Mei: ¿Te colgó?

Yuzu: Si.

Mei: Qué extraño.

Yuzu: Bueno, mañana hablaré con ella.

Narrador omnisciente

Al terminar algunas compras, llegaron al departamento y la peli negra fue recibida por una labrador que movía la cola de un lado a otro.

Mei: Jeje también te extrañe Akira. (Acariciando al can)

Yuzu: Empezaré a preparar la cena.

Mei: ¿Quieres que te ayude?

Yuzu: No amor, así está bien.

Mei: Extrañaba escucharte y más diciéndome de esa manera.

Yuzu: .....

Mei: Jeje ¿Todo bien?

La rubia se abalanzó sobre Mei rodeandola en sus brazos.

Yuzu: Yo extrañe todo de ti... De verdad me hacías mucha falta Mei.

Mei: Lamento haberme alejado...prometo que no lo volveré a hacer.

Yuzu: Te amo, te amo tanto.

Mei: Y yo a ti. (Correspondiendo el abrazo)

Después de separarse se quedaron viendo a los ojos, ambas sonriendo cálidamente, estaban felices por tenerse una a la otra y nadie ni nada cambiaría eso.

Yuzu: ¿Qué pasará con nuestra-

Mei: ¿Boda?

Yuzu: Si...

Mei: Avisaremos a todos los invitados que solo la tuvimos que posponer por otros problemas.

Yuzu: Está bien...pensé que te perdería.

Mei: Eso no pasará, recuerda que tú eres la única persona con la que quiero compartir mi futuro.

Yuzu: Jeje.

Mei: Te ayudaré a poner la mesa mientras prep-

La oji verde unió sus labios con la peli negra, sorprendiendo a ésta última, era un beso apasionado, dulce, desesperado, demostraba lo tanto que se habían echado de menos.

El aire se iba acabando pero tal parece que no le importaba a ninguna, puesto que no se detenían, Yuzu hizo retroceder un poco a Mei para sentarla en el sofá y sentarse en su regazo, aún sus labios seguían unidos, soltaban leves gemidos y jadeos entre éste.

La más alta tuvo que separar un poco sus labios para poder tomar aire, si seguía, estaba seguro que no sobreviviría.

Solo se podía escuchar el jadeo por parte de ambas, sus mejillas estaban muy sonrojadas, la temperatura a su alrededor había aumentado bastante.

Yuzu: L-Lo siento...no pude contenerme, de verdad yo...

Mei: Shh..ni digas nada.

Mei volvió a unir sus labios, tomando el cuello de la camisa de su futura esposa, por lo contrario Yuzu no hizo resistencia y tomo por la nuca a la más alta para profundizar el beso.

Nuevamente se separaron e intentaron reponer sus respiraciones que ya estaban bastante agitadas.

Yuzu: Eso fue increíble...

Mei: Pienso lo mismo..

Yuzu: Pero está empezando a hacer calor. (Quitándose lentamente su camisa)

Mei: ¿Y la cena?

Yuzu: Eso puede esperar ¿No crees?

Mei: Supongo que tienes razón.

Cuando solo quedaba el sostén en la parte superior de la rubia, Mei besaba su cuello con delicadeza, provocando que la contraria se estremeciera ante el tacto.

Yuzu: M-Mei... (Cerrando los ojos disfrutando del momento)

La oji púrpura pasaba sus dedos por el toros de su novia, regalándole caricias sin dejar de besar su cuello.

Yuzu volteó a un lado encontrándose con Akira quien inclinaba su cabeza de lado, dando a entender que no sabía lo que pasaba.

Yuzu: Uh...Cielo...

Mei: ¿Si?

Yuzu: Tenemos compañía.

La peli negra también vio a la perrita que no despegaba la vista de ellas.

Yuzu: Amm...

Mei: Akira ve a la habitación a jugar con las pantuflas de Yuzu.

Yuzu: Sip, sé una buena niña, espera... ¿Qué tienen mis pantuflas de conejito que ver en ésto?

Mei: En la vida hay que hacer sacrificios mi querida Yuzu.

Yuzu: Pero...

Mei: Nada de peros.

La labrador subía las escaleras contenta, tanto Mei cómo Yuzu sabían que esas pantuflas no sobrevivirían.

Yuzu: Pero pero pero pero pero.

Mei siguió con lo suyo, haciendo que la rubia olvidará el porqué reclamaba.

Yuzu: Tampoco me quiero quedar atrás. (Separandose un poco de Mei para empezar a desabrochar su camisa) así está mejor jeje, estamos a mano.

Mei: Pero sigo al mando aquí. (Cambiando de posiciones de una manera muy rápida, dejando a su novia a bajo de ella)

Yuzu: ¿Desde cuándo te volviste Flash?

Mei: Ni yo los sé.

La más alta posicionó una de sus rodillas en la entrepierna de Yuzu, haciendo que ésta soltara un leve gemido.

Mei: Música para mis oídos.

Yuzu: ¿Porqué tienes que ser tú la que controle la situación?

Mei: Porque a ti te encanta que lo haga, o ¿Será que acaso me lo piensas negar?

Yuzu: S-Sabes que nunca haría eso...

Mei hizo un poco de presión en la parte sensible de Yuzu.

Yuzu: Ahhh...eres muy cruel al torturarme de ésta manera.

Mei: Lo sé. (Acariciando con una de sus manos el abdomen de la rubia) Aquí voy... (Bajando lentamente a punto de introducir su mano a la parte más íntima)

El celular de Mei comenzó a sonar.

Narra Yuzu

¿Es una maldita broma?!!!  Justo en la mejor parte!!!

Mei: Mmm.. debo contestar. (Empezando a levantarse, siendo detenida por la rubia quien la abrazaba con fuerza)  Yuzu...

Yuzu: Ño!!!

Mei: Solo será un breve momento.

Yuzu: Dije que no!

Mei: Pareces una bebé, anda, prometo que no tardaré.

Yuzu hizo caso y con un puchero en su rostro la soltó, la peli negra buscaba su celular en su bolso, sacándolo y contestando.

Mei: ¿Diga?

???: ¿Hablo con al señorita Mei?

Mei: Si. ¿Qué se le ofrece?

Mientras Mei seguía en su llamada, una muy enojada Yuzu la veía desde el sofá con sus brazos cruzados.

Mei: Oh entiendo, gracias, adiós. (Colgando)

Yuzu: ¿Y bien?

Mei: Antes que nada, ¿Porqué me llamo tú abogado?

Yuzu: .......

Mei: ¿Ahora que hiciste?

Yuzu: Lo llamé en caso de emergencia.

Mei: ¿A caso pensabas acusarme por si te dejaba?!

Yuzu: Tenía justificación!! Además, esa idea fue de Matsuri!!

Mei: No puede ser...que tanto te meten esas chicas a la cabeza...

Yuzu: Créeme, no quieres saberlo.

Mei: Bien.... ¿En qué estábamos? , Cierto, en el que te iba a dejar una semana sin caminar.

Yuzu: ¿Qué tú qué?!!!

Mei: Tranquila, tal vez sea un mes.

Yuzu: No no no espera!

Mei: Quédate quieta!!

Yuzu: Ayuda!!!!!!!!!!!