LI
CAPÍTULO LI
Chris no sabe cómo llegó a casa sin tener un accidente, pues apenas recibió la llamada de Florence, aceleró hasta el límite y llegó a mitad de tiempo.
Ahora que lo piensa, no puede pasar desapercibida la calma en la voz de Florence cuando hablaron, ella se escuchó tan serena, que por un momento pensó que todo esto era un malentendido, por lo que ella tuvo que explicarle la situación una segunda vez.
El actor ingresa a la casa y encuentra a Florence sentada en el sillón de la sala, ella tiene las piernas estiradas por encima de los asientos, tararea una canción de cuna y se mantiene dejando suaves caricias a su vientre, además de que Dodger está acostado a su lado, igual de tranquilo.
—Mi amor... —susurra el actor acercándose a ella, quedando de rodillas a su lado.
—¿Puedes ir por las cosas que tengo en el armario y llevarme al hospital? —le pregunta la rubia con dulzura.
—S-sí, y-yo voy por eso —responde él visiblemente asustado, está a punto de levantarse y correr, pero es cuando su esposa lo detiene tomando su mano.
—Necesito que estés tranquilo, cariño. Sé que todo saldrá bien, estaremos bien, pero quiero que te tranquilices, ¿lo harías por mí? —cuestiona mientras acaricia la mejilla del actor.
Chris asiente torpemente. Sabe que ella tiene razón y que necesita estar tranquilo, por su pequeña familia.
Aunque al final, corre hacia el armario y obtiene la maleta de Florence con sus cosas, mismas que había preparado desde su primer día con permiso de maternidad.
Es justo ahí cuando ve, en el baño, la mancha de un líquido extraño con muy pequeños hilos de sangre. Siente que algo amargo sube hasta llegar a su garganta y su estómago se encoge, de nuevo el miedo lo invade y ese mismo miedo, le hace salir corriendo en dirección al auto y guardar la maleta, así como el bolso de la rubia que ella le señala.
Dodger extrañamente también está tranquilo y en esta ocasión, no hace el intento por salir con ellos y se queda acostado observando todo. Chris piensa tomar a Florence en brazos, pero ella se rehúsa y sólo le pide que le ayude a caminar hacia el vehículo.
Durante el trayecto al hospital, Florence llama a Scott para que él se quede a cargo de Bella (y de Dodger), además de que, por petición de Chris, también le notifica a Lisa y esta responde que tomará el primer avión hacia Los Ángeles, acompañada de Shana.
[...]
—Bueno, al parecer todo va bien e intentaremos retrasar el parto para darle un poco de tiempo para que la bebé madure, al menos los días que restan para que cumpla las 34 semanas —dice la doctora intentando transmitir un poco de tranquilidad a la pareja, más al actor, que está tan pálido que parece que se va a desmayar en cualquier momento —. Te vamos a monitorear y a administrar algunos medicamentos profilácticos, si vemos un cambio antes de estos 3 días, tendremos que realizar una cesárea, pero, por ahora parece evolucionar bien, eres una mujer sana.
—¿Entonces por qué sucedió esto? —le cuestiona el ojiazul con cierto reproche, justo ahora se siente molesto por toda la situación.
—Casi siempre está relacionado a otros factores de riesgo, aunque, en varios casos, las mujeres son igual de sanas que su esposa, señor Evans, por lo cual, no se ha podido concluir una razón específica —explica —. Pero, el pronóstico para esta edad gestacional es casi de un 98%, así que esperamos que todo salga conforme al plan.
Florence le agradece y ella se marcha, dejando a la pareja sola en la habitación. Chris suspira y dirige su mirada llorosa hacia su esposa, que le pide que se acerque. La rubia entrelaza su mano con la de él y la besa, mientras que Chris acaricia con su mano libre el vientre de su esposa, donde ella tiene una especie de cinturón conectado que está registrando los latidos cardíacos de la bebé.
—No entiendo, ¿por qué estás tan tranquila? —le pregunta él totalmente consternado.
—Estoy aterrada, Chris —confiesa la rubia con su voz calmada, aunque para el actor no puede pasar desapercibido un pequeño temblor en esta —. Pero sé que no gano nada volviéndome loca en este momento, sé que esas emociones podrían ser malas para ella y, no quiero. Quiero que la bebé sepa que todo saldrá bien y que esté lista para conocernos, deseo que sienta mi amor y que no me escuche llorar aterrada por lo que puede pasar, me quiero mantener positiva ante esto —concluye.
Chris maldice en sus adentros, él está que se hace en los pantalones del miedo, pero justo ahora está haciendo uso de sus dotes actorales para que Florence no se preocupe también por él. Definitivamente admira su fortaleza.
Es justo ahora, donde Evans ve reflejada en Florence a su madre. Ve esa misma fuerza que tuvo en los momentos difíciles que atravesaron. Mientras todos estaban aterrados, Lisa era un pilar, inquebrantable y fuerte, manteniéndose positiva y afrontando todo con valentía. Cuando fue mayor, llegó a preguntarle al respecto, obteniendo un "es un super poder de madre", como respuesta. Y ahora lo comprende.
Chris suspira y besa la frente de su esposa con extrema ternura, deja uno más en la punta de su nariz y un último beso en sus labios. Florence le sonríe, ella se ve especialmente preciosa, sin importar el estado en el que se encuentra.
El actor sabe que no puede seguir sintiéndose así, debe de luchar para darle la mejor cara a su esposa y hacerle sentir esa fortaleza. Sabe que es su labor como padre y esposo, la debe complementar y apoyar en este momento, así que simplemente se deja guiar por su instinto.
—Todo saldrá bien, mi niña —susurra Chris acercándose al vientre de su esposa, así como posando delicadamente su mano por encima de su piel —. Mami y yo estamos muy emocionados por conocerte, también tu hermana mayor, Bella, pero debes esperar un poquito más para salir de ahí, unos días más para que estés lista para este mundo, yo sé que lo harás porque eres una niña muy obediente y valiente, pero cuando sea el momento, te daré un gran abrazo, princesa.
Cuando el actor vuelve su mirada hacia la rubia, esta tiene los llorosos, pero una enorme sonrisa plasmada en sus labios. Ella coloca su mano por encima de la de Chris y sienten el suave movimiento de la bebé, observan que se acelera muy poco el latido cardíaco y luego vuelve a la normalidad.
—Está feliz —susurra la rubia.
—Nos escuchó, mi amor —reafirma él.
Scott es quien recoge a Bella de la escuela, por suerte, Chris se acordó de notificar el incidente a la institución e indicó que su hermano sería quien pasaría por la niña, por lo que la pequeña rubia pasa gran parte de la tarde con su tío, al menos hasta que ambos recogen a Lisa y Shana en el aeropuerto.
Sin embargo, no van directamente a la casa y prefieren ir al hospital para acompañar a la pareja, que ha estado sola. Dudan un poco en llevar a Bella, pero ella está demasiado preocupada por su hermanita y su mami, por lo que luego de pedir la autorización, la dejan entrar por unos minutos.
Florence acaba de comer y bromea un poco con Chris, quien no deja de acariciarla, ya sea tomando su mano o dejando dulces toques en el rostro de la rubia. Es entonces, cuando unos suaves golpes se escuchan en la puerta, la pareja intercambia una mirada y Chris les pide que pasen.
El primer rostro que ven es el de Lisa, tal como Chris lo imaginó, se nota llena de fortaleza y tranquila, aunque si se concentra lo suficiente, puede ver la preocupación en sus ojos. Ella saluda primero a Florence y luego a él, dándoles ese dulce abrazo que necesitaban. Shana entra después y en ella sí se nota la angustia, aunque sonríe al darse cuenta de que la rubia la mira con dulzura.
El último en entrar es Scott y este, a su vez, lleva a Bella escondida detrás de él, abrazándolo por la cintura y asomando parte de su rostro para ver primero a su padre y luego a su mami.
—Hola, mi amor —le saluda Florence —, ven aquí, cariño —pide palmeando el lado de la cama junto a Chris.
Bella duda un poco, pero termina separándose de su tío y camina con timidez hacia sus padres. Observa que la mano contraria de Florence, tiene algunos cables raros conectados y unas máquinas con pantalla, las cuáles están en la cabecera. Suspira al ver que hay un cinturón rodeando el vientre de su mami y escucha un golpeteo.
—Esa es tu hermanita, cielo —susurra Florence tomando su mano —, ese es su corazón, ¿Recuerdas cuando escuchamos tu corazón? —le pregunta y ella asiente.
—¿Ya va a salir la bebé? —cuestiona con timidez y mira a su padre.
—Pronto, mi amor —responde el actor —, aún faltan unos días, pero debemos esperarla aquí —agrega.
—¿Por qué? —de nuevo pregunta la pequeña rubia.
—Porque está pequeñita y debemos esperar un poco más para que crezca, pero cuando esté lista, volveremos a casa contigo y Dodger, ¿está bien? —le explica Florence con mucha calma.
—Por ahora te quedarás con Scott y Shana, abu Lisa también estará contigo, y nosotros estaremos bien —complementa Chris —. Quiero que sepas, que aunque estemos unos días separados, lo hacemos porque es necesario y porque queremos llevar a la bebé contigo.
—Sí, papi —responde con un dulce puchero —, quiero que mami esté bien y mi hermanita —agrega.
—Lo estaremos, mi amor —murmura la rubia.
Chris busca la mirada de Florence y ella asiente, el actor toma su chaqueta y besa la frente de su esposa.
—No he comido y hay un McDonald's a un par de cuadras, ¿quieres ir, princesa? —le pregunta él a su hija, a quien sus ojitos se le iluminan y no duda en asentir —. Ahora vuelvo, amor.
Chris se agacha para dejar un beso en los labios de Florence, quién les sonríe a ambos y ellos se despiden prometiendo volver muy pronto.
Si Chris es una cosa, Shana y Scott son peores, y no dejan que Florence mueva un dedo. Si fuera posible, ellos respirarían por la rubia, quien se divierte al verlos tan serviciales y un tanto torpes. Lisa suspira y se sienta al lado de Florence, justo donde Chris estaba antes de salir.
—¿Estás bien? —le pregunta con dulzura tomando la mano de la rubia, quien reía ante las ocurrencias de sus cuñados.
—Lo estoy —responde girando su cabeza hacia ella —, mientras ella y Bella estén bien, yo lo estaré.
—Pero, ¿por todo esto? —insiste.
—La doctora siempre me dijo que debía estar tranquila, las emociones fuertes podrían jugar en nuestra contra, además, como le dije a Chris, quiero que ella sienta que todo está bien y no deseo que se asuste —explica mirando su vientre.
—Eres grandiosa, Florence —murmura Lisa luego de unos segundos —. Mi hijo y mis nietas son muy afortunadas por tenerte —agrega.
—Y yo soy igual de afortunada por tenerlos a ellos —responde con ilusión.
Una hora más tarde, Chris y Bella vuelven, ella trae dos juguetes nuevos, provenientes de las cajitas felices que compró el actor. Shana se ofrece ir a casa para quedarse el resto de la tarde con Bella y Dodger, por lo que Scott las lleva prometiendo volver más tarde por su madre, quien se queda con la pareja.
Chris de nuevo se coloca al lado de Florence, aunque ahora platica con su madre.
Cerca de una hora después, cuando la rubia se queda profundamente dormida y Scott ha vuelto, que Chris aprovecha para salir unos momentos para hablar con su mamá.
—A mí no me engañas, ¿qué pasa? —le pregunta Lisa mientras van por un café.
Chris suspira y de nuevo se siente como un niño lleno de pánico y al borde del llanto. Sabe que a su madre no puede ocultarle nada, y también sabe que Florence pudo notar su miedo, pero prefirió hacerle creer que no.
—¿Crees que todo saldrá bien? —le pregunta él a su progenitora, que se toma de su brazo cuando llegan a la pequeña cafetería.
—Mi corazón de madre dice que sí, pero mi corazón de abuela está aterrada —admite ante la sorpresa de su hijo —. Pero debemos mantenernos positivos, Florence lo está.
—Ella está demasiado tranquila, te juro que cuando estoy a su lado, todos mis miedos se disipan —le confiesa el ojiazul —. La amo, mamá.
—Lo sé —responde —, no hubiera permitido que te casaras por segunda vez sin amar a la otra persona
—Mamá... —murmura el actor.
—¿Qué? Sólo te estoy diciendo lo que he visto, y aunque agradezco mucho a Anne por traer a Bella a este mundo, Florence es simplemente perfecta para ustedes, además de que tiene un gran corazón y realmente los ama —afirma una vez que pide su bebida y una más para Scott.
—Florence llegó en el momento adecuado a nuestra vida y no puedo estar más que feliz por eso —admite Chris.
[...]
Esa noche, Chris pasa la noche con su esposa, aunque duerme poco, pues se permite observarla con amor durante horas e intenta ayudarla a que encuentre una posición adecuada, ya que ella tampoco desea moverse mucho.
—Deberías dormir un poco —murmura la rubia abriendo los ojos y dándose cuenta de que está amaneciendo.
—Dormiré un poco cuando esté en casa, prefiero estar a tu servicio —le responde acariciando su cabello con cariño.
—Me vas a malacostumbrar y me volveré una esposa caprichosa que sólo busque ser consentida —bromea seguido de un bostezo —, ¿vino alguien?
—Primero un médico de turno, pero dijo que todo va bien con la bebé y una enfermera vino a cambiarte eso —dice señalando una de las soluciones.
—Quedé rendida —admite con una mueca —, ¿Bella dijo algo cuando salieron a comer? —cuestiona cambiando de tema.
—Estaba un poco asustada, pero le dije que todo saldría bien. Le expliqué que debía mantenerse tranquila y que por unos días, nos ocuparíamos más de la bebé, pero eso no significa que dejemos de pensar en ella—responde el ojiazul.
—Eres un gran padre, Chris —susurra ella tomando la mano del actor.
—Tú tuviste mucho que ver con eso, cariño, me enseñaste demasiado —afirma con sinceridad y posa su mano sobre el vientre de la rubia —. Y ahora tendremos a esta preciosa para darle el mismo amor que a Bella.
—Sobre eso... He pensando en un nombre, aunque me gustaría consultarlo contigo —murmura y Chris le sonríe enternecido.
—¿Te parece discutirlo mientras llega Shana a relevarme? —le cuestiona él sentándose a su lado.
—Será un buen tema para matar el tiempo —dice la rubia sonriendo.
Y así, pasan la siguiente hora hablando sobre los posibles nombres para la bebé, dando nuevas ideas y descartando otras. Por unos momentos se olvidan del temor experimentado el día anterior, y se concentran en la felicidad que está próxima a llegar.
No soy la indicada para decir esto, pero me gustó mucho este capítulo ☺️
Espero que también les haya gustado.
Gracias por leer❤️
No se olviden de votar y comentar, no sean lectores fantasmas ☹️
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top