CAPÍTULO XXX

Apenas une las manos de la pareja de adultos, Bella intenta abrazarlos desde su altura, aunque sólo logra rodear las caderas de ambos de forma superficial, pues sigue siendo una pequeña de 5 años.

Chris le dedica una rápida mirada a la castaña y puede leer la emoción en sus ojos, ella le sonríe antes de volverse a poner de rodillas para abrazar a Bella como es debido. La niña se cuelga de su cuello y besa su mejilla con cariño, por lo que Chris imita a su novia y ahora él recibe aquellas caricias por parte de su hija.

Pero el momento se rompe, pues Scott no "controla" bien a Dodger y este sale corriendo en dirección a Florence, para celebrar su retorno y obtener toda su atención. Así que el precioso momento finaliza para dar paso a la dinámica familiar con los Evans.

[...]

La cena inicia con felicidad y demasiada armonía, luego de tanto caos, ahora todos celebran y conviven con familiaridad, aunque la castaña no puede huir de los comentarios burlones de Scott, y estos se intensifican cuando él se percata que las manos de la castaña y su hermano se encuentran entrelazadas por debajo de la mesa. Aunque este acercamiento dura muy poco, pues apenas sirven la cena, Florence concentra toda su atención en Bella y en orientarla con el uso de los cubiertos.

Para la familia Evans, no pasa desapercibida la mirada completamente enamorada que Chris le dedica a Florence, pues es claro que al ojiazul le enternece la interacción que ella tiene con su pequeña hija.

Al final, la castaña les termina explicando a cada niño el uso de los cubiertos, que por suerte entienden a la perfección y al primer intento. Luego de esto, ella se reincorpora a la amena charla con los adultos y a las bromas de Scott.

Varios minutos más tarde, una vez que terminan de cenar, todos ponen de su parte para limpiar y poder trasladarse a la sala principal, con la intención de entregar y abrir los regalos.

Chris se sienta al lado de Florence y pasa su brazo por encima de sus hombros, aunque el gusto no le dura demasiado porque Bella corre a sentarse en las piernas de la castaña y obtiene toda su atención. Pero lo más gracioso, es que Dodger también se acerca a ellos y hace de todo para conseguir una caricia por parte de la niñera.

—Literalmente tienes a tres niños que buscan tu atención —murmura Carly con burla.

—Supongo que en primer lugar va Bella, luego Dodger y al final Chris —sugiere Shana, obteniendo una risa en general.

Florence se sonroja y abraza con más fuerza a Bella, quien se acurruca en sus brazos, además de que el actor deja un pequeño beso en su mejilla y Dodger termina por acostarse a sus pies.

—¡Los regalos! —exclama Miles con emoción, siendo secundado por sus hermanos y prima.

La siguiente media hora, todos se encargan de entregar sus respectivos obsequios, dando algunas palabras antes de entregarlos. Por lo que después, cada uno se confina a un rincón de la casa para abrir los presentes, así que Florence se acomoda en un sofá individual, en donde simplemente es seguida por el canino que está más que emocionado con su peluche nuevo, bueno, en realidad fueron 3, pero ahora toda su atención la tiene este cocodrilo.

—Hice algo para ti —dice Bella con las manos detrás de su espalda y balanceando su cuerpo de un lado a otro.

La pequeña le entrega un sobre con un estampado de corazones y arcoiris, además de que tiene varias pegatinas alrededor. Ante la atenta mirada de Bella, la castaña abre el sobre cuidando de no estropear mucho aquel envoltorio.

La rubia le observa con atención, mientras lleva en su cuello el pequeño estetoscopio de juguete que le ha obsequiado Shana en un juego de instrumentos médicos. Florence desdobla la hoja y en ese momento Chris se acerca curioso por ver el resultado final, pues Bella ya no lo dejó verlo.

Florence ahoga un grito de emoción y sus ojos se llenan de lágrimas ante tan precioso obsequio, ignorando la cantidad de purpurina que cae sobre su ropa. El dibujo consiste en tres personas de diferentes tamaños y cuyos ojos son tan azules como el mar, es claro que corresponden a Chris, Bella y Florence, además de Dodger que se encuentra a un lado del actor, la niña está en medio y simula estar tomada de la mano de los adultos, encima de su cabeza, hay un corazón un poco chueco y una estrella en el cielo.

La castaña no se contiene y abraza a la niña que está más que feliz porque su regalo le agrade tanto a su niñera. Chris toma el dibujo y observa cada detalle, él se había quedado con la idea de que sólo consistiría en su hija y Florence, pero se siente emocionado por encontrar el resto de los detalles.

—¿Te gustó, Flo? —le pregunta la niña para cerciorarse de que ha sido un éxito.

—¡Me encantó, Bella! —responde la chica y limpia las pocas lágrimas que escaparon de sus ojos —. Esta semana iré a buscar algo para enmarcarlo, si quieres podemos ir juntas para que elijas el cuadro.

Es claro que Bella acepta más que encantada y luego de darle un nuevo abrazo a su niñera, corre hacia los brazos de su padre que la carga.

—Ahora abre nuestro regalo —insiste la rubia dándole una mirada cómplice a su progenitor.

Florence sonríe y con cuidado toma aquella caja roja de terciopelo y un gran lazo dorado. Ya ha abierto un par, el regalo de Scott que fue una muy bonita figura en miniatura de Mary Poppins, y el que le entregó Shana, una elegante bufanda (aunque en realidad eso fue lo que ella le entregó a todos, claro que pensando en el estilo de cada uno).

Bella y Chris no apartan la mirada de la castaña, quien empieza a abrir la caja soltando el listón, para luego levantar la suave tapa y hacer lo mismo con el par de papeles que cubren su obsequio.

Es un precioso brazalete de plata, pero lo que más le emociona, son los dijes que tiene: el primero que llama su atención es la letra "B", y por la sonrisa que aparece en el rostro de la niña, sabe que fue ella quien lo eligió. El siguiente dije, es una rosa, tal como aquellas que Chris suele regalarle algunas veces a la semana. Y el último dije, es una huellita de perro.

—Es perfecto, ¡me encanta! —exclama con evidente sinceridad, aunque sabe que no podrá encontrar las palabras correctas para describir su emoción.

—Es la B de Bella —murmura la rubia con una sonrisa llena de orgullo —. Y la patita de Dodger. Papi eligió esa flor, dijo que es especial —agrega.

Ante aquellas palabras, Florence se levanta y se acerca a ellos para abrazarlos, por lo que la niña termina rodeando el cuello de ambos y ellos besan su mejilla. Lo siguiente que siente es un flash, bueno, en realidad fueron varios, pues todos los adultos buscaron capturar el momento

Luego de esto, Bella es llamada por sus primos para empezar a jugar con sus obsequios antes de ir a la cama, por lo cual, la niña se marcha seguida de Dodger, quien no suelta su nuevo peluche.

—¿Te gustó tu obsequio? —le pregunta Chris y la abraza por la cintura, todos se han mudado al salón principal y ellos se encuentran solos en esa área de la casa.

—Me encantó, es demasiado hermoso y tiene tanto de ustedes —murmura la chica rodeando el cuello del actor con sus brazos.

—Bella sugirió elegir la letra de su nombre porque dice que tú le enseñaste a escribirlo —confiesa con una pequeña sonrisa —. Y también eligió el dije de la huella de perro, aunque primero sugirió una "D" de Dodger, pero le dije que eran demasiadas letras.

Florence ríe levemente y luego atrae al actor hacia sus labios para poder besarlo con todo ese cariño que siente por él, Chris suspira a mitad del beso y ambos lo intensifican por unos instantes, sin embargo se detienen, pues de inmediato recuerdan el sitio en donde se encuentran.

—Te amo —murmura Florence aún pegada al cuerpo del ojiazul.

El rostro de Chris es todo un poema, pues aunque se encuentran en un momento romántico, no esperaba que la chica le confesara aquel dulce sentimiento y mucho menos, con tanta seguridad.

—Yo también te amo, cielo  —responde él y la vuelve a besar.

Ambos continúan abriendo ahí sus obsequios, pues se demoran mucho robándose besos y enseñando lo que encuentran, por lo que, cuando ellos se encuentran finalizando de desenvolver todo, Bella llega con sus ojitos cansados pidiendo su pijama para ir a la cama. Florence se ofrece a cambiar a las niñas, pues dormirán juntas y Carly se lleva a los niños.

Una hora más tarde, todos se van a la cama y para sorpresa de la castaña, ella ha sido asignada a la misma habitación del actor. No es que le moleste, pero tampoco imaginó que esto sucedería.

Luego de colocarse sus respectivas pijamas (pues a la mañana siguiente saben que serán despertados para ver los regalos de Santa), se acomodan uno frente al otro y Chris coloca su mano sobre la cintura de la chica.

—Feliz navidad, mi amor —susurra el ojiazul, hipnotizado por la belleza de la chica, pero también fascinado por lo exitosa que fue esta velada.

—Feliz navidad, cariño —responde la castaña con una gran sonrisa —. Esta noche fue mágica, en todos los aspectos.

—Lo fue más porque ahora estamos juntos sin importar nada, y eso no me podría hacer más feliz —declara el actor.

—Igual debes comportarte frente a Bella —le advierte, pues a veces, Chris suele ser un poco juguetón y demasiado inquieto con sus manos.

El actor suelta una suave y genuina risa, que sacude suavemente su pecho y que enternece a la chica frente a él, que luego de observarlo, no se contiene y lo besa.

Se mantienen así unos minutos más, compartiendo una profunda sesión de besos y caricias que sólo quedan en eso. Luego, Chris se acomoda y Florence hace lo mismo, aunque ella termina colocando su cabeza sobre el pecho cubierto del ojiazul, que comienza una serie de caricias en la espalda de la castaña, quien termina profundamente dormida.

[...]

A la mañana siguiente, parece que Florence tiene un sensor, porque sin saberlo, ella ha abierto los ojos al mismo tiempo que Bella, quien se encarga de despertar a Stella para que vayan con los niños y abran los regalos.

La castaña apenas si se mueve, pues sigue acostada sobre el pecho de Chris y este continúa profundamente dormido, aunque luego de pensarlo un poco, comienza a acariciar con suavidad su pecho, en búsqueda de despertarlo de forma tranquila, porque es claro que en cualquier momento Bella o alguno de los pequeños llamará a la puerta con insistencia.

Y como fue, 5 minutos después, unos insistentes golpes son depositados por Bella en la puerta, por lo que Chris suspira y abraza con más fuerza a su novia quien también lo imita, y como puede, rodea su torso con sus brazos.

—Buen día —murmura el ojiazul y deposita un beso en la frente de la chica.

—Buenos días —responde la castaña y deja un pequeño beso en el cuello del actor.

Sin esperar demasiado, Florence se levanta de la cama y abre la puerta, volviendo con Bella prendida a su cintura y con una gran sonrisa, pues se empieza a dar cuenta de que ver a su padre y a su niñera juntos, no le desagrada en lo absoluto.

—¡Llegó Santa! —grita con emoción y luego suelta a la castaña para correr con su padre, que sigue en la cama —. ¡Vamos! ¡Quiero verlos!

Chris sonríe y la abraza antes de llenarla de besos ante la atenta mirada de la chica, que no puede evitar sentirse emocionada al ver los pequeños momentos de padre e hija, de los que ellos son protagonistas.

—Nos lavamos la cara y estaremos allá —le dice Chris.

—Pero yo quiero ir con ustedes —menciona la rubia con una inocente sonrisa.

—Bien, me lavaré primero la cara, luego irá tu papá y ya bajaremos juntos —murmura Florence y camina hacia el baño, no sin antes tomar su pequeña bolsa de aseo.

Al menos 5 minutos después, ellos llegan a la sala principal, donde Ethan, Miles y Stella ya tienen desplegados todos sus nuevos obsequios y como si no fuera suficiente, Dodger ha recibido un peluche que ha reemplazado a los de la noche anterior.

Los adultos aprovechan para tomar una taza de café, al menos Carly, su esposo y Lisa, pues Shana se despierta media hora después, y Scott lo hace hasta que los niños entran a despertarlo para pedirle que juegue con ellos.

Chris entra a la cocina en donde Florence busca las galletas que Scott le prometió, pero es claro que no las alcanza y su novio acude a su rescate, tomándolas por ella y robándole un tierno beso en el momento.

—¿Te he dicho lo hermosa que te ves este día? —le pregunta el actor y acaricia su rostro —. Feliz navidad, amor.

—Feliz navidad a ti, cariño —responde ella con una sonrisa.

Chris la vuelve a besar con un poco más de profundidad, acariciando el rostro de la chica en el proceso y acorralándola entre su cuerpo y la barra de la cocina.

—Chris... —suspira la castaña colocando sus manos sobre el firme pecho del actor, para separarse un poco de él.

—Lo siento —se disculpa sonrojado y camina hacia un cajón para tomar unas cucharas.

Ambos salen de la cocina, primero Florence y detrás de ella va Chris, sin embargo, para ninguno de ellos pasa desapercibida la mirada burlona de Scott, quien además les guiña el ojo de forma coqueta, logrando que Florence se sonroje.

[...]

Ya entrada la tarde, los cuatro se marchan de la casa de Lisa y ante la insistencia de todos, para que Florence vuelva a casa con ellos, la chica les pide entonces ir por sus cosas a su viejo hogar. Bella está más que emocionada por conocer ese lugar, por lo que todos descienden para esperarla, hasta Dodger, quien inspecciona cada rincón a la perfección.

—Bella está husmeando por todos lados —murmura Chris entrando a la habitación de la chica, quien está guardando las últimas cosas que previamente sacó.

—No hay mucho que ver —responde Florence con una pequeña sonrisa.

—Me gusta este lugar, tengo un buen recuerdo aquí —menciona de forma burlona y se sienta en la cama.

La chica se sonroja mientras niega con la cabeza, logrando esquivar las manos de Chris que buscan abrazarla o al menos eso es lo que parece, pues el ojiazul se levanta y la besa, aunque no es nada de lo que se imaginó, pues el beso es dulce y demasiado tierno.

—Te amo —susurra él cuando se separan, por lo que la castaña aún tiene los ojos cerrados y se limita a sonreír.

—También te amo —responde ella y abre sus ojos, encontrándose con la dulce mirada llena de adoración que le dedica el actor —. Los amo a los tres —se corrige.

Lo que no saben es, que Bella los observa desde la puerta, y que por un momento, se sintió celosa de escucharlos confesarse sus sentimientos, sin embargo, sin que Florence lo imaginara, su pequeña corrección emocionó a la niña, quien se sintió alegre de ser mencionada en aquel momento.

—Yo también los amo —menciona la pequeña entrando a la habitación, por lo que la pareja se separa y Chris la levanta entre sus brazos —. Mucho, mucho, a la luna y de regreso.

Florence besa su mejilla y el actor la imita, luego de esto, Bella pide que la bajen y sale de la habitación, para volver un par de minutos después con un peluche de foca que encontró en algún lugar.

—¿Me lo regalas, Flo? —cuestiona la pequeña.

La castaña no puede sentir más que su pecho hincharse al recordar aquel viejo juguete con el que tanto se divirtió a una edad similar de la niña. Aún recuerda la historia que su madre solía contarle acerca de la obtención del peluche, y eso la llena de dulces recuerdos.

—Claro, Bella, puedes quedártelo —responde ella luego de unos segundos.

La niña la abraza antes de volver a la sala principal, en donde espera por ellos al lado de Dodger, quien parece también estar muy entretenido con uno de sus juguetes.

Para Chris no pasa desapercibido ese cambio en la chica, pero ella se limita a abrazarlo y dejar un par de besos en su barbilla, la cual está cubierta por una ligera capa de barba.

—Vamos a casa, ¿está bien? —le sugiere Florence con una pequeña sonrisa.

—Vamos a casa, mi amor —responde con seguridad y sintiéndose inmensamente feliz por utilizar aquellas palabras.

Estuvo bien cursi este capítulo, igual ya se lo merecían ❤️❤️

Espero que les guste mucho y me comenten qué les pareció 🤭

Muchas gracias por leer ❤️