XXXIV
CAPÍTULO XXXIV
El miércoles muy temprano, Florence recibe la llamada de una de las escuelas, la habían aceptado y estaban ofreciendo el horario perfecto que le permitía pasar a recoger a Bella y volver juntas a casa, así como un sueldo atractivo y sus debidas prestaciones. Estaría a cargo de los niños de segundo año y empezaría el siguiente lunes.
Cuando ella les contó a Bella y a Chris, ellos no dejaron de felicitarla y hacerle saber lo emocionados que estaban al respecto, además de que el actor se tomó la molestia de comprar un pequeño pastel para celebrar juntos este logro.
Por otro lado, Bella seguía llamándola "Flo", aunque en un par de ocasiones se le escapó el nuevo sobrenombre hacia ella y se tornaba tímida al darse cuenta. Es claro que ni Florence ni Chris, la iban a forzar y mucho menos a corregir por no decirlo, la niña sola demostraba su afinidad por la castaña.
El día jueves, todos salieron hacia la escuela de Bella, ahí Chris se despidió de ella, ya que el actor partiría hacia la pequeña gira de promoción. Apenas la niña entró a la escuela, Florence tomó camino hacia el aeropuerto.
—¿Estarás bien con todo? —le pregunta el actor y por el retrovisor puede ver a Dodger descansando a lo largo del asiento.
—Todo estará bien, cualquier cosa, llamaré a Scott —responde la castaña —. De hecho, mañana iremos a buscar un vestido más, porque sugiere que use uno diferente en la fiesta después de la premier —dice fingiendo cansancio.
—No es una obligación, cielo.
—Lo sé, pero me ha metido la idea y ahora no me la puedo quitar, además, es mi último viernes realmente libre, debo aprovechar —declara.
Chris sonríe y se gira hacia ella, la observa con detenimiento, está embelesado por su belleza y la dulce actitud que tiene con ellos. Le gusta mucho la forma en que entrecierra los ojos al sonreír y también, ha descubierto que ambos comparten esa manía de echar su cuerpo hacia atrás al reír.
—Llegamos —dice ella al estacionarse, se gira hacia al actor y lo encuentra mirándola con una bella sonrisa, no puede evitar sonrojarse por tal acción —. ¿Chris? ¿Todo en orden?
—Lo siento —se disculpa luego de sacudir un poco su cabeza en un intento de despertar de este momento tan bonito —. Sólo pensaba... Te amo tanto, Florence.
La sonrisa de la castaña se ensancha, aún le ponen nerviosas esas declaraciones tan sinceras y espontáneas por parte del actor. Ella no suele ser tan directa, sin embargo, busca formas de demostrarle también sus sentimientos, con pequeños gestos como llevarle el desayuno a la cama (tal como hoy) o pasando las últimas mañanas juntos en todas las formas posibles.
Chris no se contiene y rompe ese espacio que los separa, así que la besa con pasión y con la firme mentalidad de que es el último beso que se darán en poco más de un par de semanas, pues él volverá dos días antes de la premier, pero serán días en los que apenas se verán, por su cantidad de compromisos.
Florence le corresponde con la misma efusividad, pues será la mayor cantidad de tiempo que estarán separados desde que han iniciado su relación. Sin embargo, Dodger comienza a luchar por meterse entre ellos, por lo que la pareja debe separarse.
Mientras Chris baja sus maletas, la castaña le coloca la correa al sabueso, pues desea acompañarlo hasta antes de que aborde. El actor tomará primero un vuelo a Nueva York y luego serán seccionados para visitar algunos países y ciudades con sus compañeros.
La pareja camina de la mano dentro del aeropuerto, robando algunas miradas que no pasan desapercibidas para ambos, sin embargo, no les prestan demasiada atención y se concentran en mantenerse juntos todo el tiempo que les resta.
—Intentaré hablar todos los días —le dice el ojiazul colocándose frente a la chica.
—Lo sé, estaremos esperando tu llamada —responde la castaña y acaricia la mejilla del actor —. Estaremos bien y te vamos a extrañar mucho.
—Yo también, preciosa —confiesa y acomoda su gorra —. Pero sé que estarán bien y me motiva mucho volver a casa para encontrarme con ustedes.
Florence sonríe y antes de que sienta las lágrimas venir, rompe el espacio entre ellos y lo besa. Cuando se separan, el actor se arrodilla frente a Dodger para despedirse de él y luego se incorpora para darle un último beso a su novia, pues ya debe partir.
Ese par de semanas de chicas y con Dodger, lo único que consiguen es reforzar el lazo entre Bella y Florence. Han decidido mudarse a la vieja habitación de la castaña y ahí duermen juntas con el canino.
La primera semana de Florence en la escuela es grandiosa, de inmediato conecta con los niños y comienza a impartir sus conocimientos, es claro que los padres están a gusto con la nueva profesora. Cada día, luego de salir de ese lugar, recoge a Bella quien sale un poco más tarde debido a las actividades que tienen en ese colegio, pero que queda perfecto con su horario.
Ambas vuelven a casa inmiscuidas en una gran plática sobre su día, a tal grado de que Bella lleva una libretita en donde apunta quién contará primero su día. Cuando llegan a casa, son recibidas por Dodger y juntos pasan el resto de la tarde, ya sea haciendo los deberes y cuando no, se mantienen entretenidos horneando, armando pulseras con los nuevos materiales de Bella o simplemente viendo películas.
Chris les habla a media tarde, hacen videollamadas y Bella pasa la mayor parte del tiempo contando todo, por lo que la pareja opta por tener llamadas a parte en donde se expresan lo mucho que se extrañan.
Por lo cual, todo este tiempo se pasa demasiado rápido y a mitad de semana, faltando dos días para que Chris vuelva, la familia del actor llega de Boston, por lo que Bella debe volver a su habitación para compartirla con su prima y Florence se dedica a acondicionar el resto del espacio.
—¿Estás nerviosa? —le pregunta Carly a la castaña.
—Un poco, nunca he ido a un evento así y mucho menos con uno de los actores principales —responde ella bajando la mirada.
—Todo saldrá bien —le anima Lisa y le da un suave apretón en su hombro.
—Necesito una actualización con mi cabello —declara Shana.
—No de nuevo —bromea su hermana mayor.
—¡Vamos, Florence! Acompáñame —le dice la menor de los Evans —. Conozco el lugar perfecto y sé que está abierto.
La castaña lo medita un poco, es domingo y ya no tiene nada pendiente para la escuela, pues adelantó algunas cosas, por lo que al final acepta y ambas se embarcan en un auto para ir al salón que Shana le indica.
Varias horas después, las chicas vuelven, sin embargo, la que causa más revuelo es Florence, quien optó por aclarar un poco más el tono de su cabello, consiguiendo muchos halagos, pero hubo uno que la puso demasiado emocionada.
—Ahora nos parecemos más, Flo —dice la pequeña subiendo en el sillón para acariciar su cabello recientemente tratado —. Mira abu, mi mami y yo nos parecemos.
El rostro de todos refleja sorpresa, pero no de la mala, sino una de emoción.
—Se ven hermosas, cariño —responde Lisa y no puede evitar que sus ojos se llenen de lágrimas al ver el gran amor que ambas rubias comparten.
La matriarca de los Evans se levanta y discretamente le pide a Florence que la siga, cosa que ella hace, luego de dejar a Bella sentada junto a Stella, quienes se concentran en la nueva película que inicia.
—Gracias —es lo primero que dice Lisa al ver a Florence entrar —. Gracias por darle tu amor a mi nieta. Sé que está llena de muchas personas que la aman pero, ninguna se compara a ese amor maternal —agrega.
—Yo nunca voy a suplantar a su mamá, pero estaré para ella en todo lo que necesite y estoy demasiado honrada por recibir ese título por parte de ella —le confiesa —. Bella me ha hecho sentir cosas que nunca había experimentado y ha despertado una parte en mí.
—Es tu instinto maternal, querida. Aunque esa pequeña no haya crecido en tu vientre, el lazo que se ha formado entre ustedes es mágico y te agradezco que lo correspondas —murmura y toma una mano de la joven —. Uno de mis peores temores al ver a mi hijo como un padre soltero era que, cuando él deseara tener una relación, se volviera una competencia por su atención o que olvidara su verdadera prioridad, pero llegaste tú y conquistaste a ambos, le diste su lugar a mi nieta y ella te dio el tuyo.
—Chris y yo tenemos claro que la prioridad de ambos es Bella, por encima de todo —susurra con una media sonrisa —. Por eso sentimos mucho la presión al inicio, pero ahora todo ha sido perfecto y estamos muy felices con la relación que formamos.
—Como una familia —sugiere Lisa con una sonrisa risueña.
—No me quiero adelantar con las cosas —confiesa ella.
—No lo haces, pero está claro que ustedes han comenzado a formar una familia y no puedo estar más que alegre por eso. Mi nieta es feliz y mi hijo también, ¿qué más puedo desear? Otro nieto sería una bendición... —suelta y ríe al ver el rostro de sorpresa de Florence —... Pero todo a su debido tiempo.
El lunes muy temprano, varios minutos antes de que la alarma suene, pequeños besos son depositados en la espalda de la ahora rubia, sonríe al reconocer la colonia y cuando empieza a removerse en la cama, esas caricias terminan. La cama se hunde a su lado y ella abre los ojos.
—Hola —la saluda el actor.
—¡Te extrañé! —responde ella y se mueve hasta quedar acostada encima de la espalda del ojiazul, besando su mejilla.
—Tengo demasiado sueño, pero valió la pena —confiesa y Florence deja un último beso muy cerca de su oreja para luego caminar hacia el baño.
Chris se acuesta boca arriba y sonríe al escuchar la llave de la ducha abrirse, considera la opción de colarse dentro de ella, así que con pereza, abre los ojos y mira el reloj, faltan 5 minutos para que suene la habitual alarma, hace cuentas rápidas sobre el tiempo que llevan de sobra y no lo duda más.
Se levanta con rapidez y se apresura a quitar su ropa para entrar en la ducha con su novia, quien ahoga un grito cuando siente su espalda chocar contra el pecho desnudo del actor y luego sus fuertes brazos rodearla, haciendo contraste con la temperatura tibia del agua y el frío de sus manos.
Definitivamente esta es la bienvenida que ambos esperaban.
[...]
—Te ves hermosa —dice el ojiazul mientras él se mantiene sentado en la cama y la observa arreglarse —. Te pareces más a...
Pero Chris deja sus palabras al aire al darse cuenta del rumbo que pensaba tomar, él tiene muy claro que no quiere presionar a su novia.
—¿A Bella? —le pregunta ella y se gira con una pequeña sonrisa.
—Sí —responde el actor con la voz ronca y camina hacia ella para besarla.
—Ella me lo dijo también — confiesa con timidez —. Juro que no lo hice con esa intención.
—Lo sé —afirma acariciando los suaves mechones de cabello —. Eres tan desinteresada y dulce que, las cosas buenas llegan a tu vida sin pensarlo, porque simplemente lo mereces.
Florence sonríe y rodea el cuello del actor con sus brazos, por lo que él hace algo similar abrazándola por la cintura, en un intento de no dejar espacio entre sus anatomías.
—Te amo —susurra ella.
—También te amo, cielo —pero justo cuando van a besarse, unos insistentes golpes son depositados en la puerta.
—¡Flo, vamos a desayunar! Abu hizo una gran torre de panqueques —le dice Bella, a quien Shana ha pedido arreglar el día de hoy.
—Tengo una sorpresa para ti —le dice y hace que Chris se esconda lo suficiente, cuando ella abre la puerta, la pequeña le da un abrazo antes de entrar.
—¿Cuál es mi sorpresa, Flo? —le pregunta tomando su mano.
—¿Para mí no hay abrazo?
—cuestiona el actor saliendo de su escondite.
—¡Papi! —exclama corriendo hacia él.
El actor la levanta en brazos y ella lo llena de besos, ambos se extrañaron como nunca, pues la dinámica que se había formado entre ellos en estos meses, los unió demasiado.
—¡Dodger, espera! —exclama Florence cuando el sabueso corre y salta hacia la cama, por lo que Chris tiene tiempo de quitar a Bella para que no la aplaste.
—¡También te extrañé, amigo! —le saluda acariciando su pelaje.
—Debemos desayunar o se nos hará tarde —le dice Florence a Bella.
La pequeña rubia le da un último beso a su padre antes de correr para tomar la mano de la mayor, quien le dedica una última mirada al actor que sigue jugando con Dodger.
Ya todos están despiertos y es cuando Bella comienza a repelar que sus primos no deban ir a la escuela, aunque la consuelan diciendo que al día siguiente, no irá. Luego de un rato, Chris se une a la familia que desayuna y se ofrece a llevar a sus chicas a sus respectivas actividades.
Discretamente, Lisa los observa despedirse, puede percibir la armonía y amor que hay entre ellos, así como la dulzura con la que Florence los trata, procurando a ambos ojiazules que tampoco quitan su atención de ella.
[...]
—¿Entonces vendrás por mí? —le pregunta Bella cuando van llegando a la escuela.
—Sí, yo volveré por ustedes —responde el actor estacionando y quitando los seguros del auto.
—¡Sí! Adiós, papi —dice la rubia besando la mejilla de su padre antes de descender con Florence que la acompaña hacia la puerta.
Chris observa el parecido de ambas y no puede evitar sonreír, siempre ha pensado que las cosas tienen una razón y justo ahora lo ve con el par de chicas que han robado su corazón.
—¿Será mucha molestia que te tomes el día de mañana? —le pregunta el ojiazul a su novia cuando ella se devuelve al automóvil.
—Demasiada, no tengo ni un mes en ese trabajo y no deseo faltar —responde acomodando algo en su bolso —. Pero descuida, estaré a tiempo para la premier y mañana vendré toda desvelada, pero valdrá la pena.
—Gracias, mi amor, valoro demasiado eso. Aunque desearía tenerte más tiempo para mí —declara y ella se sonroja.
Durante el trayecto, que no es muy largo, Chris resume el viaje y le cuenta algunas de sus aventuras en la pequeña gira, dándole detalles de compromisos posteriores. Se roban algunos besos y cuando llegan, él se posterga el beso de despedida hasta que Florence se separa en medio de risas.
—Te veo más tarde —dice ella tomando sus cosas —. Te amo.
—Te amo, preciosa. Ten un buen día.
Y sin más, ella desciende del auto para iniciar su día escolar, que más tarde, concluirá con un evento sin precedentes en su vida.
Ya el siguiente es la premier, ando emocionada al respecto 🤭 Ya pronto sabrán la razón 🤭🙃
En los gif el Evans va sin la barba, pero recuerden que estos son meramente ilustrativos 🤭 Sabemos que a esa premier va con su bella barba🤤
En fin, no se olviden de votar y gracias por leer ❤️
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