrojó las prendas y, gracias a sus buenos reflejos, la joven pudo atraparlas antes de que se estrellaran contra su rostro.
-Es el estilo de vida que comparto con mis amigos, así que es una mierda que no te incumbe para nada.- le contestó entre dientes y una voz más gutural, al mismo tiempo que se levantaba y pasaba por su costado, hasta llegar a la puerta- Vístete rápido que tenemos un viaje que emprender.- indicó de forma grotesca, antes de salir azotando la puerta.
Caitlyn se sobresaltó por el golpe, pero luego dejó salir un cansado suspiro y se apresuró en vestir.
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-No es muy tarde para expresar mi disconformidad con esto, ¿no es así?- habló Luna cuando ya estaban caminando por las peligrosas y oscuras calles de Zaun.
-No quiero darle la razón a Luna, Vi, pero me preocupa que el dinero que ganamos en las peleas no sea suficiente para que nos dé provisiones necesarias hasta llegar a... ¿Dónde dijiste? ¿Piltóver?- intervino calmadamente el único hombre, recibiendo una mirada fulminante de la pelirroja.
Justo antes de que Vi logre responderle al pelinegro, Caitlyn, quien iba al frente, se giró para responder ella misma.
-El dinero no será un problema, créanme.- señaló dedicándoles una leve sonrisa.
-¿Por qué?- cuestionó la ojiverde de inmediato para luego mirarla de arriba a abajo- ¿Ahora nos vas a salir con que eres una de las tantas chicas de Piltóver que nacieron en cuna de oro?- volvió a cuestionar muy despectivamente. Kiramman simplemente apretó sus labios y se dió media vuelta para seguir con su camino, logrando que Luna suelte una carcajada.
-¡Cállate!- le gruñó Vi entre dientes, quien caminaba relajada con ambas manos en sus bolsillos de su chaqueta roja y su capucha ocultando parcialmente su rostro- No queremos atraer la atención de nadie.- le recordó.
-Lo que me faltaba, que la defiendas.- se quejó su amiga con hartazgo.
-¿La atención de quién?- preguntó ahora Jay- En este callejón no hay nadie más que nosotros.- dijo observando a su alrededor.
Sin embargo, antes de que alguno pueda decir algo más, un grupo de enmascarados salió de las alturas sobre patinetas aerodeslizadoras y no tardaron en atacarlos. Caitlyn no tuvo tiempo de apuntar a uno de ellos con su rifle, puesto que uno de ellos la golpeó para desarmarla y su arma quedó a metros de ella.
-Ay, carajo.- murmuró para sí misma al ver al líder tomar su preciado rifle, mientras la miraba tras la máscara.
-¿Y quiénes son estos imbéciles?- cuestionó Vi en un grito mientras peleaba con dos de ellos, nunca sin dejar de estar alerta a la dirección de sus amigos, en especial, de Luna porque no tiene mucha experiencia en los combates cuerpo a cuerpo.
-¡Son Los Firelights!- informó Caitlyn esquivando algunos golpes- No sé porqué nos atacan.- admitió antes de ser golpeada contra un muro.
-¡Caitlyn!- gritó la pelirrosa preocupada al escucharla soltar un alarido de dolor cuando la golpearon en su abdomen.
La peleadora no tardó en noquear a su propio contrincante para luego correr en dirección de la Vigilante e intentar salvarla de aquel hombre que la golpeaba, pero él fue mucho más rápido y, apenas la sintió cerca, se giró abruptamente con un cuchillo empuñado y lo clavó en su abdomen.
-¡Vi!- ahora fue la peliazul quien gritó asustada.
Aquel apodo no pasó desapercibido para el líder de Los Firelights, quien se paralizó al oírlo y observó detenidamente a la mujer que caía herida al suelo; le hizo unas señas a su gente y se acercó lentamente a Caitlyn.
Cait se arrodilló junto a la pelirrosa con la intención de socorrerla, pero un golpe en seco llegó a su nuca y todo alrededor se volvió negro.
¡Hola hola, genteeeeeeee!
Espero que les haya gustado el capítulo de hoy, lo hice con mucho cariño para ustedes. 🖤
Bueno, eso es todo por hoy...
¡Nos leemos pronto! 😘
A_Hiccstrid
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