Dia 27
El clima empeoraba, el frio calaba hasta los huesos y el calor de aquella fogata no era suficiente. Las suaves manos de Hinata verificaban si la fiebre habia bajado. lo cuidaba con suma devoción, mojaba un pedazo de tela que había arrancado de su blusa para poder bajarle la fiebre.

Ella se había recogido el cabello, dos mechones adornaban su bello rostro, mientras que sasuke había sido despojado de la prenda superior ya que su condición no mostraba mejoría, fue dificil para ella ya que verle el torso desnudo, esa piel blanca con cicatrices en algunas partes, ver como su pecho se contraia producto de la respiración, hizo que se sonrojara al punto de desmayarse pero tenía que hacerlo, sabía que él era muy importante para Naruto y sí moría en sus manos no podría volver a ver la cara a su querido Uzumaki.

-creo que ya está mejorando sasuke-san- dijo con una tenue sonrisa al ver la mejoría.

Se apartó para poner mas leña al fuego ya que el frío empeoraba. Se preocupó en tapar mas la entrada de la cueva, preparó una nutritiva sopa de vegetales, espero que se entibiara para poder darle de comer, con dificultad pudo sentarlo rescostado a la pared.

-tiene que comer..- su dulce voz se escuchó como regaño al poder ver el rechazo a su comida.

Las fuerzas lo vencieron, se cayó de costado, Hinata se apresuró para que no se lastimara, tomó la cabeza de él, la coloco en su regazo, lo levantó un poco para poder darle de comer, se sintió muy feliz al ver como recibía lo que ella había preparado.

Después de terminar su tarea, con sumo cuidado recargo la cabeza de sasuke en la almohada improvisada que había hecho, lo arropo y se dirigio a la fogata.

Los colores de aquel abrasador fuego hacían que la bella joven se sumiera en sus pensamientos, frotó sus manos para darse calor, colocaba un palo de leña cada vez que esta amenazaba con extingirse.

-Naruto kun... Hanabi Chan.. Otosama... okasan...- susurró con suavidad

La distancia solo afirmaba los sentimientos de ella hacía sus seres queridos. Amaba a Naruto pero también sentia la ausencia de su familia, Hiashi quizá no era el mejor padre pero seguía siendo su familia y lo amaba. Atrajo su mochila hacia su lado, metió su mano y comenzo a buscar el tesoro mas valioso que había traido de Konoha. Cuando lo tuvo en sus manos la nostalgia, la melancólica y el vacío comenzaron a hacerse presente en forma de cristalinas lagrimas. No era una simple cosa, era una fotografía donde estaban Naruto, Hanabi y ella, aquella última cita que tuvo con su prometido había quedado grabado no solo en su memoria sino tambien en una linda foto, entonces ella lo abrazó, lo colocó contra su pecho y se aferró a ese hermoso recuerdo.

-no era necesario Naruto-kun...- sonrió al ver lo nervioso que lucia su novio

-bueno.. yo quiero que Hanabi-chan.. seamos amigos.. pero..¿crees que es mucho?- preguntó algo inseguro y nervioso por el regalo que había llevado.

Ella negó gentilmente- estoy seguro que le va ha encantar- le tomó la mano para que controlará su nerviosismo

Naruto le propuso tener una salida junto con su hermana para poder llevarse mejor, apesar de que Hanabi no se había mostrado en contra de la relación de ellos, despues del compromiso se mostro sumamente celosa por el hecho de que se llevaran a su amada hermana, la sola idea de compartirla no le agradaba y nuevos sentimientos afloraban del interior de la pequeña ninja.

Hanabi le habia hecho la vida imposible ha Naruto cada vez que iba a su casa, pero siempre que lo hacía se sentía tan mal porque podía ver el amor en los ojos de ambos, sabía que solo él podía amar como se merece a la persona que mas admiraba.

-¡Hola Hanabi chan...!- saludó Naruto con suma algarabía

-buenas tardes Naruto-san..- dijo tratando de disimular sus celos

-¡vamos hacer muchas cosas el día de hoy..!- dijo sonriendo-.. hay un pequeño festival en la parte oeste de konoha... ¿te parece si vamos para alla?..- Hanabi no respondía, cosa que preocupó a Naruto-.. o.. dime.. ¿A dónde quiere ir Hanabi chan?..- insistió en ser agradable

Ella parecía meditarlo, miro el rostro de su hermana, le sonría para que le diera una oportunidad a Naruto, la conmovió ver la preocupacion de Hinata.

Si bien Naruto había sido considerado un héroe, el en clan Hyuga las cosas no habían cambiado mucho, después del rescate de la luna. Él fue ha presentarse con Hiashi al día siguiente para mostrarle sus intenciones con Hinata. Al principio pareció pensarlo, pero luego se negó rotundamente ya que el linaje de los Hyuga era muy puro. El Consejo se entero de la propuesta de Naruto, tampoco fue del agrado de ellos ya que durante generaciones ese clan se habían casado entre ellos. En su desesperacion busco la ayuda de kakashi y Tsunade para que atraves de su influencia pudieran persuadir al clan y al consejo para que consintieran su matrimonio.

Fue sumamente difícil, Hinata lloraba todas las noches porque su padre no le permitía ni salir para poder verse con Naruto, su llanto se escuchaba por toda la hermosa mansión, a Hanabi se le rompia el corazon escuchar como su amada hermana se dormía de tanto llorar, la observaba mirar a la luna recordando aquel anhelado primer beso.

-¡Hanabi chan!- llamó Hinata al ver como ella seguía sumida en sus pensamientos

Aveces la vida es dura, el camino es sumamente difícil. Hinata sentía que su corazon se apagaba todos los días sin ver a Naruto, pero los milagros existen y Hiashi cedió la mano de su hija. Aun recordaba el rostro de su hermana el día de la ceremonia de compromiso, se observaba tan hermosa y sobre todo feliz, feliz como nunca había estado.

No podía ser egoísta, amaba a su hermana y deseaba que fuera feliz aunque no fuera a su lado, la conocía lo suficiente y sabía que durante toda su vida siempre amó y admiró a Uzumaki Naruto, ¿porque tenía que negarle aquella felicidad? Y despues de mucho meditarlo.

-¡Quiero ir al festival.. Naruto san!- dijo con una sonrisa

Naruto y Hinata se miraron muy asombrados de la respuesta de la pequeña Hyuga.

-¡entonces vamos...dattebayo!- dijo con sumo entusiasmo

Naruto se adelantó, Hanabi quiso caminar pero fue tomada del brazo por su hermana, cuando volteó se encontró con unos ojos llorosos y una gentil sonrisa, no había muho que decir el rostro de su hermana decía "gracias".

Entonces un abrazó se produjo entre las hermanas Hyuga, un abrazo de añoranza, de amor, un abrazo que decía que apesar de las distancias siempre estarian juntas pasará lo que pasará. Hinata podía sentir el perfume del hermoso cabello de su hermana, cerró los ojos tratando de que se quedará grabado esa escencia perfumada de cerezos y canela, Hanabi sintió la calidez del cuerpo de su hermana, ella no solo era su hermana mayor, era la persona que mas admiraba, la persona que quería ser cuando creciera, era una segunda madre para ella.

-No llores Oneesama..- le dijo cuando se apartaron

Hinata se limpió las lagrimas de felicidad.

-¡vamos...Naruto san nos esta esperando..!-

Ella tomó la mano de su querida hermana mayor, hace mucho que no lo hacía y se sentía tan bien. Era un lazo entre hermanas, un lazo invisible pero imposible de romper.

Naruto quién había visto disimuladamente la tierna escena, se sintió tan bien ya que había visto sufrir a Hinata por culpa de los celos de su hermanita pero ahora todo eso ya estaba en el olvido, ahora solo quería tener en su memoria aquella hermosa imagen de una feliz Hanabi que jalaba del brazo Hinata quien lucia mas feliz que nunca.

Fue un día hermoso, el festival cumplio su cometido de entretener y mostrar cosas maravillosas. Después de terminar de comprar, se disponían a irse pero Naruto tuvo una fantastica idea.

-¡Hinata chan... Hanabi chan... vamos tomarnos una foto..!- dijo muy feliz.

Eran pocos los momentos que podía ver la linda relacion que tenía Hinata con su hermanita y quería que no olvidarán aquel día. Naruto creció solo, rodeado entre gente discriminatoria y secretos, el hecho de que Hinata tuviera una familia lo hacía muy feliz ya que ella ahora se había vuelto lo mas importante para él, quería hacerla feliz, quería que sonriera siempre ya que le iluminaba el día, quería que esa mirada triste desapareciera de esos hermoso ojos, quería recordarla como en aquel momento, una Hinata brillando de felicidad.

-¡Sonrian...!- dijo el fotógrafo

Naruto abrazó a ambas hermanas Hyuga, Hanabi quería huir de la cercanía de él pero cedió resignada y sonrió, mientras que Hinata se sonrojo levemente al sentir la mano en su hombro. El contacto de piel con piel le hacían sentir muchas sensaciones nuevas que la avergonzaban.

El flash salió sellando aquel hermoso día en una fotografía, Hinata le pidió a Naruto quedarse con la foto ya que quería tener un lindo recuerdo del día donde estaba rodeada de los dos seres queridos que mas amaba.

Su llanto era un suave arrullo en esa cueva fría y oscura, ella apartaba y apegaba a su pecho aquel amado retrato, teniendo la esperanza de volver ha tener otro día igual.

Unos ojos profundos se abrían con dificultad, entre su somnoliencia de su estado dirigio su mirada hacía aquella hermosa dama quién estaba al lado de una flameante fogata, observó a duras penas un retrato y lo poco que pudo notar fue a una hermosa niña con aquellos ojos peculiares y entonces supuso de quien se trataba, dirigió la mirada hacía ella quien estaba iluminada por aquel fuego, pudo sentir su tristeza y un sentimiento invisible de añoranza y pérdida, ese sentimiento que era producido por la distancia entre hermanos, ese sentimiento que él conocía perfectamente y lentamente se fue envolviendo entre su estado hasta quedarse denuevo dormido.

Dia 28

El frío habia empeorado, el vapor que salía de su boca era muy notorio, hasta se podría decir que podía ver que de su piel tambien salía, pero apesar de ese clima hostil y salvaje. la vida en ese lugar parecía detenida en el tiempo.

Hinata estaba en el río, activo su byakugan para poder pescar, no era muy buena lanzando kunais pero aún asi lograba cazar algunos peces.

Una gran sonrisa estaba en el rostro de aquella delicada mujer, había reunido comida suficiente, no había enemigos en kilometros, eso le traía mucha paz, tenía 5 pescados y aunque Sasuke no despertaba tenía la esperanza que lo hiciera.

Entró a la cueva con sumo cuidado, observó que él seguia dormido, inmediatamente comenzo a preparar algo diferente. Con la ayuda de un kunai sacó las escamas de los pescados, tambien las tripas, los coloco atravesados encima de la fogata, le colocó unas hojas aromáticas para que tengan buen sabor y se apartó para ir a revisar a su enfermo.

-sasuke san... sasuke san- lo llamó suavemente

Hinata siempre antes de acercarse primero lo llamaba, si no le respondía entonces procedía a curarle la infección cosa que había pasado el último dia ya que el no había mostrado mejoraría aunque no tuviera fiebre.

Después de tanto observó como aquellos ojos profundos se abrían lentamente, se le dibujo una sonrisa amable en el rostro. Ella solo deseaba su mejoría apesar de todo lo que haya pasado.

-¡Que bueno que desperto!- dijo emocionada aunque trató de apagar su alegría por evitar la incomodidad de su paciente.

Aquel rostro lleno de alegría y de luz solo lo irritaba más, desvió la mirada del bello rostro que estaba muy cerca de él.

-¿cuantos dias han pasado?- su mismo tono de voz frío y vacío

-casi dos días..- contestó rapidamente- el veneno de su herida es muy peligroso, porque altera los movimientos de sus músculos sobre todo del corazón logra modificar los latidos para que se vuelva lento pero lo peor es cuando llega al cerebro..- apreto los puños de soll pensar que pudo llegar a ese estado-...muere lentamente..- explicó muy preocupada-.. sa..sasuke san..- llamó timidamente para que la volteara a ver

Él la miro con el ceño fruncido ya había escuchado suficiente.

-Lo lamento..- dio una reverencia-.. si no fuera por mi.. usted.. usted no hubiera estado al borde de la muerte.. yo.. yo lo lamento..- dijo tratando de contener las lágrimas

- deja de disculparte- regaño con severidad-... me irrita que te disculpes por todo..- dijo con dureza

Hinata agachó la mirada en señal de vergüenza.

-¡No debiste ayudarme.!.- volvió hacer duro

Ella parecía no entender-.. No yo debía..-

-¡Nadie te lo pidió.!- la interrumpió para una vez mas gritarle y mirarle con rudeza

Su corazon latía intensamente de lo asustada que se sentía, esos ojos negros, profundos y vacíos la desnudaban, su mirada era tan penetrante que parecían darle una cachetada y por un breve momento recordó aquella mirada fría, vacía y perdida, le recordó a como Neji la miraba en los examenes chunin, a esa mirada fria que por muy poco hubiera sido la ultima sino hubieran detenido a su primo.

El valor se esconde dentro de cada uno, necesitaba de eso, reunir todo el valor que podía para hacerle frente a este ninja que apesar de los esfuerzos de Naruto aun seguía sumido en su tristeza y desesperacion.

Él trato de pararse pero aun su cuerpo seguía bastante entumecido.

-aún debe descansar...- lo ayudo a recostarse-.. el veneno sigue en su cuerpo, si hace movimientos bruscos solo empeorará su condición haciendo que se irrigue en todo su cuerpo- explicó sin verle a la cara.

Inmediatamente tomó su unica mano para poder cambiarle el vendaje pero él se apartó con brusquedad y le quiso dar la espalda.

Reunió todo el valor que tenía para tomarle la mano con fuerza, cosa que molestó a sasuke.

- sabe.. usted debe saber que puede perder el brazo si no lo curo- la sola idea de perder su único brazo hizo que se tensara y Hinata comenzó a quitarle las vendas-.. le veneno es muy potente.. resaltó su fortaleza, cualquier otra persona ya hubiera muerto... usted es muy fuerte... pudo resistir esta sustancia en su cuerpo por mucho tiempo..- resaltó con sinceridad

Comenzó a desatar poco los vendajes, los cuales a medida dejaban ver el brazo, también se podia ver un remedio casero que tenía hojas y un olor bastante fuerte que incómodo a sasuke.

- lamento el olor pero era necesario para que el veneno detuviera su avanze- termino de quitar sus vendas, tomó el pequeño botiquín que tenía, saco unas nuevas, pero antes limpio la zona con un paño con agua tibia.

Sasuke observaba a la hermosa joven realizar este trabajo con suma devoción, de una manera metódica y por un instante recordó a sakura, si bien el conocía los sentimientos de su compañera de equipo, ver a Hinata hyuga le recordaba a ella ya que siempre ella le otorgaba los mismos cuidados pero él creía que solo se podría tener un trato así por aquellos sentimientos, pero al ver a la chica de ojos aperlados sabía que no era asi.

Ella acercó un preparado que tenía en un pomo para colocarle encima de la infección previamente limpia la zona, luego lo vendo con cuidado y guardo todas sus cosas.

- porfavor beba con cuidado..- le ofreció lo que parecia un té

-¿Que es esto?- preguntó con suspicacia

-es un remedio que ayudará a controlar sus espasmos musculares y lo ayudará a dormir..- explicó mientras se aproximaba a la fogata para verificar si la comida ya estaba lista.

Sasuke bebía con cuidado, observó como Hinata picaba con ayuda de un kunai los pescados para verificar si ya estaban listos, al parecer solo dos estaban listos, saco estos y se aproximo.

-por favor coma..- dijo mientras le ofrecía la comida.

El dejó la taza en el piso y recibió la comida sin protestar, dio el primer mordisco. El sabor era bastante agradable pero no demostraría lo mucho que le pudiera gustar.

-¿cuanto tiempo me tomara curarme?- preguntó mientras daba otro mordisco al pescado.

- como va su recuperacion, me atrevo a decir... dos dias tal vez..- dijo con duda en su voz

Él resoplo molestó y siguió comiendo. Hinata espero que este listo los demas pescados y comió en silencio. Apesar de estar a pocos metros ambos sentían que habia una enorme distancia entre ellos y no solo esto había una muralla enorme para que fluyera una comunicación normal.

-sasuke san ¿porque no dijo que tenía una herida infectada?- pregunto con inocencia

-Tsk... lo que me pase a mi no es asunto tuyo...- dijo con indiferencia

-si usted es herido, yo quisiera ayudarlo... ademas.. yo..-

-¡No intervengas Hyuga!- dio un puñetazo contra el suelo para que se callara- porque me hayas ayudado no significa que somos amigos... ¡Nadie te lo pidio!- la miró con suma frialdad

Hinata contenía sus ganas de llorar, disimulaba loa temblores en su cuerpo producto de aquella mirada tan cruel de sasuke. Bajo la mirada y se apartó mas de él.

Sasuke vio como ella se alejaba de él y se sintió aliviado. No quería escucharla, odiaba su voz dulce, sus gestos amables, su estúpida sonrisa, la prefería callada y con el temor que él le producía. Se acostó dándole la espalda y cerró los ojos hasta conciliar el sueño.

Al anocher Hinata decidió preparar una sopa de pescado con verduras que había encontrado en el bosque, entro a la cueva con la cautela de siempre, pudo observar que su paciente dormía placidamente y se apresuró para preparar la comida.

Cuando la comida estuvo lista se aproximó a sasuke, queria evitar a toda de cualquier forma su incomodidad pero eso era algo imposible.

-sasuke san...- movió su hombro- sasuke san la cena ua esta lista- volvió a mover su hombro.

En ese momento él giró su cuerpo dejando a la vista su cara y apesar de haber visto su torso desnudo Hinata se atrevió a ver por primera vez el rostro de él.

Su rostro con una piel blanca como la de ella, una nariz perfilada, cejas gruesas, rasgos muy varoniles, no había duda sasuke Uchiha era guapo pero sus dotados rasgos no eran comparados con los de su querido Naruto.

Sasuke podría ser incluso mas guapo que Naruto pero esos ojos azules llenos de vida, esa mirada llena de esperanza era lo que mas amaba de él, la luz que podía ver en cada sonrisa, en cada gesto y eso no tenía punto de comparación con rasgos perfectos.

-sasuke san.. despierte- dijo timidamente

El abrió los ojos lentamente y se encontró con una mirada llena de preocupación.

-por favor coma..- lo ayudó a levantarse para que comiera.

Ambos comieron con el aconstumbrado silencio entre ambos, incluso el sonido mas mínimo era musica para ella, como crujia la leña cuando se quemaba, los sonidos de los grillos, aveces el sonido del viento entre los árboles la ayudaban ha sobre llevar la indiferencia de sasuke. Luego de comer le ofreció la medicina para que pudiera dormir la cual aceptó, terminó de beber y le dio la espalda para poder dormir.

Ella vio con pesar aquella silueta, nunca en su vida le había tocado tratar con un persona tan difícil. Se quedó viendo el fuego, los ultimos era su actividad favorita, ver el fuego como flameaba producto del viento, escuchar el sonido del crugir de la leña y perderse en sus recuerdos.

Ahora en su mente estaban los miembros de su equipo, shino y kiba los cuales habían sido un gran apoyo para ella. Desde que se hicieron equipo se comportaron como unos hermanos mayores para ella, recordaba las pláticas interesantes con shino, los chistes con kiba y al tierno akamaru.

Estos dias para ella habían sido muy difíciles. Apesar de haber tenido misiones, de haber viajado a diferentes partes por su rango de kunoichi, de haber estado en un guerra, de haber visto morir a su querido primo, sentía que no sabía nada de la vida, que hay mucho mas por conocer, que hay mucha gente por ayudar y sobre todo a valorar con todo el corazón lo que siempre tuvo y no lo veía.

Continuara...

Esta historia esta disponible en wattpad como "la prometida de mi mejor amigo | sasuhina" o pueden buscarme en los perfiles como skybluepetunia y encontraran mis tres historias.

saludos :3