Ella era una pequeña niña que nunca conoció a sus padres, nunca supo lo que era el amor de una madre o la protección de un padre, no sabia lo que era una familia.

Esa pequeña castaña en ese momento se encontraba en un callejón viendo a las personas pasar, sin preocuparse de lo que le pudiera pasar, ellos estaban tan inmersos en sus asuntos que no notaban a una pequeña niña sin hogar buscando comida entre la basura o un lugar acogedor para dormir.

No podía dejar de pensar que no era la única que estaba en esa situación, que no era la única que sentía esa necesidad de afecto y protección, al igual que tampoco podía sacar de su mente el vago recuerdo de un hombre que fue la primer persona que ella vio y la que le dio su nombre antes de dejarla completamente sola.

-Tu nombre es Meta Salmhofer, y tienes un gran propósito en este mundo.

Fue lo que esa persona le dijo tiempo atrás, pero nunca mas volvió a verlo, nunca mas volvió a saber de el y nunca mas lo olvidaría, aunque sea las palabras que "El" le dijo.

Tiempo Después, Inicio del Primer Proyecto [Ma]

La joven pareja estaba preparándose para recibir a los gemelos que serian el "Contenedor de los [Dioses Gemelos], se llevaron a la mujer mientras que el joven científico a cargo de ella y del nacimiento esperaba fuera para recibir la información de todo.

Cuando finalmente los gritos de dolor de la joven madre y se escucho los llantos de los bebes supo que todo había sido un gran éxito, el joven entro donde estaba la joven candidata la cual sostenía a dos bebes de cabellos negros y esta le sonrió feliz.

-Son nuestros hijos Adam-Le dijo de forma feliz y cansada sonriendo a los bebes que sostenía.

Adam solo sonrió un poco a la mujer y se acerco mientras miraba la escena y a los bebes, tenían el mismo color de cabello de su Maria Moonlit, su madre, no pudo evitar sentir un amor por ellos tan solo verlos.

-Si nuestros hijos Eve-Beso la frente de la joven la cual no tardo en quedar dormida con los bebes a su lado.

Lo que ninguno sabia es que el destino les tenia una mala jugada.

Cuando Adam iba a informar al Senado sobre que todo salio perfecto referente al nacimiento de los gemelos escucho algo que lo dejo helado en su lugar.

-Los niños sacaron al parecer el cabello negro de la Reina Alice-Informo Seth de forma tranquila.

-No puede ser-Se quejo uno de los hombres del Senado.

-No podemos usar a esos niños-Dijo otro en tono serio-Esos fallos deben de ser exterminados.

-¿Que quieren que haga?-Pregunto Seth de forma seria.

-Mátalos-Le ordenaron al castaño, el cual solo asintió ante la orden.

Sin ser visto por nadie Adam se retiro rápidamente del lugar, y fue rápidamente con Eve. Al llegar donde ella, la vio un poco mejor y junto a sus hijos, sin esperar nada fue donde ella y le dijo lo que pasaba, por lo que esa misma noche los dos junto a sus bebes escaparon de Levianta lo mas rápido que pudieron.

Perdiéndose en el bosque de Eldoh para no ser vistos en un buen tiempo, sin saber que con su huida desatarían otro evento y la historia se volviera a repetir.