8 años después

Hace ya varios años de la despedida de mi maestra Yuna, desde entonces han pasado mucho el hombre que sustituyó a mi maestra "Orstren" paso a ser el nuevo mago del estado, consejero y mano derecha de mi padre.

Orstren era un mago admirable para algunos, pero en mi opinión nunca será como lo fue Yuna, lo último que supe de ella es que fue a la "aldea Runa" a las afueras de nuestro territorio, pero eso lo supe 2 años después de que se fue ninguna noticia más me llegó de ella o al menos eso creo...

La magia a llegado a muchas pequeñas creaciones, pero nada tan imposible como lo que podía hacer mi antepasado la bruja Laireint, pero sé que aquello que nada es imposible mi meta desde hace mucho es ser mejor que ella para que mi madre y padre puedan estar orgullosos.

El Reino a prosperado y por mi parte e crecido encerrada dentro de estos enormes muros a mi alrededor ¿pero por qué?, pues desde la muerte de mi madre mi padre se volvió sobreprotector conmigo, sé que fue una gran pérdida para él y lo hace por querer "protegerme" pero como una vez me dijo mi madre

"la magia es algo que no se puede encerrar"

Desde que cumplí los 16 años para poder ser libre del Castillo e usado mi "talento" en el control de la magia para burlar a los guardias uso ropa que nunca verían en una princesa además de una capa y capucha además de usar hechizos para cambiar mi pelo y demás intentando pasar lo más desapercibida que pudiera en el pueblo haciéndome pasar por una simple ciudadana, con el paso del tiempo y de mis escapatorias del castillo e aprendido y conocido a muchas personas.

En 2 meses cumpliré los 20 años, cumpliré la edad necesaria para poder ir al árbol Lairent y recibir el poder de Astria pasado en generación en generación a cada princesa desde los inicios de nuestro Reino, también tendré que buscar al próximo rey pero... El pensar ser reina me llega a aterrar y odio la idea de tener que casarme de esta manera.

Quisiera poder tan sólo librarme de todas estas responsabilidades y ser libre, explorar el mundo y vivir muchas aventuras... Pero con mi posición eso es sólo un sueño inalcanzable.

Me encuentro en el balcón de mi cuarto viendo hacia el amanecer los ciudadanos apenas daban inicio a su día las herrerías abrían y demás, un nuevo día llegaba al reino mientras admiraba el paisaje tocaron a mi puerta despertándome de mi sueño.

—princesa ya a amanecido, el desayuno ya está listo— dijo el sirviente

—oh... Gracias iré en un momento— agradecí el aviso y me alisté

Y así comenzaba mi día siendo la princesa después de arreglarme fui al comedor donde ya me esperaba mi padre sentado al fondo del lugar tomé asiento junto a el mientras los sirvientes servían varios platos.

—buenos días padre— dije rompiendo el silencio

—buenos días hija— frio y cortante como siempre

Hace ya tiempo que el tiempo entre nosotros llegaba a ser incómodo mi padre ya no era cómo antes, se volvió demasiado serio y seco en su forma de ser era como si su espíritu hubiera muerto junto a mi madre, como quisiera recuperarlos...

—¿a pasado algo que quieras contarme? Te veo un tanto distraída

—no padre... Sólo soy yo quedándome atrapada en mis pensamientos—intentando cambiar el tema

—ya veo...

—¿a ocurrido algo?

—además de tu próximo cumpleaños— volteando a verme con una ligera sonrisa —no a pasado nada más importante

—veo que si lo recordaste— respondí el gesto

—ese será un día muy importante para ti no sólo iras a Astrien si no que pasarás a ser la nueva representación de Astria en la tierra y reina... Pero sabes que significa también ¿no es así?

Yo: ¿que tendré que casarme con un Príncipe de algún otro Reino?

Una atmosfera nos rodeó nuevamente—en realidad, Aria debo decirte que... — es interrumpido

—buenos días princesa y buenos días mi señor— dijo Orstren al arrodillarse ante mi padre —mi Rey lamento molestarle, pero le ruego que me acompañe, es importante

—lo lamento Aria terminemos nuestra conversación más tarde— buffo antes de irse

Se levantó de su asiento y se fue junto a Orstren, no sé qué a estado pasando pues mi padre no me cuenta mucho de eso... En el pueblo hay varios rumores, pero nada se a podido confirmar, bueno al terminar el desayuno es mi momento.... Después de dirigirme a mi cuarto y cambiarme para salir viene lo difícil pero sencillo a la vez, el burlar a los guardias, pero para mi suerte siempre tengo ayuda.

—buenos días princesa, veo que se prepara pasara otra de sus escapatorias— dijo Iris

Iris....es una de nuestras sirvientas que a trabajado con nosotros desde antes de que yo naciera, ella es mi Dama de compañía desde que mi maestra se fue ella es una de las personas a las que puedo confiar pues bueno ella es la única que sabe mi secreto.

—buenos días Iris y si pero no lo digas escapatoria porque no mejor le decimos "libertad condicional de los deberes" jajaja...

—princesa...no cree que ¿ya es momento detener todo este acto de otra identidad?

—¿Pasa algo? Iris veo preocupación en algo acaso...

—no princesa no se preocupe...me refiero a que en poco tiempo cumplirá 20 años y tendrá olvidar todo esto sin mencionar que e notado que tiene miedo de ello.... — dijo seria

—¿cómo es que tu....

—la conozco desde que era una bebé princesa, yo misma fui quien la trajo al mundo sacándola del vientre de su madre y e cuidado desde entonces

—también fuiste tú la que vio mis primeros pasos en la magia... Lo siento, pero no me detendré al menos aún no tengo mucho por hacer no puedo detenerme ahora— dije mientras me ponía la capucha —entiendo tu preocupación y no sabes todo lo que te agradezco lo que has echó por mi... no te preocupes regresare antes de que se den cuenta. Como lo he hecho ya varias veces— dije mientras me alejaba

—la magia es algo que no se puede encerrar ¿verdad mi Reina?

Bien mi vida fuera en el Castillo era muy diferente aquí me hago llamar como "Gina la bruja" aquí en el pueblo siempre he visto que habitamos en paz y armonía con la magia aquí vivimos humanos, elfos y alguna que otra bestia que puedes encontrar, desde que comencé con esto de la segunda vida conocí a una elfo llamada Airin ella es una retirada aventurera y gran conocedora de las criaturas que habitan este mundo, desde hace 2 años que la conocí me a contado de sus increíbles aventuras que a vivido.

Intento no sobresalir así que sólo hablo con ella entonces eso me da varias limitaciones, ósea no viajes fuera de la ciudad ni nada parecido sólo permanezco escondida en esta gran capa y capucha.

No hago mucho después de salir del Castillo sólo suelo ver a los ciudadanos mientras tienen sus pacíficas vidas hasta llegar a casa de Airin pero esta vez tome una ruta distinta de lo que normalmente hago todo estaba normal pasaba por un callejón para ahorrarme un poco de camino hacia las afueras de la ciudad.

—vaya vaya ¿acaso mis ojos me mienten? — dijo una voz proveniente detrás de mi

—eh?— volteando hacia la voz

Aquel hombre vestido con una pechera y hombreras había salido de la nada después de que pase mientras detrás de mí apareció otro —no lo creo compañero yo también veo a una hermosa jovencita— mientras más pasaba por ese callejón solo aparecían más hombres

—¿está perdida señorita? ¿Acaso necesita que le den indicaciones? — dijo el hombre el cual apestaba a alcohol

—no, yo sé cómo moverme por la ciudad sea lo que sea no busco problemas y menos de alguno de ustedes —dije mientras me dirija a la salida del lugar

El supuesto "compañero" del hombre me bloqueo el paso, bien no me estaban dejando opción estaba por usar magia contra ellos, pero mis manos habían sido atadas por una especie de látigos los cuales me jalaron para luego ser atrapada por el hombre

—bien lo lamento señorita, pero creo que no entiende la situación que la que se encuentra —me susurro al oído

—si eres buena nos aseguraremos de no lastimarla mucho

Los hombres comenzaron a reír mientras trataba de soltarme, estaba asustada por esto en todos estos años jamás creí que me podría pasar esto, tenía entendido que la seguridad en el reino tenía bajo control a todos estos ladrones, secuestradores o lo que sea que se consideren estas escorias...

Sabía que tenía que hacer algo, pero el miedo me tenía paralizada, tanto entrenamiento para controlar a la magia para no poder hacer nada.... ¿Como es posible que sea tan patética?

—porfavor alguien ayúdenme... —susurre para mi misma pidiendo ayuda

—mírenla está asustada jaja... Eso hace que tenga ganas de...

Antes de que el hombre terminará de hablar cayó noqueado mientras el sonido de algo metálico cayó al mismo tiempo en el suelo —¡¡oigan ustedes!! — dijo otra voz algo grave acompañada con el sonido de unos pasos y el metal de una armadura moviéndose hasta que frente a nosotros. Era una bestia con partes de una armadura excepto con su brazo derecho al descubierto ni casco con un espadón largo a su espalda.

—no creo que alguno de ustedes sea conocido de la señorita así que hagamos esto sencillo y déjela en paz—dijo la bestia mientras hacía tronar sus dedos

—hijo de perra!!

Uno de los ladrones se lanzó a por el tomando la espada del suelo para atacarlo pero la bestia sólo lo tomó del brazo y golpearlo haciéndolo chocar contra uno de los muros noqueándolo mientras que la bestia tomó la espada y la puso en su cintura —¿suficiente o quieren más?— dijo aquella bestia burlándose de ellos, aprovechando el que estaban distraídos usando magia electrocute al que me sujetaba, soltándome de él y comencé a correr pero la bestia me sujeto cubriéndome, no sé de qué pues cuando lo hizo soltó un quejido de dolor

—aagghh... Justo en el hombro bueno

— ¡¿puedes tomarte esto más enserio?! — dije algo molesta

—hee... perdón

Después de soltarme, de nuevo tomando el arma en su cintura la lanzó contra otro de los ladrones el cual con el golpe cayó el suelo para después tomar al que quedaba asfixiándolo hasta que se quedó quieto.

—bien— deja caer al suelo al ladrón que sujetaba —bueno eso es tuvo bien... Dentro de lo que cabe ¿se encuentra bien señorita? — camina hacia mi

—si... Muchas gracias por salvarme

—no hay de que agradecer como caballero del reino y próximo general mi deber será proteger a los ciudadanos.

—claro ya veo... Espera ¿¡caballero dices!? Una bestia caballero ¿es enserio todo esto? — dije sin creerle

—¿fuera de lo común verdad? Jeje si bueno desde pequeño mi madre me había contado historias sobre guerreros fuertes como lo es nuestro rey así que me propuse a ser el caballero más fuerte de este mundo— dijo sonriendo mientras se quitaba la flecha que tenía clavada en el hombro

—Ya veo... ven déjame ver tu hombro

El hizo caso a mi pedido, se hizo daño al ayudarme así que se lo debía y cure su herida, la flecha había penetrado el musculo así que tardaría un poco en curarlo por completo

—¿eres una bruja verdad? Seguro que pudiste haberte encargado de ellos

—puede ser, pero el miedo no me tenía petrificada e practicado tanto tiempo el usar la magia para esto... Soy patética

—el miedo es un arma de doble filo importante gracias a el té tiene concentrado y alerta, pero si te dejas vencer por el puede ser tu perdición. — dijo solidario

—mmmmm... — quitando mis manos de su herida —ya está listo esto intenta moverlo y dime que tal, gracias por el consejo

Mueve su brazo —¡increíble! Por primera vez después de varias heridas es la primera vez que me sanan sin dejar un ligero dolor ni nada parecido, es increíble señorita— me miraba sorprendido

—Gracias por el cumplido, soy algo habilidosa para esto —sonreí un poco

—bueno gracias por esto pero ahora debo de encargarme de estos tipos —en cada brazo cargaba 2 de los ladrones —cuídese señorita.... Eehhh

—Gina...

—Gina claro claro cuídate y evita meterte en callejones así jeje— dijo la bestia al salir corriendo del lugar

Vaya... Un "caballero bestia" creí que había escuchado de todo, bueno ya no me quedaba mucho tiempo para tener que regresar así que me apresuré a llegar a la casa de Airin sin más distracciones llegué en poco tiempo antes de tocar la puerta esta se abrió.

Airin: ¿llegaste algo tarde Gina paso algo?

—si, perdona unos ladrones me atraparon, pero por suerte un caballero llegó a ayudarme

—ya veo lo importante es que no te paso nada, seria demasiado malo para todos

—eh? ¿De que hablas?

—nada nada jajaja, ven pasa

Al entrar en su casa, como siempre está repleta de libros, notas y algunos cuantos objetos más del solo verla podías notar que es la colección de una retirada aventurera desde que la conocí ella me a compartido todo su conocimiento, pero sobre todo de nuestro gusto por los Dragones. Es ese gusto el que nos a unido y al ser un elfo ella tiene más control sobre la naturaleza de este mundo al igual que una apariencia de un adulto a pesar de tener 120 años de edad, también me contó que tengo algo que ella tampoco puede explicarme sobre la magia desde hace tiempo e tenido la corazonada que es por el ser una descendiente de Lairent...

Estábamos como es normalmente me contaba alguna de sus aventuras, estuvo contándome sobre su viaje a la tierra de los dragones a 20 días de aquí como quisiera poder ir a esas tierras y poder ver a esas magníficas creaturas descendientes de Gotar y Astria no sólo es eso pues bien quiero el tener una aventura como las que me a contado Airin.

—una pregunta Airin ¿que puedes decirme sobre las bestias?

—interesante... No pensé que te llegarán a interesar— dijo en un tono burlon

—no es eso lo que pasa es que me dio curiosidad, antes de llegar me tope con una y bueno...

—entiendo mmmm... realmente no sé qué decirte a diferencia de nosotros los elfos, las bestias se crearon por la diosa Astria y nosotros llegamos a este mundo a partir de su energía conocida como maná o magia. Las bestias son la combinación de un cuerpo humano, pero con el espíritu de un animal, pueden ser poderosos magos por tener por así decirlo magia en su sangre, pero es raro ver a una bestia que quiera usar magia así que solo suelen ser guerreros o forajidos. En pocas palabras prefieren usar sus músculos que el cerebro

pensar que mi padre acabó con tantas bestias en el pasado es sorprendente

—acaso ¿le interesaba saber sobre lo que nos protegió su padre princesa?

—¿¿¡¡QUE!!?? Como es que tu...

— jajaja... Princesa cuando has vivido más de 100 años te vuelves muy sabia desde que te conocí sabia quien eras en realidad.

—veo que nunca te pude esconder mi identidad

—no se sienta mal es un gran cambio el que hace y no me imagino cuanto control de la magia debe de tener para mantenerse así

—después de mucho tiempo una se acostumbra supongo, pero por favor no le cuentes de esto a nadie

—cuente conmigo nadie lo sabrá, pero supongo que sus visitas pronto terminarán ¿verdad?

miro hacia el suelo —realmente quisiera que no fuera así, pero así es dentro de poco cumpliré la edad para recibir el poder del Astrien

—y ser la nueva reina...

—Si.... El simple echo de pensarlo me aterra no creo ser la reina que mi madre quería que sea

—El miedo es un arma de doble filo su majestad, pero uno es el que escoge si controlarlo o dejarse llevar por el así que está en uno el que es lo que se debe de hacer, dentro de ti yace una energía que está durmiendo esperando a que la despierte y con confianza lograrás tu objetivo

—me alagas demasiado hoy ni siquiera pude defenderme

—podemos caer pero al levantarnos uno aprende de sus errores y se vuelve más fuerte — fijo tomando mi mano

—gracias Airin por todo me aseguraré de poder pagarte de alguna forma estos consejos que me das lo prometo

Después de eso regresé al castillo, una vez en mi cuarto me puse a pensar sobre todo esto que había pasado los consejos de Airin, mi padre y ese curioso caballero bestia jeje creo que es lo más interesante que e visto en un tiempo.

—su majestad su padre el rey de verla ahora es importante— dijo un sirviente llamando a mi puerta

—iré en un momento

Mmm... Es raro el que mi padre me busque talvez sea para decirme quienes serán mis pretendientes para casarme o algo así, ojala este equivocada...

Me aliste y fui a donde me llamaron como era normal mi padre estaba sentado en el trono con su mirada sería que le caracteriza últimamente me miraba sin parpadear realmente era intimidante.

—¿qué sucede padre?

—Aria... tenemos que hablar seriamente tu y yo, pero primero...

varios caballeros comienzan a entrar a la sala del trono poniéndose en fila para después abrirle paso al general Urban y Orstren

—¿padre que es todo esto?

—Aria o ¿debería decirte Gina? Me e enterado de que has estado escapándote del castillo...

había quedado petrificada ante sus palabras mientras que varios caballeros comienzan a entrar a la sala del trono poniéndose en fila para después abrirle paso al general Urban y Orstren

—quiero presentarte a alguien es el aprendiz de Urban y su próximo sucesor

—¡Artrien! ven aquí

En el fondo del salón entró aquella bestia de pelaje oscuro que me había salvado antes volvía a estar frente a mí.

—es un gran honor al fin conocerla princesa —dijo mientras se arrodillaba frente mi

Como.... Como es que paso todo esto...

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Las leyendas de Astria

La princesa plateada