3:39pm

No tuve la necesidad de relatar o expresarme por los días pasados...todo es demasiado tranquilo y eso me asusta.

Aquella noche durmió conmigo, pero a la mañana ya no estaba. Una vez más marchó y yo tuve que seguir con mi rutina de diario. Otra vez soportar la universidad, realizar tareas, deberes...por un momento pensé en mandarle un mensaje...pero había algo dentro mio que me decía que no hiciera tremenda estupidez.

Ayer llegó más temprano; por un lado estos días han ayudado a que los moretones desaparezcan de mis hombros y así él no sospechará nada pero...por otro lado me atormenta saber lo que ha estado haciendo afuera...aquí en la tierra. Y, además, ¿por qué no me ha mencionado nada?

¿por qué no me ha encargado deberes como siempre?

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5:04pm

Luego de incertidumbre por fin ha enviado un mensaje, agradezco que sea viernes, casi fin de semana porque así, no hay algo de por medio que me irrite o corte el avance.

El mensaje es para que lo vea en un restaurante, ya tenia un tiempo que no salíamos y...bueno, creo que...nos sentará bien a ambos aunque...usar manga larga para mis antebrazos estaría de igual manera bien. ¿Qué tan tranquila será esta salida?

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7:47pm

Asustada, incomoda...¿Cómo describirlo? Recuerdo las cosas por mi buena memoria y eso me atormenta, pero me sirve para dejarlo en claro con ayuda de esta pluma:

—Lamento no haber estado en casa en estos días, no ha sido fácil el inicio de año.

—No hay problema, entiendo perfectamente... —Tomé el vaso y bebí con calma sin dejar de mirarlo de soslayo...cuando estoy con él no existe nada en mi entorno...estoy en paz—. Pero, de manera general...¿todo bien?

Siempre he odiado cuando mis sentimientos y mis dudas salen...al menos de mi boca y se las comento...todo suele salir mal.

—Sí...normal, Amy.

—Shadow... —mucité tomando el tenedor, jugando con este—, no me has...pedido que...ya sabes.

—¿En serio, piensas en esos deberes todo el tiempo? —No parecía molesto pero sí existía una inconformidad en su frase—, concentrate en tus tareas, en tu bienestar, la felicidad de tus pasatiempos...Quisiera ver lo ultimo que has dibujado.

—No lo he hecho, el inicio del trimestre ha sido...pesado... —No pude evitar no expresar mi desánimo a la par de bajar mi mirada a mi plato...«tengo que corregir este comportamiento» pensé mirándolo tranquila y sonriendo rápidamente—. Pero de ahí en fuera todo ha estado bi-

Sus movimientos fueron rápidos; antes de terminar la palabra su mano se estiró y tomó mi antebrazo; solté una queja entre dientes y fue el final de la puesta teatral que intenté sostener hasta ese momento. Su rostro se frunció y con lentitud y disimulo, subió la manga de mi blusón hasta mi codo, dejando ver uno de los recientes moretones en mi piel clara.

—¿Quien te hizo esto?

Esa pregunta la he oído miles de veces a lo largo de estos últimos años...y ya conozco mi respuesta.

—No lo sé... —Azotó su puño sobre la mesa derramando un poco la sopa, el pequeño brinco sobre mi asiento me hizo voltear hacia otro lado, quitando mi brazo de golpe.

—Al rato hablamos, Amy.

Continuar con la comida fue dificil más no imposible, era hora de volver a la rutina...si hasta parecía que ya la extrañaba y eso que fueron sólo tres días... quizá él siempre ha estado metido en la rutina, y yo, mi mente...divaga.

Llegando a la casa he decidido subir y aquí estoy, narrando...¿será que él subirá en cualquier momento o seré yo la que baje?