En un mundo donde la luz y la oscuridad se entrelazaban, dos reinos coexistían en una frágil armonía. El reino de los demonios, gobernado por una dinastía de poderosos señores, y el reino de los humanos, con sus ciudades y villas prósperas. La paz era una ilusión, un velo que cubría la tensión latente entre ambos mundos.

En el corazón del reino demonio, una figura imponente gobernaba con sabiduría y justicia. Pero la ambición y el deseo de poder corrompieron la mente del gobernante, llevándolo a tomar decisiones que desencadenarían una catástrofe. La discordia se sembró en el seno de la familia real, y la lealtad se puso a prueba.

Mientras tanto, en un bosque lejano, una criatura blanca y solitaria vagaba sin rumbo, sin recuerdos de su pasado. Su existencia era un misterio, su corazón un vacío. Hasta que un día, sus ojos se encontraron con los de una pequeña niña, y su mundo cambió para siempre. La bestia sin nombre encontró un propósito, una dueña a quien proteger y amar.

Así comenzó una historia de amor, lealtad y venganza, que cambiaría el destino de ambos reinos para siempre. Una historia de una bestia que se convirtió en guardián, de un amor imposible que floreció en la oscuridad, y de la lucha por el poder que desencadenaría una guerra sin fin.