"Había una vez, Una reina y su rey.

Se amaban tanto...

Todos adoraban a ambos.

La Reina era dulce, atenta, amable, Era una completa belleza.

Todos la querían.

El Rey era tranquilo, atento, Amigable, Todo un galán.

Todos le querían.

Tuvieron por fruto de su amor, Dos hijos.

Ink y Zephyr.

Sus dos amados hijos.

Parecian la familia perfecta.

Pero... Un dia, Algo sucedió.

Nadie sabe realmente con certeza lo que pasó.

Pero... Los reyes se pelearon.

Se separaron, y de igual manera pasó con sus hijos.

La reina se fue con Ink.

El rey se fue con Zephyr.

Terminaron divididos en dos lados.

El Reino Rojo, Gobernado por la Reina.

Y el Reino Blanco, Gobernado por el Rey.

Los ciudadanos de cada cuento escogieron bandos.

Iban por quien tenia la razón.

"La reina jamás se molestaría por algo tonto, Obviamente el culpable es el rey."

"El rey es más sabio, Obviamente la Reina es la que inicio esto."

Se habían separado los Reinos.

Pero... La soledad comenzó a molestar a ambos reyes.

Tantos dias lleno de amor y alegria, ahora llenos de amargura y soledad.

El rey se la pasaba con varias concubinas, Buscando alguna que llene el vacio que se le quedó, Pero ninguna logró hacerlo.

Las criadas del castillo fueron las que criaron más a Zephyr.

El padre de vez en cuando le enseñaba cosas, cuando estaba de buenas.

Sin embargo, En el reino Rojo...

La reina moría de tristeza.

No soportaba ver como el Rey se acostaba con otras, varias.

Le daba dolor como aquel que amó tanto le hiciera aquello.

La locura comenzaba a inundar su mente. Estaba cansada de todo.

Y, Su Hijo era perfecto para lidiar con su estres.

"Definitivamente no dejaré que estes tu solo, Mi pequeño, Todos te amarán, Con tu belleza... ¡Eres como una bella niña! Y lo serás"

Esa era la idea de la Reina.

Y así, todos supieron que la reina tenía una hija.

Tan bella como ella.

La futura Reina Roja.

Un día, la tristeza y soledad mató al Rey.

La reina quedó aún sumergida en locura y dolor.

No soportaba más aquella vida.

Escribió lo que deseaba, Para luego ponerlo en una carta y guardarlo en un cofre.

"El último deseo de la Reina".

La reina murió, se ahorcó en el cuarto de su "Hija".

Tambien le había dejado una carta.

Nadie sabe lo que decía aquella carta.

Pero fue suficiente para que Ink "Madurará".

Luego de eso, Dejo de comportarse como el joven que era.

Termino aceptando todo lo que tenía.

Aunque, Tenía el poder de decir que era hombre, No lo hizo.

Quizás se habia acostumbrado, Quizás habia una razón más.

Lastimosamente, No pude saber que decia la carta que le dejó a su "Hija".

-¡Rurú!~- Llamaba Ink.

Error se sobresaltó al escuchar como era llamado.

Habia tomado aquel libro de una estantería del cuarto de Ink.

-¡Ya voy!- Respondió, Así pensaría que estaba de camino allá.

Aun tenía curiosidad, Quería seguir leyendo aquello que desconocía.

"Zephyr se hizo Rey del Reino Blanco, El sabía quien era realmente Ink.

De vez en cuando, antes de la muerte de la reina, Lo visitaba.

Para mantener contacto, por buenas relaciones.

Y la Reina solo le susurraba cosas al oido a Ink.

La reina tenía un deseo, Quizas un plan.

Quizás quería venganza, o quizas calmar su dolor.

Pero nunca lo logró, O eso se pensó..."

-El que escribió eso, se le cortó las manos.-

Error se asustó al ver al dueño de aquella voz.

Era Ink.

-N-No es lo que crees... Solo... Tuve curiosidad y...-

-¿No es interesante?... a El fue a la primera persona que le corté algo, Fue divertido hacerlo con mis propias manos...-

-...Lo siento por mi...Falta de educación.-

-Eres un lobo travieso, ¿Sabes lo mucho que me molesta ese libro?...-

-...¿Todo lo que dice es...-

-Todo es verdad, Súpongo... Quizás por ello ordené que dejaran de publicarlo, Este es el último que queda.-

-...Súpongo que no querias que nadie se enterara de esto...-

-Oh, Bueno, Quién sabe... Quizás sea una señal para dejar de mentir.-

-...¿Lo puedo seguir leyendo?-

-¿Hasta que parte llegaste?-

-Donde...Zephyr se hace rey.-

-Ya veo, En ese caso no.-

-¿Pasa algo malo?-

-Es muy descarado de tu parte hablar sobre ello. Ya deberías haber notado que odio este tema. -

-Mis disculpas.-

La reina roja suspiró.

-Hay muchas cosas, Que es mejor no saber.- dijo para luego quitarle el libro de las manos.

-Entiendo.-

-Bueno, ¿Nos vamos? Ya va siendo hora de que revise como estan todos los cuentos.-

-Claro.-

Ink se retiró, Error le siguió detrás.

Quedando con mucha curiosidad de lo que decía la historia.

¿Qué le hace aun seguir con aquella mentira?

¿Cual era el último deseo de la reina?

¿Qué decía la carta que le dió a Ink?

Simplemente, eran preguntas que no debería de hacerse.

Pero aun así, La curiosidad estaba allí.

Y la curiosidad nunca lleva a nada bueno.