(Narra ______)
Acabo de hacer lo más difícil que alguna vez pensé que iba a hacer. Acabo de salvar a mi archienemiga de un derrumbe y acabo de pelear contra mi propio pokémon para que se calmara. Todo en menos de diez minutos. Conduje a Jackie al Centro Pokémon junto con Absol, ahora calmado. Llovía mucho. Miré a Gary desde afuera del Centro, sentado, deprimido y tomando algo caliente. Seguramente pensaba que estaba muerta. Entramos y me dirijí al mostrador. Gary me vió. Y corrió hacia mí.
Me tiré a sus brazos.
-¡¡No vuelvas a hacer eso!!- me gritó.
Reí.
-Perdón...
Tosí un poco.
-Mejor sientate y toma algo caliente- me dijo, sonriendo.
Volteé a ver a Jackie. No me estaba mirando.
-Déjala- me dijo Gary.
-P-pero...
Entonces varias personas me calleron encima. No pude evitar gritar, entonces me dí cuenta de que eran mis amigos.
-¡Hey...!
-¡_________! ¡Estás bien!- griró Ash.
-¡Pero que susto nos distes!- gritó Pika.
Se me quitaron de encima y nos sentamos por ahí.
-¡Tienes que contarnos que pasó ahí abajo!- dijo Serena.
Suspiré.
-Nada interesante, Serena. En realidad, el derrumbe fue culpa mía. No soy un heroe ni mucho menos- repliqué.
Nadie dijo nada.
-Y... ¿Qué hace ella aquí?- pregungó Pika en voz baja señalando a Jackie.
-¡Yo la salvé! ¿Esperabas que la dejara morir ahí abajo?- dije yo.
Pika la miró con desconfianza.
-Ella te hubiera dejado morir- susurró.
Me levanté y dejé mi taza de skittolate.
-Lo sé- respondí, sonriendo-. Bueno, voy a dormir, estoy cansada.
Todos asintieron.
Pero apenas me acerqué al pasillo, alguien más entró al centro pokémon y me llamó por mi nombre.
Me pasé la mano por el pelo y me lo recojí en una cola, entonces fuí donde me llamaban...

Día siguiente, centro de Lumiose, laboratorio de Sycamore.

-¿Entonces? ¿Qué dices?
Bajé la mirada.
-Esto... ¿De verdad? ¿Me lo pide a mí?
-Si, __________. Una chica como tú realmente lo merece.
Se preguntaran que me está pidiendo ¿No? Pues el profesor Sycamore me pidió que fuera su ayudante en el laboratorio.
Volteé a ver a Gary, quien estaba conmigo y me sonrió.
Aún así... yo no quería atarme a la región Kalos. Es hermosa y muy grande pero me gustaría ir a otra parte también y no solo quedarme aquí a hacerle favores al profesor.
-Lo pensaré, profesor. Gracias- dije después.
Noté la decepción en su rostro.
-Como quieras. Estaré aquí si te decides.
Salimos del laboratorio y nos fuimos a sentar a las afueras de Lumiose.
-¿Por qué no le dijiste que sí?- me preguntó Gary.
Le sonreí.
-No sé. Supongo que no quiero en realidad.
-¿Ah no?
-Me gustaría ir a alguna otra región, no lo sé...
Gary sonrió.
-¿De verdad? Pues... si te gustaría... mi tío me llamó hace algunos días. Me preguntó si quería ir a visitarlo a Alola.
-¿¡Y qué le dijistes!?
-Que sí.
-¿A-ah...? ¿Te irás...?- titubeé.
Gary asintió.
-Pero te lo decía por si querías venir conmigo- dijo sonriendo.
-¿¡De verdad!?
-Noooooo. Te estoy jodiendo- respondió sarcásticamente.
Le dí un codazo.
-¡Claro que sí! Solo debo hablar con mi madre.
-Vale, vamos a tu casa.

En casa de ________...

(Narra Gary)
__________ ya llevaba un buen rato dentro del estudio de su madre. ¿Le dirá que no?
Yo estaba sentado en la sala acariciando a Umbreon. Entonces se me acercó Leah.
-¡Hola, Gary!- me dijo.
-¡Ross, roserade! -añadió su Roserade.
-Hola, Leah. Hola, Roserade. ¿Qué tal?
Se sentó a mi lado.
-Muy bien. ¿Que haces aquí sentado?
-Espero a _______- respondí-. Le está preguntando a su madre si podemos ir a Alola. ¿Tienes idea de por qué se tarda tanto?
Leah me sonrió.
-Así es nuestra madre. Seguro está haciedo que ________(t/apodo) le prometa que le traerá toda piedra rara que encuetre por el camino- dijo Leah, risueña.
-¿De verdad?
-Te apuesto a que sí. Nuestra madre es una fanática de las piedras evolutivas.
-Ah.
Se oyó la puerta del estudio abrirse.
-Suerte- me dijo Leah, giñándme el ojo.
Miré a _________. Su rostro no me decía nada. Más bien parecía...

🍃Continuará...🍃

Heyyyy!!!
Hola tú, que lee esto ¡Perdón por la tardanza!
¡Bajen los cuchillos!
Y... ¡¡GRACIAS POR LOS 7K OMGG!!
Nos vemos en el siguient capítulo...

🍃Alien🍃