38. Nyx es noche (2/2)

Ya en el departamento, observo la ropa que me voy a poner, ¿de chico o chica? Luego giro mi vista a Emmet el cual me observa, lo que da a entender que no quiere que vaya, aunque en realidad nunca lo desea.

Sonrío y señalo el traje.

—Me pondré este, iré de hombre.

—Ace dijo que tengas cuidado con la noche, ¿Por qué no sales mañana al boliche?

—Tú solo me recuerdas eso porque logré robarte la llave —la muevo entre mis dedos.

Me agarra la muñeca.

—No vayas —insiste.

—No te preocupes —me suelto —. Seré un chico, así que si alguien quiere secuestrarme, lo golpearé y no molestará más.

Voy hasta el baño y cuando salgo, estoy en mi forma de hombre, con el traje que me queda perfecto, igual a mí.

—Hay mucha gente en el boliche, si pasa algo...

—No te preocupes —vuelvo a repetir —. Estoy en tu línea de visión ¿no? Además, Nadir se quedará durmiendo en la casa, así que no te va a distraer de nada ¿Ves? Todo resuelto.

No me responde nada, así que me dispongo a retirarme y él me sigue detrás. Al llegar al boliche, una sonrisa se forma en mi rostro. Estoy emocionado, hace mucho que no venía a uno.

Bailo un poco, tomo alcohol moderadamente, ligo con alguna que otra mujer, aunque ninguna me convence, pero de repente, cuando estoy tomando una copa de vino, dejo el vaso en la barra y una extraña oportunidad se presenta.

La música cambia, veo unas piernas de infarto, un cabello largo, lacio de muerte, un rubio electrizante con pintitas celestes, ese vestido negro pegado al cuerpo le queda precioso, ella es hermosa. Lo que más me causa curiosidad, es ese tatuaje de araña en su brazo, cerca de su hombro, es intrigante, pero me recuerda a algo. Alzo la mano tocando mi collar de mariposa.

La chica gira sus ojos grises hacia mí mientras baila y mueve esas bellas caderas, entonces me sonríe, hace una señal para que me acerque y es lo que hago.

—¿Quién eres? —digo como hipnotizado, entonces de repente se abraza a mi cuello y por obvias razones yo agarro su cintura.

Se acerca a mis labios.

—Soy Nyx.

—Como la noche —ese es el significado de su nombre.

Se ríe.

—Quería verte —apoya su dedo en mi boca cuando voy a hablar y da un giro al soltarse —¿Quieres saber quién soy?

Oh claro que sí nena.

—Sí —digo embobado y la sigo.

—Diría que soy... tu otra mitad —juguetea apoyando su espalda en una columna —pero estaría mintiendo —se ríe otra vez y eso me encanta. Gira a través del poste —soy... soy cómo tú.

—¿Cómo yo?

—Sí —se abraza a la columna —pero soy lo contrario a ti.

—¿Lo contrario? —entrecierro los ojos.

—Las voces me llaman —mueve su vista hacia el piso de arriba —. Debo irme.

Veo que hay una persona allí, mi celular suena.

"Te encontré".

Mierda, el acosador.

Bajo la vista y veo como Nyx sale corriendo.

—¡Espera! —la sigo hasta la salida de emergencia.

Corro en el callejo hasta llegar a la calle, ella se sube a una motocicleta con alguien más, de repente levanta un arma y la persona que estaba detrás de mí sale huyendo, entonces Nyx también desaparece en la oscuridad.

¿Pero qué rayos fue todo esto?

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