La historia originalmente de MIDORY.♡￫ܫ￩♡

Lagrimas

Ding dong...

–¿Qué?

Ding, dong

–Mendosukai

Ding dong

–Shika-kun están tocando

Ding dong

–Si lo se mujer

Ding dong

–¿Entonces?

–¿Entonces que?

–Abre la puerta

–Hai... hai... que desesperados...

Ding, dong

–Ya voy, ya voy –dijo este con su pachorra eterna, dirigiéndose hacia la puerta mientras que con una mano se restregaba los ojos

Ding dong

–Quien puede ser... no espero visitas... mamá dijo que vendría hasta la tarde... –un enorme bostezo le cegó por unos segundos –un vendedor... lo más seguro

Click

–Buenos días –dijo una voz queda al momento en el que el Nara abrió la puerta, los pelitos de la nuca se le erizaron, esa voz, esa inconfundible voz, le hizo que toda pereza se le fuera en el momento en que su vista se topo con 2 pares de ojos que le miraban de una forma no muy agradable

–¿Gaara?... –dijo Shikamaru viendo al joven kazekage frente a el, tan impasible y serio como siempre, una total diferencia, a su hermano mayor, el cual parecía querer asesinar al joven de las sombras, Shikamaru agradeció que las miraras no mataran, ya que si fuera así, el, en ese momento no sería más que una mancha de sangre en el suelo.

–Nara –empezó a decir Gaara con aquella voz tan queda que le caracterizaba – lamentamos molestarte –dijo el cortésmente, viendo como el dueño de la casa iba vestido con un simple pantalón de pijama, lo cual indicaba que acaba de levantarse, eso aunado a sus enormes ojeras y los ojos somnolientos hacían más evidentes sus sospechas. –pero hemos esta mañana al departamento de Temari y al no encontrarle... suponemos que...

–¡DONDE ESTA TEMARI! –gruño un enfadado Kankuro, haciendo a un lado a su hermano con un gesto lánguido de su mano, Shikamaru, vio al joven marionetista, y moviendo los brazos como señal de negación contesto tratando de fingir demencia.

–¿Temari?

–¡No estaba en su departamento!

–¿Y?

–Y solo puede estar contigo

–Lo siento, lo siento –dijo el recuperando su pachorra –aquí no esta... seguramente debe estar en casa de alguna de sus amigas, puesto que no le he visto desde...

–Shika...–dijo una cuarta voz conocida para todos los presentes

–..desde hace cinco segundos –dijo Shikamaru viendo como su farsa había sido derrumbada, volteo su cara para ver a la hermosa joven de la arena salir de un cuarto con una mirada de somnolencia.

–¿Quién esta tocando tan tempra...? ahhh... - la joven a la que sus hermanos buscaban hizo acto de presencia en condiciones, semejantes a las del Nara, la cual indicaba a los dos jóvenes de la arena que su hermana acaba de levantarse de la muy probable cama del ninja de las sombras...

–Tus hermanos –dijo en voz queda Shikamaru, haciéndose a un lado para que pudieran pasar.

–Gaara... Kankuro que... que... hacen aquí

–Temari... ¡que demonios! –dijo Kankuro, toda hecho una furia

–Hola hermanito a mi también me da gusto verte –dijo ella con un ligero tono de sarcasmo, haciendo irritar mucho más al joven, el cual respiro un par de veces antes de decir con un tono de voz que por poco llegaba a ser un grito:

–¡¿Qué estas?!

–¿Si?

–¡¿Que estas haciendo, en la casa de este imbecil?!

–Oye...

–¡KANKURO! ¡MAS RESPETO! –dijo Temari enfadada, mirando con irrefutable odio a su hermano

–¡RESPETO... ESTAS SEMIDESNUDA EN CASA DE UN IDIOTA Y AÚN ASÍ PIDES RESPETO!

–Kankuro... –dijo Gaara con voz apenas audible – por favor...

Kankuro guardo silencio por unos segundos antes de soltar un par de palabrotas, y decirle furibundo a su hermano:

–Maldita sea Gaara siempre le perdonas todo –dijo este viendo a su hermano mayor, con una expresión mucho más madura para lo que correspondía a su edad, el joven pelirrojo negó con la cabeza mientras empezaba a hablar tranquilamente

–Acabamos de llegar de la arena, y supusimos estarías aquí

Temari rió forzadamente...

–Y puedo ver que no nos equivocamos...

–...

–Pero no estamos aquí para hablar sobre esto... sabes que nuestra visita a la hoja es meramente un protocolo

–...si, si, claro... –dijo en voz queda Temari mirando de reojo a Shikamaru, el cual buscaba con desesperación una caja de cigarrillos -aún así...me alegra... tanto verte aquí... y a Kankuro... –finalizo Temari, viendo con algo de molestia a su hermano marionetista, el cual seguía mirando con ojos asesinos al shinobi

–... a nosotros también Temari –dijo Gaara, poniendo una mano enfrente de su hermano, parando las notables intenciones de querer matar al heredero de las sombras... Temari dio un paso delante de Shikamaru, el cual ya encendía un cigarrillo, y esta con una sonrisa infantil dijo:

–Y bien...–dijo una vez Temari fingiendo la voz para hacerle de buena anfitriona –¿quieren un poco de té?

–Por favor... ha sido un viaje largo... y quisiéramos llegar descansados antes de visitar a los Hyuga...

–...que bien... -dijo Shikaramaru –recordare agradecerle a Neji... todo esto

00000

Neji sentía repulsión en ver aquellas mujeres, eran hermosas no lo discutía, pero para el, el hecho de ser solamente bello, no le decía nada. Una cabeza pequeña y bolonga coronada con dos bolitas de cabello en su tope le llamo la atención, solo podía ver el tope del cabello, dado el mundo de gente, el cual se acercaba cada vez más y más, Neji siguió con la mirada aquellos chongitos que se movían torpemente. Y no dejo de seguirlo hasta que la dueña de la cabellera estuvo frente a el...

–Neji-san –dijo la voz alegre y chillona de Tenten, haciendo que el Hyuga alzara una ceja, jamás le decía así, miro a Tenten interrogante, la cual guiñó un ojo antes de volver a decir con aquella voz chillona, poniendo énfasis en sus palabras y alargando las vocales le indicaba que no estaba más que burlándose de la forma de hablar de esas mujeres. Neji entonces decidió seguir un poco el juego.

–¿Si dígame?

–Me permite... Hyuga-san –dijo ella con una sonrisa y una reverencia demasiado fastuosa

–Lo que desee Tenten-sensei –dijo el elegantemente

-Discúlpeme –dijo ella con un tono de voz meloso imitando a varias de las bobas que tenía al lado que le veían en ese instante como si fueran sus peores enemigas. –yo no he tenido oportunidad de acércame para hablar con usted –dijo esta pasando una mano por sus dedos, de forma inocente, que a el le pareció todo menos inocente. Carraspeo su garganta un poco antes de contestar

–Lo se... lo he notado

–Digame puedo hacerle una pregunta –dijo ella con aquel tonito de voz molesto

–¿Quién no?

–Me da tanta pena... preguntarle... es una pregunta algo estupida, pero realmente he tenido esta duda... desde... hace un par de días... –dijo esta, sintiendo las miradas de las jóvenes puesta en ella, poco le importo, ella también era una candidata, y no iba a desaprovechar una oportunidad como aquella.

–Cualquiera aquí ha preguntado toda serie de cosas, le garantizo que la pregunta que usted me haga no puede superar a las otras...

Tenten sonrió y viendo a la prima mayor de Neji, (la cual apiadándose de el, decidió pasar un rato a su lado, esperando que su presencia acortara aquella entrevista sin sentido), Hinata ya se encontraba a su lado, y con un elegante movimiento se sentaba a su lado.

Tenten trago saliva nerviosa, accedió para si misma moviendo la cabeza. Y mirando sus manos y luego los ojos de Neji le encaro

–Dígame Neji-san –dijo esta ignorando su falso tono de voz, y diciendo en su clásico tono jovial, entremezclado con un poco de nerviosismo– ¿Se ha enamorado alguna vez?

–¿Cómo? –dijo Neji quitando esa sonrisa de sus labios, por un segundo dada la actuación de Tenten, pensó que la pregunta sería igual de tontas que las de las otras chicas. Sin embargo Tenten pregunto algo que en ese momento realmente le importaba.

–¿Se ha enamorado alguna vez?... –dijo Tenten con un tono de voz baja como avergonzada de decir dichas palabras, Hinata abrió los labios sorprendida, cuando Tenten le había comentado que le preguntaría algo a Neji jamás se imagino que sería algo como aquello, miró a su primo y luego a la joven la cual, al igual que muchas estaba expectante de respuestas. –¿o lo esta ahora? –finalizó.

Neji sintió el corazón en la garganta, sabía bien porque le preguntaba eso, si ella se lo hubiese dicho en cualquier otro momento le hubiera dado la respuesta que quisiera, pero tenía que hacer eso ¿preguntarle algo tan personal y tan íntimo enfrente de un montón de desconocidas?, las cuales se veían encantadas esperando las palabras del Hyuga. El calor de la habitación se hizo insoportable el cuello alto de su traje le estaba ahogado. Jaló un poco el cuello, antes de decir como un susurro.

–No...

–¿Qué?

–No lo se –dijo el mirando a la joven de los chongitos la cual paso la expresión de su cara de sorpresa hacia una visible molestia en cuestión de segundos, Tenten dio un par de pasos atrás, se perdió entre la muchedumbre y desapareció de su vista. Neji miró a su prima, por una fracción de segundos a lo cual ella respondía con voz queda:

–Creo que no era la respuesta que esperaba...

–No... creo que no... Hinata-sama

00000

–Extraño a Hinata...

–...

–Extraño a Hinata...

–....

–Extraño a Hinata...

–.....

–Extraño a...

–Ya te oí... ¡ahora por favor puedes cerrar la boca!

–¡Sasukeeeeeeeeeeeeeeeee! –dijo el joven de cabello rubio mirando de forma lastimera al Uchiha, el cual trataba inútilmente leer un grueso libro, y tomar una taza de café bien caliente, cosa que le estaba resultando imposible por la constante interrupción del Uzumaki.

–¡Solo ha pasado un día desde que la viste!

–¡Como si fuera un siglo!

–...lo que no entiendo es si tanto sufres por su ausencia... –dijo este con un ligero tonito sarcástico–¿porque no vas con ella, y me dejas en paz?

–Sabes que no puedo hacer eso... te lo he dicho toda la noche... ahora esta ocupada con esas idioteces de la familia ¿Qué acaso no has escuchado nada de lo que te he dicho?

–No, no realmente

–Tengo un mal compañero

–...–Sasuke bajo la vista por unos segundos, ahora venía todo aquel sermón del mal amigo, lo conocía...

–¡Y mal amigo! –dijo Naruto confirmando sus sospechas

–¡Cualquier amigo se pondría furioso si te escuchara decir eso toda la noche!

–kuso mal amigo

–si... el peor de todos...

–Aún no se como te tome como mi compañero de casa... -dijo Naruto tomando una galleta de un tarro cercano, el cual tenía un letrero en letras pequeñas...

Propiedad de Sasuke Uchiha –Sasuke siguió con la mirada el recorrido de la galleta, hasta que termino en la boca del Uzumaki, miró el tarro, las etiquetas delimitadoras de propiedad poco le importaban... Sasuke suspiro ya ni para que molestarse, tomo otra galleta, y la llevo a su boca, para después contestarle:

–Te recuerdo que esta casa la conseguí yo... y yo fui el que te busco como compañero no tú... –finalizó en bajando su vista, procurando concentrarse en la lectura

–...Nehhh lo hiciste solo porque la mamá de Sakura... no permitió que se viniera vivir contigo sin haberse casado antes, y el costo de esta casa es demasiado incluso para ti

Por lo visto ese día no podría leer, pensó Sasuke, miro a Naruto maldiciendo la razón que tenía, la casa era enorme, demasiado grande para ellos dos, tenía 6 habitaciones, 3 baños, un recibidor enorme, sala, comedor, cocina y un patio gigantesco donde podía entrenar lo que quisiera, era demasiado, pero a el le gustaba, dado que después de todos los años que habían pasado, finalmente había decidió echar raíces en Konoha y encontrar una bonita casa que le semejara a aquellos años mozos, en que el clan Uchiha, pertenecía intacto, por fortuna encontró aquella casa la cual era semejante grande, y algo costosa, pequeño detalle que no se resolviera con el sueldo de dos shinobis bien pagados.

Sin embargo todo plan se le vino abajo cuando la madre de Sakura negó a su hija irse a vivir con el, siendo una mancha para el honor de su hija, vivir bajo el techo de un hombre si no había una argolla de por medio.

Al día siguiente Sasuke pidió su mano, pero su madre, como buena sobreprotectora, pidió que el compromiso se celebrara cuando su retoño cumpliera los 20 años... edad oficial para que los shinobis se emancipen y momento idóneo para que su hija compartiera su vida junto aquel sobreviviente de los Uchiha.

La idea no le pareció descabellada y acepto quedando solo con el problema de los enormes gastos que le produciría aquella casa, quedándole solamente una persona en la lista que pudiera solventar los gastos del mismo modo como lo haría la joven pelirrosa.

–Naruto –masculló este mirando al ninja el cual seguía hablando

–Es una casotaaaaaaaa, demasiado para nosotros dos... y muy costosa casi todo el sueldo se me va en pagarla, realmente no se que estabas pensado cuando compraste este casota

El Uchiha se sonrojo ligeramente, sabiendo bien el porque de la compra, si bien tenía que decirlo había cumplido con uno de sus sueños infantiles que después se convirtiera en obsesión, buscar y matar al asesino de su clan, su hermano Uchiha Itachi. Pero si bien también faltaba otro de sus objetivos de vida: el resurgimiento de su clan.

–Neeeeeeeeeh, realmente no se que pensabas... si es que piensas

–El que no piensa es otro... algún día... será demasiado pequeña para el clan Uchiha que la habitara

–¿Insuficiente? –dijo Naruto mirando de forma pícara, con una sonrisa traviesa y una mirada de niño pequeño le empezó a picar las costillas con el codo de forma molesta –¿Qué?... ¿no me digas que ya tan pronto tienes la urgencia de encargar pequeños Sasukesitos?

–Para nada –dijo este sin evitar ponerse todo rojo

–¡Te has puesto colorado! –Dijo divertido –¡le dire a Sakura-chan que ya pronto la vas a hacer mama!

El Uchiha dejo su libro y su taza de café que comenzaba a enfriarse a un lado y con un gesto amenazante y una kunai en la mano tomo el cuello del rubio contesto:

–Una palabra de esto a Sakura y le digo a Hinata sobre tu colección de revista hentai

–¡Queeeeeeeee¡no te atreverías!

–Te garantizo que si –dijo este con un tono de maniaco

–Esta bien... esta bien... no le diré nada a Sakura-chan... uy que genio –dijo este una vez que el joven de cabello azabache le soltó, miro a Sasuke con cara de pocos amigos

–Pero...

–Ahora que

–¿Cómo es que sabes de la colección?

–Además de pervertido... flojo, las dejas tiradas por todos lados.

–Neeeeeeeeh

–Parece que después de todo si se te pego algo de ese maestro pervertido tuyo

Naruto sintió las orejas calientes, puso sus manos detrás de la cabeza.

–¡Pervertido!, pero al menos no loco –dijo Naruto refunfuñando

–¿Dijiste algo?

–Nada, nada

–ahora... si no tienes más que decir, me gustaría terminar de leer...

–Oye

–¿Queeeeeeee?

–Realmente lo tuyo con Sakura-chan va muy en serio verdad

-Silencio por respuesta-

–Mira que a esta edad y ya pensando en hijos

Sakuke guardo silenció cerro el libro con un ruidoso "plaf", bebió de un solo sorbo el café antes de contestarle:

–¿Acaso tu no lo has hecho? –dijo Sasuke con una sonrisa de satisfacción

–¿Qué?

–Si serás tonto... darle un heredero a los Hyuga

Naruto sonrió, para que negarlo, desde la primera vez que estuvo con Hinata lo había pensado, un heredero... repitió esas palabras en su mente, no... un heredero del Hyuga, del Bouke y el Souke, y todo aquello por lo que su novia, y su primo habían sufrido no...

Un hijo solamente suyo y de su Hinata:

–Si.

La sonrisa de satisfacción se le ensancho y antes de que el joven a su lado pudiera decir algo más, el rubio volvió a decir:

–Extraño a Hinata.... ¿Cómo le estará yendo?... me tiene algo preocupado...

–Más bien de quien te deberías de preocupas es por Neji...

–¿Por Neji? –dijo este como si fuera la cosa más improbable que pudiera pensar

–Hai

–Neeeeeh, por el ni me preocupo, estará con Tenten, Hinata me lo dijo, ya verás, como a esta hora, ese par va a estar comiéndose a besos con la bendición del Bouke sobre sus cabezas...

00000

–Imbecil –dijo Tenten después de un largo rato, dando vueltas por un largo pasillo de la mansión Hyuga, no serían más del medio día, el cielo estaba claro, y el día hermoso, perfecto para salir a pasar, pero pasar era lo que menos le importaba en ese momento a la joven, prefería en ese momento quedarse ahí y maldecir al Neji y a todo aquel que se le viniera a la mente:

Sobre todo 3 palabras:

–No lo se

Tenten apretó sus puños –No tengo porque molestarme... no ha dicho nada malo...

–No lo se

–Tenten pateo una pared, furiosa –El aún no esta seguro de sus sentimientos... no hay motivo alguno por el cual molestarme...

Dio una vuelta casi de 360 grados –además... si yo,, no le interesara a Neji... desde hace tiempo no hubiera sabido nada de el

Recapacito ella, tranquilizándose un poco, mientras fruncía el ceño y recitaba aquellas palabras que en vez de tranquilizarla le irritaban mucho más:

–Todo va a estar bien lo se –dijo ella en voz alta, antes de escuchar las palabras varoniles venir de la persona más querida para ella.

–Me sorprende como siempre procuras encontrarle el lado positivo a todo... Tenten recargo todo su peso en la pared, viendo enfrente de ella otra pared sin dignarse a mirarle:

–Si solo buscara las cosas malas a todo, sería más parecida a ti –Neji frunció la nariz, golpe bajo, lo sabía, se lo merecía...

–Pensé que te habías ido –dijo una voz profunda, Tenten no se molesto en voltearle a ver, siguó viendo la pared, como si no hubiera escuchado nada:

–Debi haberlo hecho... ¿querías que lo hiciera?

–Quiero que hagas lo que tú quieras...

Tenten miró a Neji unos segundos antes de volver a ver otra vez la pared

–¿Qué ha pasado con todas tus invitadas?... ¿Cómo te dejarón escapar así como así?

–Fácil... –dijo el arrogantemente –dije que iba al baño

Tenten sonrió de forma involuntaria

–Vaya... me sorprende que no te siguieran...

–Soy más rápido que ellas, no hubieran podido aunque quisieran

–Aja –dijo Tenten pasando a un lado de el, como si no le importara en lo más mínimo que estuviera ahí, Neji realmente ya esperaba ese comportamiento se hizo a un lado para dejar pasar a Tenten como si no le molestara su comportamiento y siguió viéndola de un lado hacia el otro.

–Por cierto vi a tu gran amigo Anji seguirte con la vista, me sorprendió que no te siguiera...

–Anji –Tenten se volteo a verle intrigada, tenía ganas de contarle lo que había descubierto, pero en ese momento no se sentía con animos, después de todo, Neji era un genio tarde que temprano tenía que darse cuenta de ello.

–Si... seguramente quería hablar contigo

–Vaya idiota –pensó Tenten pero no quería darle el gusto al Hyuga de estar de acuerdo con el, así que un poco más calmada, pero aún molesta dijo:

–Que chico tan atento ¿no crees?

Tenten le miró altiva, el Hyuga estuvo a punto de utilizar su Byakugan de forma involuntaria, y maldecir a Kara, a su hermana y a toda su descendencia, sin embargo considerando que no quería dejar a Tenten verle molesto replicó lleno de furia contenida

–¿Me preguntas eso a mí?

–Te lo pregunto a ti

–Más bien creo que es un perfecto idiota

–Celoso –dijo Tenten poniendo sus manos en la altura de sus caderas mirándole desafiante

–Molesto –replicó el con rapidez, ante la mirada de Tenten que estaba empezando a irritarle

–¿De que?

–De que...

–¿De que?

–De que –dijo este bajando un poco la voz, acercándose a su oído para decir suave como si una caricia fuera –...alguien se acerque a mi mujer –dijo el sin recapacitar, soltando las palabras por el hecho de hacerlas, miro a Tenten, avergonzado, ahora no solo era un celoso de primera, sino también un machista...

–Que curioso -dijo Tenten con una mirada despiadada –hace menos de dos segundos dices que no sabes si estas enamorado, y ahora dices que soy tu mujer... vaya ego

–Te pones así solo por mi respuesta

–Me pongó así por tu carácter... te muestras frió y hermético frente a los demás y esperas que me ponga feliz cuando te comportas como un idiota todo lleno de celos y... además machista... pues para que lo sepas... Hyuga, yo no soy mujer de nadie... ni siquiera de ti

–Lo se –dijo Neji viendo a la joven del hermoso kimono caminar para alejarse de el, Neji le miro ahí de pie, sin ser capaz de mover un músculo, lo mejor era dejarla sola.

0000

–Tonto –decía Tenten con una cara de satisfacción que no podía con ella. Mientras caminaba sin rumbo por aquella enorme mansión procurando recordar bien, por donde era que pasaba, ya que seguramente con una casona de ese tipo, lo más seguro, era que se perdiera...

–Su mujer... Tenten de la hoja... Neji Hyuga, tu amor platónico desde que tienes memoria... te considera su mujer...

–Eres un machista...y estupido Neji...–dijo esta hinchada de orgullo... ¿Cuántas chicas, serían capaces de decir, eso?... bien tal vez, había sonado demasiado posesivo, pero por primera vez, comprendio, que el Hyuga, tenía más corazón del que estaba acostumbrado a mostrar...

–¿Tenten-san?

–Ahhh... hola –dijo ella de forma natural y espontánea... al toparse enfrente de un hombre anciano, hizó una reverencia, ante aquel anciano, antes de sonreírle encantadoramente

–¿Qué hace por aquí?... -dijo el viejecillo- pensé que todas... las candidatas del Bouke, tendrían que estar en el salón de té...–dijo el ancianito, Tenten movió la cabeza interrogante, le parecía ese viejecito algo familiar

–Ahhh... si pues... es que yo... quise dar un paseo... tenía las piernas entumidas y eso es muy molesto además que...

–Ya veo –dijo el ancianito –las kunoichis de la hoja no pueden estar en un solo sitio... verdad Tenten-san

–¿Como es que sabe mi nombre?

–Neji-san me lo ha dicho antes –Tenten accedió con la cabeza... recordando que el ancianito se le hacía familiar, dado que era porque ya lo había visto, platicar junto con Neji en el salón de té...

–Ya veo... lamento mucho andar sin permiso por aquí... ya me retiro...

–Para nada Tenten-san, puede sentirse como en su casa y yo tambien lamento algo, el hecho de que no que no este con el Hyuga correcto...

–El Hyuga correcto ahora esta demasiado ocupado –dijo Tenten conteniendo una sonrisa melancolica, el anciano vio el kimono antes de volver a hablarle

–Tenten-san

–¿Si?

–Le gustaría acompañarme con un poco de té –Tenten parpadeo un par de veces extrañada

–Si... si... claro...

00000

–Maestra de armas... Jounin y aún eres encargada de misiones... un perfil impresionante Tenten-san

–Gracias... pero creo que son más palabras que lo que realmente es

–Eres modesta

–Para nada... es solo que creo que hay personas más impresionantes que yo... ahí esta Neji por ejemplo

–Neji es un caso especial...

–Muy especial –dijo ella con la misma mirada de inconfundible amor con la que veía a Neji

–¿Te gusta? –dijo el anciano con una sabía sonrisa

–¿Cómo?

–Te gusta... Neji-san

–Ahh... este...

–Te has puesto roja... eso indica que estoy en lo correcto...

–Lo conozco desde hace más de 10 años... hemos estado en el mismo curso desde los 6... y en el equipo desde los 11 es difícil no querer a una persona... con la que has convivido tanto tiempo

–Palabras muy sabias... mucho más que las de un genio

–¿Eh?

–Nada, nada... por cierto Tenten-san... no he podido dejar de admirar la belleza que traes puesta

–¿Este kimono? –dijo ella levantando las mangas viendo la hermosa tela

–Hai

–Muchas gracias... por el cumplido pero no puedo aceptarlo dado que no es mío

–Si lo se...

–¿Lo sabe?

–Hai... ese kimono perteneció a una mujer muy hermosa hace más de 20 años

–¿A Hatsumono-sama?

–No...

–¿A Mameha?

–Si

–¿Usted le conoció?

–Claro... todos los Hyuga le conocimos... y solo los más ancianos le recordamos

–Disculpe...

–¿Si?

–¿Podría decirme quien era?

–Mameha...

–Hai

–Puedo decírtelo...

–Por favor hágalo

–Pero...

–¿Pero?

–No se como tomaras su historia...

–Eso no importa -dijo Tenten con la mirada decidida –pero por favor... hagalo necesito saber... por favor...

El anciano se sirvio una taza de te antes de empezar a hablar:

–Hizashi el padre de Neji, tenía más cosas en común con su hijo de lo que muchos suponen, a pesar de su buena apariencia, los dos fueron muy reservados con las mujeres sobre todo, y dado que un Hyuga no puede pasar por la familia, sin ofrecer un heredero, a sus 18 años, aún más joven que Neji, Hizashi, se le impuso la tradición del matrimonio forzado...

00000

...Konoha 22 años antes...

–Prometida... que tontería...–decía un Hizashi de una edad mucho más entrañable que la de su hijo, sus rasgos, eran hermosos igual que todos los de esa familia, pero sus rasgos eran de los más parecidos a los de su futuro hijo, dado que cualquiera que lo hubiera visto, no habría tenido duda de que Neji era su hijo, la diferencia solamente podía notarse solo por el color de su piel, aún más dorada que la su vástago.

Pero su forma de vestir, y también la de actuar distaba mucho de la hijo, era mucho más introvertido, raras veces discutía con alguien, y también, raras veces se oponía a las decisiones de su clan, un hijo modelo a seguir. Algunos incluso lamentaban que Hiashi fuera el heredero del Souke y no el, puesto que por lo que se comentaba, Hizashi, era inclusive más fuerte que su hermano mayor.

El suave viento movió sus cabellos, mientras el joven descansaba de su andar sin rumbo tumbandose en un bonito y tranquilo lugar, donde un lago y un par de plantas silvestres le brindaban un bonito escenario.

Tiró una piedra con la punta del pie, hacia un pequeño lago... maldiciendo y reclamando mentalmente el porque era el, el que tenía que ser novio de una completa desconocida, y porque no Hiashi, tenía que haber cargando con esa maldición, y así como formuló esa pregunta, le vino la respuesta, puesto que Hiashi ya estaba casado con una bonita joven de una posición envidiable de la roca, no fue un matrimonio arreglado como el de el. Pero por lo menos Hiashi tuvo la opción de elegir y enamorarse de una buena mujer.

Suspiro

-Es una idiotez... -dijo el tirando un par de piedras más al lago, perdiendo su mirada en las ondas del agua. –Una verdadera...

-¡CUIDADO! –fue lo escucho este, antes de recibir un golpe en la boca del estómago, un ruido seco resonó en sus oídos, y un pesado, "bulto" cayó sobre el, sacándole el aire, y dejándolo más desconcertado que nada.

–Maldita... sea... –dijo este en voz baja... tratando de tomar grandes bocanadas de aire. Siendo casi imposible al sentir aquella opresión en el pecho... Hizashi, entreabrió los ojos, para maldecir y gritarle al causante de su mal, cosa que hubiera hecho gustoso de no ser, por que quedo abrumado por la hermosa visión que tenía delante, de el, o más bien encima de él.

Una muchacha, preciosa, de cabello castaño le veía... Hizashi trato de decir algo, pero no pudo, estaba más interesado en ver las pequeñas pecas en la nariz delicada de la joven... y en ver sus labios rojos, y atrayentes, pero tal vez, lo que más llamo su atención, no fue su espectacular belleza, sino aquellos enigmáticos ojos índigos con los que le observaba tan fijamente.

–¿Qué... –fue la única palabra audible que salió de la garganta seca y rasposa de Hizashi, miro a la joven intrigado, sintiendo que el calor se le agolpaba en la cara...

Las mejillas sonrojadas de la joven le indicaron que no solo el estaba avergonzando, trato de sonreír, sin embargo toda sonrisa, quedo frustrada al ver a la joven, levantarse como un resorte y mirarle como si no fuera más que un estorbo.

–¡DIJE CUIDADO! –chilló la joven

–¿Qué? –dijo Hizahi intrigado, viendo a la jovencita desde su visión casi a nivel del suelo, la joven, a diferencia de el, no parecía lo más interesada en sus presencia, más bien parecía estar interesada en quitar el polvo al hermoso kimono que traía puesto. Uno gris con bordados dorados...

–MALDITA SEA... SE HA ENSUCIADO... –dijo ella pensando en voz alta... Hizashi se levanto con la rapidez digna de un shinobi, y mirando a la joven empezó a hablar, o al menos tratar:

–Disculpa... puedo ayudarte en al...

La joven miró a Hizahi con la mirada afilada

–¡Y tú puedes decirme que hacías ahí tirado! –dijo ella señalándose con el dedo índice de forma acusadora–¡puedes estorbarle a alguien ¿Qué no tienes nada mejor que hacer?

Hizashi miró a la joven con la boca abierta, la joven se veía más bonita aún, toda molesta, un rasgo diferente, era preciosa, como ninguna otra chica que hubiera visto jamás... bien podría pasar como una gran dama de sociedad, sin embargo... esa lengua...

–¿Perdón? –dijo el alzando una ceja mirando a la joven

–Ya que...–dijo ella interpretando ese perdón como una disculpa y no como una pregunta – ya me caí –dijo ella mirando a Hizashi como si fuera el peor de sus males –maldita sea... esta todo empolvado... Hatsumono-sama va a matarme

Hizashi frunció la nariz al tiempo que soltaba petulantemente:

–No te...estaba ofreciendo una disculpa

–Pues deberías –dijo ella arremangándose el kimono, hasta la altura de los codos Hizashi, miro a la joven con los ojos desorbitados, era obvio que no pertenecía al pueblo de Konoha, una kunoichi de la hoja, jamás le hablaría de aquel modo a un Hyuga.

–Y mira chico bonito... si no tienes otra cosa mejor que hacer, más que andar tirado por ahí... y estorbar a la gente... te deberías poner a trabajar... ¡Holgazán! –y dicho esto la joven se hecho a correr nuevamente levantando un poco el kimono teniendo cuidado en que la tela no se ensuciara... Hizashi siguió con la mirada a la joven, hasta que se le perdió de vista.

–¿Holgazán? –Dijo el ofendido, mirando hacia el camino donde la joven había corrido – ¡pero si soy un Jounin!

0000

–Hizashi conoció recibió la noticia, cuando apenas cumplió los 18 años

–¿18 años? –dijo Tenten sorprendida

–Asi es... más joven incluso que su hijo

–Pobre –dijo Tenten mirando su reflejo en la taza de té sintiendo algo de pena por el

–Como debes suponer a Hizashi no le pareció la idea, pero al igual que Neji tuvo que acatarla, sin embargo, no tuvo su misma suerte el no pudo tener una selección de bonitas mujeres, como Neji... dado que en ese tiempo, la hierba y la hoja tenían un ligero altercado entre ellas, aprovecharón el matrimonio de Hizashi, para poder unir un poco más las dos aldeas, una de las familias más nobles de Konoha, con... (No una de las familias nobles, pero si muy importantes), una familia de la hierba. Teniendo en este caso Hizashi solo una opción como esposa.

–Entiendo –dijo Tenten moviendo afirmativamente la cabeza –Hatsumono fue la representante de la hierba y Hizashi de la hoja

–Así es –dijo el anciano, bebiendo de un sorbo su taza de te –unieron a los Hyuga con los Nitta, parientes politicos de los Kara...

–Los Kara ... me suena me suena

–Los Kara son los hermanos de la hierba...

Tenten abrió los ojos furiosa, entendio entonces porque era que Anji sabía la historia de Hatsumono y tambien la de Mameha, suspiro antes de mirar al anciana como si el fuese el culpable de todo, contuvo su deseo de gritar lo injusto que era que hicieran eso, sin embargo, se contuvo quería saber que era lo que había pasado.

–Hatsumono llegó un día después del cumpleaños de Hizashi, era una mujer muy bella, como bien sabes... sin embargo no llego sola, una joven de la fama y el dinero de Hatsumono, no viajaría desde tan lejos, sin un gran número de sirvientes originaros como ella de la hierba... y entre ellos venía Mameha

–¿Mameha? –Dijo Tenten sorprendida...–¿una sirvienta?

–Hai... Mameha era la sirvienta encargada de Hatsumono, algo así como su dama de compañía...

Tenten le miro inquisitivamente... todo estaba empezando a encajar

–Todo los miembros Hyuga, esperábamos su llegada, sin embargo, (por un motivo que nunca nos dijo Hizashi), el ya conocía a Mameha

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–¡Tu! –dijo Hizashi mirando a la joven bocona que había visto ese mismo día, esta mañana para ser precisos, sin embargo el hermoso kimono que la joven vestía, ya lo llevaba, ahora llevaba unas ropas, sencillas, de color paja, que tenían el sello de la familia Nitta, Hizashi frunció el entrecejo

–¡Tu! –la misma joven le reconoció al instante, miro a Hizashi con la mandíbula apretada

–Hizashi-sama –dijo una tercera voz, Hizashi volvió su vista hacía la joven que le hablaba, Nitta Hatsumono.

Una mujer de belleza pocas veces vista, cabello largo y oscuro debajo de las rodillas, piel blanca como leche, ojos dorados, ropas elegantes, y una mirada de arrogancia que no podía con ella.

–Hatsumono-sama –dijo Hizashi mirando a la joven haciendo una reverencia, siendo contestada por la joven con la igual cortesía...

–Disculpe mi curiosidad, pero me ha sido imposible pasar por alto, el hecho de que ha reconocido a una de mis sirvientas –dijo ella señalando a Mameha con una mirada de prepotencia, los ojos afilados de la joven de cabellos castaños buscaron su refugio en el piso, haciendo una inclinación respetuosa a Hizashi.

–Le he visto –dijo el con voz queda, mirando a la joven –he hablado con ella en la mañana, Hizashi, vió como las mejillas de la joven que aún tenía su mirada puesta en el piso se coloreaban.

–¿Con Mameha?... espero que no le haya molestado... a veces puede ser una molestia

–Para nada –dijo Hizashi elegantemente –ha sido muy amable

–Ya veo –dijo ella mirando a Mameha la cual había dejado de ver, el piso y miraba a el futuro heredero del Bouke con la boca abierta, Hizashi sonrió a la joven, ignorando el hecho de que la futura heredera del Bouke estaba en esa misma habitación. La cual mirada de forma altiva a Mameha. –supongo que encontró a Mameha y la debió haber confundido con una dama de sociedad

–¿Qué?

–Mameha, es muy traviesa –dijo ella soltando una risita nada convincente –pobre, siendo una simple sirvienta, nunca había visto un kimono como los míos y tuvo el atrevimiento de ponérselo... y pasear por el pueblo

–Ya–dijo Hizashi mirando a Mameha la cual, se puso colorada hasta las orejas, miro a Hizashi procurando ocultar su vergüenza

–Mire que tomar uno de mis kimonos... que atrevimiento

–Si...

–Es una lastima...

–¿Qué es una lastima?

–El hecho de que tenga que tirarse tan hermoso kimono

–¿Tirarlo?-dijo Hizashi viendo interrogante a la joven, mientras Mameha miraba del mismo modo a Hatsumono como si se tratará de una loca

–Claro... acaso espera que me ponga otra vez ese kimono, jamás... ahora huele como a una sirvienta, y yo así ya no lo quiero

–Ya veo –dijo el mirando a su hermano, el cual parecía tener un poco de lastima a su hermano menor por su futuro matrimonio con semejante tipa.

Hizashi pudo ver, como otro de tantos sirvientes, se acercaba a el, con una enorme caja destapándose frente a el, mostrando lo que Hizashi ya suponía que traería esa caja, el hermoso kimono que le vió a la joven unas horas antes, el que había tomado prestado de Hatsumono.

Hizashi casi contuvo su deseo de reír, era precioso y seguramente costoso, no tuvo ni siquiera que preguntar quien sería el que pagaría los gastos, sin embargo su hermano mayor, no se contuvo de hacer esa pregunta.

–Entonces echara a la basura un carísimo kimono solo porque alguien más ya lo usado –dijo Hiashi mirando a la jovencita, la cual bajo la cabeza avergonzada.

–Pero claro... y nadie más que Mameha tiene la culpa... veamos si pagando el costo de ese kimono aprenderá la lección

Hiashi vio a su hermano con una ceja en alto

–Debe se un kimono muy caro

–Por supuesto –dijo Hatsumono –ni trabajando toda la vida creo que sea capaz de pagarlo... pero de alguna forma tienen que aprender la servidumbre a tomar lo que no es suyo –dijo ella mirando a Mameha con una sonrisa de satisfacción en la cara, Mameha le vió como si quisiera fulminarla con la mirada, sin embargo accedió con la cabeza toda apenada.

Hizashi miró a la joven, y luego a Hatsumono, tuvo un enorme deseo de querer, correr a aquella mujer.

–Hatsumono-sama –dijo el sin voltear a pedir autorización a su padre hermano, o cualquier a de los otros miembros ahí presentes

–¿Si Hizashi-sama?

–¿Si alguien más pagara la suma por el kimono quedaría saldada la de Mameha-san?

–¿Qué?

–Si o no Hatsumono-sama –Hatsumono vio los ojos de Hizashi con algo de temor, sintiéndose incomoda, ver como el podía pasar de dedicarle una bonita sonrisa a una sirvienta y verla a ella, su futura esposa, con ese mirada tan llena de odio. Hatsumono volteo a ver a su lado, donde una mujer de unos 70 años, una de sus tantas guardianas, accedió levemente con la cabeza, indicándole que debía aceptar la petición de Hizashi.

–si... supongo que si... –dijo ella, con una sonrisa forzada en el rostro, Hizashi accedió levemente con la cabeza, mientras decía en voz alta:

–Souji –llamo el, a uno de los miembros del Bouke, el cual se acerco para escuchar

–¿Si Hizashi-san?

–Podrías pagar por favor a Hatsumono-sama, la cantidad que pida por el kimono

–Si señor

–¿Y el kimono Hizashi? –dijo su hermano con una mirada cómplice dedicada a su hermano, menor el cual sonrió moviendo la cabeza afirmativamente

–Dado que yo lo he pagado, supongo que es mío –dijo el lógicamente

–¿Qué? –dijo Hatsumono toda sorprendida, mientras la mirada de Mameha se disipaba y mostraba una hermosa sonrisa

–¿Le parece bien Hatsumono-sama?

–Si... claro... claro que si –dijo ella trastabillando las palabras, un poco.

Hizashi vio a su hermano, antes de guiñarle un ojo a la joven Mameha, la cual trato de ahogar una risita sin mucho éxito.

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Tenten reía abiertamente

–Vaya... nunca espere que el kimono lo hubiera comprado Hizashi-sama –dijo ella soltando una risotada –¡esa Hatsumono, debió de sentirse tan tonta!

–Si... seguramente que si –dijo el anciano riendo igual que la joven, antes de volver a servirle un poco de té

–Pero entonces ¿porque el kimono perteneció luego a Mameha?

–¿Acaso no lo imaginas?

Tenten pasó una mano por sus labios analizando aquella pregunta, antes de sonreir con la respuesta bien clara

–¿Hizashi-sama Se lo obsequio?

–Por supuesto... que otra cosa si no

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–Toma –decía un Hizashi mucho más joven a la preciosa muchacha de cabello achocolatado, escondidos entre la oscuridad de un pasillo siendo iluminados por una poco perceptible luz de una lámpara de papel.

–¿Pero?... yo no puedo...–dijo ella tratando de no aceptar la enorme caja

–Pensé que te había gustado... si no porque otra razón te lo habrías puesto –contesto este dándole la caja nuevamente

–No puedo...

–Tómalo o realmente este kimono quedara en la basura... yo no necesito un kimono –dijo este con una sonrisa dedicada solamente a ella, la joven procuro que sus dedos dejarán de temblar cuando paso sus manos por la caja

–Arigato...–dijo ella dejando que el silencio les invadiera, Hizashi incapaz de dejar ir a la joven empezó a hablarle algo realmente raro en el.

–Ahora entiendo el porque tenías tanta prisa

–Y ahora entiendo porque tu... estabas ahí tirado... lamento haberte dicho tantas cosas... si hubiera sabido quien eras...

–Seguramente hubieras dicho lo mismo –dijo el con una sonrisa, sacándole una hermosa sonrisa a la joven, la cual tapo con su boca con su mano antes de reír ruidosamente.

–¡Puedes reír quien lo diría! –La joven apretó los dientes antes de sacarle la lengua como gesto de niña encaprichada

–Y justo en el momento en que estaba pensando que no eras tan idiota

Hizashi frunció el ceño

–Nehhh, pero no pongas esa cara... mejor, pon una sonrisa... le da luz a tus ojos...

–¿Qué?

–Incluso, hasta te ves guapo

–¿Queeeee?

–Pero quien diría, te vez aún mas guapo todo sonrojado...

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Hatsumono y Mameha se debían quedar en Konoha por un mes, el objetivo de ello, era que Hizashi, conociera y cortejara a la joven que habría de ser su esposa, sin embargo en vez de cortejar a Hatsumono a quien cortejo fue a:

–Mameha

–Así es... como has de suponer Mameha y Hizashi se enamoraron –dijo el anciano con voz queda, más sin embargo su relación no podía llevarse a cabo

–Pero porque

–¿Acaso piensas, que Hizashi Hyuga, podía haberse casado con una sirvienta?

–Si, si realmente le quería podría haberlo hecho

–No sabes nada de las normas Hyuga, ella no podría ser esposa de Hizashi, solo por...

–...solo por no ser de sociedad –dijo Tenten tristemente, accediendo con la cabeza, el anciano accedió de igual modo

–Hizashi lo sabía... y ella tambien...

–Y a pesar de todo Hizashi se caso con Hatsumono

–Si... y nueve meses después dio luz al único heredero del Bouke

–Y ¿Qué paso con Mameha?

–A pesar de que Mameha no pudo casarse con Hizashi, como quería... continúo siendo servidumbre de Nitta, y amante del heredero de los Bouke

–¿Su amante?, ¿Y Hatsumono? –dijo Tenten con la cabeza baja, escondiendo la vergüenza que se reflejaba en sus mejillas.

–estoy seguro que Hatsumono también lo sabía... todos los miembros del clan lo sabíamos... pero a ella, no le convenía hacer un gran alboroto sobre aquello... puesto que no solo tendría la deshonra de los Hyuga, sino tambien la de los Nitta.

–Así que solo por el honor guardo todos sus sentimientos

–Bueno el honor era aparte... al ser matriarca del Bouke, le daba un gran status... y no hablemos del aspecto económico

–...así que se vendió a un hombre que no le amaba...

El anciano siguió hablando como si no hubiera escuchado nada

–Todos pensamos que Mameha se iría cuando Hatsumono murió dando a luz a Neji, pero eso no paso... dado que de ser su sirvienta... Mameha se convirtió en la ama de cría de Neji

–Imposible –dijo ella sorprendida, demasiada información, miro al anciano como esperando que le dijera que no era verdad sin embargo el anciano bebió su té con la mayor tranquilidad

–Hatsumono, era muy hermosa, (pero que los cielos me perdonen) tambien era una inútil obsesionada con su figura... nunca la vi contenta con su embarazo, lamentaba todo el tiempo perder su fisico, tambien era muy floja... así que estoy seguro que aunque no hubiera muerto, Mameha pasaría a ser la ama de cría de Neji

–Pero es que es imposible... Neji me dijo que no había escuchado el nombre de Mameha si fue eso, significa que Neji le conoció

–Efectivamente le conoció, pero se fue mucho antes de que Neji fuera capaz de recordar

–Pero entonces porque Mameha se iría, en el momento, que todo estaba bien... Hatsumono ya no podía interponerse

–Mameha era una chica muy dulce... y a pesar de no ser la madre biológica de Neji, le quería como si fuera su propio hijo... pero creo que las normas del Bouke y el Souke, terminaron cansandola

–¿...?

–Cuando el destino de Neji quedo sellado, con el nacimiento de Hinata Hyuga un año despues

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–¡Estas demente! –grito Mameha furiosa, con los ojos fijos en el, dedicándole una gélida mirada –¡no le puedes hacer eso a Neji!

–¿Crees que yo quiero?

–¡No lo se!

–No digas tonterías... jamás le haría daño a Neji...pero no puedo oponerme... no a esa maldita maldición del Bouke

–¡Claro que puedes!... impídeles que toquen a Neji –dijo ella señalando con un dedo hacía un moisés, donde un pequeño y encantador bebe Hyuga lloraba a todo lo que daban sus pulmones

–No puedo... es la tradición... al nacer el heredero de los Souke su destino quedó marcado

Mameha se acercó al pequeño dedicándole una hermosa sonrisa antes de girarse contra Hizashi

–¿Y entonces dejaras que lo marquen?... ¿Cómo si de un animal se tratara?

–No entiendes

–No... no entiendo, como siendo quien eres, no puedes imponer un poco de control en tu vida...–dijo ella tomando al pequeño Neji en brazos

Hizashi no dijo nada, observo por unos segundos a Mameha antes de que ella empezara a hablar decida

–No te preocupes... Neji-kun –dijo ella con el inconfundible tono de una madre amorosa –no dejare que te toquen

–No puedes hacer eso

–Puedo y lo haré... mientras yo este aquí, no le tocaran ni un cabello a Neji

–No eres la madre de Neji –la joven le miró con los ojos bien abiertos, la mirada de Mameha se volvió más gélida que nunca y con voz ronca dijo:

–Pero como si lo fuera... para Neji soy más madre, que tú y Hatsumono juntos –Hizashi se acerco a Mameha con un tono amenazante, tomo a Neji en sus brazos, antes de decir:

–Neji es un Hyuga, una de las mejores familias de todo Konoha, ha nacido con privilegios que serán envidiados por muchos... pero también tendrá que cumplir con ciertas obligaciones... yo lo entiendo... Hatsumono lo entendía... y se que Neji con el tiempo también lo habrá de entender... –Mameha vio al bebe, el cual lloraba entre los brazos de su padre, se sintió impotente, pero siguió escuchando a Hizashi –y si tu no entiendes eso... has el favor de cerrar la puerta cuando salgas...

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–Mameha se fue al día siguiente y nunca más le volvimos a ver, dejando tres cosas atrás... a su amor, al niño que quería como su hijo, y ese hermoso kimono que llevas ahora puesto.

Tenten sintió una opresión en el pecho y un enorme deseo de quitarse aquel kimono que no contaba más que la desgracia de aquella mujer. El anciano siguió hablando

–Ahora Tenten de la hoja sabes la historia de Mameha, y también sabes más cosas de Neji, cosas que el mismo ignora, por su propio bien

–El bien de Neji... -dijo Tenten furiosa, estaba segura que a pesar de todo a Neji le gustaría saber sobres su pasado, miro al anciano apretando los dientes sin pensar solto las palabras toda molesta –El bien de Neji... ¿o el suyo?

–Neji no lo entendería

–Ni yo tampoco... realmente no entiendo como una mujer que amaba tanto al padre de Neji no pudo casarse de el, solo por esas tonterías de la sociedad

–Eres aún muy joven para entenderlo... en aquel tiempo la buena familia era primordial, Hiashi y Hizashi lo sabían y acataban las reglas... una chica hermosa de buena familia era básico para los Hyuga

–Igual que ahora –dijo Tenten sintiendo la garganta seca

–...si es importante... pero tal vez, no tanto... la historia de Mameha nos abrió los ojos a varios miembros, y entendimos que una joven, hermosa y valiente, una buena kunoichi, y jounin de tal vez la hoja, sería suficiente para un heredero de la familia secundaría.

Tenten sonrió, ignorando por un momento toda su molestia... reconociendo aquella características en ella misma

–Salvó por una cosa

–¿Una cosa?

–Solo pedimos una cosa a esa joven valiente y hermosa... y es ser pura de alma y también de cuerpo

–¿De... de... cuerpo? –tartamudeo Tenten sintiendo los fijos ojos blanquecinos del anciano en su cuerpo, Tenten incapaz de aguantar aquella mirada, desvió su vista, dándole la respuesta al anciano.

–La joven que tomaríamos para el Hyuga, debía de conservar su virtud, hasta el momento en que su esposo la desposara y le tomará en la alcoba nupcial.

–No... entiendo –dijo Tenten con la clara vergüenza reflejada en sus mejillas

–Tenten-san, por favor no haga esto más difícil

–No

–Se que no es virgen Tenten -dijo el anciano con voz queda, sintiendo avergonzado de tener que hablar de aquello tan intimo, las mejillas de Tenten se colorearon, mientras el anciano, tomaba su mano como gesto de un doliente.

Ya lo sabía, dijo mentalmente Tenten, todo aquello la historia de Mameha tambien, eran para ello, solamente para terminar con aquellas palabras, tan cortas y tan duras, que al escucharlas tan nítidas, le dolieron más que nada en el mundo. Procuro negar con su cabeza, pero sus ojos lacrimosos, le impedían hacerlo.

–No tiene caso que trates de negarlo... yo lo se y tu también

–Yo...

–Eres hermosa –dijo el anciano sinceramente –encantadora, fuerte, una jounin, pero además de eso, tienes lo que a la mayoría le falta, inteligencia, hubieras podido ser una buena esposa

–Todavía puedo –dijo ella desesperada, incapaz de creer, que eso le estuviera pasando

–No, si has perdido tu virtud

–Pero Neji y yo... –trato de decir Tenten, sin embargo el anciano no le dejo terminar

–Supongo que no es necesario preguntar quien fue el que tomo tu inocencia, creo que lo se...

–...

–Y si estoy en lo cierto... y si de verdad quieres a Neji como dices... te suplico que no digas nada... porque el podría perder todo lo que tiene solo con una simple palabra tuya –dijo el anciano con una mirada triste.

Tenten se mordió un labio, frustrada, así que el anciano, había supuesto todo, y lo peor, era que había supuesto bien. Sintió que las manos le pesaban como plomo y aquel kimono hermoso le quemaba la piel. Puso se cerebro a trabajar a toda prisa. Viendo un poco de luz de esperanza.

–Pero... no puede hacer eso... el Souke ya me ha aceptado Hiashi Hyuga me ha aceptado –dijo desesperada, viendo como todas sus esperanzas se caían con la negación de cabeza del anciano.

–Si, estas en lo cierto, Hiashi te ha aceptado... pero, el Bouke no lo hace...porque yo no lo hago

–Pero... el Bouke es Neji ¿no?–dijo Tenten con la garganta aspera y las mejillas humedas.

–Neji es aún muy joven para ser su cabeza... y dado que el patriarca murió hace ya varios años se puso a uno de los miembros más antiguos –dijo el en voz queda –lo siento Tenten-san

Tenten se sintió tonta, molesta, vió al anciano como si todo aquello que quería saber, y también lo que no, quedaba claro en su mente. Sintió la garganta como una esponja. Seca e hinchada. Dos gruesas lágrimas rodaron por sus mejillas hasta perderse en la fina tela de aquel kimono.

–¿Usted es el representante del Bouke?

–...así es... de verdad lo siento Tenten-san

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Tenten sentía las piernas pesadas, nunca le habían pesado tanto, se sentía realmente mal, los labios le temblaran, sus ojos ardían, una gruesa lagrima surco su mejilla. Seguramente Neji se enfadaría cuando supiera que se fue sin siquiera decirle adiós, pero no lo podía ver y menos en ese momento.

–¡TENTEN! –escucho ella claramente su nombre, no pudo moverse ni siquiera se digno en voltear, mascullo un apagado Lee, solamente cuando el chico se puso delante de ella, hablando alegremente sin verla directamente a los ojos:

–VENIA YO CAMINANDO FELIZMENTE, CUANDO VEO A UNA HERMOSA MUCHACHA EN UN KIMONO ENVIDIABLE, Y DIJE... ¿QUIEN ES ESTA BELLEZA QUE IRRADIA LA LLAMA DE LA JUVE... Tenten –dijo este una vez viendo el lastimero estado de su compañera, la cual trataba inultimente de contener sus lagrimas

–Lee

–¿Qué te ha pasado?... ¿Acaso paso algo en la mansión Hyuga?

–Lee –dijo ella soltando el llanto, se lanzó a sus brazos como si no le fuera posible hacer otra cosa.

–¿Tenten pero que pasa? –dijo el joven de cabello de tazón, acariciándole la cabeza como si se tratara de una niña pequeña.

–Lee... lo perdí... de verdad... que lo perdí...

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Hola que tal aquí estoy yo con el nuevo capitulo, espero les guste :D y tmb espero no se les haya hecho demasiado largo, lamento mucho la tardanza se que dije que no me iba a demorar tanto de ahora en adelante, pero ayyy ayyy pasan tantas cosas, en fin, gracias espero les guste, y si no espero no sean demasiado duras, varias chicas ya han adivinado el desenlace, pero aún espero les siga gustado un besote byyyyeeeeeeeeeeee.