Capitulo 18
Narra Yuzu
Genial, había dicho demás, ahora que hago? No puedo continuar así, no quiero ser una cobarde.
Mei: Yuzu...¿Qué querías decir con eso?
Suspiré, no sabía cómo lo tomaría Mei, yo no quería alejarme de ella.
Yuzu: Mei, yo...
Mei: ¿Si?
Yuzu: Me mudare a New York...
Mei: Oh...me alegro por ti, supongo que te irás terminando la preparatoria no?
Yuzu: No, me iré este sábado...
Mei: Q-Que?
Yuzu: Créeme que quería decírtelo antes, pero no sabía cómo.
Mei solo pudo agachar un poco su mirada esperando a que dijera que es una broma, pero no era así, aunque yo también quería que lo fuera, simplemente ella solo me sonrió, una sonrisa que obviamente supe que era falsa, era doloroso para ambas.
Mei: Ya veo...es por eso que me diste a Akira, verdad?
Yuzu: No solo por eso, claro que también pensé en que te haría compañía, te cuidara por mí.
Mei: Gracias..
Yuzu: Mei, porfavor, sé que debí decírtelo antes...y de verdad lo siento, yo no quiero irme, quiero quedarme contigo y no solo hasta terminar la preparatoria, quiero estar contigo por qué te amo.
Ella bajo a la perrita que estaba en la caja y después acarició mi mejilla.
Mei: Está bien, no tienes porqué disculparte.
Vi sus hermosos ojos, estaban cristalizados, me rompía el corazón verla de esa manera.
Yuzu: Mei, no quiero dejarte...
Mei: No te preocupes, te irá bien, más te vale no bajar tus calificaciones.
Yuzu: Quiero quedarme contigo.
Mei: No Yuzu, tus padres se preocuparían mucho si te quedas.
Yuzu: Pero...
Mei: Pero nada, me alegra me lo hayas dicho, eres muy linda y valiente.
Yuzu: No tanto como tú.
Podía sentir lágrimas recorrer mis mejillas, quería estar con ella, la amaba tanto, no podía pensar en estar sin ella y lo peor es que no sabía si regresaría.
Mei: Tienes que irte a casa.
Yuzu: Si...
Mei: Mañana te veo si?
Yuzu: No creo poder ir mañana...aún debo terminar de empacar algunas cosas.
Mei: Entiendo, entonces... esté es un adiós?
Yuzu: No, no digas eso (Tomando la manos de la pelinegra) yo no te diré adiós, porque se que el destino nos juntara.
Mei: Te amo Yuzu.
Yuzu: Y yo a ti Mei.
La abrace con todas mis fuerzas, como si se llegará a esfumar, ella correspondió mi abrazo, sentía su calidez recorrer mi cuerpo, no quería separarme de ella, pedía que el tiempo se detuviera. Nos separamos y nos miramos a los ojos.
Yuzu: Puedo?
Mei: No tienes que preguntar tontita.
Reí ante su respuesta y la bese sin dudarlo. Sus labios eran tan suaves, simplemente era mi adicción, ella era mi adicción. Nos separamos por falta de aire, ambas estábamos sonrrojadas.
Mei: Debo irme.
Yuzu: Si..
Mei cargo la cajita con la perrita dentro, me vio una última vez.
Mei: Te amo Yuzu.
Posteriormente ella se dio la vuelta para seguir su camino, desapareciendo en la oscuridad de la noche, me quedé inmóvil, me sentía tan débil y perdida, caí de rodillas para empezar a sollozar desconsoladamente abrazándome a mi misma. Una vez que me calme decidí ir a casa, al entrar mis padres me voltearon a ver.
Rin: Se lo dijiste Yuzu...
Bastó con ver mi cara de tristeza para responder a su pregunta.
Kohaku: Hija...de verdad lo lamento...
Yuzu: Está bien, ella tiene una parte de mí y es Akira, se que cuidara muy bien de ella.
Rin: Si, Akira está en buenas manos.
Yuzu: Mamá, papá...vamos a volver?
Mis padres se voltearon a ver con una mirada triste.
Rin: No lo sabemos aún.
Yuzu: Entiendo..
Kohaku: Hija, hoy nos habló nuestro jefe, pide que nos vayamos mañana mismo en la tarde.
Agaché mi mirada, ya no tenía porque quejarme, ya me había despedido de las personas más importantes para mí.
Yuzu: Está bien, iré a terminar de empacar mis cosas..
Rin: Si, descansa.
Yuzu: Igual.
Me subí a mi habitación y me dejé caer en la cama, estaba tan cansada, no físicamente si no emocionalmente, necesitaba estar en paz por un pequeño rato.
Con los padres de Yuzu
Rin: (Suspira) Pobre Yuzu.
Kohaku: Si, no pensé que le fuera a afectar tanto, a demás viajaremos a otro país y siempre fue su sueño desde que era muy pequeña, no lo entiendo.
Rin: Obviamente le gustó la idea de viajar, pero no la de dejar a todas las personas que conoció aquí y que quiere mucho...en especial a Mei que comenzaban a tener una linda amistad.
Kohaku: Aún así..conocerá nuevas personas, se que le irá bien con eso, siempre ha sido una chica muy sociable.
Rin: No es lo mismo amor.
Kohaku: Yo lo veo así..
Rin: Ahhh hombres.
Kohaku: Eh?!
Rin: Lo que escuchaste. Por eso Yuzu escogió a Mei de seguro...(susurrandose a si misma)
Kohaku: Que dijiste?
Rin: Nada,bueno, iré a tomar una siesta.
Kohaku: Está bien.
Llegó el día de irnos, ya estaba lista, partiríamos al aeropuerto en una hora, me quedé sentada en mi cama, pensado que podía hacer para matar el tiempo, en eso entro mi madre con un ramo de rosas muy hermosas.
Rin: Hola hija, estás lista?
Yuzu: Si, y esas rosas?
Rin: Son para que se las des a alguien.
Yuzu: A quien?
Rin: Cómo que a quien? A Mei por supuesto.
Yuzu: Me despedí de ella ayer...
Rin: Y que tiene que lo vuelvas a hacer? Estoy segura que se llevará una gran sorpresa al verte de nuevo.
Yuzu: Tú crees?
Rin: Si, ahora ve, aún tienes tiempo.
Yuzu: Bien! Gracias mamá!
Tomé las flores y salí corriendo de la casa, estaba tan feliz de pensar que la volvería a ver si quiera una última vez.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top