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Narra Rick:

Aquel día fue de lo más normal, solo si no mencionamos que unos chicos idiotas estaban rebotando a mi hermana de las bragas... Por suerte Vivian, Hugo y yo estábamos cerca y la ayudamos

Terminando el día escolar regresamos al barrio y Vivian nos invitó a comer en su casa con sus padres, Flora y Valentín. Flora era de estatura baja y de apariencia tierna, tiene el cabello castaño oscuro pero la mitad inferior la tiene teñida de azul, tenía los ojos azules y usaba gafas, copa C y un trasero grandecito y redondo, ella antes trabajaba como maestra pero decidió retirarse para estar con su familia. Por otro lado, Valentín, era alto, de cabello negro, ojos cafés y tenía desarrollada bastante masa muscular, él aún trabajaba como maestro

Llegamos y Flora dejó de cocinar para saludarnos

Escuchamos pasos apresurados de las escaleras –Debo irme– Dijo el padre de mi amiga –Hasta pronto mi niña– Y le dio un beso en la frente a Vivian –Adiós chicos– Chocó los cinco con nosotros –Te veré esta noche mi amor– Y abrazó a mi tía para besarla –Me gustaría haberte ayudado con la comida como siempre pero se me hace tarde

–No te preocupes, amo cocinar contigo pero debes llegar a dar una clase. Que te valla bien...– Abrió los ojos –¡Eeek!– Chilló al sentir el tirón en sus bragas

–Jajaja. Nos vemos– Y se fue

Mi tía acomodó sus bragas con las mejillas rojas –Y... ¿Qué tal la escuela?

–Bien mamá– Mintió Vivian

Entendía porqué mintió, no quería decir nada de lo que le paso a Wendy por que si mi padre se entera, era capaz de mucho.. Él puede ser el tipo mas tranquilo que conozcas, pero cuando se trata de proteger a su familia, y aún más, a su Ratoncita, él podría convertirse en una verdadera maquina asesina

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–Tan delicioso como siempre tía Flora– Le dije al terminar mi comida. Me levanté para llevar mi plato al lava trastes

–Ni se te ocurra, yo soy anfitriona y yo recojo la mesa– Me detuvo ella

–Pero mi madre crío a un caballero– E impedí que me quitase el plato

Ella rió un poco –Ay Rick, eres un buen chico– Y me dio un beso en la mejilla

Poco después Hugo propuso ir al Wedgie Room. Este era un pequeño almacén que hay en el barrio, ahí hay muchas cosas para hacer calzón chino y otras cosas similares, tales como ganchos, una tirolesa, tablas para golpear el trasero, ropa interior extra, columpios y muchas cosas mas; también solemos usarlo para reuniones o para cuando tenemos un fin de mes de películas, donde mi tía Mina, madre de Hugo, selecciona una película y la proyecta en el lugar

Llegamos y nos llevamos la sorpresa de ver a mis tías Nora y Sara colgadas de las bragas, la tía Sara tenía una cinta en la cabeza y estaba atada de forma a que su cara quedaba pegada al trasero de mi tía Nora. Sara era un poco más alta que yo, era muy hermosa, cabello negro y ojos color miel, copa B y trasero regular; una de las cosas que la caracteriza era qua lo responsable que es, ella y la tía Nora eran pareja desde varios meses antes de que yo naciera, y tienen una relación poco común, pues cuando Nora era descuidada, desordenada o simplemente se "Portaba Mal", Sara le daba nalgadas, cosa que me gustaría ver jeje. Nora era un poco más baja que Sara, de piel entre morena y clara y era entre copa B y C, tenía mas trasero que pecho, y el cabello castaño oscuro corto

–Agh.. Esto apesta...– Murmuró mi tía Sara

–¡Hey!– Reprochó Nora –Yo ya me bañé, y no estabas tan en contra de tener la cara ahí anoche ¿Eh?.. ¡Ay!

Sara le dio un pellizco en el trasero –¡Sabes de lo que hablo!... Llevamos aquí un rato..

Nosotros tres veíamos eso aguantando la risa

–¡Niños! Me alegra verlos– Dijo Nora con una sonrisa en cuanto nos vio

–¿Qué les pasó?– Preguntó Vivian con una sonrisa burlona

Sara suspiró –Es una larga historia ¿Pueden bajarnos?

Vivian se frotó las manos y estaba dispuesta a tirar de sus piernas

–¡Espera!– La interrumpió Sara –Así no. Sabes que voy a llorar si recibo un calzón chino peor a este...

–Así es– Añadió Nora –Y si tiran de nuestras piernas o no nos bajan, les diremos a sus padres

Vivian y Hugo lo consideraron pero yo solo las baje, no porque tuviese miedo o algo así, quise hacerlo y ya

–Gracias– Dijeron mis tías al abrazarme

–Ahora, si nos disculpan.. Iremos a castigar a la mamá de Hugo

–Suerte

En cuanto ellas dos se fueron nosotros nos sentamos a pensar en qué hacer

–¿Vemos una película?– Propuso Hugo –Puedo ir por el proyector de mamá y ponemos algo del USB de Vivian

Mi amiga suspiró –Aún no descargo nada nuevo, la página de donde las descargo no tiene nada nuevo desde hace dos días

–Emm...– Antes de decir algo, fuimos interrumpidos por el sonido de la puerta del Wedgie Room

–Hola– Saludó nuestra amiga Agnes

Vivian le sonrió –Hola Agnes ¿Qué hay?

Ella suspiró –Nada nuevo que reportar, Paula ya terminó de instalarse en su nuevo lugar con Jasper y yo vengo de casa de mis padres

Cuando Paula se había mudado con su esposo a Estados Unidos sus padres también se habían cambiado de casa por lo que decidieron dejarle la casa del barrio a Agnes

–¿Y qué tal el trabajo?– Preguntó Hugo

Nuestra amiga gruñó –Un desastre... Aún no me acostumbro a levantarme temprano

Ella era la hija de mis tíos Mauro y Martín, copa D y un trasero que me hace suspirar desde hace unos años.. Su cabello es de color negro y sus ojos color chocolate, tiene un tatuaje de serpiente en la parte externa del muslo izquierdo, uno que casi nadie ha visto porque usa pantalones largos. Agnes era muy pequeña cuando nosotros nacimos así que nosotros tres la vemos como una hermana mayor o algo así, somos muy cercanos

–Tengo tiempo libre ¿Qué quieren hacer?

Reí –Eso mismo estábamos pensando

Ella tuvo una idea –¡Ya sé! ¿Jugamos a las luchas? Como cuando estábamos más pequeños

Vivian se sonrojó un poco –Jaja.. No sé ¿Exactamente igual? Recuerdo que todos estábamos en ropa interior al luchar

Agnes rió –Claro que lo haremos así, hace mucho que no veo tus tiernas bragas

Por detrás de nuestras espaldas, Hugo y yo chocamos los puños, esto se pondría interesante

Agnes se ató el cabello con una liga –¿Con cuál de ellos harás equipo?

–Con Hugo– Respondió simplemente

–Genial, me quedaré con Rick

Nos quitamos la ropa y me quedé solamente en mis bóxers negros, Hugo tenía unos amarillos, Agnes unos cacheteros negros y un sujetador que combinaba, por último Vivian tenía unas bragas blancas con un oso en la parte trasera y un sujetador blanco

–Bien, recuerden que es por relevos– Recordó mi mejor amigo

Agnes tocó mi brazo –¿Quién va primero?

–Tú dime

–Hm.. Parece que Vivian irá primero, así que yo me enfrentaré a ella

Asentí –De acuerdo, si me necesitas ya sabes, sólo toca mi mano y te la quito de encima

Ella sonrió –Estaré bien, conozco su debilidad

–¿Cuál es?

–Siente muchas cosquillas en los pies, aunque someterla y llegar a sus pies sin que me de una patada será difícil

Ambas chicas subieron una colchoneta, Hugo y yo contamos hasta tres y Agnes saltó sobre Vivian, ella la tomó de los hombros y usando su pierna la derribó, Agnes cayó bocarriba. Vivian le dio la vuelta y se sentó sobre su espalda, tomó su brazo y tiró hacia atrás aplicándole una llave, esperando a que se rinda rápido

–Dame la mano– Dije acercando mi mano a ella

–¡No!.. Yo... Puedo!..

Vivian rió –No, no puedes. Si aplico más fuerza te podría romper el brazo, pero si sigo así solo sentirás un dolor temporal que a la larga no aguantarás

–Tiene razón– Secundó Hugo –Me aplicó la misma llave, no podrás

Agnes gruñó –¡Dame la mano!

Se la di y subí a la colchoneta, empuje a Vivian y me subí sobre ella, usando mis piernas para inmovilizar sus brazos

–Parece que algo te distrajo– Me burlé

–E-Es que tu "Amigo" Se salió de tus bóxers...

Me sonrojé y me quité de encima de ella, y me lleve la sorpresa de que era una vil mentira para que me quite. Ella me llegó por atrás y puso su brazo al rededor de mi cuello mientras que con el otro sujetó este mismo para que no me pueda liberar

–Valla... Me sorprende tu habilidad para pelear

Ella sonrió –Gracias, papá me enseñó

Un recuerdo vino a mi mente, una historia que papá me contó, una de las peleas más épicas que presenció entre el tío Greg, alguien de 2mts que vive en Cancún y el papá de Vivian, donde Valentín aplicó la misma llave a Greg y este se liberó arrojándose hacia atrás; claro que tuve miedo de lastimar a Vivian pero pude esquivar su cuerpo y estando detrás la logré someter con mis brazos

–¿Qué dices de esto?– Me burlé

–Quisiera aplaudir, pero como verás no puedo

Sonreí –La intención cuenta

Agnes celebró –¡Bien hecho! ¡La tienes!

–Ya no..– Se rio Hugo al derribarme con una patada

–¿En qué momento de acercaste? Ni siquiera te vi– Dije desde el suelo

–El truco esta en no hacer ningún ruido

Peleamos por un momento pero al no usar golpes como tal, ninguno podía superar al otro

Hubo un cambio más, Vivian y Agnes iban a pelear

–Hagamos una apuesta– Propuso Agnes –Si te gano, te quitas la ropa interior delante de nosotros tres.. Sobra decir que si me ganas yo haré lo mismo

–Es una apuesta arriesgada... Si pierdo será muy vergonzoso

Agnes sonrió –Vamos, eres "La Gran Vivian", la chica entrenada para ser una "Pequeña Máquina de Combate".. Entrenada por alguien que solo ha perdido una pelea en toda su vida

–¿De qué hablas?– Preguntó Hugo

Se giró –Años atrás le gané a Vivian en una pelea, entonces ella le pidió a su padre que la entrene; incluso uso esas palabras "Papi, quiero ser una pequeña máquina de combate"

–¿Aún recuerdas esas palabras?

–Claro– Respondió con una sonrisa

–Eso explica porque peleas tan bien– Reconocí

Vivian asintió –Aún entreno de vez en cuando

–Estas llena de sorpresas– Alabó Hugo

Agnes se acercó a Vivian –¿Entonces? ¿La Gran Vivian quiere apostar o no?

Reconocí la estrategia de Agnes, tentar el lado soberbio de Vivian, un lado que rara vez aparece solo cuando ella tiene todas las de ganar en un juego que va en serio.. Y tanto Agnes como yo conocíamos como volver ese lado en su contra

Vivian asintió –Bien, es un trato pero será una pelea de verdad, con puños y patadas

Agnes sonrió –De acuerdo, sin golpes bajos ni tampoco a los pechos ¿De acuerdo?

–Como digas.. Igual no necesito golpear ahí para vencerte

Era la estrategia de Agnes funcionando. Vivian le dio unos golpes y se sentía ganadora, fue justo cuando Agnes le dio una patada y una vez la derribó le aplicó una llave a la que Vivian se tuvo que rendir

–La soberbia es un pecado muy peligroso amiga mía

–¿Cómo hiciste eso?– Preguntamos Hugo y yo al unísono

Agnes sonrió –Hubo un tiempo en que mis papás nos llevaron a Paula y a mi de vacaciones a Cancún. 6 Meses en los que pude aprender a pelear y poner en práctica todo, cumplí ese sueño y me volví buena peleando y todo gracias al Señor Greg, la única persona que ha logrado vencer al padre de Vivian

–Excelente historia.. Acabo de recordar que tengo que hacer algo..– Y Vivian planeaba escapar

Agnes la sujetó de las bragas –Irás después de que pagues

–Vamos Agnes... ¿En serio quieres que haga eso delante de los chicos?...

–Ambas sabemos que me habrías hecho pagar si hubieras ganado ¿O miento?

–.. Tienes razón... Habría hecho que pagues..

Me acerqué a Hugo –Oye amigo... No sé si sea buena idea ver a Vivian así, sabes como se pone cuando se avergüenza– Le susurré

–Tienes razón, por mas ganas que tenga de ver su cuerpo desnudo, no me sentiría bien si ella no

Estuve de acuerdo –Cuando ella se desnude, cerramos los ojos sin que Agnes se de cuenta

Justo cuando Vivian se quito la ropa, cerramos los ojos

–Valla trasero que tienes amiga mía.. Como has crecido– Halagó Agnes

–¡Hey! Quita tus manos de mi trasero

–Como digas..

–¡Ay! ¡No me toques los pechos!

"¡Qué tortura!" Pensé, escuchar todo eso y no poder ver nada era simplemente horrible

Agnes dejó de reír –Bueno, debo irme. Nos vemos

Poco después Vivian se colocó la ropa –Listo... Gracias por cerrar los ojos, no sé que habría pasado si sentía sus miradas lujuriosas sobre mi..

–Vamos, sabes que te tenemos el suficiente respeto, si tú no quieres que veamos, no lo vamos a hacer– Dije con una mano en su hombro

–Aunque si mas adelante sientes deseos de enseñarnos tus pechos o algo, eres libre de hacerlo– Bromeó Hugo

–Ja ja ja– Rio sarcásticamente